¿Decisiones?

Maratón 2/3

Han pasado ya tres semanas desde las ocurrido, en la semana que viene debería estar en la universidad pero sigo pensándolo, recapacito un poco, Cleo sigue intentando hacerme cambiar de opinión respecto al be... al feto, enserio que si me paro a pensar en él pero mi mente sigue con la misma condición. He tomado una decisión y nada me hará cambiar de opinión, de eso estoy segura. El día de hoy me encuentro trabajando en una cafetería sirviendo café, donuts, croissants y tés, más de una viejita me ha reclamado lo lenta que soy pero ¿que puedo decir? Soy una mujer embarazada y con las hormonas alborotadas. Como de todo incluso creo que he subido de peso estos a días. Logre pagar lo de el aborto y como saben tengo que esperar otra semana más. Cleo viene a verme todas las tardes, James ha estado preguntando por mi las últimas semanas pero siempre estoy con la excusa de que estoy enferma, de Luke no he sabido absolutamente nada y bueno no es que me importe.

- Quisiera un café con leche de almendras, tamaño chico, moka, con mucha crema batida y caramelo - pide la inesperada voy de James.

Me congelo donde estoy, lo bueno es que estoy de espaldas a él y no me ha visto la cara.

Me aclaro la garganta - Claro en un momento - intentó que mi voz suene diferente y más chillona pero no funciona.

- ¿Emma? - su voz es de preocupación.

Suspiro y me giró hacia él - Hola - saludé.

- ¿Qué haces aquí? - preguntó confundido.

- Mmmh,.... trabajando - conteste enseñándole los batidos.

- ¿Porqué? - preguntó.

- Porqué mi vida depende de ello - conteste girándome de nuevo.

- ¿Ya te recuperaste de un momento a otro? - me fastidio.

- No te interesa - conteste cortante.

Se torna el silencio - ¿Sabes algo de Luke? - al vaso que tenía en mi mano resbala y choca con la mesa - ¿Están peleados cierto? -.

- Haces demasiadas preguntas y no, no he sabido de él desde hace ya varias semanas - conteste malhumorada.

- ¿Puedo saber cuál fue la razón? -.

- Dios - susurre - No es de tu incumbencia -.

Le entregue su café de mala manera. Me giré para irme.

- ¿Estás embarazada, cierto? - preguntó dejándome helada.

No supe que decir, mis malos se volvieron puños y mis ojos picaban.

- Adiós James - me encerré en el baño y me mire al espejo.

Inhale varias veces y exhale, tenía que controlarme, no iba a dejar que nadie me volviera a dañar otra vez, y eso es una promesa.

***
Empacaba mis cosas ya para irme a casa de Cleo, ella ya había iniciado la universidad hace unos días así que llegaba tarde a su casa. Me quite la ropa del trabajo y lo guarde en mi casillero, dejando a la vista una playera negra demasiado pegada a mi torso, haciendo que mi barriga se vea más redonda e hinchada. Podría verse a simple vista. Una anciana entró a la tienda haciendo sonar la campanilla.

- Disculpe pero está cerrado - murmure acercándome a ella.

- Solo quisiera un pedazo de pastel y un té de moras - hablo con su voz de viejita.

No sabía que había pastel, mi barriga exige pastel. Voy a pedirle que se marche pero entonces se me acerca y coloca su mano en mi vientre.

- ¿El primero? - pregunta sonriendo.

- S-si - tartamudee.

- ¿Cuantos años tienes, niña? - pregunta mirando mi hinchado vientre.

- Di-dieciocho -.

- A muy temprana edad, yo pase por lo mismo, se que serás una excelente mamá - dicho esto se gira sin antes sonreírme para irse.

Dios mío. Necesito ....

- ¿Fue fácil? - pregunte de la nada haciendo que se detenga y se gire confusa - ¿Fue fácil, para usted? - termine.

La anciana me sonríe y me señala el sillón vacío, suspiro y asiento. Deje sobre la mesita dos platos de pastel y dos tazas de té, la anciana feliz comenzó con el primer bocado.

- No, no fue nada fácil - negó con la cabeza - No siquiera sabía que estaba embarazada a los 17, me di cuenta cuando la marea roja nunca llegó y mi panza comenzó a hincharse - rió como si le fuera gracioso, sonreí falsamente - le dije a mis padres quienes no quisieron hacerse cargo de mi, mi novio ...- suspira - era guapo, pero cuando se lo dije me dejó sola -niega con la cabeza y come más pastel - pensé en varias formas de ..., zafarme de él, cuando nació ..., fue lo mejor que me pudo haber pasado - explica con una clara muestra de amor en su voz, de adoración, entonces me mira - ¿Tú que piensas hacer con este bebé? - preguntó.

Pensé en algo pero...

- Piensas dejarlo ... - aclara - Es tu decisión niña, pero te aseguro que no habrá algo más hermoso y tan real como lo que pasará cuando lo tengas, son momentos que nunca olvidarás -.

La campanilla vuelve a sonar, entra un señor con un bebé en brazos y una niña corre hacia la anciana.

- ¡Abuelita! - se lanza a los brazos de su abuela - ¿Porqué tardas tanto? - preguntó la niña rubia y con una hermosa tez y hermosos ojos.

- Ya iba mi niña, solo que el pastel estaba muy bueno - carga a su nieta y me sorprendo de la fuerza que tiene a pesar de su edad - Es tú decisión niña, tú decides que hacer, si decides quedártelo te aseguro que no habrá más tristeza - me sonríe - Adiós - se despide.

- Dios mío madre, si nos hubieras avisado hubiera bajado a cambiar a William - se queja su hijo abrazándola por los hombros y saliendo del local.

Suspiré mientras ponía en una bolsa el pastel que no me comí y lavé los platos usados, cerré el local y pensando muy bien me dirigí a casa, en el metro podía ver a mujeres con bebés riendo, parejas embarazadas y viviendo felices, comprando en tiendas para bebés, cunas, pañales... Cynthia me recibe con alegría, a pesar de que ya sabe lo que planeo con el bebé me apoya. Cleo llega más tarde, no está contenta aún con la decisión, como siempre intenta convencerme, le contesto con la misma decisión. Me doy una ducha y al salir me miró al espejo, mi mano acaricia mi vientre y siento un cosquilleo, la quito inmediatamente. Ya en la cama me sigo atormentando. ¿Qué voy a hacer?

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Maratón 😜
No hay nada que decir por ahora, gracias por leer!!! Hasta mañana! Voten ⭐️🌟.

Saludos 🤙🏻👀

Ashley🖤