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Después de que terminara la competencia la familia de Lilian se marchó hacia el palacio, durante la cena todo estuvo muy callado, al terminar Deo y el rey Bastián se dirigieron a su estudio para discutir asuntos relacionados a la relación familiar que compartían. Mientras tanto Lilian, Alessandro y Silvia se dirigieron al estudio del príncipe, donde Adele los estaba esperando.
-Ya que la competencia termino mañana anunciare a las personas que ocuparan los cargos que dejaremos vacantes-comentó Lilian sentándose en el sillón a un lado de Adele.
-Entiendo quieres dejar todo en orden lo más pronto posible-comentó Alessandro con pesar.
-Bueno te recuerdo que estaré muy ocupada con lo de tu boda y coronación así que debo encargarme de esto pronto-remarcó Lilian mirando fijamente a su hermano quien aparto la mirada.
-Entonces que posiciones van a ocupar solo nos mencionaste quienes ocuparían sus puestos, pero no especificaste cuales ocuparían-mencionó Silvia con duda.
-Seleccionamos a Dante Owen como capitán y como segundo al mando a Elaine Gaines-respondió Lilian.
-Es una buena elección, apuesto que el hijo del marqués Ritter se opondrá-comentó Alessandro con tono de burla.
-Tienes razón estuve escuchando que su padre le decía a varios nobles que su hijo sería el próximo capitán del escuadrón-comentó Adele.
-Su reputación se verá severamente afectada, pero eso le pasa por decir cosas sin sentido, las personas que seleccionaste son las más hábiles de su generación si quisiera enfrentase a ellos perdería muy fácilmente-exclamó Silvia muy segura.
-Si lo dejara a él a cargo seria arriesgar a todo el reino, no puedo permitir eso-declaró Lilian.
Todos asintieron ante el comentario de Lilian, en esos momentos cuatro pequeñas personitas aparecieron repentinamente.
-Realmente quería salir-expreso quejumbrosa una de las pequeñas personitas, tenia cabello rojo, tez clara, una figura atlética y una estatura de cerca de 30 centímetros, además de tener una apariencia masculina.
-Si solo ibas a quejarte no hubieras salido, sigues siendo muy berrinchudo Dion-reclamó otra de las personitas, esta tenia el cabello gris, tez medio clara, figura atlética y misma estatura que el otro, pero a diferencia de este tenía una apariencia femenina.
-Agatha tiene razón si solo piensas quejarte será mejor que no digas nada-exclamó otra personita con cabello rosado, y mismas características físicas que el primero, al igual que la apariencia masculina.
-No me estén molestando solo dije lo que siento-reclamó Dion a ambos.
-Me alegra poder verlos de nuevo princesa Lilian, señorita Silvia y príncipe Alessandro-expresó con respeto la otra personita de cabello negro.
-Te agradezco que nos saludes Alysa, los demás ni siquiera nos tomaron en cuenta-expresó Lilian con sarcasmo, a lo que los demás reaccionaron.
-Perdón por ser groseros me alegro verlos nuevamente-exclamó Dion haciendo una reverencia.
-Yo igual me disculpo-menciono Agatha imitando a Dion.
-De igual manera les ofrezco una disculpa por mi comportamiento-expresó el ultimo con una reverencia.
-A pesar de que estamos mucho tiempo juntos eres muy grosero conmigo Damián-expresó Lilian.
-Al parecer Dion sigue siendo igual-comentó Silvia.
-Si no cambiare, se que soy genial-expresó Dion con orgullo.
-¿Cuándo piensas dejar de ser tan narcisista?-preguntó Alessandro con molestia.
-Tal vez sea porque comparto un poco de tu personalidad-contestó Dion en tono de broma haciendo enojar a Alessandro.
-Me pregunto como es que Dion es el espíritu de Ale, si el es muy serio y Dion es muy alegre es algo que me causa mucho conflicto-comentó Lilian haciendo que todos rieran.
-Entonces será mejor que sigamos planeando como vamos a dejar preparada la defensa de la ciudad, porque si seguimos así solo terminaremos discutiendo-comentó Silvia, a lo que los demás asintieron.
-Entiendo empecemos rápido para que puedan ir a descansar-comentó Alessandro colocando un mapa sobre la mesa.
-Podemos empezar por reforzar la seguridad de estas zonas, están en los límites, son ciudades muy prosperas, así que pueden ser perfectas para un ataque-comentó Silvia señalando varios puntos en el mapa.
-Si que tienes muy buena memoria-expresó Adele con una sonrisa.
-Ya vez Ale debes tener cuidado con no hacerle nada a Silvia, ya que lo recordara por mucho tiempo-bromeó Lilian.
