Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

XLIV - Suerte

Patrick y Michael pasaron el tiempo revisando cómo proceder en un caso en particular, el hombre de ojos color aqua no le mintió a Andrés, estaría trabajando de cerca con Patrick.
Luego Michael vió prudente contarle la conversación que tuvo con Andrés, cuando le contó dejó muy confundido a su compañero.

—No puedo creer lo que dices, bueno, viniendo de ti sí, pero ya tiene tiempo que yo y Andrés no cruzamos palabra, al menos no desde que vino Jonathan a visitarte.
A pesar de que nuestras oficinas quedan juntas, él no me habla más, antes al menos me daba los buenos días, hoy ni siquiera me mirá.

—Ha de estar llevando un caso complicado, es de los que no descansa hasta concluir un caso.
Si duda de poder ganar... hará lo que sea para encontrar vacíos legales o elementos que desestimen a la otra contraparte.
Estará pensando en ello, buscando, ya cuando deba de ir a juicio con el cliente, y sobre todo tenga una resolución, volverá a la marcha.
Será el mismo de siempre, dale un poco de tiempo.

—Éso espero, como sea, olvidemos a Andrés un rato.
¡Cuenta, cuenta! ¿Ya tienes una historia preparada para el unicornio de la niña? Debes tener una historia, por si acaso pregunta.

—En realidad no.

—A lo niños los ganas con historias, por ejemplo, hace algunos años, tuve un caso referente a violencia doméstica e intrafamiliar.
El niño menor no quería hablar con nadie, los mayores sí hablaron conmigo, pero ése niño, él tenía un algo, no podías estar en una habitación con él sin que se llevará las manos hacía la cabeza, se ponía en bolita.
Quería ayudar, escucharle y hacerle saber que podía confiar en mí, fui al centro, le compré una tortuga de peluche a la que le puse “La Tortuga Coco”, e invente a una pequeña tortuga que cada que se sentía en peligro usaba su caparazón como protección.
Le pareció “guay” y quería tener un caparazón igual.
En lugar de hablar de su vida, le hable de la tortuga, empezó a preguntar cosas y a querer hablar.
Le conté su historia, él me contó la suya.
Gracias a la “Tortuga Coco” pude hacer que hablará, y su testimonio fue crucial para el caso.
Seguí hablando con él, fui viendo como se llevaba con la nueva familia y él aún conserva la tortuga e incluso me hizo un dibujo.

Patrick saco de su cajón una hoja protegida con un legajo plástico, era un dibujo de él y la tortuga.

—Lo que quiero decir, es que a veces necesitas tener el alma de un niño.
Pensar por un minuto como ellos, si quieres ganarte a Cherry, deberás aprender a hacerlo.
Jugar con ella e inventar historias fantásticas.

—Pensaré en algo, daré lo mejor de mí.

—Suerte, si necesitas algo llámame. & no te preocupes, te cubriré aquí.

Le agradeció por ello, de verdad esperaba tener ésa suerte que mencionaba su compañero.

Era hora de irse a casa para cambiarse y volverse a duchar, luego iría a casa de Jonathan.

Mientras tanto Jonathan estaba en casa, ayudando a Cherry, le eligió un vestido amplio y ligero con short, no quería que se sintiera incómoda al jugar.

También le puso unas zapatillas con correa, para que no perdiera los zapatos, tenía esa costumbre de querer andar descalza.
Le dejo el cabello suelto y le puso uno de los broches de Lucía.

—Corazón, dime ¿De verdad quieres salir con nosotros?
No me molestaré contigo si no quieres conocer a alguien más, lo entenderé y respetaré eso.

—Sí quiero ir con ustedes.

—Bien, pero promete decirme si te sientes incómoda en algún momento.
Te escucharé y regresaremos a casa ¿De acuerdo?

Cherry asintió, a la vez que giraba su vestido.
Le había gustado tanto el vestido que su padre había comprado para ella.
Y su abuela le dijo que se veía bonita con ése vestido, entonces lo quería aún más.

El contador recibió un mensaje a las 10:38 de parte de Michael, diciéndole que llegó antes, por si quería bajar a verlo.
Jonathan se asomó a la ventana y vio el carro de Michael aparcado en la otra casa, por lo que no dudo en decirle a su madre que no tardaba en regresar.
Bajo las escaleras con cuidado, preguntandose el por qué Michael llegaría antes, luego pasó por su mente que era probable que se hubiera arrepentido.
Y ésa sensación le provocó malestar, por ello no sé apresuró en bajar.

Hoy este día pintaba de lo peor.

Al salir de la casa vió a Michael saludarlo desde el cristal del parabrisas, se veía bastante bien, el traje azul combinaba con el color de sus ojos, era sumamente perfecto.

Entro al auto con él y espero ver que quería decirle, no creía que se tratará de algo bueno.

Michael se recargo en su hombro, puso una mano en su pierna y le hablo.

—¿No piensas besarme? Vine antes, sólo por uno de tus besos y para que no nos extrañemos tanto.

Siempre querré besarte, te ves bastante guapo hoy, igual que todos los días.
Es probable que me hubiera avalanzado sobre ti, no importando nuestro convenio.

Ambos se besaron y Michael pudo sentir la sonrisa de su novio en medio del beso.

—Ven aquí —le dijo suavemente, mientras lo atraía hacía él—, te prometo que vengo por ti hoy en la noche.
Tú y yo en la noche estaremos sólos.

—Te creo, estaré esperando por ti, mi amor. Te quiero.

—También te quiero, cariño.

Un último beso, un último abrazo y salió del coche, no podía apartarse tanto de Cherry en un fin de semana.
En lo que Michael le envío un mensaje a Patrick informándole de su llegada, además de decirle que había hecho lo que le recomendó.

«Bien hecho, suerte, verás que te irá bien».

No lo sabía, pero con haber visto a Jonathan antes... estaba más que tranquilo.
Faltaban cinco, era hora de bajar, movió el coche, saco los regalos de la cajuela y fue hasta la casa.

¿Todo estaría bien, cierto?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro