Jeonghan observó el sobre adornado con tonos plata y oro en sus manos, era el mismo que habían recibido sus padres y que seguramente usarían para guiarse a sus mesas. Al parecer todo estaba perfectamente ordenado, las mesas tenían una letra y un número para poder asignar lugares, y lejos de verse corriente o algo parecido toda la invitación estaba tan perfectamente diseñada al igual que la mesa que no parecía de mal gusto. Jeonghan suspiró cerrando el sobre y mirando alrededor.

Los adornos dorados y plata a lo largo del salón eran realmente hermosos, incluso las flores parecían brillar al igual que la seda blanca en las cortinas y el mantel, tan perfectamente cuidado que era difícil recordar cómo se veía el salón antes de que lo decoraran, parecía haber sido ayer cuando estuvieron moviendo mesas y escombro fuera del lugar. Su mirada cayó sobre los balcones que dejaban ver el cielo estrellado.

—Así que...Esto va a ser incomodo.— Dijo Wonwoo al otro lado de la gran mesa redonda. Claro, por alguna razón habían puesto a los cinco juntos. —¿Cuál tenedor debo de usar?

—Come con las manos.— Bromeó Jeonghan mirando la mesa de los profesores, estaba demasiado cerca... ellos estaban vigilándolos. —Esto será difícil.

—Lo sé.— murmuró Woozi bebiendo de su copa, sería interesante si no fuera simplemente agua. —Seremos vigilados toda la noche, al parecer.

—¿ellos saben algo de nosotros?— preguntó Seungkwan. —Es imposible ¿no? debieron hacerlo porque causamos problemas antes, quizás quieren que nuestros padres nos separen una vez se conozcan.

—Podría ser.— Dijo Jeonghan soltando un largo suspiro. Buscó la mano de Woozi por debajo de la mesa y la tomó. —¿el plan sigue siendo el mismo?

Woozi asintió. Cuando la mano de su omega correspondió su agarre Jeonghan en serio quería besarlo, quería llevarlo a un lugar escondido y tan solo acurrucarse con él durante horas olvidándose del mundo, porque Woozi se veía jodidamente bien de pies a cabeza, incluso su semblante serio creaba una imagen perfecta. Minghao había hecho un muy buen trabajo, incluso cuando Jihoon fue especialmente insoportable a la hora de maquillarlo.

Cuando su omega lo miró no pudo contener su sonrisa.

—Si se dan esas miraditas cuando su familia este aquí van a sospechar.— Dijo Wonwoo y Woozi desvió su mirada al mantel. —Olvídalo, van a sospechar del jefe sin importar que.

—¿Qué podemos hacer?— preguntó Seungkwan. —No podemos separarlos.

—No van a sospechar nada.— murmuró Woozi mirando hacia otro lado y Jeonghan pudo ver que quizás si fueran a hacerlo... Soltó su mano para apartarla pero Woozi la volvió a tomar con fuerza, el corazón de Jeonghan saltó. —Concéntrense en que harán para salir.

—Las puertas no son opción.— Dijo Minghao señalando a los ayudantes parados firmemente en línea a los lados. —En cambio, los balcones... Wonwoo y yo podríamos intentarlo, los demás tendrán que lidiar con los ayudantes.

Jeonghan suspiró ¿Cómo salir de ahí sin ser descubiertos? Antes pensaba dejárselo todo a Woozi y él solo seguirlo, pero el omega le había dejado claro que una vez iniciara el baile Jeonghan estaría por su cuenta, nadie lo iba a ayudar a salir. Había sido una mierda porque su cabeza estaba en blanco, dudaba que pudiera hacerlo solo mirando a la larga fila de ayudantes que había en cada espacio, y despues mirando a la mesa de profesores a solo un par de metros de ellos.

Los ojos de los cinco se desviaron al escuchar los pasos acercarse, se pusieron de pie en cuanto la persona se detuvo y les dedicó una amable sonrisa, era el Mayor, la vestimenta tradicional y elegante adornando su cuerpo junto con las joyas por todos lados, incluso sus manos estaban repletos de anillos que brillaban hermosos. Jeonghan estaba sorprendido porque Joshua era realmente apuesto, un hombre sin etiqueta en él que se presentaba como un líder amable. Por lo general los Mayores eran personas viejas, Joshua parecía tan joven como el profesor Hoshi.

No hubo ninguna palabra, tan solo una sonrisa y una pequeña reverencia de parte de los cinco. Joshua no era una persona de muchas palabras, pero con tan solo mirarlos podía decirles todo, incluso su forma de caminar era un lenguaje decodificado para decirles que se mantendría cerca. El Mayor pasó de largo segundos despues encaminándose a la mesa principal, un poco más lejos que la suya. Y justo detrás de Joshua un joven y adorable menor que hizo sonreír a Jeonghan.

—Dino...— Canturreó, pero sus palabras quedaron en nada cuando Dino dio un paso y tropezó con Seungkwan. Los ojos del Menor parecieron iluminarse, su rostro que parecía catatónico en realidad transmitía el asombro y admiración. Una mirada enamorada, quizás. —Ah... Nuestro Kwannie se ve bastante lindo hoy.

—Ah...— Dino reaccionó segundos despues apartando su mirada hasta Jeonghan. Se despidió en silencio y se fue de ahí.

Jeonghan observó a Seungkwan sentarse sin levantar su mirada, el omega mirando el mantel con el rostro levemente sonrojado, era lindo. Aunque Jeonghan no había podido ver la expresión de Seungkwan no le sorprendería que fuera la misma que Dino había sostenido durante ese rato, tan confundida y llena de ese sentimiento que no querían mencionar. Sonrió mirando el mantel y dibujando garabatos con su dedo.

—Disculpen...— Murmuró Seungkwan poniéndose de pie y saliendo de ahí en dirección contraria a la del mayor.

—¿Qué haremos con nuestro Kwannie?— preguntó Jeonghan una vez Seungkwan estuvo lo suficientemente lejos.

—¿nada?— preguntó Wonwoo más que responder. —Vernon le romperá el corazón, pero creo que es el indicado para hacerlo.

—¿Vernon? Le gusta Dino...

—¿Dino?— Wonwoo suelta una pequeña risa. —Claro que no, le gusta Vernon. ¿lo has visto? Es algo así como su primer amor.

—No, Seungkwan y Dino se ven como su amor imposible.

Wonwoo hizo una mueca y se inclinó sobre la mesa para encarar a Jeonghan, pero él no dudo. Seungkwan y Dino tenían algo en ellos cuando se miraba, incluso si Dino fingía estar molesto con Seungkwan siempre tenía los ojos sobre él, y cuando el omega estaba en peligro era el primero en correr para protegerlo. Dino quería a Seungkwan lo suficiente como para no importarle pelear con alguien mucho más grande que él. Vernon en cambio... parecía que no le importaba nada.

—A Seungkwan le gusta Vernon, se iluminan sus ojos cada vez que lo ve. —Habló Wonwoo. —Soy su mejor amigo, puedo saberlo.

—Ni siquiera pudiste saber que ibas a tener una cachorra ¿Cómo vas a saber de esto? Dino y Seungkwan se gustan.

—Vernon y Seungkwan son los que se gustan.— Wonwoo se cruzó de brazos. —No hay manera en la que permita que Seungkwan quiera a ese malcriado niño irritante.

—Al menos Dino parece una persona normal, no como el inmutable de Vernon ¡parece que nada le importa!

—Yo creo que le gusta ambos.— Dijo Minghao sin prestar realmente atención, su mirada puesta en la copa. —Y ambos gustan de él.

Jeonghan y Wonwoo se miraron por unos segundos hasta que soltaron una pequeña risa, claro que Minghao diría eso, pero no, a Seungkwan le gustaba Dino y Jeonghan lo sabía, y era perfecto porque Dino era un chico realmente lindo cuando dejaba de lado aquel carácter mandón. Dino solo era alguien incomprendido, asustado de todo y que tenía un pequeño camino para madurar, sabía que en cuanto lo hiciera él y Seungkwan tendrían un posible futuro.

—De cualquier manera Seungkwan no puede estar con ninguno.— Habló Woozi. —Ellos son menores, no pueden tener una pareja.

Justo antes de que Jeonghan pudiera replicar uno de los ayudantes se inclinó a su lado y murmuró no tan cerca de él.

—Joven Choi, su familia lo espera en la entrada.

Jeonghan asintió poniéndose de pie, no lo había notado antes, pero las personas habían comenzado a llegar y algunos conversaban en voz baja alrededor de las mesas. Cuando caminó por el gran salón no perdió la oportunidad de ver a cada familia, y cuando estuvo cerca de una pequeña sección buscó a ciertos alumnos. Todos se veían bien, se veían felices de rehuirse con sus padres y hermanos, tan normal y tranquilo que parecía cualquier otro baile. Pero no lo era. Algunos alumnos de piel pálida resaltaban entre todos, el maquillaje apenas podía cubrir las grandes ojeras y el cabello sin brillo.

Segundo año. Que visión más extraña. Cuando pudo encontrar a los de tercero las cosas fueron aun peor, los chicos no solo parecían un poco débiles, sino que se veían como si algo les hubiese chupado el alma, con miradas perdidas o tan solo callados, con los ojos muertos. ¿Qué excusa le estaban dando a sus familias? Porque aquello no era normal, incluso Jeonghan si se acercaba podría ser un gran contraste, resaltaría sin dudarlo, como caminar en medio de zombies. Esos eran alumnos a punto de graduarse ¿eran perfectos? Que vista tan deprimente.

No se dio cuenta en el momento cuando el ayudante se detuvo, de pronto chocó con su espalda y se disculpó dando un paso hacia atrás, escuchó una reconocible risa que le erizó el cuerpo y no pudo contener la sonrisa ignorando cualquier pensamiento. Giró sin dejar de sonreír hasta que sus ojos se encajaron en los de Seungcheol. Sus padres también estaban ahí, hablando con un profesor. Jeonghan olvidó sus modales y tan solo corrió para atrapar a su hermano.

Pensó que iba a recibir un regaño por correr, pero no, Cheol lo atrapó con cariño y lo abrazó con fuerza meciéndolo un poco. Ya lo había visto antes, y habló muy poco con él, pero era la primera vez que podían verse sin que nada malo pasara alrededor de Jeonghan... nada malo por culpa de Jeonghan. Así que era un buen encuentro, de dos hermanos sin que uno tuviera la necesidad de ser la figura autoritaria.

—Jeonghan...— El tono de regaño de su madre se vio afectado por el cariño en su voz, como si la mujer realmente quisiera reír en lugar de corregirlo. Jeonghan soltó a Seungcheol y se acercó a ella dejándose atrapar entre sus brazos.

Su madre era una alfa, tan fuerte y grande como su padre, más grande que Jeonghan o cualquier otra mujer. La gente pensaba que el matrimonio de sus padres sería un experimento fallido, que dos alfas procreando sería algo que no crearía ninguna vida, pero despues de varios intentos y un poco de intervención humana (hospitales y doctores) pudieron traer a Seungcheol, un alfa completamente puro. Y tres años despues, cuando el matrimonió pensó que habían acabado y que solo les quedaba criar a Cheol, llegó Jeonghan, un bebé omega.

—Los extrañe.— Les dijo cuándo se separó de su madre, aun sostenía sus manos y la miraba con total cariño. Jeonghan adoraba a su familia por completo. Miró a su padre y este se acercó para darle el mismo abrazo cariñoso que su madre.

—También te extrañamos.— Su padre habló dejándole un pequeño beso en la cabeza. —Aunque tenemos que hablar seriamente por tu comportamiento.

—Papá, podemos dejar eso para despues.— Dijo Seungcheol. —Ha sido un año muy estresante para Jeonghan y pronto estará en exámenes finales, creo que debemos darle esta noche.

—Seungcheol tiene razón.— Jeonghan les sonrió.

—Bien...— Su padre respondió al unísono que su madre, ambos sonriendo con tanto cariño que Jeonghan quiso regresar con ellos esa misma noche y olvidarse de la escuela.

Sus padres lo amaban tanto como él a ellos. Su mirada viajó hasta Seungcheol quien regresó a sonreírle y Jeonghan hizo lo mismo. Ellos lo seguirían amando sin importar que pasara, aunque Jeonghan estuviera perdidamente enamorado de un omega ¿verdad? Aunque él quisiera quedarse con su Woozi en lugar de dejar que se casara con Seungcheol... Jeonghan no estaba dañando a nadie queriendo a Jihoon, porque su hermano no amaba a Woozi ¿cierto?.

Jeonghan no estaba lastimándolos.

2

Despues de que Jeonghan se levantara de la mesa no pasó mucho tiempo para que llamaran a Wonwoo, él se puso de pie mostrándole la lengua a Minghao porque habían tenido una larga conversación de si Seungkwan estaba enamorado o no de dos personas y de que Minghao insistía en hablar con Seungkwan de como tener sexo con más de una persona a la vez, era inquietante y Wonwoo en serio esperaba que Minghao no hablara en serio. Kwannie era un chiquillo inocente, claro que no podía tener sexo hasta que encontrara a su destinado, el cual era vernon así que era perfecto porque ambos vivirían en celibato.

No supo cuánto tiempo caminó, solo se detuvo cuando escuchó la molesta voz de su padre murmurándole a su hermano un par de indicaciones, le agradeció al ayudante e hizo que este se fuera antes de llegar. No quería mostrarle a nadie el hecho de que su familia era un circo de vez en cuando, y quería atribuirle todo el mal a su padre, pero reconocía que él y BoHyuk tenían parte de la culpa. Se acercó en silencio solo para escuchar lo que su padre murmuraba.

