Al día siguiente, Lincoln se levantó con una mezcla de anticipación y curiosidad. Fusui, miembro del temido clan Kure, había expresado su deseo de probar su fuerza. Lincoln sabía que no sería un combate ordinario, especialmente después de lo que Fusui le había contado sobre su clan. Pero lo que realmente le intrigaba era la habilidad especial que Fusui mencionó: la *Liberación*.

Después de prepararse y dirigirse al amplio patio trasero de la casa, Lincoln encontró a Fusui esperando, ya en posición de combate. Esta vez, su expresión era más seria, como si el combate que estaban a punto de tener fuera mucho más significativo.

Fusui: "Hoy no me contendré, Lincoln. Quiero que veas de lo que soy capaz. Usaré una técnica especial de mi clan llamada Liberación. No será fácil para ti."

Lincoln asintió, aceptando el desafío.

Lincoln: "Estoy listo, Fusui. Démosle."

Fusui cerró los ojos por un momento, concentrándose. Cuando los abrió de nuevo, Lincoln pudo notar un cambio inmediato en su presencia. La energía que emanaba de ella era intensa. De repente, su piel comenzó a oscurecerse hasta adquirir un tono morado. Sus músculos crecieron, volviéndose más prominentes y definidos. La transformación fue rápida y espectacular, mostrando claramente el poder que la *Liberación* otorgaba a Fusui.

Fusui: "Esta es mi *Liberación*, Lincoln. Ahora, vamos a ver cómo te enfrentas a esto."

Sin dar tiempo para reaccionar, Fusui se lanzó hacia adelante con una velocidad abrumadora. Lincoln apenas tuvo tiempo de levantar los brazos para bloquear el primer golpe, que fue mucho más fuerte de lo que había anticipado. El impacto lo empujó hacia atrás, pero logró mantener el equilibrio.

Lincoln: (sorprendido) "¡Eso fue increíble!"

Fusui continuó atacando con una velocidad y fuerza que superaban cualquier cosa que Lincoln hubiera enfrentado antes. Cada golpe era como un relámpago, y Lincoln se encontró forzado a usar toda su habilidad para evitar ser derrotado.

A pesar de la abrumadora fuerza de Fusui, Lincoln no se dejó intimidar. Recordando su entrenamiento, comenzó a adaptarse a la velocidad y los patrones de ataque de Fusui. Usó su fuerza para contrarrestar los golpes más pesados y su agilidad para esquivar los más rápidos. Aunque la *Liberación* hacía que Fusui fuera increíblemente poderosa, Lincoln estaba decidido a no rendirse.

El combate se volvió más intenso a medida que avanzaban. Lincoln, aunque impresionado por la habilidad de Fusui, comenzó a encontrar pequeños momentos en los que podía contraatacar. En un movimiento rápido, logró atrapar el brazo de Fusui y lanzar un contraataque que la obligó a retroceder.

Fusui: (respirando con fuerza) "Nada mal, Lincoln. Puedo ver por qué mi primo Wakasuki te eligió como su alumno."

Lincoln, igualmente cansado pero lleno de determinación, sonrió.

Lincoln: "Tú también eres impresionante, Fusui. Pero no voy a dejar que me derrotes tan fácilmente."

Ambos sabían que el combate estaba llegando a su punto culminante. Fusui, aprovechando al máximo la *Liberación*, lanzó un último ataque, poniendo todo su poder y velocidad en él. Lincoln, por su parte, utilizó todo lo que había aprendido, canalizando su fuerza y técnica para enfrentar el golpe.

El choque fue espectacular. El sonido del impacto resonó en todo el patio, y ambos combatientes quedaron inmóviles por un momento, evaluando el resultado.

Finalmente, Fusui retrocedió un paso y, con una sonrisa de respeto, relajó su postura. Su piel volvió a su tono normal, y su cuerpo recuperó su tamaño habitual.

Fusui: "Eres fuerte, Lincoln. Muy fuerte. Mi *Liberación* no fue suficiente para superarte. Eso dice mucho de ti."

Lincoln, aunque agotado, también sonrió.

Lincoln: "Tú también eres increíble, Fusui. Fue un honor pelear contigo."

Fusui: "Este es solo el comienzo, Lincoln. Hay mucho más por aprender y experimentar. Estoy segura de que nuestras fuerzas se complementarán en el futuro."

