Estuve en silencio todo el camino, Siwon no paraba de maldecir, no me quedaba más que mirar todo por la ventana. Al llegar a casa todo fue igual, Siwon se fue a ver televisión y yo me fui al baño, me encerré para poder sacar mi celular.

— Jungkook... — dije viendo un mensaje de él

>> ¿Cómo estás? << escribió

>> No debiste decir esas cosas <<

  >> No dije nada malo <<

— Pero... — dije pensando en todo esto

>> ¿Dónde estás? << pregunté

>> Estoy yendo a un hotel <<

>> ¿Cuándo vas a volver? <<

Esperé la respuesta pero nunca respondió, tuve que salir del baño, me cambié y me fui a dormir, me dormí esperando su respuesta, una que no llegó.

(Dos semanas después)

Jungkook no volvía, Siwon parecía ya no estar molesto, volvió al trabajo, pero antes me dió un libro, dijo que podía gustarme.

— No me gusta — dije tirándolo a un lado de la cama, hablaba de cosas que no entendía

Estaba aburrido, no había querido hablar con Jimin, la última vez dijo algo raro que no entendí.

" No hagas tonterías, y si ya lo hiciste acábalo " me dijo antes de irse

No sabía a qué se refería, quise preguntar pero temía que me salga con nuevos sermones, que me hable de la biblia y todo eso, no quería su drama.

Estaba con un vestido de color rojo, era corto, me gustaba mucho. Siempre me a gustado la ropa sexy, me gusta resaltar mi figura, además de que me parecen muy lindos, no sé. Estaba descalzo, tenía calor, intenté entrar a la piscina, pero al final solo me quedé sentado en la orilla, de nuevo fui a mi cuarto y nada, me quedé sin hacer nada.

— Mierda... — dije poniéndome de pie para correr a buscar mis pastillas para el celo cuando sentí mi lubricante bajar — no hay nada... — dije renegando cuando vi mi estuche de pastillas sin nada

— Taehyung... — escuché la voz de Jungkook afuera

Volteé, olvidándome de todo, saliendo a verlo de forma desesperada, cuando lo vi en el pasillo me lancé encima de él, sintiendo como me agarró de los muslos con fuerza mientras yo lo agarraba de las mejillas para unir nuestras bocas.

— Te extrañé — dije separando nuestras bocas

— Yo también — dijo sonriendo

— ¿En dónde estabas? — pregunté mientras él me llevaba a su cuarto

— Casa de Nam, también en cabinas — dijo tirándose a la cama conmigo debajo suyo

— Me sentía solo — dije triste

— ¿Me estabas esperando? — preguntó dejando besos en mi cuello

— Mucho... Siwon se fue hace una semana a Tokio, dijo que tardaría mucho, que luego debía de viajar a Estados Unidos —

— ¿Entonces me dices que me extrañáste por que él se fue? — preguntó alejándose de mí

— No, digo que no estuviste aquí y me sentí solo por las noches — dije sentándome en la cama para quitarme el vestido — mi-mi celo —

— Sí... pude sentir como iba aumentando tu olor — dijo agarrándome de la nuca para unir nuestros labios de nuevo

Caí de nuevo sobre la cama, sintiendo como mi cuerpo empezaba a calentarse más, más, mucho más con cada segundo, sintiendo como todo mi cuerpo se ponía sensible y como mi lubricante salía por mi ano de manera exagerada.

— Mi interior... — dije abrazándolo — pide por tí, por favor no me hagas sufrir más —

— No te haré sufrir más  — dijo separándose de mí para quitarse el traje con el que estuvo esa noche

Yo solo lo miré, miré como de inmediato liberó su enorme pene. Abrí mis piernas, diciendo con solo esa acción que ya estaba listo para él.

— ¡Ahg! — gemí cerrando mis ojos al sentir como entraba

Suave, las estocadas eran suaves, Jungkook me besaba y yo lo abrazaba mientras me embestía con suavidad.

— Te extrañé — dije pasando mis manos por su espalda desnuda

— Yo también —

— Pensé que no volverías... y no respondías —

— Lo lamento, se me apagó el celular y Namjoon no me quiso prestar el suyo —

— Ahg, humm, muy bueno — gemí sintiendo como mi cuerpo seguía calentándose más

— ¿Recién te vino hoy? — preguntó abriendo más mis piernas sin dejar de moverse

— Sí-í... —

— Esperemos que mi padre no vuelva pronto, ¡Ah! —

— ¡Ahg!, ¡Nhg! —

— ¡Humm!, ¡Humm! —

Estuvimos todo lo que quedó del día así, no me corrí, tampoco él, ambos nos deteníamos antes de eso, no queríamos que acabe, no hasta estar satisfechos.

— ¡Humm! — gruñó sintiendo como mis paredes lo apretaban cuando me corrí

— ¡Ahg! —

— Deberíamos dormir — dijo besándome

Ambos, frente a frente dormimos, sintiendo como el semen de Jungkook salía. A la mañana siguiente lo hicimos de nuevo, en la cama, en cucharita, sintiendo como la cama se movía con fuerza, no podía parar de mover mis caderas, quería más.