—Quiero que te comportes como una jodida persona ¿está bien?— le ordenó su padre a su hermano mientras que lo sostenía del brazo. —No pagamos tanto en estos ridículos trajes y en ti como para que lo arruines, escúchame bien, esta es tu única oportunidad para demostrar que sirves y que no solo eres un inútil...

—¿puedes dejar a cara de perro en paz?— Preguntó con la esperanza de que su padre dejara de murmurar idioteces.

Su familia giró y su madre le regaló una adorable sonrisa caminando hasta él y extendiendo sus manos para posarlas sobre las mejillas de Wonwoo. Al menos parecían bien arreglados, la mujer se veía hermosa en su vestido de noche y su hermano era decente... bien, al menos se había bañado y si parecía una persona y no un perro de la calle. Su padre era discreto, tan solo un traje que si bien no se veía costoso tampoco se veía barato, era mejor que cualquier otra cosa que se hubiera puesto antes.

—Wonwoo, cariño, te ves hermoso.— alagó la mujer. —¿de dónde sacaste el traje? Te ves como un chico rico... ¿eso es maquillaje? ¿te dejaste maquillar? Mi hermoso hijo, realmente pareces un omega ahora.

Wonwoo tomó la mano de su madre y le sonrió. Si no hubiese sido por el maquillaje ella y todos podrían ver su sonrojo, pero no, nadie pudo verlo y nadie pudo saber que aquella dama casi nunca le hablaba tan lindo a Wonwoo, casi siempre eran gritos o regaños por su comportamiento, o era una voz decepcionada ¿estaba bien sentirse como un cachorro frente a ella? Como si quisiera acurrucarse y que siguiera diciéndole cosas bonitas.

Wonwoo quería hacer sentir así a su cachorra todos los días de su vida, no solo en ciertas ocasiones.

—Hey, te ves bien.— Le dijo Bohyuk. —Realmente bien ¿al fin te diste un baño?

Soltó una pequeña risa y le dio un suave golpe a su hermano.

—¿Por qué te vistieron como si valieras la pena?— le preguntó ignorando a su padre.

—Wonwoo...— Lo llamó su padre tomándolo del hombro, Wonwoo lo miró. Por primera vez encontró un sentimiento humano y extraño en el rostro de aquel alfa, como si quisiera decirle algo importante y no solo hacerle sentir mal. —¿estamos bien?

Entrecerró los ojos y apartó la mirada. Cuando Wonwoo tenía a su cachorra en las manos la sentía indefensa, pequeña y adorable ser a la que nunca lastimaría, algo realmente hermoso que no quería soltar ni mostrársela al mundo. Pasó varios días en el templo y solo asistía a clases para huir y estar con ella hasta que llegó el día de dársela a Mingyu, fue jodidamente doloroso separarse de su bebé. ¿Alguna vez su padre se sintió así? ¿Sintió que Wonwoo era todo su ser y que el mundo se acabaría si alguien lo lastimaba? Porque su padre nunca se había contenido a golpearlo, ni siquiera cuando era un niño... Wonwoo jamás lastimaría a su bebé.

¿Mingyu lo haría? Su estómago cayó. Miró a su madre y se preguntó porque ella dejaba que su esposo le hiciera vivir una mierda a sus hijos... su padre no los golpeaba todo el tiempo, pero si lo hacía, y su madre nunca había sido golpeada por el hombre, si eso hubiera pasado Wonwoo hubiese tomado a Bohyuk y se hubiera largado con ellos tres, pero no, su padre ni siquiera le hablaba mal a su madre. ¿entonces de que se trataba eso? Wonwoo no quería que la golpearan pero... No lo entendía. Y no quería terminar en una familia así con Mingyu.

—¿alguna vez lo hemos estado?— Respondió.

—Cariño, Wonwoo...— Habló su madre. —Esta es una noche especial, por favor.

Ambos asintieron.

—Cara de perro.— Wonwoo llamó a su hermano y su madre suspiró con fuerza. —Hermanito...

—¿si, hermanito?

—hay una fuente por si quieres beber agua, no vayas a subirte a la mesa.

—Ah, claro, es la que te dejan usar ¿verdad?

Wonwoo sonrió, realmente extrañaba un poco a BoHyuk. Un ayudante se acercó a ellos y les murmuró que podían regresar a su mesa, así que Wonwoo caminó con ellos sintiendo su corazón latir con fuerza, esperaba que su familia pudiese comportarse, y también esperaba poder salir de ese lugar sin que nadie lo viera. Minghao había dicho algo de los balcones, estos tenían puertas que al cerrarse daban un poco de privacidad, pero... estaban demasiado alto, aun le causaba un poco de incomodidad y tenía que buscar un punto en el que nadie los lograra ver salir.

Pasó justo detrás de Jeonghan y este no se dio cuenta, su familia hablaba con uno de los profesores y parecían conversar de su avance como alumno. Wonwoo se preguntó porque ningún profesor estaba hablando con sus padres ¿Qué no importaban? ¿no querían acercarse? Suspiró ignorándolo, ya había pasado demasiado tiempo preocupándose por otras cosas que su cabeza ya no daba para más. Llegó a la mesa y Seungkwan aun no estaba ahí. Los acomodó entre Minghao y donde se suponía que iba a estar Seungkwan, bastante alejado de la familia de Jeonghan y Woozi.

—Oh, que lindo centro de mesa.— Dijo su madre. —Los cubiertos son tan elegantes.

Wonwoo se sintió enrojecer cuando su madre comenzó a hablar acerca de lo genial que era cada detalle bajo la mirada de Jihoon... Era... Sus amigos sabían que esperar ¿no? Ah, Wonwoo sentía que su sonrojo podía verse atraves de su maquillaje.

—Mamá...— La llamó tosiendo un poco. —Les presento a mis amigos.— Decidió hablar antes de que alguien más abriera la boca. —Minghao, Jihoon y... por ahora es todo.

Hubo un pequeño "mucho gusto" y "es un placer" de por medio, su padre parecía examinar a Minghao y a Woozi de una manera bastante poco disimulada, hasta que perdió intereses. Wonwoo quería golpearlo por alguna razón, sus amigos estaban bien. Alguien en otra mesa se puso de pie y se acercó a ellos, el profesor de deportes que había querido tocar a todos sus alumnos a lo largo del año comenzó a platicar con los padres de Wonwoo. Bien.

—¿tú no eres The8?— preguntó BoHyuk a Minghao. —Si eres... Te he visto en Instagram y en malas películas.

Minghao exhaló una pequeña risa y asintió.

—No le hables, le das asco.— Le dijo a su hermano ignorando la plática del profesor y sus padres.

