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Un Final Y Un Inicio

Un nuevo día comenzaba en Royal Woods, donde en el interior del sótano de la casa de la familia Loud, nuestro querido albino, quien aún tenía puesto aquel traje de ardilla, se encontraba encadenado de manos y piernas, en una de las paredes de dicho sótano, además de tener puesto un extraño collar en el cuello.

En algunas partes de aquel sótano, más específica y principalmente en la pared y parte del piso, dónde el albino se encontraba encadenado, habían diversos, charcos así como manchas y gotas de sangre por doquier, pero la mayor parte de dicha sangre, estaba embarrada en el traje de ardilla que el albino continuaba usando.

Sin embargo, de un momento a otro, la puerta del sótano se abrió mientras que por las escaleras, se podían escuchar el sonido de los pasos de las "hermanas" del albino bajando por ellas, el albino, sabiendo perfectamente a qué era a lo que venían, este se estaba preparando mentalmente, para la paliza que recibiría en breve.

Las hermanas Loud, por otra parte, una vez que bajaron por completo las escaleras, estás se encontraban frente al albino, mientras que cada una lo miraba con odio y desprecio, además de que llevar consigo, unos cuantos objetos así como una mascota en mano, los cuales tenían planeado usarlos con el.

Lori: - tenía un palo de golf.

Leni: - un estuche con alfileres.

Luna: - una guitarra electrica algo dañada.

Luan: - una cubeta con globos llenos de un extraño líquido, el cual no era agua.

LynnJr: - un bate de béisbol.

Lucy: - un murciélago colgando de uno de sus brazos extendido.

Lola: - un látigo.

Lana: - una llave inglesa.

Lisa: - un pequeño control remoto.

Lincon: ¿Y ... ahora? - sin levantar la mirada y con voz apagada les pregunta - ¿Porque ... están ... tan enojadas?.

Lori: ¡Por tu culpa tuve otra discusión con Bobby! - lo golpea con el palo de golf.

Leni: ¡Por tu culpa!, ¡ya no me salen bien los diseños de los vestidos! - le entierra muy profundamente, diversos alfileres en los brazos y las piernas además del torso.

Luna: ¡Por tu culpa, no me salen las notas de una canción que he estado escribiendo! - lo golpea con su guitarra en la cabeza.

Luan: ¡Por tu culpa la gente ya no me contrata, para las fiestas de cumpleaños de sus hijos! - le arroja los globos con la extraña sustancia.

LynnJr: ¡Por tu culpa mala suerte!, ¡perdí en otro partido de béisbol, y me expulsaron de el equipo! - lo golpea muy fuerte con el bate.

Lucy: ¡Mis poemas ya no son tan buenos como antes suspiro! - envía a su murciélago a morder al albino principalmente en el cuello.

Lola: ¡Por tu culpa volví a perder otro concurso de belleza! - le da diversos azotes con el látigo en el rostro.

Lana: ¡Por tu culpa brinquitos, se escapó! - lo golpea con llave inglesa.

LynnJr: Oye Lisa - voltea a ver la menor con lentes - Faltas tu.

Lisa: Enseguida unidad fraterna - voltea a ver al albino - Les sugiero que se alejen un poco del homosapiens.

Las demás hermanas Loud, sin poner objeción alguna, estás se alejaron unos cuantos metros de el ensangrentado, mojado, y apaleado albino, el cual respiraba pesadamente.

Lisa: - apunta el control remoto hacia el collar en el cuello de el albino.

Lincon: - hace un pequeño esfuerzo por levantar la mirada para así mirar a Lisa - L-Lisa, p-por favor ... n-no lo hagas.

Lisa: Esto es por el bien de la ciencia - preciona el botón de el control remoto.

Lincon: ¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH!!!! - grita fuertemente.

Al sentir como una gran cantidad de voltios, recorren todo su cuerpo, y el estar empapado de aquel extraño líquido, además de tener aquellos alfileres enterrados profundamente en sus extremidades y torso lo hacia empeorar.

El albino se retorcía de manera violenta, brusca e inhumana, mientras que las hermanas Loud, observaban esto con una gran sonrisa, llena de satisfacción, pero en especial cierta castaña deportista.

Lisa por otro lado, anotaba las violentas reacciones del albino, en una pequeña libreta, mientras observaba detenidamente, como este se retorcía debido a la descarga eléctrica, y tras que dicha descarga eléctrica pasará, se podía observar al albino, que se encontraba chamuscado y humeante de su cuerpo, pero lo curioso era que, este a pesar de su estado y condición seguía conciente.

LynnJr: - mira con asco al albino - Maldita sea ... aún sigue vivo.

Lori: Déjalo no vale la pena y nuestro tiempo, vámonos mamá ya hizo el desayuno - comienza a subir las escaleras, mientras que las demás comienzan a seguirla excepto la castaña deportista.

Lana: Oye Lynn - la mira - ¿No vienes?.

LynnJr: - la voltea a ver - Voy en un momento no me esperen.

Lana: De acuerdo - sube las escaleras para alcanzar a las demás, dejando sola a la castaña y al albino.