— ¡Humm! — gruñó corriéndose pero yo no paré de moverme

— ¡A-AHG! — gemí alzando una pierna mientras me movía con fuerza

Mi cabello estaba húmedo, todo mi cuerpo estaba mojado al igual que él. Nos despertamos a las seis de la mañana para hacerlo, al menos yo sí, ya eran las diez de la mañana y ninguno se levantaba para hacer otra cosa.

— ¡AHG!, ¡HUMM! — gemía sin parar — ¡UHG! — gemí cuando logré correrme

— Deberíamos comer — dijo abrazándome

— O podemos seguir — dije empezando a moverme de nuevo

— Tengo hambre — dijo riéndose

— Cuando tú estabas en celo no me despegué de ti, literal —

— Taehyung... vamos a comer — insistió

A regañadientes me separé de él, me puse solo un polo suyo y él un short, bajamos en silencio pero no podía aguantar mucho, sentía como mi interior se retorcía.

— ¡AHG! — gemí sosteniéndome con fuerza de la mesa mientras Jungkook me embestía

— Es-es... ¡Humm! — gruñó sin dejar de moverse

— ¡AHG! —

Lo más profundo de mí se sentía increíble, Jungkook sabía donde darme, sabía como llevarme lejos.

— ¡MÁS!, ¡MÁS! — gemí cuando salió de repente — Jungkook... —

— Ven — dijo agarrándome del brazo

Me alzó y sentó en la mesa de la cocina, yo abrí mis piernas y de inmediato entró.

— ¡FUCK! — llevé mis manos a mi cabeza mientras sentía como entraba y salía — ¡HUMM! —

— Mírate no más, eres todo un desastre —

— ¡OH!, ¡TU-TU PENE!, ¡AHG! — lo abracé, escuchando como nuestras pieles chocaban con fuerza — mi-mi ano, te ama — gemí mientras pasaba mi lengua por su mejilla — tocas to-todo tan bien, solo tú, tú-tú... ¡NHG! —

— Sí, solo yo te llevo al cielo, así como tú a mí — dijo agarrando mi mentón — eres malditamente perfecto, tu interior me traga tan ricamente, mi pene se desliza por tu interior, tocando todas tus paredes y bañándolas de mi semen una y otra vez —

— ¡AHH!, ¡AHH!, ¡YES!, ¡MIERDA! — gemí corriéndome mientras él se movía con fuerza — ¡JUNGKOOK! — grité sintiendo como mientras su semen salía él no dejaba de moverse y chupar mi pezón con fuerza — es-es demasiado — gemí sintiendo como ya no podía más, me tumbé sobre la mesa, sintiendo como no dejaba de moverse — humm —

— Listo... — dijo saliendo de mí — comamos —

(Tres días después)

Lo hicimos por toda la casa, en la ducha, los cuartos, la piscina, cocina, comedor, y aún así no parábamos.

— ¡Oh sí! — gemí moviéndome mientras estábamos en un cuarto vacío, no sé cuantos cuartos tenía esta casa — ¡Ju-jungkook muévete más! —

El cuarto no tenía nada más que una vieja mesa, y era ahí en donde lo estábamos haciendo.

— ¡Humm! —

— Cre-creo que... ¡Ahg! — gemí viniendo como salía y entraba en mi lentamente — ¡Sí!, ¡Mierda sí! — gemí sintiendo como se corría

Lo abracé y nos besamos, era lo que siempre hacíamos cuando terminábamos, besarnos hasta dejar de sentir como nuestras bocas.

— Te amo — dijo saliendo de mí

— Sí, también te amo — dije abrazándolo

— Te llevaré a la cama —

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Últimamente todo era sexo, no me quejaba, para nada, me gustaba sentir a Taehyung, pero siento que puede ser demasiado para él, no lo sé, hace poco fue mi celo y como dijo, estuvo cada día junto a mí, eso es agotador, no quiero que se ponga débil.

— Además de estar más delgado... — dije viendo el plato de comida que le serví

Taehyung no comía mucho, comía de desayuno un vaso de jugo, de almuerzo ensalada y de cena nada, absolutamente, creo que exagera algo con su físico.

— Taehyung, toma — dije sentándome a su lado con el plato

— Quiero comer abajo — dijo poniéndose de pie, se había puesto uno de mis pantalones, le queda algo grande

— Pero... —

— Vamos abajo — dijo pasando por mi lado

Estaba con otro tipo de ropa, también estaba despeinado, mucho, además de eso sin maquillaje o perfume, me gustaba el Taehyung natural, ya hasta podía ver sus raíces negras.

— Humm —

— ¿Taehyung? —

— Está rico — dijo comiendo de la olla

— Sí que tienes hambre... — dije sonriendo para abrazarlo

Comimos con tranquilidad, Taehyung tomó una pastilla para el celo que encontró en la cocina y ambos nos fuimos al cuarto, nos abrazamos y dormimos, Taehyung fue quien primero cayó dormido, yo solo lo miré, viendo sus lunares, viendo lo hermoso que era, no hablo del Taehyung que siempre viste de manera provocativa, hablo del Taehyung que es natural, así, sin nada que arreglarse, así.

— Te amo... — dije a pegándolo a mi pecho, escuchando sus ronquidos — divorciarte... — dije cerrando mis ojos — divorciate para que ambos podamos estar juntos, no solo en estas cuatro paredes —