"La boda - ¿Tú?"

Aun con todos los gritos y la histeria previos durante los preparativos toda la boda había resultado realmente perfecta. La ceremonia eclesiástica había sido más para la familia Swan, Bella sabía que su madre siempre había querido verla caminar por la iglesia y Edward, aunque pensaba no poseer alma o derecho alguno a recibir la bendición de un sacerdote, no puso ninguna objeción a ello. Aunque mientras el cura oficiaba la ceremonia Edward no pudo dejar de notar como su futura esposa tendía a mirar a su lado, al lugar que ocupaban los padrinos. No hacía falta ser un lector de mentes para saber qué estaba pensando en la ausencia de Jacob Black.

Después de eso la ceremonia civil se llevó a cabo en la muy decorada casa. Alice retocaba el maquillaje de la novia y revisaba el velo, mientras tanto afuera los invitados se acomodaban en los asientos dispuestos para todos ellos. Charly y René estaban al frente y del lado opuesto del pasillo estaban Carlisle y Esme. Los compañeros de instituto de Bella, Billy, Sue y Seth estaban sentados atrás de los padres de la novia. Aunque Seth no paraba de mirar de un lado para otro, la idea de poder ligarse alguna chica guapa durante la fiesta no se saldría fácilmente de su cabeza.

Por su parte Edward estaba hablando con el ministro que los casaría legalmente ante la ley. Jasper estaba de pie en la puerta dando la bienvenida a los invitados, aunque no quedaba ya nadie por recibir, y estaba a punto de regresar a tomar su lugar como padrino del novio cuando escucho el sonido del motor de una camioneta y cierto tufillo le picó la nariz:

-"No es cierto" -Podía sentir bastante emoción, un poco de lo que parecía ser una mezcla de confusión y negación, y emociones en tanto control que le recordaban a un muro de ladrillo firme pero milimétricamente levantado. Por dios, tenía que ir a contárselo a Emmett, no se lo iba a creer. Pero más que eso se moría por ver la reacción de su esposa -Buenas noches, bienvenidos -Ok, lo admitía, tal vez su sonrisa no era del todo tan inocente como aparentaba serlo.

-Lo prometiste Alice -Le recordó la novia mientras se colgaba del brazo de su padre, preparándose para caminar una vez más al altar -Después de esto me pondré mis tenis.

-Si si, ahora ve y procura no caerte -Agregó con una linda sonrisa. Mientras Alice le hacía señas al fotógrafo para que comenzara, Bella inhalo hondamente y comenzó a caminar junto a su padre. Durante aquel corto trayecto le fue imposible no ver a todos los invitados, odiaba ser el centro de atención, pero se sentía bien saber que todos le miraban con emoción, con alegría, con pulgares en alto por parte de Mike y Jesica y con muchas lágrimas en los ojos de René. Pero hubo un instante en el cual casi tropieza, Charlie la afianzó disimuladamente del brazo y siguieron su trayecto:

-Te dije que vendría -Le susurro Edward cuando la recibió en el altar. Bella se tomó un momento para volver a mirar hacia atrás. Allí, entre las filas del fondo, Jacob le hacía un gesto de saludo con la cabeza. Sintió ganas de ir hacia allá y pedirle que se parara en el altar junto a ellos como padrino. Sin embargo no quería hacerle enojar y que se fuera.

La ceremonia legal transcurrió según lo previsto, aunque por alguna razón Emmet y Jasper estuvieron sonriendo con alguna clase de doble sentido. Los novios dijeron sus votos, Alice puso mirada asesina cuando el ministro preguntó por alguien que pudiera oponerse y René estalló en lágrimas al tiempo que los novios eran aplaudidos al ser ya marido y mujer. Quince minutos después los invitados estaban desperdigados por todo el lugar, algunos charlaban entre sí, otros comían bocadillos, algunos iban para felicitar al novio ya que de momento la novia había ido para cambiarse los tacones por un calzado más cómodo.

-Felicidades -Harry fue uno de los que felicitaron a Edward.

-Gracias -El Cullen le estrechó la mano con una sonrisa genuina -Me sorprende verte.

-Disculpa la intromisión -Agregó el ojiverde con una tímida sonrisa -No esperaba ser invitado tan fortuitamente.

-No te preocupes -Edward le dio una pequeña palmada en el hombro. A pesar de su extraño primer encuentro había llegado a desarrollar cierto respeto y agrado para con el mago -Ya decía que esos dos estaban actuando extraño.

Mientras hablaban una mesera paso ofreciendo varias copas de champaña, obviamente solo Harry aceptó una, al mismo tiempo que veía más allá como Jasper hacía que Teddy devolviera la que había tomado. Agradeció mentalmente por eso, no quería repetir el incidente de hace un par de años. Solo recordarlo le provocaba escalofríos.

-Ya volví -Él y Edward estaban en medio de una pequeña platica cuando la novia se les unió, aún llevaba su vestido pero si prestas atención cuando caminaba podrías ver sus tenis rojos.

-Perfecto -Su esposo la recibió abrazándole por la cintura y un casto beso -Es hora de hacer el brindis.

-P-Primero quisiera hablar con Jake -Se excuso Bella con una mirada de disculpa, pero su ahora esposo correspondió con una sonrisa complaciente. Por su parte Harry no pudo dejar de pensar que seguramente había algo más en todo aquello. Aunque no era su asunto.

-¿Es la primera boda a la que asistes? -Inquirió Edward mientras ambos caminaban a la mesa de bocadillos.

-No, pero hacía tiempo que no venía a una -Respondió Harry. Para su sorpresa Edward le paso un pequeño plato con algunos de los tentempiés que Alice había ordenado -Gracias. Después de la guerra varios compañeros decidieron casarse, fue extraño y divertido a la vez. Había una fiesta casi todos los días.

-Sus bodas deben ser interesantes -Comentó Edward.

-No son tan diferentes -Agregó Harry con una pequeña sonrisa -Aunque si es la primera vez que Teddy viene a una.

-Edward -De repente ambos se vieron abordados por Rosalie -Alice quiere que vayas a hacer el brindis.

-Nos vemos al rato Harry.

Durante todo el rato en el que el inglés y el vampiro estuvieron charlando ambos estuvieron bajo la atenta mirada de Jacob. Ni siquiera era consciente de en qué momento había estado haciéndolo; en un principio estaba hablando con su padre y con Sue, diciéndoles que había decidido invitar a su nuevo amigo inglés en vez de complicarse la vida con una cita. Sorprendente Billy le dio una sonrisa y un par de palmadas en la cintura, dado que no le llegaba hasta el hombro, y Sue comentó que Seth hablaba cada tanto de un nuevo amigo Teddy que lo había invitado al cine. Pero cuando Charly llegó para saludarlo y él y su padre comenzaron a pelear por ver quién invitaba una copa primero a Sue, Jacob se quedó solo unos segundos. Acepto una copa de champaña de la bandeja de uno de los meseros, sabiendo que Bella quería abordarlo en cuanto regresara, y aunque era consciente de que no podía embriagarse al menos podía intentar un pequeño efecto placebo.

-"¿Y este qué?" -Fue su primer pensamiento cuando vio a Harry acercarse a Edward para felicitarlo. Claro, seguramente era solo por su tendencia formal y esos modales impecables que siempre tenía. Pero en lugar de solo dar la mano y retirarse el inglés se quedó charlando con Edward. Ok por alguna razón eso le molesto y casi pudo escuchar a su lobo gruñir en su pecho. Que hasta parecía que el aroma de Harry se intensificaba.

De acuerdo, las cosas ya estaban tornándose muy extrañas. Mejor iría a buscar a Teddy y -

-¡Que me lo des!

-En este país está prohibido darle alcohol a los menores.

Mejor en otro momento. Teddy estaba batallando por lograr que Jasper le dejara tomar una copa, y por alguna razón estar cerca de esa sanguijuela en particular siempre le había provocado cierto pavor. ¿Ahora qué hacía? Su padre seguía marcando territorio con Charly, Seth andaba pululando por toda la pista de baile intentando ligarse a alguna chica y su cita estaba muy ocupada charlando felizmente con el estúpido novio.

-"Ancestros... -Pensó horrorizado -Eso sonó a despecho"

-Jake, Jake -Estaba comenzando a considerar la opción de no volver a saltar de los acantilados, cuando Bella entró en su campo de visión. Lucía aprensiva y nerviosa, como siempre.

-Hola Bell -Apenas si reparó en ella, estaba más concentrado en intentar escuchar que tanto hablaba Harry con Edward. Entonces cayó en cuenta de que estaba hablando con Bella. La misma a la que había estado evitando por semanas -¡Bella!

Apenas si reaccionó cuando la humana lo rodeó con sus brazos. Solo se quedó allí de pie genuinamente sorprendido por su comportamiento. Desde que había recibido esa bendita invitación había estado muy alterado. Cabe recordar que se había aislado en Alaska por casi un mes. El tema del amor de su vida contrayendo matrimonio con una maldita sanguijuela le había tenido realmente colgando de los nervios. Pero ahora, estaba en esa misma boda y no había reparado siquiera en el detalle de que parecía darle completamente igual. Incluso hasta pensó que ese vestido le quedaba bien.

-Me alegra que vinieras -Estado de ánimo que difería completamente del de la novia, quien parecía aún sin creer que el quileute hubiera asistido -Aunque me había encantado que-

-Déjalo así -Pero de repente su humor regresó a estar centrado y con la guardia en alto -No quiero discutir ese tema de nuevo.

-Pero Jake-

-Mira mi padre está por pasarse de copas, viejo necio... -Siendo que la chica pensaba insistir con el asunto Jacob solo hizo caso omiso y siguió de largo hacia donde su padre efectivamente tomaba otra copa de licor.

-"..." -Harry, que luego de hablar con Edward, había querido regresar con el quileute se había quedado al margen al verle charlar con la novia. Fingió estar tomando más bocadillo mientras, sin poder contener su curiosidad natural, escuchaba cada palabra. En cuanto Bella se fue el camino para alcanzar a Jacob quien, para su sorpresa, hablo primero:

-Sí ya sé que eso fue rudo -Y pensar que pensó que Jacob ni siquiera se había dado cuenta que había estado escuchando. Que hasta adivino lo que estaba pensando al respecto.

-Perdona, la curiosidad pudo más que yo -Para su sorpresa sintió como Jacob ponía la mano sobre su cabeza y lo despeinaba, igual a como solía hacerlo con Teddy. Se sentía extrañamente reconfortante.

-Está bien, lo maneje con madurez -Esta vez Harry apenas logró contener su risa, aunque era muy evidente -¿Qué?

-¿"Eso" fue maduro? No, el hecho de que tú mismo te llames maduro ya es gracioso por sí solo.

Ambos siguieron discutiendo acerca de cuán maduro era Jacob en realidad y cuánta madurez se atribuía él mismo bajo el argumento de "Si me hubieras conocido antes verías lo mucho que maduré". Harry solo le concedió un sencillo "Claro claro". Para entonces ambos ya se habían sentado a la mesa que les habían asignado, Harry se presentó formalmente con Billy como el nuevo amigo de Jacob, o en palabras del anciano, como "la buena influencia que ya hacía falta para el cabeza dura de su hijo". También conoció a la madre de Seth, una mujer encantadora que le agradeció por ser tan amable con su hijo.

-Que por cierto no he visto en un rato -Agrego Sue mirando a los lados. Sorprendentemente Jacob y Harry intercambiaron una mirada con ceja alzada antes de girar y ver en la misma dirección donde Seth era evidentemente rechazado. El joven quileute regresó cabizbajo y se sentó a la mesa con un muy sobreactuado drama.

-Solo falta Teddy -Comento Jacob pero antes de comenzar a mirar a los lados Harry, sin siquiera inmutarse mientras tomaba su copa de agua, dijo:

-Espéralo

-¡Amigo no te desanimes! -Harry fue el único que no se sobresaltó cuando Teddy apareció de la nada palmeando el hombro de Seth y dándole palabras de ánimo a un volumen exagerado. Sue se rió sutilmente por su reacción, Billy miraba a todos lados como si buscara una explicación y Jacob suspiró resignado, ya comenzaba a acostumbrarse a manía que tenía el joven inglés de acercarse como una sombra silenciosa y salir por sorpresa -Cualquiera de estas chicas tendrían suerte de bailar contigo.

-Sí, suerte, pero no ganas... -Dejando que Seth superara solo su pequeña depresión el resto de asistentes dirigió su atención a la pequeña tarima que habían instalado en el centro donde Carlisle se preparaba para hacer un brindis por los novios. Para Harry, aquella era su parte favorita de las bodas. No importaba si quien se casaba era el clásico payaso o el mismísimo Draco Malfoy, nunca faltaba el familiar burlón que querría hacer una broma o contar una anécdota bochornosa de alguno de los novios. En este caso fue divertido como el padre de la novia amenazaba sutilmente a su nuevo yerno, a Emmet sugiriendo a Bella no volvería a dormir, un obvio mensaje para quienes sabían que la chica planeaba convertirse en un vampiro, pero una frase con doble sentido para todos los demás asistentes.

-Dime algo... -De repente su atención se vio desviada de la madre de la novia que cantaba una canción de cuna hacia Jacob quien le hablaba con un semblante extrañamente serio y un tono bajo -¿Debería ir a decir algo?

-No -Aquella respuesta, rápida y directa, sorprendió tanto al emisor como a su interlocutor. ¿Por qué daba Harry una respuesta así? Lo único que sabía del tema eran pequeñas especulaciones, no tenía bases para ser tan estoico y hasta su opinión personal estaba muy lejos de responder tan secamente un "no". Pero la verdad era, que por breve instante, la idea de Jacob de pie en esa tarima, con todos los invitados viéndole y diciendo unas palabras bonitas a la feliz pareja... ¡Ahí estaba de nuevo! Esa sensación de náuseas y acidez en la boca del estómago. ¿Por qué? -Perdona, quiero decir, ¿por qué lo harías?

-Es... -Jacob se acercó un poco más él y casi pudo sentir los vellos de su brazo derecho erizarse -Es que se suponía que yo sería el padrino -En ese momento el volumen y ecualización de las cornetas tras la tarima emitieron un horrible sonido de eco agudo, aunque fue sólo momentáneo y todos lo atribuyeron al típico fallo en el sistema de sonido, que hasta Charlie hizo una broma sobre el canto de René. Claro que, Jacob y Seth aún sentían sus oídos pitar y hasta sus pensamientos parecían tener estática acústica.

-Auh auh auh -Seth intentaba acomodar su cabeza golpeando la frente contra la mesa mientras Teddy le miraba divertido. Pasaron solo unos minutos cuando los novios fueron llamados a la pista para bailar el vals y apenas unos segundos después para que a Teddy se le prendiera el foco.

-¿Vas a bailar? -Seth ni siquiera levantó la cabeza de la mesa, solo negó silenciosamente antes de decir:

-Ni hablar, no pienso perder mi último pedazo de dignidad cuando me rechacen-

-¿Qué me dices de recuperar TODA tu dignidad y algo de orgullo? -Hizo falta una buena porción de autocontrol para que Harry y Jacob no se golpearan la frente con la palma de la mano al mismo tiempo.

