Wonwoo se quitó los zapatos intentando no hacer ruido, como el lugar estaba casi completamente solo el sonido chocaba entre las paredes haciendo eco, así que solo decidió asegurarse de que sus pasos no serían escuchados por cualquier persona que no fuera él mismo. Miró a Minghao y esperó a que este entendiera, pero despues de unos segundos el chico solo lo miró como si estuviera confundido y Wonwoo tuvo que señalar.

—Quítate los zapatos. —Le murmuró. —No sabemos lo que hay aquí, ni quien esté cerca, por eso quítatelos para que no sepan dónde estamos.— Fue cuidadoso, su susurro chocando contra sus manos y la oreja de Minghao. —Jeonghan estaba por aquí, pero dudo que haya venido por voluntad propia...

Minghao asintió quitándose los zapatos como le había dicho Wonwoo, los mantuvo en su mano derecha y comenzaron a caminar. El pasillo apenas y estaba iluminado por la luz de afuera, todo era oscuro sin presencia de lámparas que pudieran guiarlos, por suerte Minghao tenía buena vista, Wonwoo no, nunca había tenido buena vista y sus padres nunca se esforzaron en revisar eso como para comprarle lentes. Ah, detestaba su miopía, era leve, pero muy molesta de vez en cuando.

Caminaron en silencio por el largo pasillo intentando recordar cada ruta para no perderse, y trataron de no dar vueltas en el enredo de pasillos y habitaciones. Si bien el lugar parecía limpio y espacioso aun tenía un par decoraciones que adornaban los otros pasillos, así que todo parecía normal a excepción de las puertas firmemente cerradas y el extraño silencio que los sumergía. ¿Por qué ocultarían toda una zona de la escuela? Quizás ahí eran a donde llevaban a todos los chicos que sacaban por las noches en camillas.

Minghao se detuvo de golpe y Wonwoo también lo hizo, miró hacia enfrente encontrándose con la gran puerta adornada e imponente del centro. Er gigante, tanto que Wonwoo dudaba que fuera una habitación cualquiera, quizás un salón o algo parecido, algo que intentaban ocultar. Miró los pasillos a los lados y estos se encontraban con una puerta al final de cada uno.

—Este es el espacio vacío.— Murmuró Minghao. —Es el espacio vacío del que hablaba Jihoon. ¿verdad?— Wonwoo asintió. —¿Por qué lo esconderían? Hay otro salón de fiestas. En el segundo piso, ese no está oculto.

—Esto es demasiado extraño.— murmuró Wonwoo. —¿Por qué lo ocultan de nosotros? ¿Por qué mantienen a los de tercer año cerca? El edificio es tan grande que podría alejarnos a todos por completo ¿Por qué los de tercer año están aquí entonces? ¿Por qué trajeron a Jeonghan?

Escuchó pasos y algo más, no muy fuerte pero estaban acercándose. Tomó a Minghao del hombro y lo empujó a una esquina detrás de una decoración, y él hizo lo mismo escondiéndose detrás de otra. Le pidió silencio y aunque quizás Minghao no podía escuchar los pasos acató la orden de Wonwoo y se quedó tan quieto y callado que su respiración se detuvo por segundos. Se escondieron ahí, con la oscuridad del pasillo ayudándolos a estar ocultos.

Una puerta se abrió.

Un alfa (Se estaba cansando de los alfas) empujaba una camilla con un chico en ella, su brazo caía y Wonwoo pudo ver la zona rojiza alrededor de su cicatriz. Habían hecho algo con su supresor, por lo tanto era un omega también. Se escucharon más pasos y esta vez dejó de respirar, si los descubrían ahí... Wonwoo ni siquiera sabía lo que les harían si los encontraran, todo parecía tan raro y daba tanto miedo que la idea era... extraña.

—¿es de primer año?— preguntó una voz e hizo que Wonwoo se encogiera. Su mirada cayó sobre Minghao.

—Si. Acaban de marcarlo.

—Bien.

Ambos hombres siguieron su camino, Wonwoo los observó, se veían tranquilos y sin percatarse de que ellos estaban ahí, y conforme se alejaban podía volver a respirar. Escuchó una puerta y despues el tipo de la camilla tan solo desapareció al girar a otro pasillo. Gateó un poco afuera para asegurarse de que el camino estaba libre y cuando lo comprobó le hizo una señal a Minghao. Bien al menos sabían que tener miedo estaba justificado, eso parecía una película de terror.

Extendió la mano y tomó la de Minghao para no perderlo de vista, ambos temblaban como niños asustados pero ninguno dio un paso atrás. ¿Ahora que buscaban? Tenían que salir de ahí y regresar a sus habitaciones, no sabían en dónde buscar o a donde ir, y tampoco sabía que querían encontrar, todo era tan confuso y enredado que Wonwoo deseó tener a Jihoon ahí para decirle que hacer, pero no, el enano tan solo huyó cuando llegaron ahí.

Vio un pequeño flash a su lado y su corazón por poco se detiene, gira de golpe y encuentra a Minghao quitándole la luz al celular que tiene en las manos. Bien, Wonwoo quiere golpearlo, pero no lo hace porque reconoce que las fotografías podrían ayudarlos un poco cuando regresen. Si es que el jodido flash no los delata.