Lincoln: "Estoy de acuerdo. Aprendí mucho hoy. Gracias, Fusui."

Con el paso de los días, Fusui y Lincoln pasaron más tiempo juntos durante sus entrenamientos. Aunque Fusui mantenía en secreto las técnicas del clan Kure, ella se enfocaba en ayudar a Lincoln a mejorar su fuerza, velocidad y control, mientras intentaba conocer más sobre él y su vida. Lincoln, por su parte, empezaba a apreciar el enfoque y la determinación de Fusui, encontrando en ella no solo una mentora, sino también una nueva amiga.

Conforme pasaban los días, el entrenamiento entre Fusui y Lincoln se volvía más intenso y significativo. Fusui, con su mirada siempre concentrada y sus movimientos precisos, guiaba a Lincoln en una serie de ejercicios diseñados para perfeccionar sus habilidades físicas y su control sobre su inmensa fuerza. A pesar de las estrictas normas de su clan, que le prohibían compartir las técnicas del Kure, Fusui encontró maneras de desafiar a Lincoln sin romper esas reglas.

Fusui aprovechaba su conocimiento en combate para enseñarle a Lincoln cómo canalizar su poder de manera eficiente, enfocándose en la técnica, la postura, y el control mental. Aunque evitaba revelar los secretos del clan Kure, utilizaba otros métodos para fortalecer a Lincoln, incluyendo ejercicios de resistencia y velocidad que lo empujaban al límite.

Durante los descansos entre sesiones, Fusui y Lincoln se sentaban juntos, a menudo en algún lugar tranquilo, donde la conversación se volvía más personal. Fusui le preguntaba sobre su vida antes de la llegada de Takeshi, sobre su familia y amigos en Royal Woods, y sobre cómo había lidiado con la presión de tener una fuerza tan abrumadora. Lincoln, sorprendido al principio por el interés de Fusui, empezó a abrirse más, compartiendo sus experiencias y preocupaciones.

A su vez, Fusui compartía fragmentos de su vida en el clan Kure, describiendo la estricta disciplina y las responsabilidades que conllevaba pertenecer a una familia tan poderosa. Aunque mantenía ciertos aspectos en secreto, Lincoln comenzaba a entender la intensidad y la devoción que Fusui tenía hacia su entrenamiento y su familia.

El vínculo entre ambos se fortalecía con cada sesión. Fusui, aunque reservada, comenzaba a disfrutar de la compañía de Lincoln y admiraba su tenacidad y determinación para mejorar. Por su parte, Lincoln sentía que Fusui no solo lo estaba ayudando a ser más fuerte físicamente, sino también a encontrar un equilibrio interno, algo que siempre había buscado.

Cada día que pasaba, la relación entre ellos se volvía más cercana, basada en el respeto mutuo y un deseo compartido de alcanzar nuevas alturas en sus habilidades. Aunque Fusui seguía siendo estricta en su rol de mentora, no podía evitar sentirse intrigada por la naturaleza única de Lincoln, lo que la motivaba a seguir explorando más sobre él, tanto en el campo de entrenamiento como fuera de él.

En un día que parecía ser como cualquier otro en su rutina de entrenamiento, Lincoln se preparaba para otra sesión con Fusui. El clima era fresco, el aire lleno del sonido de las hojas moviéndose con el viento, y todo parecía tranquilo. Fusui estaba ajustando los ejercicios para el día, cuando de repente, una sensación de tensión invadió el ambiente.

Desde la distancia, tres figuras se acercaban lentamente hacia el área de entrenamiento. El líder, Alcón, era un hombre de complexión robusta y mirada penetrante. A su lado, dos secuaces igualmente intimidantes, pero claramente subordinados a él, lo flanqueaban. Alcón era conocido por su destreza y su frialdad en combate, un mercenario que había sido contratado por Henry, el padre de Chandler, para dejarle en claro a Lincoln cuál era su "lugar".

Lincoln, al percatarse de su llegada, frunció el ceño, sintiendo que algo no estaba bien. Fusui, al igual que él, adoptó una postura defensiva, preparada para cualquier eventualidad.