—Te habla a ti.

—¿Por qué crees que te lo digo? También le doy asco.

Bohyuk hizo una mueca y puso toda su atención en Minghao para despues desviar su mirada hacia Jihoon quien respondió devolviéndosela. Wonwoo pudo ver el momento exacto en el que su hermano se sacudió un escalofrió y despues desvió su mirada a otro lado, como si el omega lo hubiera asustado de golpe. Wonwoo miró a Woozi y este le regresó la mirada de la misma manera, y no lo comprendió. ¿Qué tenía de malo el jefe? Inclinó un poco la cabeza y Jihoon hizo lo mismo con la mirada suavizada.

Escuchó la suave risa de Minghao.

—¿ah? ¿Qué?— le preguntó a Minghao y este solo negó mirando abajo.

No pasaron ni dos segundos antes de que escuchara varios pasos acercarse, se giró y encontró a Seungkwan abrazado de su madre con un sonriente rostro, él se veía tan feliz que parecía brillar por cuenta propia, también había dos chicas que parecían un poco más grandes riéndose y hablando, llevaban preciosos vestidos que ondeaban con cada paso. Wonwoo sonrió, la familia de Seungkwan era realmente hermosa, incluso hablando literal, todos eran bonitos y parecían amables, de la clase de personas con las que hablarías de la nada solo para pasar el rato.

—Mamá...— Seungkwan se detuvo y los miró con una gran sonrisa, Wonwoo le regresó el gesto. —Ellos...

—¿eres The8?— preguntó una de las chicas ignorando a su hermano. Minghao miró a ambos lados y asintió. —SoJeong, mucho gusto.— Ella extendió su mano ignorando a todos los demás, incluso se sentó a lado de Minghao. —He visto muchos de tus trabajos, eres...

—SoJeong, es un baile no una junta de trabajo.— Dijo la otra chica tomándola del brazo. —Lo siento.

Seungkwan los presentó como era debido y Wonwoo hizo lo mismo con su familia, ellos se comportaron bien, pero cuando el profesor decidió irse y su madre comenzó a hablar con la madre de Seungkwan... realmente se notaba la diferencia. La mujer era luz pura, amable, elegante, delicada, alguien en otro "nivel" mientras que la suya seguía hablando de lo lujosos que eran los cubiertos. SoJeong había insistido en hablar con Minghao y Jinseol, la otra hermana, se había puesto a su lado intentando hacerla desistir del trabajo.

Bohyuk había mirado a las hermanas de Seungkwan con interés, y al mismo Seungkwan, así que lo pateó debajo de la mesa para que dejara de ser un idiota.

—Woozi ¿Dónde está Jeonghan?— preguntó Seungkwan al no verlo en la mesa.

—Con su familia.— Respondió Jihoon. —Creo que hablan con los profesores.

—¿Por qué?— preguntó Wonwoo.

Jihoon no respondió, lo que quería decir que algo no andaba del todo bien.

—justo ahora estoy concentrado en mis estudios.— Escuchó a Minghao hablar. —No tengo interés de trabajar por ahora.

SoJeong puso un rostro triste y Wonwoo se sintió un poco enternecido por esto, le dio un pequeño golpe con el codo a Minghao y este lo miró de reojo.

—Estamos a punto de terminar el ciclo escolar.— Dijo Wonwoo. —¿Por qué no aceptas?

—Quiero concentrarme en mis estudio.— Repitió Minghao y Wonwoo entrecerró los ojos.

—Bien, si cambias de opinión te dejaré mi numero.— SoJeong habló sacando su tarjeta y entregándosela a Minghao quien la recibió. —Te aseguro que es un proyecto prometedor.

SoJeong se levantó y se llevó a JinSeol con ella, ambas regresando a su lugar a lado de Seungkwan quien estaba casi al extremo de la mesa, Wonwoo hizo un puchero y lo miró y Seungkwan le respondió con el mismo puchero, la mesa era jodidamente grande, tanto que estaban demasiado alejados el uno del otro. Vio como Woozi se inclinaba hacia Seungkwan y le susurraba algo al oído que Wonwoo no pudo escuchar.

Sintió a Minghao inclinarse a su lado y se acercó a él.

—Tenemos una de las mesas más grandes del salón ¿no te parece?— preguntó Minghao y Wonwoo asintió. —Realmente querían que estuviéramos juntos.

Wonwoo dio un largo suspiro.

—No somos los únicos...— Murmuró Woozi moviéndose de lugar hasta ellos quedando a un lado de Minghao. —Nosotros podemos llenar la mesa, pero ellos no.— Woozi señaló a unos chicos que ya estaban con sus familias, parecían completos, pero la mesa no estaba abarrotada de gente. —No somos los únicos vigilados.— Woozi señaló otra mesa un poco más llena de lo que estaría la suya. La distribución comenzaba a ser extraña. —Tengan cuidado.

Un ayudante llegó llamando a Woozi quien se puso de pie y comenzó a caminar.

—Wonwoo.— Bohyuk le murmuró. —¿crees que hayan más de dos chicas lindas? Me gustaría tener más de donde escoger.

Wonwoo lo pateó.

3

Cuando Woozi encontró a sus padres hubo un frio abrazo de parte de uno de ellos, claro que no fue el alfa. Jihoon elevó los brazos e intentó corresponder cayendo en la incomodidad, hace tanto tiempo que no los veía que no sabía cómo reaccionar con ellos ahí, parecían tan distantes como siempre, como si nunca se hubiera ido y solo estuviera regresando de cualquier otro lado, claro que si eso estuviera pasando no recibiría un abrazo de ninguno. Se apartó y miró a ambos sin decir una sola palabra.

—Te trajimos un obsequio.— Dijo su padre omega entregándole una pequeña caja que solo observó entre sus manos. —Pensamos que te animaría.

—Gracias.— Lo tomó y abrió la pequeña caja. Solo era un reloj. —¿Habían estado muy ocupados?— le preguntó especialmente al alfa. No hubo respuesta. —¿Por qué no mandaron a sus empleados? Hubiera sido lo mismo.

—Jihoon...— El alfa por fin habló. —He recibido noticias desagradables sobre ti por parte de tu prometido ¿Cómo crees que nos hace quedar? ¿crees que mereces esto?

Jihoon se encogió en hombros y bajó la mirada hacia el reloj. Si sus padres no estaban felices ¿Por qué le trajeron un obsequió? Se concentró en este por varios segundos buscando lo que sea que justificara la acción, pero no había nada. Levantó el rostro encarando a sus padres pensando en que decir.

—No.— Respondió sin más. —Tampoco merezco el obsequio.— Lo extendió de vuelta a su padre omega.

—Es un obsequio de mi parte, Jihoon.— habló el omega como si realmente le importase. —Te lo mereces.

