— ¿Jun-jungkook? — todo quedó en silencio, mi cuerpo quedó helado al ver a Jungkook en el suelo — ¡JUNGKOOK! — caí sobre mis rodillas al ver como el piso empezaba a mancharse de sangre a su alrededor

— Le-les dije que no se movieran —

— ¡JUNGKOOK! — me acerqué a él, viendo como estaba respirando de manera agitada y con dificultad

— Ta-taehyung — dijo sonriendo con dificultad

— Es-estoy aquí amor, estoy aquí — dije agarrando sus manos

— Duele... — dijo con esfuerzo

— No, mírame, mírame — dije viendo como quería cerrar sus ojos — Jungkook mírame — dije agarrando su rostro

— No-no quiero morir — dijo sonriendo — soy muy joven... so-solo tengo veinticinco años —

— No vas a morir, Jungkook nosotr-... —

— ¿Jun-jungkook?, ¡JUNGKOOK! — gritó Siwon empujándome con fuerza — ¡HIJO! —

— Jungkook... — dije viendo la herida en su abdomen, se veía muy profundo y la sangre estaba invadiendo todo

— Todo esto es tu culpa — dijo Siwon volteando a verme

— Pa-padre... —

— ¡TODO ESTO ES TU CULPA! — gritó intenta sujetarme pero yo me puse de pie para correr — ¡TODO ES TU CULPA! —

Caí con fuerza, sintiendo como todo empezó a moverse rápido y como me empezó a doler la cabeza.

— Todo es tu culpa — dijo Siwon poniéndose encima mío

— Dé-déjame — dije intentando quitarlo de encima mío — Si-siwon —

Puso sus manos en mi cuello y empezó a apretar, intenté soltarme de su agarre, escuchaba el llanto de Yerin, escuchaba la voz débil de Jungkook, pero no podía moverme, Siwon solo me miraba con odio, sin dejar de apretar más su agarre.

— Ta-taehyung... — Jungkook se estiró un poco, intentando alcanzarme

— Ju-ungk-... — dije con dificultad, estirando mi mano

— ¡PAPI!, ¡PAPI! —

— Vas a morir, por todo lo que has hecho te vas a pudrir en el mismísimo infierno, vas a morir maldita rata — dijo apretando más fuerte

Dolía, mucho, todo empezaba a dolerme, todo dejaba de escucharse a mi alrededor, pero solo miraba a Jungkook, no quería que este sea el final, no así. ¿Qué pasaría con mis hijos?, tenía miedo de eso, no quería dejarlos solos.

— Lo-los amo — dije viendo a Jungkook cerrar sus ojos, yo también lo hice, sintiendo como gotas caían encima de mi rostro, sintiendo como dejaba de sentir o escuchar algo, solo oscuridad, solo era eso

— ¡PAPÁ! —

○●○●⊙●○●○

— ¡AYÚDEME POR FAVOR! — grité agarrando al señor del brazo

— ¿Qué le pasa?, déjeme —

— ¡NECESITO SU AYUDA!, ¡MI HERMANO ESTÁ ADENTRO Y ACABO DE ESCUCHAR UN DISPARO! —

— ¡JIMIN! — escuché la voz de Yoongi detrás mío

— ¡YOONGI! — corrí a abrazarlo

— Tranquilo, la policía está en camino — dijo sin soltarme

— Yo-yoongi, mi hermano... —

— Jimin tranquilo — dijo alejándose un poco de mí — todo va a estar bien —

— No-no, no va a estar bien —

— La policía — dijo Yoongi agua de la mano

Tumbaron la puerta con fuerza, dos policías entraron y uno no me quiso dejar pasar, pero no me importó, entré, necesitaba ver a mi hermano.

— ¡Taehyung! — exclamé subiendo las escaleras lo más rápido que podía,  sintiendo mi corazón latir con fuerza — ¡TAEHYUNG! —

Era horrible lo que mis ojos vieron, nunca había visto algo tan crudo como lo de ahora. Mi hermano, Jungkook y Siwon estaban tumbados en el piso, los tres debajo de un charco de sangre.

— Ta-taehyung... —

Quise acercarme a él pero me detuve al ver en una esquina a Yerin, estaba pálida, su rostro estaba empapado de las lágrimas que seguían bajando, estaba temblando mientras miraba a mi hermano, mientras no dejaba de decir en voz baja...

— Papi tengo miedo —

— Cariño — corrí a ella y la sostuve entre mis brazos, cubriendo con mi pecho lo que estaba detrás mío, era tarde para impedir que vea tan horrible escenario, pero quería protegerla, necesitaba abrazarla para que sepa que estaba con ella — tranquila, yo estoy aquí —

— Pa-pi tengo miedo — dijo aferrándose a mí, no dejaba de temblar con fuerza

Contuve mis lágrimas y la cargué, debía de sacarla lo más rápido posible.