Alcón: (con una sonrisa despectiva) "Así que tú eres Lincoln Loud, ¿eh? He oído hablar de ti. Un chico que se cree invencible, ¿verdad? Bueno, he venido a mostrarte que siempre hay alguien más fuerte, alguien dispuesto a ponerte en tu lugar."

Lincoln no dijo nada, pero sus ojos se endurecieron al observar a los tres hombres que lo rodeaban. Sentía la tensión en el aire, pero también la presencia tranquilizadora de Fusui a su lado.

Fusui: (con una voz calmada pero firme) "Si crees que puedes intimidar a Lincoln, estás muy equivocado. No permitiré que lastimen a mi alumno."

Alcón soltó una carcajada y dio un paso adelante, señalando a sus secuaces que se prepararan.

Alcón: "Esto no es personal, chica. Solo un trabajo bien pagado. Pero si te interpones, no tendré problemas en incluirte en la lección."

Lincoln intercambió una rápida mirada con Fusui. Sabía que estaban en desventaja numérica, pero la confianza en sí mismo y en su entrenamiento le daba la seguridad de que podían manejar la situación. Sin embargo, Alcón y sus hombres eran claramente peligrosos.

Lincoln: (con una voz tranquila) "No sé quién te envió, ni me importa. Pero no voy a dejar que me intimiden o lastimen a Fusui."

Alcón se abalanzó hacia Lincoln, lanzando un golpe dirigido a su cabeza. Lincoln, con reflejos rápidos, lo esquivó, y respondió con un puñetazo directo al estómago de Alcón, pero este apenas retrocedió, sonriendo con satisfacción.

Alcón: "Tienes fuerza, lo admito. Pero te falta la experiencia para usarla contra alguien como yo."

Los secuaces de Alcón también se lanzaron al ataque, intentando rodear a Lincoln, pero Fusui intervino, bloqueando sus movimientos con una velocidad impresionante. Usando su técnica, neutralizó a uno de los secuaces con un golpe preciso, mientras Lincoln luchaba contra el otro.

La pelea se intensificó rápidamente, con Alcón dominando el combate gracias a su experiencia y habilidades de mercenario. Lincoln, aunque bien entrenado, estaba comenzando a sentir la presión, especialmente al ver a Fusui lidiando con dos oponentes al mismo tiempo.

Fusui: (con un tono urgente) "¡Lincoln, mantén la calma! No te dejes llevar por la ira, usa lo que te he enseñado."

Lincoln asintió, concentrándose en las palabras de Fusui. Sabía que si perdía el control, estarían en serios problemas. Tomando una profunda respiración, esquivó otro golpe de Alcón y, utilizando una combinación de técnicas que había aprendido, logró conectar una serie de golpes que finalmente hicieron retroceder al mercenario.

Sin embargo, Alcón no se rindió. Se levantó, limpiando la sangre de su labio, y sonrió.

Alcón: "No está mal, chico. Pero aún no has visto nada."

Fusui, habiendo neutralizado a los secuaces, se colocó junto a Lincoln, lista para cualquier cosa que Alcón pudiera intentar. Ambos estaban exhaustos, pero determinados a no dejar que este enfrentamiento los derrotara.

El enfrentamiento parecía haber llegado a un punto muerto cuando, de repente, Alcón levantó la mano, deteniendo la pelea.

Alcón: "Muy bien, Lincoln. Te lo concedo, tienes agallas. Pero no olvides esto: siempre hay alguien que estará dispuesto a desafiarte, y algún día, puede que no tengas tanta suerte."

Con eso, Alcón y sus secuaces se retiraron, dejando a Lincoln y Fusui en pie, pero conscientes de que este no sería el último desafío que enfrentarían.

Lincoln: (respirando con dificultad) "Gracias, Fusui. No sé qué habría hecho sin ti."

Fusui: (con una leve sonrisa) "Eres fuerte, Lincoln, pero debes seguir entrenando y aprendiendo. Este fue solo un recordatorio de que nunca debes subestimar a tus oponentes."

A medida que se reponían del enfrentamiento, ambos sabían que el camino que tenían por delante no sería fácil, pero estaban más decididos que nunca a seguir adelante, juntos, enfrentando cualquier obstáculo que se les presentara.

Fin del capítulo

(Perdón si no ahí imágenes no encontré de fusui con la técnica liberación)