Ya era de noche y en la residencia Hyodo todo estaba muy movido ya que todos estaba presentes de la cena que Issei estaba preparando no solo para los residentes si también para unos invitados que este especialmente invito de frente.

Todas las chicas presentes se arreglaron para la ocasión ya que Issei les dijo que a pesar de que era una cena informal era muy importante ya que este iba a hacer el primer evento en que los líderes de las tres fracciones se reunían fuera de sus respectivos puestos de líder.

Incluso el mismo Issei estaba vestido para la ocasión nada demasiado formal, pero clara mente se veía elegante, igual mente sus esposas que cada una se arregló, como esposas del ser más poderos del mundo ya sea en su presente o esté presente ellas no iban a dejarlo en vergüenza, algo que a Issei no le importa ya que él las ama tal y como son.

Issei utilizo su habilidad de dividirse, de esa manera se dividió en cinco seres, antes de iniciar la guerra contra Indra el solamente se podía dividir en una vez, tal vez dos con esfuerzo, ahora con el tiempo puede hacerlo cinco veces.

La habilidad si bien no era buena en batalla ya que esta dividida el poder de uno, Issei lo usaba algunas veces para estar con sus esposas o hijos ya que todos estaban conectados y pensaban igual en tiempo real.

(Nota: Con esa pequeña explicación hago entender que este no es un clon, como los que hace naruto)

Había un Issei esperando a los invitados en la sala, mientras que los otros cuatro estaba en la cocina preparando todo, y gracias a que sus mentes estaban unidas, el Issei de la sala sabía que no faltaba mucho para finalizar todo.

En ese momento las esposas del castaño bajaron listas para la ocasión, las cinco chicas luciendo sumamente hermosa, cada una estresaba y mostraba una belleza diferente y única.

Issei no pudo evitar quedar cautivado por lo hermosas que se veian todas ellas, en ese momento recordo a sus demas esposas y no pudo evitar extrañarlas ya que ya llevaba dias desde la ultima vez que las vio.

-Se ven hermosas –Dijo Issei con una sonrisa y una mirada llena de amor, haciendo sonrojando a las cinco chicas que apartaron la mirada, pero aun así tenia una sonrisa en sus bellos rostros.

En ese momento una luz ilumino el lugar dejando ver a Miguel y Gabriel, ambos vestidos diferente ya que ninguno lelevaba sus vestimentas de siempre, y por increible que paresca Miguel lucia realmente atractivo para cualquier mujer que lo viera, su figura delgada y faciones delicadas, podia hacer que un gran numero de mueres mueran por el.

Mientras que Gabriel lucia preciosa para no decir otra palabra, su bien dotado cuerpo y sus faciones delicadas la hacian merecedora su titutlo como la mujer más hermosa del cielo, ella perfecta mente podia enamorar a cualquier hombre sin nisiquiera intentarlo.

-Es bueno verlos aquí –Dijo Issei acercandose a los dos estendiendole la mano a miguel que este recibio, despues repitio la accion con Gabriel, pero solo que este le beso su mano en señal de respeto y caballerosidad.

-Como prometimos, aquí estamos Issei –Dijo Miguel de una manera tranquila.

-Me alegro de verdad que vinieran, son los primeros en llegar así que, que les parece si vamos a la sala mientras esperamos a los demas y darle tiempo que la comida este lista –Sugirio Issei de manera tranquila a lo que ambos asintieron, aunque clara mente a la joven Gabriel se le podia ver un poco nerviosa, pero nada más un poco.

En la sala Issei les ofrecio un poco de vino a ambos que aceptaron, era un vino ligero, casio sin alcohol ya que no queria aruinar el apetito de ambos.

Cuando Issei iba tomar asiento pudo sentir la presencia de otra personas que aparecian, al ir a resivibirlo era Sirzech, Serafall y Grayfia que a diferencia de antes, ella andaba destida total mente diferente a lo usual, ya no llevaba su vestimenta de sirvienta ya que Iseei la había invitado hace unas horas como la esposa de Sirzech y no como su ayudante.

Algo que le causo gracia al maou pelirrojo al ver como discutia Issei y Grayfia cuando esta se negaba y Issei insistia, al final Issei gano y se retiro para ir con su las dos serafall que loe staban esperando.

Como Issei consideraba a Grayfia una persona muy importante para él ya sea porque siempre le ayudo mucho en ese tiempo o que se había enamorado de ella en el paso de su tiempo, ella era muy importante para él por eso ella era la única chica fuera de su familia que Issei daría su vida si es necesario para ayudarla en lo que sea.

Sobre Sirzech realmente se veía muy apuesto ya que a pesar de sus años todavía se mantenía como un hombre joven su cabello carmesí lo hacían lucir realmente atractivo para que cualquier mujer no pueda evitar mirarlo.

Por parte de Grayfia, ella se podía considerar una belleza única, su rostro simple mente demostraba el significado de belleza, su hermoso cuerpo la hacía lucir solamente aún más hermosa para la vista masculina que podía hacer que cualquier hombre se posara en sus pies con una simple mirada.

Y sobre Serafall, ella no se quedaba atrás en absoluto de Grayfia, ella mostraba porque era una de las mujeres más hermosas del inframundo y tal vez la más codiciada de todo el inframundo, sus facciones eran sumamente únicas y hermosas, y la sonrisa que adornaba su rostro podía hacer que cualquier hombre hiciera lo que quisiera por ella, ella a pesar de tener una estatura baja no la hacía lucir menos sexy, ya que su hermoso cuerpo muy bien dotado, haría que las mujeres la envidiarían y los hombre la desearan, en palabras simple una bella única.

-Sean todos bienvenidos –Dijo Issei y repitió la acción que hiso antes, a Sirzech le dio la mano y ambas chicas le beso la mano.

-Gracias por invitarnos –Agradeció Sirzech amable mente, ya que en el poco tiempo que había tratado con el entendió que, si bien su relación con él en el futuro no era buena, eso no le impedía a llevarse bien como amigos y no como antes que él lo consideraba su hermano.

-Gracias por invitarnos –Dijo esta ves Grayfia de manera tranquila y sería algo que a Issei le pareció gracioso ya que parecía que seguía molesta por perder contra él.

-Gracias por la invitación Ise-chan –Dijo Serafall en su forma alegre y normal, Issei le había dicho que actuara normal, como ella misma era ya que a pesar de estar en presencia de los otros líderes, eso no tenía nada que ver con trabajo así que podía relajarse, eso a ella le alegro y no pudo lanzar a abrazar a Issei cuando se lo dijo.

-No, más bien les doy gracias por aceptar venir hoy –Les dijo Issei de manera tranquila con una sonrisa, cuando iba a guiarlos a la sala aparecieron Azazel y Penemue al lado de Sirzech.

-Yo –Dijo Azazel como su típica expresión relajada mientras la joven Penemue se tapaba la cara de vergüenza por la actitud de superar haciendo reír a Issei junto a Serafall y Penemue sabiendo que Azazel no cambio ni en el futuro.

Y ahí estaban los dos último, Azazel parecía un poco mayor que Sirzech y Miguel, sin embargo, él tenía ese encanto que las mujeres mayores siempre lo buscaban, ya sea por su apariencia o como las trata.

Sobre Penemue que se puede decir... ya que la palabra hermosa le quedaba corto, ella era una mujer que expresaba madures a pesar de que solamente tiene la apariencia de una mujer joven en sus 27 o 28 años, su forma de ser seria y tranquila solamente la hacía lucir verdadera mente bella, a diferencia de Gabriel que ella tiene un aura de tranquilidad e inocencia o de Serafall que tenía un aura de tranquilidad y traviesa, Penemue tenía un aura de tranquilidad y madures, la simple imagen de verla haría que cualquier hombre hiciera lo que sea por estar con una mujer así.

Pero solo Issei sabia la verdadera Penemue, o mejor dicho solo él la había visto ya que debajo de esa expresión seria y madura se encontraba la verdadera Penemue una chica tímida, Penemue le había revelado su forma de ser cuando se estaban conociendo mejor para casarse, ahí fue donde Issei conoció a la verdadera Penemue.-

Una chica que se avergüenza con un simple beso o que se sonroja cuan un simple cumplido sin doble sentido, algo que Issei siempre le fascino y amo de ella, tiempo después las demás se dieron cuenta, pero fuera de ese círculo nadie sabe sobre eso, ni siquiera Azazel que estuvo tanto tiempo con ella.

-Es bueno verte Azazel –Dijo Issei mientras le daba la mano.

-No me caería nada mal un poco de relajación –Dijo Azazel descarada mente sabiendo que nunca hace nada, todos lo volvimos a ver como diciéndole ¿Enserio?

-Me alegro que vinieras –Le dijo Issei a la joven Penemue y repitió la acción de besarle la mano haciendo sonrojar un poco a ella, Issei recordó que una cosa que pone a Penemue sonrojada o tímida era la caballerosidad, pero la de verdad, ya que algunos actuaban así para llevarla a la cama, algo que clara mente ella podía ver las intenciones clara mente.

En este caso ella se sonrojo ya que Issei en ningún momento tuvo esas intenciones y solamente era caballeroso por ser una mujer hermosa que se merecía respeto.

Issei guio a todos a la sala donde Miguel esperaba paciente mente, mientras hablaba con Gabriel que se había quedado para acompañarlos mientras que llegaba su marido.

-Oh Miguel –Dijo Azazel yendo a Saludar a Miguel que se levantó para ir también a saludarlo.

-Es bueno verte aquí Miguel –Dijo esta vez Sirzech de manera amistosa saludando al líder del cielo.

-Me alegro también de verlos Sirzech, Azazel –Dijo Miguel devolviendo el saludo a ambos.

Sin embargo, a diferencia de los hombres las tres chicas siendo ellas las jóvenes Serafall, Gabriel y Penemue se estaba mirando de una manera extraña, no era amenazante, sino de una manera como si quisieran decir algo a la otra, pero no sabían como decirlo o como empezar.

Todos eso era visto por todos los que estaban ahí, principalmente las otras contrapartes de ellas mismas que veían todo de manera divertida.

Grayfia veía a Issei como diciéndole que intervenga, pero una sonrisa y una mirada le hiso entender a la albina que esto tarde o temprano tenía que ocurrir, así que mejor temprano.

La albina no dijo nada más ya que ninguna de ellas expresaba intenciones negativas, si no era otra cosa, algo ella no entendía y tal vez solo Issei entendía.

-Oh vaya parece que ya llegaron todos –Todos escucharon una voz de las gradas siendo el dueño de la voz Gorou el padre de Issei que venía acompañado de Ayaka la madre de Issei ambos llevaban vestimentas para la ocasión haciéndolos lucir bien a pesar de la edad de ambos.

-Oh mamá, papá, vengan que quiero presentarlos –Dijo Issei llamando a sus padres, sin embargo, tres chicas al escuchar las palabras "Papá y Mamá" se empezaron a poner nerviosas por algún motivo, algo que ninguna de las tres entendía.

Las jóvenes Penemue, Gabriel y Serafall estaban nerviosas al ver a los padres del castaño, si bien les afecto saber que estaban casadas con el castaño, ellas pensaron que eso no decía nada, después de todos ninguna había visto al castaño antes de la reunión, y tal vez solo Serafall en la pelea contra Raiser, pero nunca cruzaron palabras, la verdad es que nunca se vieron de frente sino hasta la reunión.

Sin embargo, se pusieron nerviosas porque al frente de ellas estaban los que se suponen que iban a hacer sus suegros o mejor dicho su supuesta familia.