— Está vivo... — escuché decir a un policía detrás mío

○●○●⊙●○●○

(Una semana después)

" No entiendo "

" ¿Qué no entiendes mi pequeño? " preguntó mi madre acariciándome suavemente mi rodilla " te has dañado mucho, te he dicho que no corras, eres muy bonito como para dañarte, siempre debes de ver por donde vas, así evitarás hacerte daño "

" Ma... ¿Porqué sigues con él? " pregunté viendo todo a mi alrededor " no te da dinero ni nada, prefiere tomar y gastar en otras cosas "

" Tienes solo ocho años Taehyung, no entiendes nada " dijo sonriendo

" Soy inteligente, entiendo todo a la perfección " dije molesto

" ¿En serio? " se río suavemente " a ver niño inteligente, ¿Qué es el amor para tí? "

" Es... no sé " dije avergonzado

" Yo puedo responderte eso mi Tae " dijo agarrando mi mano " el amor es solo un sentimiento, no tiene valor " dijo con una sonrisa triste " el amor no te llevará a nada, mírame "

" Ma... "

" Por eso tú no debes de enamorarte, eres muy hermoso Taehyung, a veces dudo de que seas mi hijo y es por esa belleza que saldrás adelante, tendrás todo lo que te propongas " dijo orgullosa " pero puede no ser suficiente... "

" ¿Tendré todo? " pregunté emocionado " ¿Incluso esa muñeca que se tiene una piscina y un carro rosa? "

" Todo... pero Taehyung no importa si esa persona te da todo, si no es con amor no cuenta "

" Tu dijiste que el amor no tiene valor mami " dije sonriendo, pensando en las muñecas que tendría

" No tiene valor si solo una persona está dispuesta darlo todo, por eso si te enamoras de alguien que no sea de aquí, busca a tu amor en otro lado, encuentralo y que te de todo, todo su corazón "

" Que me de todo " dije con ilusión

" Todo lo hermoso del mundo, todo lo valioso, lo que brilla más que un diamante o un rubí "

" Lo tendré todo "

" Te mereces todo mi pequeña flor " dijo besando mi frente

" Tendré miles de muñecas mami "

— Que me de todo... — dije abriendo mis ojos lentamente, viendo que me encontraba en una cama de hospital — Jungk-... — me detuve al ver a mi hija echada a mi lado

— Papi... ¡Papi! — exclamó abrazándome

— Hi-hija — dije abrazándola con fuerza

— Papi, papi — dijo dándome besos por todo mi rostro — lo lamento papi, lo lamento — dijo llorando

— No mi cielo, no... — dije acunando su carita

— No-no te cuidé, yo debía de cuidar —

— Yo-yo debía de hacer eso — dije pegando nuestras frentes — soy tu papá, debo de verla por tu seguridad... hasta que puedas tú misma defenderte, y eso no es ahora mi cielo, por favor perdóname tú a mí — dije recordando su mirada de horror — ¿Estás bien? —

— Sí-í — dijo limpiando su nariz con su manga

— Me alegro — dije apegándola a mi pecho, echándome con ella

— ¿Tú estás bien? — preguntó abrazándome con fuerza

— Sí, si tú estás aquí estoy bien — dije rascando su cabeza

Se durmió entre mis brazos, botaba suspiros rotos, aún se veía pálida y eso hacía que me sienta mal. Con dificultad me alejé, la tapé bien y salí, necesitaba ir al baño.

— ¿Taehyung?, ¡Taehyung despertaste! — exclamó Jimin acercándose a mí

— Hola hermanito — dije sonriendo

— ¡Taehyung! — exclamó abrazándome — ¡Ay me tenías tan angustiado!, ¿¡Porqué te gusta preocuparnos!?, con mamá era lo mismo, siempre has sido así de malo — me regañó

— También te quiero — dije sonriendo, pero mi sonrisa se borró al recordar a alguien — ¿Dónde está Jungkook? — pregunté alejándome de Jimin — quiero verlo, ¿Dónde está? —

— Taehyung... — dijo cambiando su expresión

— No-no, él no puede estar muert-... —

— No, eso no — dijo agarrándome de los brazos — solo que aún no despierta, está estable pero no abre los ojos —

— Necesito verlo — dije intentando soltarme de su agarre

— Taehyung escúchame, sigues mal, no puedes ir —

— Jimin... —

— ¡HAS ESTADO INCONSCIENTE DURANTE SEMANA!, ¡NECESITAS ALIMENTARTE! — gritó enojado — además Yerin... —

— ¿Qué pasa con mi hija? —

— No ha dormido desde esa vez, no ha querido ni comer, Taehyung la única manera que encontré de que deje de lastimarse los dedos fue echándola a tu lado. Sé que quieres ver a Jungkook, pero tú hija te necesita ahora —