LynnJr: - se acerca al semi-inconciente albino, para así sujetarlo del cabello y hacer que la mire directo a los ojos - Escúchame bien, saco de mala suerte, si fuera por mí ya estarías muerto, pero necesito que sigas brindando suerte, ya que la próxima semana voy a inscribirme al equipo de fútbol americano de la escuela...

Y pobre de ti si no tengo suerte ese día, cuando hagan la selección de los jugadores, porque si no me eligen te mato, ¿oíste?, ¡yo te mato! - le da un buen derechazo en el rostro al albino dejandolo completamente inconsciente, para después subir las escaleras, y dejarlo solo

Una vez que el albino se encontraba solo, en una de las paredes del sótano, lo que parecía ser una sombra negra se hace presente, y de esta emergen dos siluetas oscuras, una masculina y la otra femenina, dichas siluetas habían presenciado, la golpiza, humillación y tortura que le habían hecho pasar al albino hace un momento.

¿?: - ¿Hasta cuándo vas a actuar?, ¿hasta cuándo dejarás que esto le siga pasando al niño? - pregunto la silueta femenina a la masculina.

¿2?: Hasta que el deseo de Venganza, en él, fluya por completo y salga a flote, porque en su corazón los sigue amando, pero ese sentimiento se desvanece con el paso del tiempo, y para cuando eso ocurra, ellos conocerán lo que es perderlo todo - mira al albino - Lo menos que puedo hacer por el niño, es curar un poco sus heridas - extiende una mano con dirección hacia el albino.

La cual brilla por unos segundos, para que así, la sangre así como algunas heridas en el cuerpo de el albino, desaparezcan sin dejar rastro alguno que estuvieron ahí.

¿2?: ¡Listo!, ahora vámonos, hay mucho que hacer, para lo que está por venir.

¿?: Entonces, no perdamos ni un segundo del valioso tiempo.

Y así ambas siluetas se fueron tal como habían llegado, dejando al albino nuevamente en soledad.

Tiempo Después...

Era un día nublado y lluvioso en Royal Woods, dónde en las lluviosas y solitarias calles de dicha ciudad, nuestro querido albino favorito, iba caminando o más bien cojeando además de tratar de no caer inconsciente, debido a lo débil y moribundo que se encontraba, por la falta de alimentación y perdida de sangre, entre otros daños tanto externos como internos, por las constantes palizas que había recibido con anterioridad.

Que sin lugar a dudas, para una persona normal, esto ya habría significado la muerte, por la pérdida de sangre excesiva, e infecciones por la falta de atención médica, en las diversas heridas, esparcidas por todo su cuerpo, lo curioso era que este, no llevaba puesto, aquel traje de ardilla, ni tampoco aquel collar eléctrico, que fue diseñado para evitar que escapara del sótano de su "hogar".

Lincon: Haa... Haa... Y-Ya ... falta poco... - siguió caminando con las pocas fuerzas que le quedaban.

Después de estar caminando con mucha dificultad, durante un cierto lapso de tiempo, el albino, había llegado a su destino, el cual no era más que otro que el Cementerio De Royal Woodsy una vez adentro de dicho cementerio, el albino comenzó a caminar, entre las diversas tumbas, observando las inscripciones de lápidas, lo que daba a entender que estaba buscando una tumba en específico y tras otro pequeño lapso de tiempo, el albino finalmente había encontrado, lo que estaba buscando.

Lincon: Aquí ... está - se para enfrente de una pequeña y solitaria tumba, para así mirar la inscripción en la lápida.

-Aquí Yace...-

- Albert Harriet -

- Un Gran Soldado Y Amigo
Que Sirvió Con Honor Y Orgullo A Su Nación -

- Que En Paz Descanse -

Lincon: A-Aquí estoy ... abuelo - comienza a derramar unas cuantas lágrimas - P-Perdóname por no despedirme ... de ti - coloca la palma de su mano sobre la inscripción de la lapida - S-Saben ... - les habla a ustedes - L-La muerte de mi abuelo, fue la segunda cosa más dolorosa, q-que me ha pasado, y-ya que la primera, fue mucho peor...

T-Tres dias, antes de que mi abuelo falleciera, "mis padres" y "mis hermanas", habían bajado al sótano llevando consigo a Lily, a-al principio, pensé que, ellos habían recapacitado y-y que, m-me liberarían, p-pero ... me equivoqué...

I-Incluso Lily, al verme todo lastimado y ensangrentado, n-no lloro, y-y cuando la acercaron a mi, intenté hablarle, p-pero las palabras, a puras penas salían de mi boca, p-pero lo que más me dolió, f-fue que Lily - los mira - N-No me reconoció, y quería que la alejaran de mi, p-porque vi que me tenía miedo - agacha la mirada - ...