Negó mirando directamente a su padre. El omega recibió la pequeña caja y miró al suelo como si hubiese sido herido, se sintió mal, pero no podía aceptarlo despues de que le dejaran en claro que no merecía nada por su comportamiento. Hubo un largo silencio entre los tres y se preguntó si eso era normal ¿así deberían de ser las familias? ¿así iba a ser él? La mirada sería y fría de su padre probablemente era la misma que Jihoon estaba heredando y que incomodaba a la gente. No quería ser así. Estar atrapado en un matrimonio que lo hacia infeliz donde hacía infeliz a alguien más.

—Llorar no es apropiado.— Soltó su padre a lo que se suponía era su pareja quien limpiaba sus lágrimas penosamente. Jihoon se sintió como una mierda en ese momento, pero sentía que no era el causante de aquel llanto, tan solo fue un detonante. —Por favor.

—Papá...— Jihoon lo llamó incapaz de alzar sus brazos y envolverlo en ellos para consolarlo, Jihoon no sabía como hacerlo, tenía que ser distinto al abrazo que recibió de su padre en cuento lo vio, tenía que ser uno que fuera honesto y que no lo hiciera sentir peor. —No llores, no es tu culpa.

¿Quién estaba culpándolo? No supo descifrarlo, pero por suerte su padre detuvo por completo cualquier rastro de su acción y alzó la mirada mirándose frágil y pequeño, tan indefenso que Jihoon quiso defenderlo del mundo. Dudaba que su otro padre sintiera algo por él, un sentimiento si quiera de apego o cariño para sentirse mal, pero no, en sus ojos no había nada de culpa o preocupación, solo una ligera molestia por crear algún espectáculo.

Por suerte los ayudantes comenzaron a hacer su trabajo y los encaminaron por el salón, Jihoon desvió su mirada de sus padres enfocando las demás mesas que parecían bien distribuidas, los alumnos parecían estar bien, se veían presentables y demasiado estilizados ignorando el hecho que un pequeño grupo guardaba escondido marcas en su piel, las ojeras y la tez pálida debajo de tanto maquillaje. Jihoon suspiró, claro que pasaba algo extraño ¿Cómo los padres no eran capaz de verlos? Incluso con una excusa tan idiota como "el encierro" ¿no sería preocupante ver a sus hijos así?

Cuando llegaron a la mesa Jeonghan ya estaba ahí, sus padres conversando con él mientras que los demás parecían hablar con un par de profesores o entre ellos. Seungcheol también estaba ahí a un lado de su hermano menor, riéndose como la primera vez que los vio juntos. Seungkwan estaba hablando con su madre mientras que Wonwoo intentaba golpear a su hermano por debajo de la mesa, Jihoon sonrió ante esto. Minghao tan solo estaba ahí, viéndose incomodo mientras observaba su copa.

Se sentó a un lado de Seungkwan sin decir nada, sus padres haciendo lo mismo en completo silencio hasta que el alfa comenzó a hablar con los padres de Jeonghan. Jihoon ni siquiera se molestó en presentarlos, su cabeza había comenzado a doler desde que se convenció de que su padre no le iba a dirigir la palabra de nuevo a menos de que fuera estrictamente necesario. Tomó su copa y bebió hasta que dejó de sentir la garganta seca.

—Woozi...— Le murmuró Seungkwan. Parecía preocupado. —¿estás bien?— Jihoon asintió. —Pareces... Realmente pareces molesto.

—Estoy bien.

—¿seguro?— Seungkwan se aseguró de murmurar más bajo. —por lo general no sonríes mucho y eres distante, pero no sueles dar miedo ni preocuparnos... Mira a los chicos.

Jihoon alzó la mirada buscando primero a Wonwoo, tenía la mirada del omega sobre él, realmente como si pareciera confundido, tan solo asintió levemente intentando demostrar que estaba bien y despues se encontró con la mirada alerta de Minghao, bien, podía coleccionar las expresiones de sus amigos; Seungkwan de preocupación, Wonwoo confuso y Minghao como si tuviera que encontrar algo en medio de todos. Suspiró y despues buscó a Jeonghan esperando que este estuviera concentrado en su familia y no en él.

Se arrepintió al verlo, porque no podía descifrar la mirada de Jeonghan, algo tan triste y preocupado... comprensivo. Intentó decirle que todo estaba bien, pero estando tan lejos solo pudo desviar su mirada hacia otro lado fingiendo que no estaba ocurriendo nada importante. Jihoon solo estaba molesto ¿verdad? Se sintió culpable de preocuparlos.

—Seungkwan...—Lo llamó inclinándose un poco. —Yo... ¿soy distante?

—Ah...— Seungkwan titubeó. —A veces no sabemos que estás pensando, o no sabemos cómo te sientes... y no sonríes mucho. Pero está bien, eres así ¿verdad?— Jihoon suspiró. —¡no te sientas mal!— alzó un poco la voz para despues regresar a murmurar. —lo comprendemos, eres una persona seria.

Jihoon miró a su padre alfa y despues al omega, ninguno se miraba, tan solo parecían existir en el mismo lugar sin darse cuenta del otro. Eso era... Jihoon no quería ser así, no quería ser como su padre alfa ni mucho menos como el omega, no quería ser sometido y ocultar sus sentimientos, pero tampoco quería demostrarle al mundo que todo le importaba un carajo. Era jodidamente difícil para él saber cómo demonios mostrarse sin sentirse "inapropiado" como su padre diría, pero... Al menos quería demostrarles a sus amigos que era una persona real y no solo un proyecto sin sentimientos de esta.

Minghao también era una persona un tanto seria, pero él se reía y bromeaba, y... jihoon realmente no sabía como hacer eso. Por lo general se limitaba a darle órdenes y a intentar cuidarlos ¿quién quería a una persona así en sus vidas? Alguien que solo era... como un jefe, y curiosamente Wonwoo lo llamaba así. Jihoon era como su padre.

—jihoon...— Lo llamó Seungkwan. —¿Qué es lo que pasa? Estas preocupándome...

—Estoy bien.— Dijo, aunque no estaba seguro de ello.

—¿quieres salir? Si necesitas tomar aire...

—Seungkwan...— Jihoon puso su mano sobre la de Seungkwan intentando decirle sin palabras que no debía preocuparse. —Estaré bien.

—¿es uno de tus amigos?— JinSeol, si recordaba bien el nombre, se inclinó para verlo, ella le dedicó una linda sonrisa. —Jihoon ¿verdad?— Jihoon asintió. —Un gusto, me llamo JinSeol.

Jihoon asintió sin saber que decir hasta que vio la pequeña sonrisa de Seungkwan. Bien, ya todos estaban en la mesa así que no le quedaba de otra más que hablar ¿no es así? Si él se quedaba callado parecería extraño frente a todos.