—¿no quieres que pose para ti?— le pregunta con cierta molestia jalándolo a su lado. — quizás quieres iluminar todo el jodido pasillo para que se den cuenta donde estamos.

—La encendí por accidente.— Respondió Minghao. —¿crees que todas las habitaciones estén ocupadas?

—No lo sé ¿quieres tocar para ver? Puede que también te suban a una camilla y te lleven a quien sabe dónde para marcarte.

Minghao lo ignoró para enfocarse en la gran puerta a sus espaldas. Alzó el celular y tomó un par de fotos a esta, hizo lo mismo con las habitaciones a los lados y con todo el pasillo en general, Wonwoo se quedó viéndolo, vigilando que nadie más llegara por sorpresa y atento a cualquier sonido. Mingyu tenía algo de razón, el asunto era peligroso desde los ojos de un omega, despues de todo eran un montón de alfas haciendo cosas extrañas con ellos, tratándolos como objetos o poco más ¿Qué debía pensar Wonwoo? En cualquier circunstancia se largaría del lugar, pero su padre jamás lo dejaría.

¿no sería bueno solo huir lejos con Mingyu? Ninguno tenía dinero para sostenerse, ninguno tenía un trabajo estable y Wonwoo era inexperto para mantenerse, siempre vivió de lo que sus padres le daban por muy malo que fuese. Llevó una mano hasta su rostro y suspiró. ¿Cómo iba a soportar todo esto? Y... él no quería dejar a Seungkwan ahí, no quería que un chico tan lindo se quedara en ese lugar a manos de un montón de alfas, sabía que si no cuidaba de Seungkwan tarde o temprano se lo llevarían. Y Jeonghan... Detestaba a Jeonghan, pero no deseaba que nada malo le ocurriese, y era un idiota para defenderse a si mismo sin importar que tanto hablara.

Su mirada llegó hasta Minghao... Minghao intentó irse y no lo logró ¿eso que quería decir? Si él no pudo hacerlo ¿Por qué Wonwoo podría?

Minghao dio un par de pasos cerca al pasillo para tomar diferentes ángulos, Wonwoo lo observó sintiendo de nuevo las náuseas. ¿Cuándo iba a terminar con eso? Había estado enfermándose fácilmente por toda esa mierda, y nunca terminaba de sanar, cuando pensaba sentirse bien entonces volvían para molestarlo. Quería solo dejar de comer para ver si se detenían en un golpe de suerte, pero dudaba que fuera su alimentación ya que Jun llevaba buena comida una vez a la semana.

Cuando escuchó un par de pasos ajenos tomó a Minghao y lo empujó a una habitación, por suerte estaba abierta. El cuarto era oscuro y solo tenía una pequeña ventana por la cual guiarse. Empujó a Minghao a una esquina y él se puso en otra haciéndole una seña para guardar silencio. Los pasos continuaron acercándose y Wonwoo rezó para que no abrieran esa puerta porque no estaban del todo ocultos. Cerró los ojos para esperando, los pasos haciéndose cada vez más fuertes y rápidos.

No abrieron la puerta, en cambio el sonido solo se alejó desapareciendo por el otro lado del pasillo. Abrió los ojos y se puso de pie dándole una señal a Minghao para que hiciera lo mismo. Hubo un flash por parte de Minghao que cegó a Wonwoo, se cubrió por un par de segundos antes de alzar su brazo contra el omega. Por suerte se detuvo antes de hacer algo.

—Enciende la luz.— Ordenó Minghao y Wonwoo buscó el interruptor.

La habitación se iluminó al instante.

4

Un quirófano. Algo pequeño e improvisado, todo estaba en orden pero amontonado, como si todo estuviera hecho con tanta prisa que la habitación simplemente no había quedado. Minghao caminó tomando un largo video para despues comenzar con las fotografías, sabía que tener pruebas era mejor que sus propias palabras. No era realmente una imagen de terror, todo estaba limpio y no había sangre, la camilla estaba ordenada y los artículos guardados en empaques.

Observó los papeles sobre una mesa y los tomó para leerlos, pero las fotografías dentro de ellos llamaron antes su atención; era un chico joven, estudiante de tercer año por su vestimenta, en la primera foto aparecía como cualquier otro chico en el anuario, limpio y consiente, en la segunda... estaba dormido, pálido y dormido, las bolsas debajo de sus ojos siendo evidentes y casi moradas. Y en la tercera parecía estar... ¿semi consiente? Sus ojos perdidos le hicieron sentir incómodo.

Encontró más fotografías en el lugar...

—Wonwoo.— Lo llamó. —Ven a ver esto.

Wonwoo se acercó inclinándose para ver las fotografías. Cada una era más completa que la anterior, cada rasgo del cuerpo desnudo quedaba enmarcado en la fotografía siguiente. Era un omega de tercer año, desnudo, drogado, y despues... despues habían ecografías.

—Tómale foto y vámonos.— Dijo Wonwoo. —Esto me causa escalofríos. ¿Qué significa?

