- II -

Lyla

La naturaleza me da tanta paz.

Estoy observando el cielo nocturno, las estrellas brillando allá arriba, acompañando a una luna creciente. El viento mueve mi cabello a un lado en ondas suaves, y lo siento contra mi piel, disfrutando cada sensación mientras camino por un campo arenoso sin rastros de árboles o pasto.

Estás olvidando algo importante, Lyla.

Sacudo mi cabeza, alejando esos pensamientos. Mi mente se ha sentido tan nublada, tan confusa en los últimos días. Se calma cuando estoy cerca de Morgan, quien aún sigue inconsciente en esa burbuja de agua, aún en la cueva oculta en medio de unas dunas de la cual salí para tomar aire fresco. He recordado a los miembros de mi clan: Ian, Luke, Drake, Aidan, ¿Dónde están? Por alguna razón, no puedo recordar la última vez que los vi.

Me detengo frente a un muro de arena que llega a mis rodillas, sin importar cuanto o de donde caminé siempre termino aquí, en este mismo punto en la arena como si algo me llamara, me atrajera, ¿Qué hay aquí? La brisa nocturna arrastra la arena un poco, enviándola en el aire a un lado.

Mis ojos se abren en sorpresa cuando un dedo sobresale de la arena.

¿Qué? ¿Un cadáver?

Me acerco al muro de arena, y comienzo a escarbar, lanzando arena a cada lado, descubriendo la mano dueña de ese dedo, luego el brazo y finalmente el cuerpo cubierto por ropas negras: Es un chico. Su pálido rostro esta cubierto de rastros de arena, su cabello negro alrededor del mismo, está inconsciente pero no está muerto, puedo sentir su energía ligeramente. Aunque no se quien es, su parecido con Morgan es increíble.

¿Quién eres tú?

¿Por qué siento que te he visto antes?

¿Por qué estás aquí bajo la arena inconsciente?

Sacudo las preguntas de mi cabeza, no es el momento para eso. Intento usar mi energía para darle un poco al poner mis manos sobre su pecho pero no funciona. Trato de despertarlo, sacudirlo, incluso abofeteo su rostro dos veces pero nada lo despierta. Su estado me recuerda al estado de Morgan, ¿También está atrapado en ese sueño profundo? ¿Por qué?

Cada vez que me esfuerzo en entender esto, en recordar algo más, me duele la cabeza. Me pongo de pie, observándolo, escarbando en mi cabeza por ideas. No se que más hacer, pero en ese momento el chico hace una mueca de dolor y tose sangre, y siento un cambio de energía proveniente de la cueva donde permanece Morgan, es como si estuvieran conectados.

¿Qué está pasando? 

De nuevo, intento despertarlo pero nada funciona, solo hace muecas de dolor y tose sangre. Algo lo está debilitando y lo mismo parece estar pasando con Morgan así que me quito la chaqueta y cubro al chico con la promesa de que volveré después de ayudar a Morgan.

Corro a la cueva tan rápido como puedo, y me adentro en el oscuro túnel que me lleva a Morgan. Al llegar, noto que Morgan está temblando, y tose sangre, aún con los ojos cerrados. Puedo sentir como su energía está siendo drenada, ojeo mis alrededores pero no hay nadie, ¿Quién o qué la está debilitando de esta forma? Morgan tose de nuevo, líneas de sangre flotando en el agua a su alrededor.

¿Qué hago?

Cada vez que he intentado meter mi mano en la burbuja me ha repelido, quemado e incluso inmovilizado por horas.

—¡Morgan!— le llamo aunque se que es inútil, —¡Morgan!

Solo puedo observar con horror como sangre también comienza a brotar de su nariz y la raíz de un mechón de su cabello comienza a volverse blanca y sigue bajando hasta que el mechón es blanco por completo y resalta entre el negro de su cabello flotando a su alrededor.

Más sangre, menos energía. Si esto sigue así, no estoy segura de que ella pueda despertar de nuevo. Su cuerpo comienza a verse ligeramente trasnparente como si fuera a desaparecer. Esto no puede ser bueno. 

¿Qué puedo hacer?

Piensa, Lyla, Piensa.

Morgan está extremadamente débil, y la fuerza de su escudo, de esa burbuja a su alrededor depende de ella y lo que sea que es que le esta quitando la energía no es el escudo, es algo más. Por consiguiente, el escudo está en su punto más débil. Incluso si no puedo atravesarlo, puedo...

Modificarlo.

Me cuesta mucho cerrar los ojos ante la vista frente a mi porque se que Morgan está sufriendo y no tengo ni idea de si mi plan funcione a tiempo pero es todo lo que puedo hacer. Me concentro por completo, acumulando mi energía en ambas manos. No controlo ningún elemento pero puedo controlar energía natural para sanar, para modificar elementos.

Nunca busqué unirme a un clan porque me creía débil en comparación a los otros vampiros convertidos que controlaban un elemento. Yo solo era la sanadora con ningún aporte o valor en la batalla o eso pensaba hasta que me encontré con el clan de Almas Silenciosas.

Yo estaba huyendo de unos cazadores de convertidos, vampiros traicioneros que cazaban los de su misma especie para ofrecerlos a Purasangres a cambio de dinero, poder o promesas falsas de protección. Aidan me salvó, me ofreció quedarme en su clan mientras sanaban mis heridas. Cuando llegó el día de irme, ellos estaban entrenando en las afueras del escondite: Ian, Drake, y Luke. Morgan aún no era parte del clan. Me les quedé viendo y se veían tan felices, atacándose y bromeando el uno entre el otro. Aidan apareció a mi lado.