Un ayudante se acercó a su mesa y los cinco lo miraron sin entender, ya estaban todos y aunque quedaba un espacio vacío a un lado de Minghao nadie se sentaría ahí... por muy mal que se escuchase. El hombre caminó y se inclinó para murmurarle algo a Minghao, y Minghao miró a Jihoon como si no comprendiera.

—¿Alguien vino?— Le preguntó Wonwoo a Minghao.

—Eso creo. — Respondió Hao. —Vuelvo en seguida.

Un sentimiento amargo cruzó por el pecho de Jihoon, si nadie había venido para verlo ¿Por qué lo llamaban? ¿ellos sabían que nadie respondería a la invitación de Minghao? ¿iba a regresar? Jihoon estaba dispuesto a ponerse de pie y a seguirlo, pero justo cuando iba a hacerlo Seungkwan sostuvo su mano contra la mesa y lo obligó a sentarse. Despues le murmuró.

—No creo que sea nada malo.— murmuró Seungkwan. —Confía en mí.

Suspiró volviéndose a sentar y captando la mirada de su padre. No importaba.

4

Minghao caminó confundido durante todo el trayecto, el ayudante no le dijo ni una palabra y él decidió no preguntar, aun así aprovecho para echar un vistazo a los balcones preguntándose si realmente podía salir de ahí. Si el plan seguía siendo el mismo tenía que tener cuidado, la mesa de los profesores estaba casi a un lado de la suya y de vez en cuando se giraba a mirar, y al menos uno o dos lo miraban a él de regreso. Era estresante. Pero al menos había podido ver al profesor Hoshi.

Hoshi estaba vestido con un hermoso traje negro, su sonrisa resaltando de entre los demás al igual que sus ojos. Era estúpido pensar en él en aquellos momentos, en especial cuando lo tenía a un par de pasos de su asiento en la gran mesa, pero no podía hacer otra cosa, había hablado muy poco con Jeonghan y Wonwoo prefería pelear con su hermano o jugar con las servilletas, Jihoon estaba demasiado lejos y parecía tener un humor extraño y Seungkwan estaba con su familia. Él estaba solo, solo y aburrido.

Cuando llegaron a la puerta no había nadie ahí, y Minghao sintió un pequeño temor, miró al ayudante y este lo miró a él pareciendo también confundido, comenzó a buscar con la mirada y se acercó a la salida sin decir una palabra. ¿Por qué lo habían traído hasta la puerta? Llevó una mano hasta su estómago sintiendo el malestar, realmente no estaba listo para esconderse o algo así, porque se sentía jodidamente indefenso estando solo. Por primera vez se sentía indefenso por no estar con nadie que quiera y conozca alrededor. Dio un paso hacia atrás.

—Estoy aquí.— Reconoció la voz al instante pero aun así lo tomó por sorpresa, brazos lo rodearon desde la espalda y lo atraparon como si fuera a caerse. Se giró de inmediato y lo apartó mirando como algunas personas giraban a verlos. —¿ah? No nos hemos visto en meses según internet.

—Jun...

Jun le sonrió. Dejó de importarle la gente de alrededor y lo abrazó con fuerza. Lo había visto hace pocos días, realmente lo hizo, pero... Verlo ahí... con una invitación en sus manos y vestido elegantemente hizo que el corazón de Minghao estallara. Estaba tan jodidamente feliz que sus mejillas dolieron.

Cuando se apartó aún tenía esa sonrisa en el rostro al igual que Jun, intentó desvanecerla segundos despues pero fue inútil, bien, no tenía que ocultar lo feliz que era en ese momento, no le importaba.

—¿llegar tarde me hizo ver más genial?— preguntó Jun y Minghao soltó un largo suspiro, pero asintió. —Oh, qué bien porque no tenía la intención de hacerlo. Fue un contratiempo.

—¿Cuál?

—Las fotografías que tomaste antes, de esos cuartos.— Minghao abrió los ojos recordándolas. —Y ese chico.

Un ayudante se acercó a ellos antes de que pudieran continuar, Jun guardó silencio y tan solo sonrió caminando en medio del lugar. Minghao apretó los labios, no era buen momento para acobardarse, sin embargo... había estado metiendo a Jun en todo esto, su mejor amigo no tenía por qué estar involucrado en toda la mierda que pasaba en la escuela, pero lo estaba, y había sido de gran ayuda durante meses. Minghao era un poco egoísta.

Cuando llegaron a la mesa Minghao no se molestó en presentar a Jun, eran demasiadas personas metidas en sus propios asuntos que no tenía caso hacerlo. Se sentó y recibió la mirada sorprendida de los otros cuatro chicos mientras que Jun solamente fue amable, como si no conociera a ninguno se quedó callado y se inclinó hacia Minghao para alejarse un poco de Jeonghan quien seguía mirándolo confundido.

—¿La dejaron sola?— preguntó Wonwoo murmurando, su mirada realmente aterrada. Minghao miró a Jun recordando ese detalle y este solo le sonrió. —Jun...

—No.— Respondió Jun. —él puede hacerlo sin mí, créeme.— Jun le dijo a Minghao para no hablar directamente con Wonwoo. —Tengo mi celular por si hay algún problema.

Minghao asintió y Wonwoo pareció calmarse un poco, al menos lo suficiente como para no delatarse a si mismo. Se giró un poco concentrándose en Jun y este comenzó a hablar de las cosas que habían pasado con su trabajo y en su vida ignorando todo lo relacionado con la escuela, al parecer había rechazado varias ofertas de trabajo para dedicarse a si mismo (en realidad para dedicarse a investigar) que había rentado un apartamento en la ciudad cercana (que compartía con Mingyu) y que esperaba volver a casa cuando Minghao pudiera hacerlo. También le contó sus planes para dejar por completo la actuación y dedicarse a la música y el modelaje. Era sorprendente como Jun pudo ocultar todo eso en aquellos meses y solo se concentró en ayudar a Minghao... si, si era egoísta.

—El departamento es realmente pequeño, hay dos habitaciones y un baño, pero es demasiado tranquilo.— Habló Jun evitando mencionar a Mingyu y a la cachorra. —Pensé que sería más cansado, pero no, es realmente silencioso por las noches.

—¿Qué ha dicho el manager de tus improvisadas vacaciones?

—Estaba muy molesto al principio, también molesto contigo, pero lo asimiló bastante bien despues, dijo que mientras no hiciera mucho escandalo podía tomarme mi tiempo.

—Él...

—No, no sabe dónde estoy, solo lo he llamado un par de veces.— Minghao asintió y Jun se inclinó cerca para murmurar. —Oye ¿el que está a un lado de Jeonghan es su hermano?— Minghao asintió. —Entonces es el prometido de Jihoon ¿Por qué no se sientan cerca? Los dividen como cuatro personas.