Ambos padres caminaron adonde estaban todos.

-Quiero presentarles a Miguel actual líder del cielo –Dijo Issei presentando a líder del cielo que inclino un poco en señal de respeto.

-Mucho gusto –Los padres del castaño se sorprendieron al ver aquel hombre era el arcángel Miguel, rápidamente le devolvieron el saludo.

-Él es Azazel ex gobernante de los ángeles caído –Presento Issei al caído que solamente les doy una sonrisa y saludo a ambos.

-Él es Sirzech Lucifer uno de los cuatro reyes demonios, aunque creo que ya lo conocieron anterior mente –Presento Issei a lo que los ambos padres asintieron.

-Perdone por no decirles antes, es que no queríamos preocuparlo –Dijo Sirzech en tono de disculpa.

-No se preocupen, Issei ya nos contó todo sobre el asunto así que no tiene que preocuparse –Dijo Gorou haciendo que el maou se tranquilizara.

Issei ahora se volvió adonde estaba las mujeres que se pusieron más nerviosas algo que a Issei le pareció extraño, parecía la primera vez que había presentado a sus esposas a sus padres, sin embargo, le extraña ese comportamiento porque ellas ni siquiera están con su yo joven.

En ese momento al mirar a sus esposas que intentaban con todas sus fuerzas no reírse entendieron que tal vez ellas si estaban pensando que eran sus suegros.

-Papá, Mamá, aquí tenemos a personas que tal vez se les haga conocidas –Dijo Issei a lo que ambos padres al verlas se sorprendieron ya que ellas estaban ocultándose en una esquina intentando que nadie las viera.

-Primero quiero presentarles a Grayfia, la esposa Sirzech –Presento Issei para que la albina les dé una sonrisa.

-Es un gusto conocerlos –Dijo ella inclinados un poco a lo que ambos padres respondieron igual manera.

-Ella tres ya las conocen, pero de la misma manear los voy a presentar –Dijo Issei poniéndose al lado de Gabriel.

-Ella es Gabriel uno de los cuatro grandes serafines –Presento Issei a lo que la joven Gabriel se puso muy nerviosa, que no pudo decir nada.

-Ella es Penemue uno de los Cabre de Grigori –Presento Issei a lo que la joven Penemue estaba dándoles una sonrisa ya que no pudo decir ninguna palabra.

-Por último, pero no menos importante, ella es Serafall Leviathan, uno de los cuatro reyes demonios como Sirzech y la hermana de Sona –Presento Issei a lo que la joven Serafall solamente pudo inclinarse un poco en señal de saludo.

Las tres esposas de Issei que estaban de tras de ellas estaban aguantándose la risa al ver a sus yo jóvenes de esa manera ya que ellas mismas estaban igual o tal vez peor.

Los padres del castaño al ver el estado claro de nerviosismo de las tres chicas entendieron perfecta mente ya que su hijo mayor les había comentado antes sobre el tema.

Gorou camino y le dio un leve abrazo a la joven Penemue que se sorprendió por esa acción.

Ayaka por otra parte abrazo a las jóvenes Serafall y Gabriel que estaban al lado de la otra, de la misma manera se sorprendieron, las esposas del castaño sabían que iba a pasar ya que eso mismo les paso a ellas.

-No tienen que estar nerviosas, el hecho de que se supone que seremos familia, no tienen que forzarse para que eso pase –Dijo Gorou de manera suave sorprendiendo a las tres chicas que abrieron los ojos a más no poder.

-No tiene que amar o enamorarse de nuestro hijo si ustedes no quieren –Dijo Ayaka que sorprendió aún más a las tres chicas, todos estaban callados escuchando los que estaban diciendo, incluso los tres líderes masculinos.

Sin embargo, las tres chicas tuvieron un malestar al escuchar esas palabras, no es que no quisieran enamorarse, aunque bien, la joven Gabriel ni siquiera había pensado en eso, pero cada vez que su otro yo le contaba una parte de su vida con el castaño la hacía sentir... ¿Feliz?, y que eso sin que ellas se dieran cuanta eran las semillas que sus otros yo mayores sembraron en ellas que poco a poco iban brotando.

Pero todas ellas tenían cierto interés en el joven castaño, que, si bien no es amor, es solo interés del saber mejor porque se enamoraron de él, que fue lo que vieron de todas las personas del mundo en él.

Principalmente la joven Gabriel quería saber más que todas ellas, ya que a pesar de las dos anteriores ella nunca había experimentado ese tipo de amor, en otras palabras, el castaño era su primero y único amor.

-Aunque no me molestaría tener a chicas tan linda como yernas –Dijo de la nada Ayaka de manera divertida haciendo que las tres chicas se sonrojaran, sin embargo, solo Issei y sus esposas se dieron cuenta de algo...

Ellas... no lo negaron...

-Pero por ahora que les parece si empezamos como amigos y nos olvidamos del futuro por un momento –Dijo Gorou que se alejó de la joven Penemue, igualmente Ayaka se alejó de las dos chicas, ambos padres del castaño les dieron a las tres chicas una sonrisa que a pesar de sus sonrojos por lo de antes, las pudo tranquilizar.

En ese momento escucharon a otra persona bajar por las gradas, todos vieron que se trataba del joven Issei que clara mente no lucia absoluta mente nada mal.

Haciendo que por alguna razón un pequeño sonrojo de las jóvenes Gabriel, Penemue y Serafall apareciera en sus mejillas.

El joven Issei que escaneo la habitación se quedó con la boca abierta al ver a las tres chicas que clara mente opacaban toda su atención, fue tanto que ignoro completa mente a todos y su mirada solo las veía a ellas.

Eso sonrojo aún más a las tres chicas ya que claras mentes vieron al castaño de que a pesar de tener fama de pervertido, no las estaba mirando con ojos lujurioso o perversión, si no que las estaba mirando como si estuviera admirando lo más hermoso que el mundo tiene.