— Yerin... — dije mirando a la puerta de mi habitación

— El doctor la vio, no tenía heridas pero está mal, la han mandado a terapia pero ella no ha querido moverse de este pasillo por nada —

— Mi-mi hija — dije sintiendo mis piernas débiles

— Taehyung, por favor cálmate — dijo Jimin abrazándome — Jungkook va a despertar pronto, Yerin se pondrá bien y tú también, todo saldrá bien, solo no hagas más tonterías, por favor escúchame esta vez —

— ¿Y Siwon? —

— Él... —

(Una semana  después)

— Come, di ahh — dije dándole de comer a Yeonjun

— Está rica tu comida tío — dijo Yerin sonriendole a Jimin

Estábamos en casa de Jimin, dormíamos en la sala mientras. Yerin estaba comiendo poco a poco, también la ayudaba a calmarse, siempre se levantaba llorando y llamándome, también mojaba el sofá, además de dañarse los dedos cuando veía a un alfa. La había estado llevando a sus terapias, la doctora era beta, preferiamos evitar que se choque con muchos alfas ya que eso le afectaba, a los únicos que más o menos soportaba eran a Suelgi, Yoongi y Jungkook.

— ¿Papá Jungkook despertó? — preguntó mientras estábamos caminando al hospital 

— Aún no... — dije suspirando — pero pronto, ya ha empezado a mover sus dedos, es un comienzo — dije sonriendo

— Papi... —

— Dime —

— No me dejes nunca —

Siwon había muerto, luego de ahorcarme se tiró un disparo en frente de Yerin, lo sé porque ella se lo contó a Jimin, me rompió el alma cuando Jimin me lo contó, ella no debía de estar ahí.

— No mi cielo, a ninguno de ustedes —

(Un mes después)

— ¿Vas a despertar pronto? — pregunté viéndolo sereno — Jungkook, vamos, ya levántate, los niños te extrañan — dije agarrando su mano — po-por favor despierta ya, debemos de irnos a nuestra casa — dije tocando su mejilla — ¡Despierta ya! — golpeé su pecho — ¡Déjate de juegos y levántate! —

— Tae... —

— Jungkook... ¡DOCTOR! —

(Dos meses después)

— ¡Padre mira! — exclamó Yerin agarrando con algo de temor la mano a Jungkook para mostrarle su dibujo

— Está lindo —

Jungkook había despertado, ahora estaba recuperándose, no podía hacer mucha fuerza por las puntadas. Nos habíamos ido de casa de Jimin para irnos al pequeño departamento que escogimos, vendí muchas cosas, como mi ropa y perfumes, compré cosas para la casa y comida.

Las noticias sobre la muerte de Siwon acaparon todo, también me llamaron sus abogados, aún estaba casado con él, pero no pedí nada, creo que eso sería demasiado, también saqué del testamento a mis hijos, Jungkook también lo hizo, la hermana de Siwon ahora es la que tiene toda la empresa.

— Taehyung... —

— De-descansa, yo puedo solo — dije cargando con dificultad uno de los pequeños muebles que conseguí en un mercado, estaban de oferta por ser de segunda

— Apa milla — le dijo Yeonjun también mostrándole su dibujo

— Está lindo, mi amor — dijo sonriendo

No todo esto era gracias a lo que vendía, también había empezado a trabajar, una vecina me pagaba por pelar almendras, maní y castañas, mis uñas y dedos dolían pero no importaba.

— Vamos a descansar — dijo Jungkook sentándose con cuidado a mi lado

— Ya voy a terminar, espera —

— Son las tres y media... —

— Y mañana me pagarán si termino los ocho kilos ahora, me falta menos de medio kilo, espera — dije sonriendo

— Taehyung... no hemos hablado de esa vez —

— Olvidemos ese día, el doctor dijo que no era bueno para Yerin recordarlo, aún sigue con la medicación pero eso no evita que tenga ataques —

— Yerin está durmiendo con Yeonjun, no está aquí y necesito hablar de esa vez —

— Jungkook... —

— Tuve miedo — dijo agarrando mi mano — no por mi herida, si no por tí, ver como puso sus manos en tu cuello... Taehyung tenía miedo de que también termines como yo, nuestros hijos están muy pequeños, yo sufrí mucho al no tener a mi mamá conmigo y sé que para ellos hubiera sido peor, además Yerin pasó por un muy mal momento, no los protegí —

— Lo importante es que ya pasó — dije sonriendo

— Te amo — dijo besando mi mano — pronto me voy a recuperar y empezaré a trabajar para darles muchas cosas —

— Solo quédate con nosotros — dije poniendo mis manos en sus mejillas — te amo, tanto que no importa si tengo que trabajar mucho — dije riéndome — suena raro, nunca pensé que diría eso —

— Te amo, por eso... cásate conmigo — dijo poniendo un anillo en mi mano