Años después.

Eventualmente, Dick adopto el sobrenombre de Robín, y los criminales de Gotham conocieron una nueva cara de la justicia. Un joven que había prometido que a pesar de todo, siempre lucharía por lo que era correcto, y que nunca se rendiría.

Ahora, años después de haber tomado la decisión de ir a vivir con Bruce Wayne, Dick era más conocido por ser un dolor de cabeza para los criminales de Gotham, como Joker.

-Ácido. ¿Por qué siempre es ácido? – Dick Grayson dijo para sí mismo –

Se podría decir que Robín estaba cansado de la misma clase de trampas que usaban para atraparlo a él y a su mentor. Después de casi tres semanas sin casi ningún crimen a la vista, Batman y el Chico Maravilla se pusieron en acción. Después de días buscándolos, Joker y Harley Quinn les había puesto una trampa dentro de Ace Chemicals.

Estos cayeron casi de inmediato. Además, Harley tuvo la brillante idea de arrojar los cinturones de Batman y Robín cerca de los controles para que los perdieran primero y no pudieran escapar de ninguna manera.

Batman solo sonrió en sus pensamientos. Si esta era la mejor trampa que Joker y Harley podían hacerles, se estaban quedando sin ideas.

Se tocó el dedo índice con el pulgar izquierdo, lo que hizo que un mini soplete se extendiera desde su guante y comenzara a calentar la cadena. En solo dos segundos, estaba libre, y Robín lo siguió gracias a una lima de dedo afilada de su guante. Entonces el Dúo Dinámico consiguió sus cinturones y escaparon con la ayuda de sus cables ascendentes.

Una vez fuera de la planta química, Batman y Robín persiguieron a los delincuentes fugitivos. Parecía que iban a ir en círculos, pero resultó que Batman había colocado trazadores en la parte inferior de sus vehículos para que Joker y Harley sean detectables. En unos tres minutos, descubrieron que los dos villanos estaban dentro de uno de los almacenes donde a menudo los gángsters guardaban su mercancía de contrabando. Ahora Robín no entendía de qué se trataba esta emergencia, así que tuvo que preguntar.

-Entonces, ¿qué querían Joker y Harley en Ace Chemicals? – pregunto Dick, con algo de confusión –

-El GCPD informa que estaban robando sólo dos elementos químicos de los laboratorios: nitrógeno y cloro – describió Batman con su voz seria y profunda – Y a juzgar por los cables y material que le robaron a GothCorp, diría que están trabajando en algún tipo de explosivo químico.

-Parece que estos imbéciles quieren imitar a Freeze haciendo una bomba de hielo – Dick no pudo evitar poner una sonrisa – Que poco originales.

Batman notó la expresión de burla de Robín y asintió con la cabeza, luego dijo: "Vamos a movernos".

Y los dos vigilantes echaron a correr.

Mientras tanto, el Joker, Harley Quinn y Johnny Frost acababan de completar la bomba y ahora estaban maquiavelando planes para llevar a cabo la siguiente fase de su operación, sin saber que Batman y Robín entraban por una salida del techo y ahora estaban agachados en una viga en las sombras, completamente ocultos.

-¿Por qué no usamos nuestro nuevo juguete para exigir una tonelada de dinero al alcalde? – sugirió Joker viendo a la bomba química que tenía en sus manos – Simplemente lo plantamos debajo de las calles de Gotham, luego le pedimos al alcalde que nos lleve la bolsa con billetes verdes más grande, y si no obtenemos el botín... ¡KABOOM!

-Eso es típico viniendo de usted, jefe – dijo con voz ronca de Johnny Frost – Preferiría volar las paredes de Arkham y darle a Batman un verdadero desafío tratando de rodear a nuestros amigos. Por supuesto, podríamos usar su plan.

-Por mí está bien cualquier plan, Sr. G – bromeó Harley, siempre ansiosa por decir algo – Quiero dinero, pero también quiero ver a Ivy.

Antes de que Joker pudiera decir una palabra, varias bombas de humo cayeron del techo y nublaron el área. Mientras él y sus matones tosían, Batman y Robín saltaron al humo y rápidamente desarmaron el explosivo, luego agarraron a varios secuaces por detrás y los colgaron con los cables ascendentes. Y sin previo aviso, Batman agarró a Johnny Frost y lo sujetó de las muñecas con unas esposas magnéticas.

-¡Tenemos compañía! – gritó Joker, e inmediatamente sacó sus pistolas dobles –

Harley sacó su revólver, y pronto las paredes del almacén se llenaron de agujeros de bala y el aire resonó con el sonido de las armas de fuego. Luego, en un instante, Batman y Robín salieron del humo y comenzaron a derribar al resto de los gángsters. Golpeaban y pateaban con gran precisión, esquivaban los ataques de sus oponentes y los desarmaban con una rapidez impactante, y saltaban, giraban y volteaban con asombrosa facilidad. En menos de dos minutos, solo el Joker y Harley se quedaron en pie, y ambos miraban a los gélidos ojos de los dos justicieros de Gotham.