Y se sonrojaron aún más por la palabra que escucharon que dijo el castaño "Hermosas", fue un susurro, que nadie debería de escuchar, pero como seres sobre naturales tiene sus sentidos mejorados todos pudieron escucharlos, a excepción de los padres del castaño.

Esa simple palabra hiso que el corazón de las chicas latiera rápidamente, sus mejillas se tiñeron de rojo, visible para todos, mientras pensaba como una simple palabra podía afectarlas tanto.

Todas había escuchado escucha es palabra una infinidad de veces, nunca les había producido nada, incluso las habían llamado, como preciosa, encantadora, bella y una lista interminable de palabras.

Sin embargo, esa palabra, esa simple palabra había hecho que sus corazones se acelerasen sin ningún motivo, ni siquiera habían cruzado palabras con él, ni mucho menos conocerlo, como era posible que ellas tuvieran esa reacción, ninguna entendía, incluso la joven Gabriel estaba realmente confundida, del porqué de su comportamiento.

-Te vez muy guapo Ise-chan –Dijo Serafall a la versión de su esposo de joven, haciendo sonrojar al castaño por sus palabras.

-Verdad que Ise se ve muy guapo –Pregunto Penemue a las tres chicas que solamente se sonrojaron y bajaron la mirada totalmente avergonzadas, igual que el joven castaño, eso hiso sonreír a las dos chicas que lograron su cometido.

Issei que estuvo al margen de todo no pudo evitar sonreír por tal escena que se desarrolló de la nada, sin embargo, los otros líderes lo vieron, principalmente Azazel qué, aunque le daba una sonrisa, podía ver que estaba a punto de vomitar sangre, al ver la escena anterior y saber que no era él, Issei decidió mejor continuar con la noche.

-Issei, donde están las demás chicas –Pregunto Issei a su joven yo que se recuperó un poco el sonrojo.

-Me dijeron que ya iba a bajar que me adelantara –Contesto el joven Issei, así que esperaron a las chicas paciente mente, Issei se dio cuenta que la cena ya estaba toda lista, preparada y arreglada para la mesa para servirse.

Así que cuando iba a ir a llamar las chicas estas bajaron todas ellas lucían sumamente bellas, incluso Issei tuvo que admitir que todas lucían sumamente bella, sin embargo, para él nunca podría llegar a sus esposas.

Aunque cuando vio mejor hiso una excepción y vio que dos de ellas lucían igual de hermosa que sus esposas.

Entre todas ellas escondiéndose de todos, se encontraban la joven Sona y Tsubaki completa mentes rojas de la vergüenza, pero eso solo era la punta del Iceberg ya que ellas andaban vestidas con un hermoso vestido informal que las hacia lucir hermosas, el de la joven Sona dejaba descubierto sus hombros y su vestido llegaba hasta el suelo, Tsubaki tenía uno que le llegaba un poco arriba de la rodilla dejando ver sus bien torneadas y sexys piernas.

Todas las demás chicas andaban bellas, principalmente Rias y Akeno, que clara mente el joven Issei cuando las vio se sonrojo furiosa mente, pero había algo diferente que cuando vio a antes a las tres chicas.

Que incluso ellas misma vieron, incluso Sirzech y Grayfia notaron.

Y es que el sonrojo del joven Issei no era saludable, esto era porque el joven las miraba pervertida mente, principal mente en la parte del pecho, ya que todas ellas a excepción de Sona y Tsubaki andaban vestimentas muy reveladoras, que, si bien no era vulgares, eran innecesarias.

-Como nos vemos Ise –Pregunto Rias posando para que el joven Issei la viera, igualmente todas las demás posaron para él, sonrojándolo aún más.

-Todas se ven hermosas –Dijo el joven Issei totalmente sonrojado con un poco de sangre saliendo de la nariz.

Sin embargo, todos los presentes que presenciaron la escena anterior con las tres jóvenes Serafall, Penemue y Gabriel se pudieron dar cuanta de algo, a excepción de los padres del castaño.

Y es que eso era que aquella palabra "Hermosas" era muy diferente a la que el joven castaño le había dedicado a decirle al trio de chicas.

Sirzech y Grayfia fruncieron un poco el ceño, pero no por el joven Issei si no por lo que estaba siendo su quería hermana, estaba yéndose por el camino corto y fácil al corazón del joven castaño, en lugar de ir por largo y difícil, el problema era que el corto y fácil no era estable en cambio del largo y difícil era un camino estable que durara por siempre.

Su quería hermana estaba ganándose el corazón de del joven castaño tomando la perversión de él, algo que Grayfia también se dio cuenta perfectamente.

Y no pudo negar, ya que incluso ella, en aquel momento fue por el camino difícil y largo con su esposo y a pesar de que fue extremada mente duro, lo había logrado y también lo había valido.

(Nota: Como me gustaría leer la historia de ellos dos, pero bueno, aquí hago una referencia como si fuera Grayfia que fue la que conquistó el corazón de Sirzech, sin embargo, no es así, si no que lo digo del punto de vista de ella.)

(Nota 2: El camino que hago referencia es una vieja historia china que hace referencia al camino del amor, donde ambos toman el camino largo y difícil siendo este el más seguro, ambos, parte de un punto y a mitad del camino se encuentran haciendo su amor grande y duradero, mientras que si uno toma el camino largo y el otro el corto, nunca se encontrar ya que no están entrelazados, el corto es fácil e inestable haciendo que en algún momento se termine o destruya, mientras que el que tomo el camino largo seguirá caminando hasta toparse con su otra mitad)

Clara mente ambos estaban un poco enojados, sin embargo, encendieron que ese no era ni el momento, ni el lugar de decir algo, incluso estaban pensando en no intervenir ya que eso no era su vida, que, si bien se preocupan por ella, pudieron ver que Rias estaba muy segura del camino que ella decidió tomar, y eso fue al verla insinuarse a sí misma al joven castaño que estaba con la misma expresión pervertida.

