
capítulo 12:
Cien mililitros de líquido glandular contienen entre 80.000 y 100.000
La hermana Qing miró a los ojos claros de Shen Yu y rió suavemente:
"El dinero se puede hacer en cualquier parte, pero el dinero no es fácil de hacer en cualquier parte".
Shen Yu no pudo entender palabras tan profundas, sólo comprendió que la Hermana Qing dijo que había un lugar donde podía ganar dinero. Luego preguntó apresuradamente:
"Hermana, ¿puedes decírselo a Yu Yu?"
La hermana Qing hizo una pausa y se preguntó:
"¿Le falta dinero?".
Shen Yu asintió pesadamente:
"¡Sí! ¡Yu Yu necesita mucho dinero!"
Parecía deprimido,
"Sin dinero, no se puede salvar a la gente".
La hermana Qing guardó silencio por un momento. Aunque Shen Yu no parecía muy inteligente, la determinación en sus ojos la conmovió.
Quién dejaría salir a un tonto a trabajar para ganarse la vida si no lo pasara mal.
Al principio no quería inmiscuirse en los asuntos de otras personas, pero quizá Shen Yu le recordaba a la persona que una vez fue. Al fin y al cabo, era ablandar un poco el corazón, y en el mundo actual, sin dinero, no es nada.
Sabía lo humilde y doloroso que era no tener dinero y, después de pensarlo, decidió mostrarle a Shen Yu una salida.
Pero es imposible tener un trabajo adecuado cuando quieres dinero rápido.
Lo que le presentó a Shen Yu fue un pequeño taller subterráneo que elaboraba medicina negra. La medicina que estudiaron requería líquido de la glándula omega como materia prima. La extracción de líquido glandular es muy perjudicial para el organismo y además está prohibida por la administración. Por lo tanto, las materias primas son escasas y deben recolectarse en secreto a un precio elevado: cien mililitros cuestan entre 80.000 y 100.000 yuanes.
Ella le contó a Shen Yu la naturaleza de este "trabajo" de antemano. Shen Yu escuchó con poca comprensión. Probablemente sabía que sería muy difícil. Sería doloroso recibir una inyección en el cuello, pero el dinero llegaría rápidamente, por lo que podrías recolectar suficiente dinero para salvar a Gu Yingyi de una sola vez.
"¿Qué te parece? ¿Lo has pensado?"
Shen Yu se asustó inconscientemente al pensar en el miedo y el dolor que sintió al quitarse la marca, pero entonces pensó que Gu Yingyi seguía encerrado en el centro de detención.
Tenía que salvar a su marido, así que se mordió el labio y Shen Yu decidió aceptar:
"¡Sí!".
La hermana Qing no dijo nada. Para las personas que tenían poco dinero, esta era la manera más rápida y efectiva. Había poca ayuda que ella pudiera brindar.
"Bueno, averígualo por ti mismo, asegúrate de no comer mañana por la mañana, mantén el estómago vacío y Ven a verme a las diez de la mañana y te llevaré allí. "
"Gracias hermana."
Después de regresar a casa, Shen Yu comenzó a ponerse al día con la orden de Zhang Yang de nuevo.
Había estado tejiendo hasta las tres de la mañana, los ojos de Shen Yu estaban rojos y había muñecos terminados en su pie izquierdo. En el lado derecho hay ovillos de lana, a veces se quedaba dormido mientras tejía, cuando se despertaba se daba palmadas fuertes en la cara. Y se pellizcó con fuerza dos veces para despertarse, sacudió la cabeza y se dijo:
"Yuyu no puede dormir, tienes que salvar a tu marido, aún está esperando a Yuyu".
Después de darse ánimos a sí mismo, se preparó para tejer otro muñeco a ganchillo, uno más que hacer y podría sacar a su marido más rápido.
Shen Yu se despertó acostado en la mesa al día siguiente, tuvo los brazos presionados toda la noche y se sintió entumecido cuando se despertó por la mañana. Siseó y jadeó en busca de aire, sin atreverse a moverse, esperó a que pasara el entumecimiento antes de moverse lentamente unas cuantas veces.
Bostezó, tenía los ojos doloridos y amargos, se frotó los ojos y su cabeza recién despertada giró lentamente. Se sentó allí durante mucho tiempo antes de recordar lentamente que hoy iba a la casa de la hermana Qing.
Pensando que llegaba tarde, Shen Yu rápidamente buscó su teléfono celular.
La hermana Qing le dejó su número de teléfono ayer. Miró la hora y vio que eran solo las nueve. Rápidamente se lavó la cara, se cepilló los dientes y corrió a la tienda de la hermana Qing.
La tienda de la hermana Qing está muy cerca de la casa de alquiler, pero Shen Yu no siempre puede recordar lugares que estén demasiado lejos.
Cuando llegó a la tienda, Shen Yu fue a buscar a la hermana Qing a la habitación privada de ayer. La hermana Qing ya estaba esperando allí. Al verlo llegar, le preguntó:
"¿Aún no has comido?".
Shen Yu corrió hasta aquí. Ahora estaba exhausto y sudando. Estaba sin aliento y sacudió la cabeza:
"No".
"Bueno, vámonos"
Dijo La hermana Qing mientras miraba su reloj y se levantaba.
La hermana Qing le llevó a un coche, y en el coche, la hermana Qing le dijo:
"Piensa por ti mismo, no es demasiado tarde para echarse atrás".
Shen Yu está muy decidido: "¡Yu Yu no se arrepentirá!"
Porque debe salvar a su marido.
Hoy, sólo puedo entregar comida a Gu Yingyi por la tarde, así que espera que termine antes.
El coche se dirigió a su destino, que estaba alejado, poco poblado y rodeado de edificios del tipo de los barrios antiguos donde hace mucho tiempo que no vive nadie. Hay otro callejón por el que bajar. Los coches no pueden entrar ahí.La hermana Qing salió del auto y lo condujo hacia adentro:
"Estaremos allí pronto".
El pequeño callejón está de cara al sol, por lo que está oscuro incluso a plena luz del día. El callejón no es ni largo ni corto. Las paredes no están expuestas a la luz del sol durante todo el año y están cubiertas de moho y musgo, y el suelo está incluso húmedo y embarrado. La basura se amontonaba en un rincón y de vez en cuando había uno o dos gatos callejeros escarbando en la basura.
Después de salir del callejón, finalmente volvió a ver el sol.
La hermana Qing lo llevó a un lugar que parecía un almacén abandonado, se quedó allí, curvó los dedos con uñas rojas y llamó a la puerta enrollable. Entonces la puerta enrollable se abrió con un estruendo desde el interior y salió un hombre con una máscara y una bata blanca.
"La hermana Qing está aquí".
La hermana Qing tarareó, luego se inclinó y entró al almacén.
Shen Yu le seguía de cerca, su miedo a las batas blancas le hacía confiar sólo en la Hermana Qing, con la que actualmente estaba más familiarizado.
La Hermana Qing barrió con sus ojos al tímido Shen Yu y dijo:
"No tengas miedo, este es el lugar".
El hombre de la máscara miró al omega que seguía a la hermana Qing:
"Hermana Qing, ¿es él el omega del que hablas?".
La hermana Qing asintió.
Shen Yu apretó los puños y reprimió el miedo en su corazón.
El hombre que llevaba una máscara le pidió a Shen Yu que lo siguiera y, cuando el hombre abrió una pequeña puerta, Shen Yu siguió al hombre hasta una pequeña habitación parecida a un laboratorio, en el centro de la habitación había una cama de hierro, junto a ella se amontonaban diversos instrumentos experimentales.
Shen Yu apretó la esquina de su abrigo y se puso de pie con inquietud.
¿Es lo mismo que la última vez? ¿Necesitas una inyección en el cuello?... La última vez le dolió mucho, estaba muy asustado.
"Ponte de espaldas."
El hombre le dijo a Shen Yu mientras se preparaba para lo que vendría.
Shen Yu escuchó las palabras del hombre y se tumbó en la fría cama de hierro mientras el hombre caminaba hacia él con una jeringuilla vacía. El hombre dijo:
"Para asegurar el efecto, no usaremos anestesia. Dolerá un poco, así que tenga paciencia".
Estaba tan asustado que apretó ambas manos sobre la cama de hierro, su cuerpo se desplomó con tanta fuerza que estuvo a punto de temblar.
Cuando la aguja afilada penetró la glándula y comenzó a extraer, el dolor indescriptible se extendió instantáneamente desde la nuca a todo el cuerpo.Shen Yu se mordió los labios con fuerza, su rostro de repente perdió todo color y un fino sudor frío le mojó las sienes.
Le dolía tanto que sus uñas apretaban la cama de hierro, las lágrimas no dejaban de caerle por la cara y de los labios le salía sangre de los mordiscos.
Las glándulas son la parte más vulnerable del omega, y el proceso de extracción del fluido glandular es el más insoportable tanto para el omega como para el alfa.
No sabe cuánto tiempo pasó, pero la extracción finalmente terminó, todo el cuerpo de Shen Yu estaba empapado de sudor. Toda la persona yacía en la cama de hierro con el rostro pálido, como si se hubiera derrumbado, y estaba cubierto de sudor.
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