—¿Por qué no te quedas con nosotros?

—Yo...— observé la pelea de puños entre Ian y Luke. Drake se les unió catalogándolos de infantiles, —no domino ningún elemento, solo puedo sanar, sería una carga.

—Ninguno de ellos domina un elemento aún, ¿los ves preocupados? ¿Angustiados? ¿qué te hace pensar que de eso es lo que se trata un clan?

—Pero dominarán un elemento en el futuro, en cambio, yo...— no terminé mi oración.

—Yo diría que tu dominas el quinto elemento, el más importante.— me asegura, —el único con el poder suficiente para cruzar la línea entre la vida y la muerte, y traer aquellos cercanos a la muerte de vuelta a la vida, ¿por qué subestimas una habilidad que casi alcanza la divinidad?

Giré mi rostro para mirarlo, sorprendida por sus palabras. Aidan mantuvo sus ojos sobre los miembros del clan en todo momento. Él suspiró.

—¿Te sientes débil? Entrena, investiga, descubre que más puedes hacer con tu habilidad, practica, no te aísles y pases tu vida ahogándote en lastima por ti misma. Incluso si no te quedas con nosotros, haz algo, Lyla.— él me miró, el azul de sus ojos brillando con honestidad.

Ese día me hice parte del clan, entrené con los demás, descubrí muchas cosas sobre mi misma, sobre mis habilidades y me di cuenta del verdadero significado de ser parte de un clan, no tenía nada que ver con poder, si no con la capacidad de complementarnos, de ser ese hogar al final del día, de saber que ellos siempre estarán ahí para mi y que harían lo que fuera necesario el uno por el otro.

Como yo estoy a punto de hacerlo por Morgan en este momento.

Con la energía suficiente, pongo mis manos contra la burbuja, me quema y arde, haciéndome gritar el dolor pero no me detengo.

No soy débil.

Grito en agonía, mi energía extendiéndose por toda la burbuja, congelando el agua a su paso hasta que toda queda completamente congelada, incluyendo a la desvaneciente Morgan. Ya no me quema, ni me arde pero se que no se mantendrá congelada por mucho tiempo. Mi modificación de elementos no suele ser duradera.

Este es mi oportunidad.

Me subo encima de la congelada burbuja y comienzo a golpearla con todo lo que tengo.

—¡Ah!— grito para motivarme, el hielo rompiendo mis nudillos con cada golpe, el dolor es increíble pero no pararé por ninguna razón.

Porque un clan no se trata de poder, se trata de estar dispuestos a darlo todo el uno por el otro.

Eso es mucho más valioso que cualquier elemento.

La primera capa de hielo se quiebra bajo mis puños ensangrentados, puedo ver la figura congelada de Morgan, solo un poco más, resiste, Morgan. Acelero mis golpes, uno tras otro, el hielo crujiendo debajo de mi, manchado de sangre.

—Eres mi modelo a seguir,— me había dicho Morgan unas semanas después de unirse a nuestro clan mientras estábamos acostadas en el pasto a un lado de uno de nuestros escondites, observando las estrellas.

—¿Yo?— bufé, girando mi cara para verla. Ella hizo lo mismo y me sonrío.

—Crecí con una madre de carácter dócil y sumiso, aunque no recuerdo mucho de ella, ella no era fuerte, pensé que esa era la norma hasta que llegué al clan y te vi. Eres fuerte, independiente y entrenas con los chicos, incluso derrotándolos de vez en cuando. Y pensé: Quiero ser como ella.

No sabía que decir y ella habló de nuevo.

—Así que te prometo que nunca seré la damisela en apuros, patearé traseros y seré fuerte como tu, así somos las mujeres de este clan.— se puso la mano en el pecho.

—¡Vamos, Morgan!— le grito, —¡Resiste!— continuo golpeando con tanta fuerza que los músculos de mis brazos crujen en dolor, y lagrimas escapan de mis ojos. Sé que no me queda mucho tiempo hasta que el hielo vuelva a su forma en agua, esa barrera elemental que no podré cruzar. Necesito quebrarlo ahora.

Concentro mi energía en mis manos y las entrelazo encima de mi cabeza para bajarlas con toda mi fuerza. El impacto del golpe abre un grieta inmensa en el hielo que lo hace colapsar, rompiéndolo en miles de pedazos. Morgan y yo caemos juntas sobre los pedazos de hielo y uno puntiagudo se clava en mi brazo al aterrizar al lado de Morgan, mi espalda contra el suelo.

Morgan abre sus ojos y tose desesperadamente, y puedo respirar de nuevo.

Lo logré.

Mierda pero como duele.

Morgan respira agitadamente y gira su cara hacia mi, probablemente no luzca como el eje de la fortaleza ahora pero su sonrisa me dice que eso es lo de menos. Su mano busca la mía y la aprieta.

—Gracias.

Le devuelvo la sonrisa.

—Ni lo digas,— levanto su mano con la mía y la pongo sobre mi pecho como ella lo hizo aquella noche, —así somos las mujeres de este clan.

------------

Nota de la autora: ¡Aww, Lyla! Girl power! ¡La despertó antes de que fuera transportada a los Duermientes! Bien, Lyla, demuestrales que Morgan no está sola, y que eso es mucho más valioso de lo que los seguidores de Shadow piensan. Ay, ya me emociné. Particularmente, me gustó este capítulo, se me apretujo el corazón al final así que chicas pongan su mano en su pecho y no se rindan porque así somos las mujeres de este clan. 

Post data: ¡Pobre Milosh tragando tierra! xD 

Muakatela,