Mientras tanto, cierto trio de chicas no le quitaban la mirada, clara mente nadie se había dado cuenta que lo estaban mirando, y por alguna extraña razón cada una soltó un suspiro al ver que el joven castaño tenía una mirada y extracción totalmente diferente a la que les dedico a ella.

Por alguna razón se sintieron aliviadas, aunque la joven Gabriel estaba en un profundo pensamiento intentando entender que era lo que le estaba pasando.

Pero en un momento las tres chicas que miraban al joven castaño abrieron los ojos de sorpresa, incluso los demás que miraran la escena se sorprendieron, ya que vieron como la mirada y expresión del joven Issei cambiaba a la misma que les había dedicado a las tres chicas anterior mente.

Y eso era porque cuando Rias, Akeno, Xenovia y Asia estaban hablando entre ellas sobre las expresiones que tuvo el joven Issei de ellas, el joven castaño por fin pudo visualizar a las jóvenes Sona y Tsubaki, aquel sonrojo sano subió a sus mejillas, y nuevamente en un susurro que todos escucharon a excepción de las Rias, Akeno, Xenovia y Asia que había empezado una de sus peleas por saber quién fue que impresiono más al joven castaño.

El joven dijo a aquella palabra anterior inconsciente mente "Hermosas" Inmediata mente las mejillas de las jóvenes Tsubaki y Sona se tiñeron de rojo mientras que bajaban la mirada por la vergüenza que las invadía mientras ambas chicas sentían que sus corazones no paraban de latir fuerte mente.

Sin embargo, esa vista solamente las hacia lucir aún más hermosa para los ojos de ambos castaños ya que Issei no pudo evitar admirar la belleza de sus esposas de jóvenes.

Incluso la joven Serafall no podía negar que su hermana, su seria y fría hermana lucia realmente muy adorable en ese estado.

Issei al ver cómo iba la situación, pensó que lo mejor era continuar la cena ya que si Rias las demás se dieran cuenta de las expresiones de su joven yo, toda la cena se echaría a perder.

Llamando la atención de todos, y sacando al joven castaño de su transe, Issei les dijo que pasaran al comedor, cuando llegaron vieron a Koneko ya sentada y lista para cenar, algo que causo un poco de risas a algunos.

Todos se sentaron en sus respectivos asientos, ya que como Issei era el anfitrión de la cena tenía que mantener a sus invitados contentos por así decirlo, así que en un lado de la mesa se encontraban Issei donde podía ver todo, a un lado estaban sentados, Miguel, Azazel, Sirzech, Grayfia, el joven Issei, Rias, Akeno, Asia, Koneko y Xenovia.

En el otro lado de la mesa se encontraba Gorou, siendo el dueño de la casa está ahí, a su lado estaba Ayaka, junto a ella estaban las jóvenes Penemue, Gabriel y Serafall, Sona y Tsubaki que quedaron al frente del joven Issei, al lado de ellas estaban las cinco esposas de Issei.

Clara mente la mesa era una especial para la ocasión, era una ancha y bastante larga donde todos estaban cómodos, aunque Issei sabía que muy pronto con la llegada de más de sus esposas tenía que hacer una segunda mesa.

Cuando Azazel iba a pregunta sobre la comida, vio como de la cocina salían tres castaños iguales a Issei solo que estos llevaban puesto tres atuendos de chef.

Todos volvieron a ver a Issei, al menos la persona que no había visto esa técnica anterior mente.

Issei les dio una explicación rápida sobre ella, diciéndoles que era una técnica que había desarrollado para hacer varias tareas ya que le permite dividirse en sí mismo, así como su poder, que si bien no sirven para pelear es una técnica muy útil para otras cosas.

Además de que todos compartían la misma mente al mismo tiempo, esa simple explicación sorprendió a todos por eso.

Rápidamente los otros Issei acomodaron la mesa, cabe decir que todos estaban sorprendidos por todo lo que había preparado el castaño, había una gran variación de platillos, pero había varios que eran específicos para las esposas del castaño y sus versiones jóvenes ya que este hiso sus platillos favoritos haciendo muy feliz a sus esposas y sorprendiendo a sus versiones jóvenes.

El joven castaño siempre estuvo observando a las versiones jóvenes de las esposas de su yo mayor, él se había dado cuenta que realmente él había hecho todo lo posible para consentirlas ya que ver la sonrisa de alegría de las esposas y sus versiones jóvenes no pudo negarlo.

Durante toda la cena Issei siempre estuvo distrayendo sus invitados, algo no muy difícil para su actual yo ya que anterior mente en su tiempo había hecho este tipo de cosas para muchas más personas.

La verdad es que Issei estaba muy agradecido de que Rias y las demás chicas no hicieran una escena de pelea por su joven yo, ya que durante la cena su yo joven estuvo hablando con todos con mucha normalidad, algo que parece que no se había dado cuenta que hablaba con normalidad ya que ni siquiera se había dado cuenta que estaba hablando con las versiones jóvenes de sus esposas.

Algo que todos vieron o al menos los tres líderes y el mismo castaño, además de las esposas de este que tenían una sonrisa divertida al ver la interacción que si bien no era mucho se podía ver como todas ellas hablan con tranquilidad, sin necesidad de que alguien intervenga o fuerce la conversación.

Pero también algo curioso paso durante toda la cena y es que las tres chicas de las principales fracciones se estaban llevando BIEN, eso era algo realmente sorprendente ya que ni la joven Serafall ni la joven Gabriel había tenía una disputa como siempre la tienen, incluso habían interactuado una que otra palabra, incluso la joven Penemue se les había único en algunas ocasiones, eso sorprendió mucho a los tres líderes hombre ya que ellos sabían perfectamente la relación que tenían las tres chicas.