-Ella tiene razón será mejor que tengas cuidado-mencionó Damián.
-Ustedes realmente se parecen-comentó Alessandro.
Todos se rieron durante un momento, pero continuaron planificando la defensa de la ciudad durante algunas horas, cuando todo estuvo terminado se sentaron a descansar.
-Creo que ya estamos cansados será mejor vallamos a descansar-comento Silvia.
-Concuerdo contigo-expresó Lilian con un bostezó.
-Bueno será mejor que vallamos a dormir mañana será un día ajetreado-comentó Alessandro.
-Entonces los dejo que tengan bonita noche, me voy-mencionó Lilian saliendo del estudio, a lo que Adele la siguió, despidiéndose.
Adele y Lilian se dirigieron a su habitación, cuando llegaron entraron silenciosamente.
-Estaré lista en un momento te veré en unos minutos-ordenó Lilian, Adele solo escucho y se retiró.
Cuando estuvo sola, se cambio su ropa por una más oscura y cómoda, necesitaba ropa que la hiciera pasar desapercibida.
-Damián necesito que me hagas un favor-comentó Lilian.
-Necesitas que me haga pasar por ti otra vez ¿verdad?-expresó Damián con pesar.
-Si quisiera tu ayuda nuevamente, por favor-comentó Lilian con una sonrisa.
-¿Qué debo ponerme ahora?-preguntó Damián con resignación.
-Esto-contestó Lilian dándole un camisón.
Damián tomo la forma de Lilian y se puso el camisón, después de esto Lilian saco una esfera de su cajón la cual aplasto y de inmediato apareció un portal en el que entro Lilian despidiéndose de Damián, del otro lado la esperaba Adele, que estaba vestida con ropa muy similar a la de Lilian.
Adele le dio una máscara plateada Lilian que era parecida a la que tenía ella, ambas tenían una serpiente tallada en el lado derecho, ella se la puso y empezó a caminar muy tranquilamente hasta que se topó con una puerta, puso su mano en una piedra que se encontraba a un lado de la puerta, esta se abrió dejando pasar a Lilian y Adele.
El lugar donde se encontraban era la base de las serpientes plateadas, era una asociación que había surgido hace unos tres años, pero ya tenía mucha influencia en el continente, se especializaban en el espionaje, consiguiendo información muy difícil de obtener, esta era muy bien pagada, consiguiendo fondos suficientes para seguir operando. Nadie sabía quién era su líder o donde había surgido, ni tampoco su propósito.
Adele y Lilian caminaron hacia una habitación, entraron para encontrarse con seis personas enmascaradas sentadas alrededor de una mesa, parecían estar esperando a alguien, en cuanto entraron Lilian y Adele todos guardaron silencio esperando a que ellas se sentaran.
-Sean bienvenidas, las estábamos esperando-comentó una voz tranquilamente.
-Ha pasado mucho tiempo desde que las vimos por ultima vez, me alegra que nos veamos Leila y Lía-expresó entusiasmado otra voz.
-Tu siempre estas tan enérgico, me alegra verte de nuevo Leo-comentó Lilian con una sonrisa, Leo era un joven muy alegre, tenía el cabello rubio y ojos cafés, era de estatura media y complexión delgada, tenia una piel morena clara, pero era apuesto y confiable.
-Me pregunto como es posible que seas tan confiado al decir tu nombre tan abiertamente, deberías usar un nombre clave-comentó otra voz con preocupación.
-No necesitas preocuparte por eso, los únicos que saben que ese es mi nombre real son ustedes, así que no hay ningún problema, deberías dejar de preocuparte por eso Layla-respondió Leo sin preocupación, Layla por el contrario era muy precavida, era una mujer de cabello negro largo, tez blanca y complexión delgada pero atlética, era muy buena en los trabajos de sigilo, además de ser la que mas se preocupaba por la seguridad de los demás.
-Dejemos ese asunto por ahora, concentrémonos en la reunión-comentó otra voz severamente.
-Si nos reuniste a los ocho debe ser porque tienes algo muy importante que decirnos-habló nuevamente la voz del inicio ganándose la atención de todos.
-Siempre tan tenaz Lino-expresó Adele, Lino era muy tranquilo e inteligente, tenía un cuerpo voluptuoso debido a su musculatura, tenia pelo castaño y ojos grises, lo hacían ver misterioso.
-Tienen razón, es sobre la razón por la cual fundamos esta organización-expresó Lilian con seriedad haciendo que todos lo miraran con asombro.
Adele formo una barrera para evitar que se escuchara su conversación.
-Ahora podemos hablar tranquilamente-comentó Adele.
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