-Te escucho -Aunque había que reconocerle lo persuasivo que podía ser.

-¡Baila conmigo! -Y lo impaciente. Apenas lo dicho y tomó a Seth de la muñeca llevándoselo a rastras hasta la pista de baile donde, claro, no sin antes hacer una pequeña parada a espaldas de Billy y Sue justo de frente a Jacob y Harry haciendo una seña muy obvia hacia el primero que sacara a bailar al segundo. Que incluso hasta gesticulaba en silencio "¡Saca a bailar a Harry pedazo de..." Bueno tal vez no era necesario traducir la última parte. Y para empeorar las cosas Charlie sacó a bailar a Sue y Billy fue a hacerles de chaperón, dejando a los dos últimos ocupantes de la mesa en un silencio bastante incómodo.

-Esto es raro -Mientras tanto Seth no se sentía del todo cómodo bailando con otro chico, especialmente porque recién caía en cuenta que realmente, para fines prácticos, no sabía bailar. ¡Que ni puta idea de donde debía colocar las manos!

-Es fácil, mira... -Todo lo contrario a Teddy quien era obvio que tenía experiencia más que de sobra. Tomó la derecha de Seth y la puso en su hombro, luego colocó su propia mano en la cintura del Clearwater y con su otra mano tomó la mano restante del Quileute -Ahora los pies, olvida el uno dos, solo sígueme. Medio paso a la derecha, y medio a la izquierda. Y sigue el ritmo.

-Todos nos están mirando -Teddy tuvo que agradecer internamente el poder ver esa expresión apenada tan de cerca. Seth era realmente adorable sin darse cuenta.

-En realidad estamos muy cerca de los novios -Le respondió él inglés mientras lo guiaba un poco más apartado de la atención, no quería que ese baile acabará pronto -¿Es la primera vez que bailas?

-N-no -Obviamente sí, pero Teddy le dejó pasar la mentira con una pequeña sonrisa. Pero mientras rezaba internamente porque ese vals durará unos diez minutos, aprovechó un giro para ver hacia la mesa donde Jacob y Harry seguían sentados en un muy evidente silencio entre ellos. No podía creer que su padre fuera realmente tan obtuso, bueno, ya se encargaría de esos dos en cuanto se encargará de cierto asunto que se traía entre manos.

Al mismo tiempo, a mitad de la carretera de entrada al pueblo una figura alta envuelta en una gruesa gabardina, bufanda y sombrero de ala corta se aparecía de la nada con un ruido sordo. Miró a su alrededor pero efectivamente no había nadie cerca, tomó su maletín y comenzó a caminar hacia el pueblo. Solo el ruido de la suela de sus zapatos rompía el silencio de la noche. Como fuera, tenía mucho trabajo que hacer pero primero quería descansar y tomar una taza de té, o mejor, un trago de whisky de fuego.

***

-No quiero escuchar una palabra al respecto -Los novios se habían retirado hacía cerca de la media noche. Por supuesto que todos los demás invitados se habían quedado para seguir celebrando, pero fue cerca de las cuatro de la mañana cuando ya todos comenzaron a retirarse. Alice, cuando Harry fue a despedirse, lucía radiante y muy satisfecha consigo misma por la boda. Pero de momento tenía que asegurarse de que su ahijado no comenzará a lanzar comentarios con respecto al tema del vals -O te castigaré.

-Eso es extorsión -Se quejó el menor, recostado de espalda al auto mientras esperaban a Jacob -Estás abusando de tu posición legal sobre mí. Te acusare con el Wisengamot.

-No trabajan en fin de semana, espera al lunes para enviar una queja.

-¿Están listos? -Jacob había regresado de despedirse de su padre, aunque en realidad había sido una despedida unilateral ya que Billy estaba muy ocupado cantando rancheras con Charly -Lamento que vieran eso.