Una vez que la cena había terminado, y todos estaban satisfechos, principalmente las chicas del castaño y sus versiones jóvenes todos se dispersaron, a hacer otras cosas, aunque Issei, Sirzech, Miguel y Azazel estaba la sala hablando tranquila mente.

La dos Sona y Tsubaki se habían ofrecido para ayudar a lavar los platos con dos clones de Issei y una Grayfia que a pesar de que Issei se negó ella igual mente ayudo, lo padres del castaño fueron a descansar ya que, al ser humanos, su resistencia era menos que las de los demás y ya era un poco tarde.

Asia y Xenovia se fueron a sus habitaciones, Koneko se quedó en comedor con sus dulces, mientras Rias y Akeno peleaban por el joven Issei... otra vez, ya que al parecer ambas querían ir a dormir con él, pero Rias no quería que Akeno estuviera.

Gabriel, Penemue y Serafall estaban en la sala con sus versiones jóvenes y los líderes y el castaño mayor.

-Tengo que decir que eres un muy buen patrocinador –Dijo Azazel con una gran sonrisa y una copa de vino en la mano mientras miraba a Issei que le devolvía la sonrisa.

-Gracias por el cumplido, me costumbre a hacer este tipo de eventos para que los lasos entre las fracciones siempre es unidas y se fortalezcan –Dijo Issei de manera tranquila antes de tomar un sorbo de su copa de vino.

-Por lo que veo que la paz siempre se logró –Dijo Miguel queriéndose confirmar si su mayor anhelo se pudo hacer realidad.

-Se puede decir que en cierto modo ahora estamos en paz –Dijo Issei llamando la atención de los tres líderes por ese comentario.

-Hay problemas –Pregunto Sirzech no muy seguro si debería de saber.

-La paz no puede existir si no hay guerras, ese es el equilibrio del mundo mismo, así como ahí bien también ahí mal –Explico Issei haciendo que los líderes lo vieran fijamente.

-Si bien se pudo alcanzar la paz el precio no fue pequeño, muchos murieron, incluso actual mente ahí varios grupos de rebeldes que solo quieren destruir esa paz que si bien no son como Khaos Brigade si son muy molestos por la cantidad que ahí, de esa manera se creó un grupo especial para que se encarga de cazarlos y eliminarlos –Dijo Issei dando un respiro recordando como uno de esos grupos intento secuestrar a una de sus hijas, literal mente Issei había destruido una gran parte de las cosas africanas donde se encontraban, no había dejado ni rastros de ese grupo o cualquiera que tenga el pensamiento de meterse con su familia.

-Grupo anti-terrorista, realmente no suena nada mal esa idea –Dijo Azazel muy interesado por esa idea.

-Quienes componente este grupo –Pregunto Sirzech que también estaba un poco interesado.

-La verdad está conformado por seres de todas las razas o rangos, incluso entre ellos se encontrar algunos dioses como Ares de la mitología griega –Esas palabras sorprendieron a los presentes.

-No se extrañen, ultima mente han aparecido seres muy poderosos, incluso ahí ocasiones donde Vali o yo tenemos que actuar para que no pase a más, realmente es muy molesto –Dijo Issei un poco fastidiado, pero aun así sorprendió mucho a los líderes por esas palabras.

-Pero al menos la paz se ha mantenido, a pesar de las constantes organizaciones, no son un problema y se puede vivir de manera tranquila, pero aun así todos siguen entrenando ya que al parecer nadie quiere perder forma –Comento Issei de manera tranquila.

-Pero eso es bueno ya que si surge algo todos pueden ayudar –Dijo Sirzech conforme como se desarrollaron las cosas.

-Bueno la verdad es que en el futuro a Azazel se le ocurrió crear un torneo donde se puede ingresar cualquier ser, la verdad es que ha tenido mucho éxito ya que de esa manera muchos se inscriben para tener una buena pelea con los seres más poderosos del mundo –Dijo Issei sorprendiendo a los tres líderes.

-Parece que voy a tener que trabajar en eso más adelante –Dijo Azazel con una gran sonrisa divertida ya que esa idea realmente le estaba gustando, un lugar donde seres poderosos se enfrentan por alzarse con la victoria era algo realmente que quería ver.

.

Mientras que los hombres hablan las chicas que estaba en el mismo lugar hablaban entre sí,

-La verdad aun me cuesta creer que ustedes dos se lleven bien –Dijo la joven Penemue mirando a las dos Serafall y Gabriel que la miraban con duda.

-Te sorprendería de todo lo han hecho juntas –Dijo Penemue con una sonrisa divertida al ver como las dos mayores se sonrojaban.

-Oye, no digas eso –Dijo Gabriel muy sonrojada con un lindo puchero.

-La verdad si es un poco extraño estar en la misma habitación y en el mismo lugar con ustedes que no sea por trabajo –Dijo la joven Serafall mirando a las jóvenes Gabriel y Penemue que también la volvieron a ver.

-Cómo fue que terminamos siendo tan cercanas –Pregunto la joven Serafall a su yo mayor que puso una expresión triste que todas se dieron cuenta, aunque Gabriel Y Penemue ya sabían el porqué.

-La verdad es que nuestra relación era muy mala, incluso cada vez empeoraba más, primero era Gabriel y yo, no podíamos estar cerca una a la otra, después sin que ninguna nos diéramos cuenta Penemue era igual, realmente nos odiábamos –Dijo Serafall un poco arrepentida por su pasado al igual que las otras dos, eso sorprendiendo a sus versiones jóvenes, y es que ese odio era por celos, celos que ni siquiera ninguna de ellas sabía que era por eso, tenían celos de no estar con el castaño y se desquitaban con ellas mismas.

