Un nuevo personaje se adentra al pueblo

Después de lo sucedido con la chica el osito ya no quería salir de su casa, la chica había sobrevivido ya que el oso se quedó paralizado cuando las luces se apagaron así que la chica aprovecho para escapar y decirle a su familia, su hermano preocupado le pregunta que donde vive el osito, ella sin querer decirle a su hermano ya que no quería que el osito le hiciera algo más a otra persona, mucho menos a su familia. El hermano después de preguntar por el pueblo consiguió la dirección del oso. Al llegar a la casa lo único que mira es al oso en una esquina tirado de rodillas mientras ve sangre en el piso. Lo único que el chico quería era acercarse y torturarlo hasta que vea lo que ella sufrió.

- Osito gominola: Yo nunca quise hacerle eso, mi intención no era que eso pasara. Yo solo quería un amigo.

El chico escucho eso y recordó cuando por no tener amigos se burlaban de él, recordó que él hubiera dado lo que fuera por un amigo. Se acerca al oso y le dice:

- El Hermano: Se cómo te sientes. Se burlaban de mi por no tener amigos, mi hermana era la única amiga que yo tenía. Hubiera dado lo que fuera por un amigo al igual que tú.

El chico se va de la casa del oso y vuelve a la suya para ver a su hermana, él llega y le dice que el oso no es un mal tipo. Simplemente quería un amigo, ella sabe por lo que paso su hermano como era el sufrimiento de no tener amigos, que se burlen de ti, la sensación de sentirse la basura del mundo. Aunque ella sabía lo que su hermano había pasado por eso no le dio importancia y le dijo:

- La Chica: Ese oso está loco, sé que paso por lo mismo que tu, pero, a mí no me importa. Quiero que mates a ese maldito oso. Me torturo en el sótano de su propia casa. ¡MATA A ESE MALDITO OSO!

El chico al escuchar eso que decía su hermana simplemente se fue a su habitación para pensarlo, el no quería matar a nadie.
Él también hubiera hecho lo que hizo el oso si hubiera podido, quería que todos fueran felices, pero si quería la felicidad de su hermana tendría que matarlo. Este chico sentía que se iba a volver loco, sentía que si mataba al oso era como matarse a sí mismo, el oso lo recuerda a él.
Luego, fue a la casa del oso para poder hablar con él, al llegar el oso estaba en la cocina deprimido, estaba con los ojos en blanco y una cara de sufrimiento absoluto, como si un niño hubiera perdido a su madre enfrente suya.
El oso lo ve y le dice:

- Osito gominola: Yo no quería, yo me quede paralizado después de que las luces se apagaron. He matado mucha gente que no hubiera querido matar.

El chico le dice que no viene por eso. Le dice que el paso por lo mismo y lo entiende perfectamente, él hubiera hecho lo que fuera por un solo amigo que no fuera su hermana. Le dice que si el oso quiere podrían ser amigos, el primer amigo del chico.

- Osito gominola: Matar, Asesinar, Culpar, Torturar, ya no sé qué no puedo hacer. Soy un monstruo que aún no se ha creado por completo.

El chico le sigue repitiendo lo mismo pero el oso lo ignora. El chico se preocupa por el oso, siente que después de eso ya no volverá a ser el mismo que fue en algún momento. El chico le empieza a llevar comida todos los días para ver si algún día el oso vuelve a ser el chico que fue antes.

- Osito gominola: Culpa, Muerte, Tortura, Suicidio, yo nunca quise hacer eso. Yo era normal.

El chico un día al llegar a la casa del oso se da cuenta de que el no está. Empieza a preguntarle a la gente del pueblo si lo vieron, pero todos dicen lo mismo, nadie lo ha visto desde hace 2 meses.

El Fin.