... - N-No sé que le hicieron, pero no tengo la menor duda, que Lisa tuvo algo que ver... - mira hacia el cielo mientras las gotas de lluvia caen sobre su rostro - Y con mi abuelo muerto, y-ya no tengo a nadie, en quien confiar, y-y tampoco - saca una pequeña navaja de uno de sus bolsillos - Razón para vivir... -

... - S-Sé que esto, que estoy a punto de hacer, a la mayoría no les gustará, p-pero, solo les pido que entiendan, q-que ya no tengo otra opción, ya he aguantado y esperado lo suficiente y nada cambio, p-pero antes de morir, me gustaría compartir, mi primer y último deseo...-

...- Q-Que mi pequeña hermana Lily, sea salvada de ellos, y que ellos, paguen por lo que me hicieron, si alguien, escucha mi deseo, espero que por favor ... lo cumpla - procede a hacerce, unos profundos cortes en las muñecas, para después sentarse a un lado de la lápida de la tumba de su abuelo - Espérame abuelo, pronto me reuniré ... contigo - cierra los ojos exhalando su último aliento de vida, con una pequeña sonrisa en su boca, mientras la sangre salía de sus muñecas.

Y en solo cuestión de pocos minutos, el albino, fallece tras la perdida de sangre restante por los cortes en sus muñecas, seguidamente, la lluvia cesa poco a poco, para que acto seguido, dos siluetas una femenina y una masculina, se hagan presentes y se coloquen enfrente, del cuerpo sonriente y sin vida del albino.

La apariencia de la silueta femenina, era de una chica de más o menos 18 años, con la piel pálida, ojos color rojo sangre, cabello negro liso y largo que le llegaba hasta la cintura, la cual vestía un vestido de una sola pieza, color negro que le llegaba hasta los pies, demás de que cargaba en una de sus manos , un libro, en el cual en la parte frontal tenía una placa metálica, con forma de cráneo de esqueleto humano.

La apariencia de la silueta masculina, era de un chico de no más de unos 20 años, con la piel pálida, ojos de color verde, cabello azul-claro, con las puntas plateadas, tanto en la parte frontal como en la posterior, este vestía, una campera de cierre abierta con capucha manga larga, además de unos pantalones negros con líneas blancas laterales, y unos zapatos azules con suelas plateadas.

Sin olvidar que en sus muñecas y tobillos, traía puestos unos artefactos, con forma de anillos de plata y con el símbolo del infinito grabado en cada uno de ellos.

¿?: - abrazada al brazo de el peli-azul mientras observa al albino - Pobre pequeño, tenía una buena y larga vida por delante, y esos desgraciados se la echaron a perder, todo por una estúpida superstición, de una mala perdedora que no pudo aceptar la derrota, me dan ganas de arrancarles el alma ahora mismo de sus patéticos cuerpos mortales, para así mandarlas, directo al infierno - mira a el peli-azul¿Tu no piensas lo mismo ... Yandal?

Yandal: - suspira - Muerte, por más tentador, que sea el matarlos ahora mismo - la mira - Solo estaríamos dándoles la salida fácil, primero hay que hacerlos sufrir, y para ello estoy yo aqui.

Muerte: ¡Jum!... - hace un pequeño puchero - Bien.

Yandal: - mira al albino - Asegúrate de llevar su alma, a dónde se encuentra la de su abuelo.

Muerte: Puedes estar seguro de que lo haré - extiende una mano hacia el cuerpo de el albino.

Y acto seguido de la boca de este, sale una pequeña esfera de luz blanca, la cual termina reposando en la delicada mano de la chica.

Muerte: - mira la esfera con una expresión tristeza y melancolía - Es una lastima, tenía tanta pureza, que injusto.

Yandal: Tu mejor que nadie sabe, que la vida siempre ha sido injusta, con los nobles de espíritu y puros de corazón.

Muerte: - suspira - Supongo que tienes razón, nos veremos después - desaparece de un segundo a otro sin dejar rastro alguno.

Yandal: Bien ahora me toca a mí, dar sepultura a este cuerpo mortal - chasquea los dedos.

Acto seguido, un ataúd de madera de color blanco, aparece de la nada, mientras que un hoyo en la tierra se abre, justo al lado de la tumba del abuelo del albino, seguidamente, el cuerpo del albino comienza a elevarse y flotar en el aire, además de que las heridas así como los moretones, desaparecen y su ropa es reemplazada por un traje negro, que le quedaba a la medida.

Seguidamente el cuerpo de el albino ingresa al interior de el ataúd, y este se cierra por si solo, para que después este, ingresé al interior de aquel agujero en el suelo, y así la tierra por si sola, comience a llenar aquel agujero hasta cubrir el ataúd por completo, y así aparezca una lápida de piedra que tenía grabado la siguiente inscripción...

- Aquí Descansa Junto A Su Abuelo -

- "Lincon Marrie Harriet" -


- Considerado Como -

- El Hombre Con El Plan, Y El Mejor Hermano De El Mundo -

- Siempre Serás Recordado -

El peli-azul mira la tumba del albino, por unos cuantos minutos, para después dejar una rosa blanca sobre dicha tumba, dar media vuelta y dirigirse hacia la salida principal del cementerio, ya que una vez afuera de dicho cementerio, el peli-azul mira hacia el cielo, con el ceño fruncido.

Yandal: Prepárense Louds, porque el peso de la venganza, caerá sobre cada uno de ustedes y todos aquellos que los apoyaron.

Continuara...

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