-Tiempo después perdimos algo muy valioso, algo que era muy importante para nosotras tres –Dijo Serafall mirando a su esposa que hablaba con los tres líderes masculinos de manera tranquila, una sonrisa pequeña se le formo en su bello rostro, las jóvenes Gabriel, Penemue y Serafall, miraron en su dirección y se dieron cuenta que miraban al castaño.

-Issei –Pregunto la joven Penemue con ligero rastro de sorpresa e igual que las otras dos jóvenes.

-Sí, lo habíamos perdido, no podíamos estar ya a su lado aun cuando quisiéramos, y sola mente cuando lo perdimos nos dimos cuenta que lo importante que era para nosotras el simple hecho que él estuviera ahí –Comento Serafall mientras se le salía una lagrima recordando aquel momento y la soledad que sentía al no poder estar cerca de él.

Eso sorprendido aún más a las tres jóvenes, que no sabían que decir o pensar.

-Nuestro encuentro pasaron de ser peleas a consolarnos nosotras mismas, Serafall y yo poco a poco nos volvimos amigas, lloramos tanto juntas que eso nos unió, ya que ambas compartimos un mismo sentimiento, el querer estar junto a él –Dijo Esta vez Gabriel con una sonrisa triste recordando ese momento de su vida que no quería volver a experimentar.

-A mí fue la que menos le afecto, ya que a pesar de que me dolió no estar con él, mi inseguridad no me dejaba saber si realmente estaba bien estar con él, me reuní con ellas dos en algunas ocasiones poco a poco me sentía cada vez más cómoda con sus presencias, y ver que ambas compartíamos muchas cosas en común nos hicimos buenas amigas –Dijo Penemue con una sonrisa haciendo sonreír a Gabriel y Serafall ya que increíble mente se habían vuelto muy buenas amigas en donde se podían apoyar unas a las otras.

-Y cuando pudimos volver a estar con Ise-chan, ninguna desaprovechamos la situación e intentamos estar con él, nos dimos cuenta que las tres sentíamos lo mismo y aunque parezca extraño, lo compartimos, así como nosotras también lo compartimos con las demás chicas que son nuestras hermanas y sus esposas, ya que nos dimos cuenta que no solo nosotras nos sentíamos así, así que había más chicas que tenían los mismo sentimiento que nosotras, decidimos compartirlo a pesar de que éramos muchas –Dijo Serafall recuperando su sonrisa de felicidad algo que todas vieron.

-Ise-chan hiso todo lo posible para estar con nosotras y no sentirnos menos que las otras, nos dio cariño, amor y lo que más deseamos una familia –Dijo Serafall con una mirada que expresaba un gran amor, mientras miraba a Issei que al notarla este le dio la misma sonrisa llena de amor, haciendo que su sonrisa sola mente creciera aún más que antes.

Las tres chicas jóvenes presentes estaban realmente sorprendidas por las palabras de Serafall, aun cuando ya sabían algo, realmente escucharlas hablar con tanto amor las hacia un poco... ¿envidiosas?

-Realmente es un poco extraño escuchar a Onee-sama hablar de esa manera –Dijo la joven Sona que venía entrando en la sala con las demás chicas que le ayudaron, los demás Issei habían desparecido para unirse todos en uno solo.

-Oh, Sona-chan –Dijo Serafall con una gran sonrisa al ver a su hermana de joven.

Ambas Sona se sentaron al lado de Serafall, las dos Tsubaki al lado de Penemue y Grayfia al lado de Gabriel ya que al ver a su esposo hablando con los otros tres tan alegre mente, lo dejo ya que al menos vio que estaba divirtiéndose.

-No puedes culparme por estar tan enamorada de Ise-chan –Dijo Serafall con una gran sonrisa, mientras se abrazaba a ella misma, haciendo una expresión infantil.

-La verdad todavía estoy muy sorprendida que todas ustedes se enamoraron del mismo hombre –Dijo Grayfia mirando a todas las chicas haciendo que las jóvenes bajen la cabeza y se sonrojen, mientras que las mayores le den una sonrisa.

Pero lo que Grayfia noto fue que ninguna de las jóvenes había negado que o dicho algo sobre el tema.

Por parte de las cinco chicas del futuro estuvieron muy tentadas de decirle a Grayfia que el castaño tiene sentimientos por ella, aunque en este momento sola mente están empezando, ya que todas las esposas del castaño sabían que su amado esposo tenía dos amores que eren imposibles para él.

Uno de ellos era Grayfia, se había enamorado de ella por todo lo que ella había hecho por él, clara mente nunca se lo dijo a ella, y en confianza él se lo confeso a ellas, sabían que el castaño había dejado esos sentimientos se fueran desapareciendo poco a poco que, aunque ya no la amaba como antes ellas sabían que todavía había quedaba algo de aquel sentimiento en su corazón, pero ver que ella era feliz con su familia ninguna dijo nada.

La otra chica era mucho más especial, ella era el motivo de que su amado esposo conociera lo sobrenatural, que no importa el tiempo que pase, él siempre la iba a amar, aun cuando no puede estar con ella, incluso todas sus esposas sabían sobre ella, sobre su amor por ella, que tal vez incluso era igual que el que, él tenía por ellas.

Reynare era una chica que, a pesar de superarla, siempre iba a estar en su corazón, siempre la iba amar, sin importar cuanto tiempo pase, siendo ella su primera novia, la primera de todas ellas.

Ellas dos eran las únicas dos chicas fuera de sus esposas que el castaño amaba o en el caso de Grayfia amo, y las únicas que dos chicas que dejarían acercarse a su amado esposo.

-La verdad no es tan difícil si lo piensas bien –Dijo Penemue llamando la atención de la albina por ese comentario.

-Tal vez ahora no sabes, pero Issei hiso muchas cosas que lo hicieron el hombre que es, y una de esas es que nos salvó la vida a cada una de nosotras en diferentes circunstancias –Siguió Penemue recordando como el salvo la vida cuando el Trihexa la iba amatar.