Minghao los miró discretamente, quizás era lo mejor, Woozi servía como una barrera entre su familia y Seungkwan, así como Jeonghan lo hacia entre Jun y la familia Choi. La madre de Wonwoo y la madre de Seungkwan parecían llevarse bien, ambas mujeres beta parecían amables y aunque la señora... ¿jeon? Parecía un poco más escandalosa y vivaz no molestaba realmente a nadie. El padre de Wonwoo en cambio... él se mantuvo callado y con un rostro amargado durante todo ese tiempo, como si su copa fuera más interesante que cualquier cosa pasando alrededor.

El hermano menor de Wonwoo parecía examinarlos de manera discreta, miró a cada persona incluyendo a Jun y justo cuando él llegó lo saludo como si se conocieran, pero no se conocían, quizás era porque lo reconoció de alguna mala película. Como sea. Los padres de Jeonghan llevaban hablando con los de Jihoon desde que estos llegaron, tan ensimismados que no volteaban a ver a los demás. Bueno, el padre... ¿papá? De Jihoon no apartaba su mirada del mantel, era un poco deprimente lo callado que estaba mientras que su pareja parecía ignorarlo.

Quizás Jihoon notó que Minghao no podía apartar su mirada del hombre que se inclinó en su dirección y le murmuró un par de cosas para distraerlo.

Apartó la mirada de esa mesa y se dirigió a la de los profesores. No pasaron ni dos segundos cuando encontró la de Hoshi. Los pequeños ojos de su maestro se encogieron más en una sonrisa amistosa, y Minghao sonrió en respuesta sintiendo su rostro calentarse. No podía ignorar el hecho de que ahí estaba Hoshi, a un par de pasos riendo y conversando con sus compañeros, tan lindo y siendo diferente a ellos que lo enterneció. Hoshi no se veía como los demás, él parecía como más pequeño a su alrededor.

—Hao...—Jun se atravesó en su mirada haciendo un puchero. —No le hagas ojitos a tu maestro mientras estoy aquí, es raro.

—No le estaba haciendo ojitos a nadie.

—deberías hacerme ojitos a mi porque no me has visto en meses. —Jun torció los labios comenzando a parpadear.

Minghao tan solo exhaló una pequeña risa y desvió su mirada hacia Wonwoo quien discutía en voz baja con su hermano acerca de quien-sabe-que-cosa. Ambos parecían dos niños pequeños peleando, su padre los ignoró durante todo ese tiempo, su mente parecía estar en otro lado mientras que la madre seguía platicando con la otra mujer, ahora ambas riendo. No había mucho que hacer realmente, todo parecía ser un aburrido baile donde la música sonaba tan lejana y bajita que realmente tenía que esforzarse para poder escuchar.

Giró para ver los balcones y despues miró a Wonwoo. No sabían si podrían bajar por ahí, ni siquiera había dimensionado lo alto que estaban, por lo que tomó la mano de Wonwoo y murmuró un par de cosas para que lo siguiera, y también se llevó a Jun porque dejarlo ahí sería incómodo para él.

Tenía que asegurarse de que Wonwoo pudiera bajar.

5

Jeonghan no supo en que momento Jun, Minghao y Wonwoo se fueron de la mesa, pero tan pronto giró se encontró con una mirada desconocida que encajó con la suya en el momento exacto. El contacto visual fue evidente, Jeonghan sabía que lo había visto y la persona sabía que Jeonghan lo había visto... Era evidente que estaban mirándose por lo que un silencio los rodeó por varios segundos. BoHyuk, si no se equivocaba era el hermano menor de Wonwoo.

—Hey...— Habló BoHyuk. —Desaparecieron tres personas... ¿estamos jugando a la mafia?

Jeonghan exhaló una pequeña risa apartando su mirada. BoHyuk no era igual a Wonwoo, pero tenía algo en él que dejaba en claro que tenía cierto parentesco, quizás sus ojos o cualquier otra parte, o la mirada incomoda/nerviosa al igual que la sonrisa. Jeonghan no supo descifrarlo, y tampoco pensaría mucho en ello.

—No parpadees o podrías desaparecer igual.— Dijo sin darle importancia.

—¿desaparecer de un aburrido baile? Me quedare dormido de tanto parpadear.— BoHyuk se dejó caer sobre la silla como si estuviera derritiéndose y su amoroso padre le dio un golpe por debajo de la mesa que lo hizo saltar. —él es la mafia, vamos a matarlo.— Dijo Bohyuk señalando a su padre y Jeonghan rió.

—Eso sonó como si tú fueras la mafia.

—Oh...— BoHyuk se inclinó cerca mirando directamente a Jeonghan. —Eso es exactamente lo que diría la mafia.

Jeonghan sonrió con interés. El baile si estaba siendo aburrido, Jihoon estaba como cuatro o tres personas alejado de él y Seungcheol ahora estaba hablando con el padre de Jihoon acerca de la boda y de los planes de su futuro negocio, nada que a Jeonghan le interesara. Se inclinó un poco cerca de BoHyuk ignorando la plática que sucedía a su izquierda y pensó.

—si fuera la mafia dejaría vivo a Wonwoo y a Minghao, podría acusarlos a ellos de ser la mafia, sé que no reaccionarían bien. Aparte, están a lado mío, sería evidente.

—¿seguro que no eres la mafia? Suenas como uno.— BoHyuk le sonrió. —Seguramente eres la mafia y te deshiciste de esos tres para despistar.

Jeonghan sonrió y antes de que pudiera responder sintió la pesada mirada de su hermano. Giró sin comprenderlo y el rostro de Seungcheol le dio una clara orden; mantente alejado de él. Elevó ambas cejas y se levantó de su asiento para sentarse justo a un lado de Bohyuk, Seungcheol no pareció feliz con esto pero se mantuvo quieto mientras que Jeonghan giraba hacia el chico. Pudo ver a sus padres girar levemente, pero el padre de Woozi captó de nuevo su atención.

Giró hacia BoHyuk.

—Eres hermano de Wonwoo ¿verdad?— El chico asintió. —Mi nombre es Jeonghan.

—BoHyuk. Supongo que eres amigo de mi hermano... ¿Cómo?

—¿Cómo?

—¿Cómo la triste familia Jeon puede sentarse con la rica y aclamada familia Choi? Estar en la misma mesa es como... creo que es el sueño húmedo de papá.— BoHyuk murmuró lo último inclinándose hacia Jeonghan. Despues señaló a su padre. —Mira lo feliz que está.

Jeonghan lo miró y... el tipo ni siquiera estaba sonriendo, mantenía un rostro tan amargado que parecía el peor día del mundo. Quiso reír, pero el gesto amargado del hombre lo hizo desistir de la idea. Con solo verlo era suficiente como para sentir un malestar. Desvió su mirada hacia BoHyuk preguntándose como él y Wonwoo habían resultado tan expresivos y un poco rebeldes... Seungcheol se parecía mucho a su padre.