-¡No es justo! ¡Ustedes dos ya deberían de tener más agujeros que un colador! – Joker despotricó –

Joker y Harley parecían estar preparándose para un enfrentamiento, pero mejor corrieron hacia la salida. Joker logró salir por la puerta, pero Harley casi saltó de su traje cuando Robín apareció frente a ella, colgando boca abajo de la puerta.

Todo lo que Robín dijo fue "¡Boo!" y luego soltó una lluvia de golpes y algunas patadas, lo que finalmente hizo que Harley se doblara. Luego ató a la payasa de dos lados con cables pesados ​​para evitar que escapara.

Mientras tanto, el Joker había salido del almacén y estaba a punto de escapar cuando un puño apareció de la oscuridad y lo golpeó con un derechazo directo a la mandíbula.

-Se acabó, Joker – Batman salió a la luz con las sombras que parecían desvanecerse – Estás viendo otro año en Arkham añadido a tu sentencia.

-¡Dios santo! – Joker gimió, a punto de perder el conocimiento por el golpe del murciélago – Vete al diablo, Bats...

En unos minutos, llegó el Departamento de Policía de Gotham, y el Joker y Harley fueron llevados en una camioneta negra que se dirigía de regreso al Arkham Asylum mientras sus matones eran amontonados en otra camioneta hacia la Penitenciaría de Blackgate. Batman y Robín recibieron un sincero agradecimiento del comisionado Gordon y de algunos oficiales, que habían estado tratando de atrapar a los dos villanos desde su fuga la semana anterior.

-No puedo negarlo, Batman, tu servicio a Gotham City es una bendición para nuestra gente – le dijo el comisionado a Batman –Con la caída exponencial en nuestra tasa de criminalidad... es impactante pensar en lo alto que era hace diez y siete años cuando apareciste por primera vez.

-Detener el crimen es sólo una parte de mi trabajo, comisionado – explico Batman – Los criminales aquí son tan audaces que a menudo piensan que incluso pueden robar el pan de las mesas de cada casa si lo intentan. Yo les hago pensarlo dos veces antes de que siquiera lo piensen. De esa manera, saben que estoy obligado y decidido a acabar con el crimen y asegurar que siga siendo así.

-Y haces un trabajo magistral – afirmó Gordon – Pero si tan solo atraparas a esa chica con el traje de gato...

-Catwoman no le hace daño a nadie – Robín intervino – Solo roba joyas y después dona el dinero. Y me salvo la vida en dos ocasiones.

-¿Ahh si, Chico Maravilla? – Gordon puso una mirada reprobatoria hacia el muchacho – ¿Y tú como lo sabes?

-Trabajo de detective... – contesto Dick con una sonrisa cínica –

-Buenas noches Jim – Batman se despidió del Comisionado mientras sacaba su pistola de ascenso y se enganchaba a un tejado cercano –

Robín hizo lo mismo, uniéndose a su mentor en la oscuridad, no sin antes despedirse con un gesto del Comisionado. Luego, la policía siguió su camino para llevar a los convictos fugados a la prisión mientras Batman y Robín se quedaron en el borde de un tejado aledaño.

-Hoy te luciste, Dick – comento Bruce a su pupilo – Tomando en cuenta la solicitud que me hiciste el otro día...

-¿Al fin dejaras que tenga mi propio nombre e inicie mi carrera en solitario? – interrumpió Dick, emocionado –

-No, solo hiciste que después de hoy lo considere – Bruce puso una sonrisa sarcástica – Ya veremos después que hacer. Al fin y al cabo ya estas por cumplir veinte años.

Al contrario de lo que Bruce pensaba, Dick no se molestó al decir esto. Solo puso una sonrisa orgullosa, pensando en que sus logros al fin rendían fruto.

-¿Sabes Bruce? Creo que estoy orgulloso de todo lo que he logrado – Dick puso su vista en las estrellas, pensando en sus padres – Ojala ellos estén orgullosos de mí.

Bruce no dijo nada, solo le toco su hombro en un gesto reconfortante.

Lo están, Dick. Están tan orgullosos como yo lo estoy de ti...

Y era cierto, por que en toda su vida, Bruce Wayne nunca había estado más orgulloso de alguien.

Dick era su más grande logro. Nadie iba a imaginar que en el día en que se conocieron en el circo, sus vidas iban a estar unidas por un buen rato de su vida.

Nunca imagino que Dick Grayson se iba a convertir en su hijo.

Por siempre...

CONTINUARA...

Si llegaste hasta aquí, tienes mi profundo agradecimiento por tomarte tu tiempo y darte una oportunidad al leer esta aventura.

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¿Cómo calificas mi desempeño como escritor?

De nuevo, solo vuelvo a repetir GRACIAS.