—No quiero especular.— Respondió Minghao tomando las fotos.

Cuando dejó los papeles tal y como los había encontraron salieron de ahí, sus piernas temblaban un poco e intentaba no tener el suficiente miedo como para llamar a Hoshi, sabía que terminaría haciéndolo si no se controlaba, así que lo mejor era no pensar. Dio unos cuantos pasos en silencio con Wonwoo sintiendo el frio suelo debajo de sus pies.

Bien, el omega de las fotografías era un estudiante, y por lo poco que pudo leer su tipo de sangre, su peso y altura eran normales, había una pequeña descripción que no alcanzó a leer bien y las fotos parecían... extrañas, lo suficiente extrañas como para no poder olvidarse, sin mencionar las ultimas ecografías, Minghao no sabía si el pequeño ovillo que vio era un bebé o un hígado, no era bueno con eso... pudo haber sido cualquier cosa, pero en definitiva nada muy grande o fuera de lo común... aunque dudaba que fuera un bebé, no encontró la forma de un bebé ahí.

Wonwoo se detuvo en seco y justo antes de que pudiera preguntar comenzó a correr, tardó en comprenderlo, pero cuando comenzó a escuchar los pasos se dio cuenta de lo cerca que estaba. Corrieron por los pasillos con la poca luz entrando por la ventana, esperaba no ser escuchado, él se había quitado los zapatos para eso y no quería que fuera en vano. Wonwoo era lento, jodidamente lento, así que corrió más rápido y lo arrastró por el pasillo.

Era como un laberinto pequeño, cada pasillo conectaba con otro y con otro y no sabían cual llevaba a la salida, al menos Minghao no lo sabía, estaba un poco perdido, pero encontró una pequeña esperanza cuando Wonwoo lo jaló redirigiéndolo a otro pasillo. Tenía que confiar en el omega, si o lo hacía y entraba en pánico... No quería meter a Hoshi en eso, o quizás no quería descubrir que Hoshi estaba ya metido en toda esa mierda. ¿Qué haría si fuera así?... Maldijo en voz baja sacudiendo la cabeza, no era tiempo para eso.

Cuando volvió a escuchar los pasos esta vez fueron rápidos, como si estuvieran corriendo, y eso lo hizo entrar en un pequeño pánico. Arrastró a Wonwoo tan rápido como pudo intentando no tropezar, si los atrapaban estaban completamente jodidos. No giró a los lados ni se detuvo en ningún momento, pero sentía que aquellos pasos se acercaban demasiado rápido, en cualquier momento los alcanzarían. Wonwoo lo hizo girar, y de un segundo a otro soltó uno de sus zapatos que sostenía.

Lo escuchó caer y casi pudo imaginar el eco chocando contra las paredes, pero no se detuvo, Wonwoo no se lo permitió, lo jaló con tanta fuerza que lo obligó a seguir corriendo. Tan solo pudo ver en medio del pasillo su solitario zapato siendo abandonado en ese lugar... a la vista de cualquier persona, alguien sabría que estuvo ahí. Cuando los pasos se hicieron más fuertes supo que no iba a regresar por él. Mierda.

Comenzó a reconocer los pasillos despues de un rato, se habían alejado lo suficiente y nada más se escuchaban a si mismos jadeando. Minghao se detuvo al pie de las escaleras y Wonwoo lo empujó hacia arriba, su mente seguía en su zapato, lo había dejado, una evidencia de que estuvieron ahí, de que él estuvo ahí... Cerró los ojos sin dejar de caminar, apagó su mente por un largo rato.

—Llegamos.— Escuchó a Wonwoo y fue lanzado a su habitación.

Dio un par de pasos antes de dejarse caer sobre su cama, el perfume de Jun lo tranquilizó y sus manos acariciaron su cabello. Bien, al menos ahí podía sentirse un poco a salvo.

—Hao...— Lo llamó Jun. —¿estás bien? ¿necesitas agua?

Tomó la mano de Jun.

—Se me cayó el zapato...— murmuró lanzando el sobrante en medio de la habitación. —Lo dejé allá...

—Cenicienta.— Dijo Jun suavemente. —Descansa por ahora, nos preocuparemos por eso despues.

—¿estás bien , Wonwoo?— escuchó la voz de Mingyu. —¿encontraron a Jeonghan?

—No, pero encontramos algo peor.— Dijo Wonwoo dejándose caer contra su alfa. —Demonios, voy a vomitar.

—Descansen por ahora.— Dijo Seungkwan acomodando la cama de Wonwoo. —Parecen agitados.

Minghao asintió abriendo por fin los ojos. Jun estaba ahí, se veía tan preocupado que no parecía el mismo Jun sonriente y un poco tonto de siempre. Minghao se sintió mal.

—Jun, toma.— Le dio el celular. —Todo lo que conseguí está ahí, saca todo e investiga lo que puedas ¿esta bien?— Jun asintió.

—Hao... ¿seguro de que quieres quedarte?

Minghao asintió.

—al menos por ahora. No quiero dejarlos aquí.

No quería dejar a Hoshi hasta comprobar que él no estaba involucrado en todo eso.