—Wonwoo a veces es un dolor de cabeza, pero es una buena persona, mejor que cualquiera de ellos.— Jeonghan señaló a las demás mesas. —No importa cuál sea su apellido.

BoHyuk soltó una pequeña carcajada.

—Ah... subestime a Wonwoo, creo que si puede hacer amigos.

Jeonghan sonrió. Claro que Wonwoo podía hacer amigos, al igual que Woozi. Su mirada se dirigió hacia él por instinto y encajaron miradas... él no se veía feliz, tampoco se veía triste o molesto, tenía una mirada extraña como si quisiera ocultar algo detrás suyo y que nadie lo viera. Dio un pequeño suspiro y se alejó de BoHyuk para concentrarse en el omega. Sabía que aquel rostro afligido estaba ahí desde que sus padres llegaron, se veía tan distante y diferente que Jeonghan intentó ignorarlo. Tenía un poco de miedo, él solo quería levantarse de su silla e ir y abrazarlo hasta que quitara ese rostro.

—Jeonghan.— Llamó Seungcheol. —Regresa aquí.

—Supongo que nos vamos a ver durante toda la noche...— Dijo Bohyuk. —Así que esto no es un adiós.

—¿Qué haces hablando con Jeonghan?— La voz de Wonwoo lo hizo girar, él estaba de vuelta junto con Jun y Minghao. —Aléjate de él antes de que le pegues las pulgas.

—¿ah?— Bohyuk miró a su hermano.

Jeonghan se puso de pie y regresó a su lugar en silencio viendo como Wonwoo castigaba a su hermano por cualquier cosa, Minghao no dijo nada al igual a Jun y él tuvo tiempo de regresar su mirada a Seungcheol y a sus padres. El baile estaba siendo jodidamente aburrido y lo único interesante había sido hablar con el hermano menor de Wonwoo. Estaba jodidamente lejos de Woozi y Minghao lo ignoraba para hablar con Jun ¿Qué más podía hacer?

—Jeonghan.— Lo llamó Seungcheol acercándose para murmurar. —Por favor.

—Solo estaba hablando con el hermano de uno de mis amigos ¿hay algún problema?

—¿con los Jeon?— Jeonghan se sorprendió un poco de que Seungcheol supiera su apellido. —Hable con Jihoon sobre esto, parece que no te dijo nada... Tu reputación es demasiado frágil, Jeonghan, sería mejor si solo te relacionas con Jihoon por ahora, al menos hasta que todo se calme.

—Mi reputación está deñada desde hace tiempo y jamás se ha calmado ¿Por qué importarme ahora?... ¿Por qué hablaste con Jihoon acerca de eso? ¿es por esa razón que me preguntó acerca de un tal Jisoo?

—¿Jihoon te preguntó por él?— Seungcheol apartó su mirada hacia Woozi y encajó sus ojos en él, Jeonghan apretó los labios y lo llamó. —Se suponía que debía hablar contigo acerca de las relaciones que mantienes dentro de la escuela.

—¿y porque él y no tú? ¿no piensas que estoy un poco grande como para que me cuiden?— ¿Por qué estaba enojándose? Era gracioso, Jeonghan realmente no sabía porque estaba molesto. —¿Qué mierda has estado hablando con él? ¿Qué le has dicho?

—Jeonghan, no es la mejor manera de hablar.

—Me importa un carajo ¿Por qué demonios...?

—Jeonghan.— La voz de Seungcheol se alzó molesta y Jeonghan se encogió, las miradas cayeron sobre ambos en un incómodo silencio en el que sus padres participaron.

Nadie habló por varios segundos, sin embargo, el sonido de la música se hizo más fuerte y algunas personas en otras mesas se pusieron de pie acompañadas por alguien más. Jeonghan respiró hondo acomodándose en su asiento mientras que aquella pequeña distracción había sido un escape para la pequeña escena que habían logrado hacer. Miró a sus manos y escondió su rostro.

—Seungcheol ¿no crees que es el mejor momento para bailar con tu prometido?— preguntó su madre y Jeonghan sintió como si un balde de agua fría cayera sobre él.

Seungcheol asintió poniéndose de pie y caminando hasta el asiento de Jihoon, extendió su mano cordialmente mientras que Jeonghan miraba de reojo con las mejillas sonrojadas. Soltó una pequeña risa. Tenía la esperanza de que Jihoon dijera que no y se quedara ahí, mirándolo sabiendo que quería acercarse para consolar a Jeonghan. Pero no, el omega tan solo miró a Seungcheol durante un momento para terminar aceptando. Ambos se alejaron de la mesa. Su estúpido corazón dolió tanto que fue ridículo.

Miró a Minghao y este abrió la boca para decir algo.

—¿no vas a bailar?— Le preguntó antes de que hablara. —Tu acompañante se aburrirá aquí si no lo haces.

Minghao asintió en silencio tomando a Jun de la mano y llevándoselo. Entonces quedó frente a Wonwoo. Seungkwan fue arrastrado por su hermana segundos despues.

Entonces solo quedaban él y Wonwoo sobre la mesa ignorando a los padres, ellos habían comenzado otra plática ignorándose entre sí. Jeonghan suspiró largamente mirando las flores blancas sobre la mesa.

—Jeonghan.— Lo llamó su madre. —¿te sientes bien?

—Claro, pero me preocupa mi hermano, piensa que es mi padre.— Respondió con una pequeña sonrisa sin mirarla.

—Jeonghan, Seungcheol es tu hermano mayor, debes escucharlo tanto como a mí o como tu padre.

—¿y quién me escucha a mí?

No obtuvo respuesta. Miró al padre de Woozi, al que no estaba hablando con el suyo, el hombre se veía realmente tímido mientras que la madre de Seungkwan comenzaba a unirlo a la conversación, e incluso era un poco triste verlo acercarse con miedo a ellas como si estuviera pegado a su marido. Aun así el hombre logró acercarse a ellas y mover un poco los labios para emitir algunas respuestas vagas. Era difícil pensar que su madre pudiera ser incluida ahí, ella parecía tan seria y daba algo de miedo de vez en cuando.

Una mano extendida entró a su campo de visión. La siguió con la mirada lleno de curiosidad y tuvo que alzar el rostro para encontrar al dueño.

—Si me quedo sentado un rato más terminaré por adherirme a la silla.— Dijo Bohyuk. —¿vienes?

Jeonghan buscó la mirada de Wonwoo y cuando la encontró este parecía más confundido que cualquiera, y miraba a su hermano como si fuera un alien.

Miró hacia el centro de salón, las personas bailaban, incluso Jihoon y Seungcheol lo hacían ¿Por qué él no?

Jeonghan estaba molesto, pero no sabía porque.

Tomo la mano de BoHyuk y se dejó guiar.

...

Aun queda un buen de este capítulo. Help.