-He visto peores -Comentó Harry con humor mientras subía al asiento del copiloto. Al tiempo Teddy, en el asiento de atrás, no evitaba murmurar algo acerca de una gran carta de queja -Gracias por invitarme, por cierto. Es agradable asistir a una fiesta.

-Gracias a ti por acompañarme -Acotó Jacob. Ambos sonrieron con complicidad en lo que la camioneta salía del terreno de la casa Cullen. Era de madrugada y, si bien no había bailado ni bebido mucho, Harry ya quería llegar a casa para descansar. Ponerse su pijama, tumbarse en la cama y dormir. Iba tan concentrado en su plan que no se dio cuenta de cómo poco a poco el sueño iba ganándole terreno hasta, que en un pequeño descuido, terminó yéndose completamente hacia el lado izquierdo contra el hombro de Jacob -L-lo siento... -Se disculpó casi de inmediato levantándose y manteniéndose estoicamente erguido.

-Está bien -Pero Jacob no parecía molestarle -Puedes dormir si quieres.

-No, ya casi llegamos -Se excusó rápidamente el ojiverde. El resto del camino fue bastante silencioso, Teddy se había dormido a todo lo largo del asiento trasero y Jacob no pudo evitar oír el pulso del copiloto. No estaba seguro de porqué pero escuchar esos latidos le resultaba tranquilizador, y escucharlos ir un poco a prisa le provocaba un cierto orgullo. ¿Ridículo no?

-Dejaron las luces encendidas -Comento cuando detuvo la camioneta al frente.

-... -Esta vez el pulso de Harry dio un pequeño salto en sus latidos -Si, debí olvidar apagarlas al salir.

-Te ayudaré con él -A pesar de que Harry quiso oponerse Jacob insistió en cargar a Teddy desde el auto hasta su cuarto. Que incluso hasta lo arropo. Y por un instante, mientras les observaba desde el marco de la puerta, Harry no pudo evitar notar que en cierta forma esos dos se parecían un poco, hasta podrían pasar por hermanos. Pero tenía cosas más importantes en las que pensar en ese momento, y mientras acompañaba a Jacob de regreso a la puerta intentó sondear la casa lo mejor que pudo -¿Estás bien?

-¿...? -Estaban ya en la puerta cuando la pregunta de Jacob le tomó por sorpresa.

-Desde hace rato pareces preocupado -Explicó el moreno -¿Está todo bien?

-Eh, sí perdona, me pongo de malas cuando tengo sueño -Por suerte fue capaz de improvisar una excusa plausible en el último segundo -Gracias por invitarme, necesitaba eso.

-También me la pase bien -Acotó Jason riendo un poco y llevándose la mano a la nuca apenado -Deberíamos salir más a menudo.

-Claro -Hubo un breve, y por demás increíblemente incomodo, instante ambos se inclinaron ligeramente hacia adelante como si fueran a despedirse de beso. Se corrigieron casi simultáneamente, se estrecharon la mano un poco mecánico y Harry esperó a que Jacob subiera al auto para cerrar la puerta.

-Antes de que digas algo, cerré los ojos

-Deberías agradecer que no te encendí a maldiciones

-Oh vamos Potter, no intentes irte por las ramas, ¿quién era el cuero?

-¿Es en serio?

-Recuérdame, ¿cuántas veces te arrastre a un puto bar y te negaste a hablar con una mujer?

-Malfoy

-Potter

Generalmente Harry disfrutaba cuando discutía con Draco, le traía cierto sentimiento de nostalgia masoquista, una mezcla que pocos han conocido. Pero en ese momento, cansado, con sueño, y con una seria preocupación con respecto a su sistema de seguridad, lo último que quería era discutir. Vale. Una cosa era mantener el contacto con sus amigos, con su viejo empleo y con una de las pocas personas en las que confiaba. Pero otra muy diferente era que ese imbécil llegara sin avisar, se colara en la casa y, al parecer, abriera una de las botellas de whisky que tenía ocultas en su habitación.

-Cierra la boca y sírveme un trago.