Eso sorprendió a todos los del presente, y preocupo mucho a sus contrapartes jóvenes al ver que iba a morir.

-Él nos salvó sin ni siquiera dudarlo ni por un momento, no le importo morir mientras nosotras estuviéramos a salvo –Dijo Gabriel mientras llevaba sus manos a su pecho y recordando cuando iba a morir a manos del Trihexa y su amado esposo la rescato y la protegió sin importarle si moría en el intento.

Esta vez las jóvenes chicas les lleno la curiosidad para saber qué fue lo paso para que ellas estuvieran en peligro de muerte ya y que el joven castaño las salvara, la verdad quería saber si realmente el joven castaño haría eso por ellas.

En ese momento Issei bajo de las gradas, todos los presentes lo vieron, clara mente tenía una expresión de cansado.

-Te vez cansando –Dijo Issei a su yo joven que lo volvió a mirar de una manera cansado, cuando iba contestar se escuchó un estruendo.

-Akeno que te he dicho –Fue el grito que se escuchó del piso de arriba ahora todos entendieron el porqué, mientras que Sirzech y Grayfia tenían una mano en su rostro.

-No es solo tuyo Rias –Se escuchó otra voz para que volviera a sonar un estruendo, el joven Issei al ver esto solamente soltó un suspiro y se alegró que el cuarto de sus padres estuviera con sellos de protección y de silencio.

-De verdad algunas veces me gustaría que dejaran de pelear –Dijo el joven Issei de manera cansada mientras suspiraba.

-Has pensado en hablar con ellas –Pregunto Grayfia un poco seria por la actitud de Rias, ella nunca había pensado que Rias actuara de esa manera.

-(Suspiro) ya lo he intentado, pero nunca me escucha, solamente me ignora y se van –Contesto el joven Issei mientras se sentaba en un lugar vacío en la sala en medio de Penemue y Azazel.

-Parece que necesitas ponerte serio contra ella –Dijo Azazel de manera divertida mirando al castaño que le dio una mirada.

-Crees que no lo he hecho, pero nada funciona con ella, y cada vez que intento pasar un momento con Akeno o con Asia, Rias se enoja y empieza a discutir ya sea con Akeno o me aleja de Asia –Dijo el joven Issei sorprendiendo a todos por eso, jamás pensaron que Rias fuera así de posesiva sabiendo el sueño del joven castaño y su forma de ser.

-No es tan fácil ser el rey de harem verdad –Dijo Issei con una sonrisa divertida ya que todo eso él lo paso, cada pelea, discusión y otras cosas, él lo experimento.

El joven Issei lo volvió a mirar, ambos se miraron a los ojos mientras todo el lugar estaba en silencio.

- ¿Cómo? –Pregunte el joven Issei no le importo que estuvieran todas esas personas ahí. Issei sabía que quería decir, pero solamente sonrió por esa pregunta.

-Como rayos lo hiciste, digo tienes a todas esas chicas hermosas, que te quieren y te aprecian, ninguna de ellas se pelea por ti, que, si bien no me molesta, me gustaría tener unos momentos tranquilos con ellas, al menos 5 minutos sin que se peleen –Dijo el joven Issei seria mente mirando a su otro yo, mientras todos estaban viendo la escena sin decir nada ya que sabían que esa era lo mejor, además que algunos estaban interesados en ese tema.

Principalmente Azazel que quería saber cómo mierdas el castaño logro hacer que Gabriel callera enamorada de él.

-Yo no hice nada, si quieres una respuesta pregúntales a ellas –Dijo Issei mientras miraba a sus esposas.

El joven Issei las volvió a ver con una mirada de súplica que no pudieron evitar pensar lo lindo que se veía así.

-La verdad, nunca pensé sobre eso –Dijo Gabriel ahora pensando sobre ese tema.

-Nosotras siempre mente amamos demasiado a Issei, tanto que no queríamos perderlo, aun si teníamos que compartirlo lo queríamos a su nuestro lado –Dijo Sona sorprendiendo a todos por esas palabras principal mente a su yo joven que se sonrojo furiosa mente.

-De verdad –Pregunto la joven Tsubaki a su otro yo que solamente asintió.

-Cuando amas a alguien, no importa que, quieres estar con él, nosotros éramos muchas chicas que estaban detrás de Ise, sabíamos que, si escogía a una las demás estarían destrozadas, así que pensamos que tal vez lo podíamos compartir, después de todo la poligamia es algo muy común en nuestra sociedad –Explico Tsubaki sorprendiendo a todos por la forma de pensar tan madura y decidida.

-Amábamos demasiado a Issei como para que escogiera a una de nosotros así que solamente decidimos en compartirlo, a pesar de que sabíamos que algunas iba a recibir mejor tratamiento que otras como en todo harem, pero al menos podríamos estar con la persona que amábamos –Dijo Penemue de manera tranquila mientras que su otro yo la mirada, aunque ella misma sabía que fue una de las ultimas desidia estar con él y compartirlo, aun sabiendo que tal vez personas como Kuroka o Sona que eran más cercanas a él podrían ser tratadas de mejor manera.

-Sin embargo, grata fue nuestra sorpresa de que Ise, siempre nos trató a todas por igual, algo que todas apreciamos, ya que gracias a eso no peleábamos por su atención, ya que ya la teníamos, por ese motivo somos así, ya que como él nos trata como lo primero en su vida nosotras lo mínimo que podemos hacer es tratarlo como lo primero de las nuestras –Dijo Serafall, todos estaban sorprendidos, principal mente el joven Issei, mientras que Issei miraba a sus esposas con gran amor en su mirada, realmente se sentía dichoso al estar con ellas.

-Valla chico de verdad que están enamoradas de ti –Dijo Azazel verdadera mente sorprendido, por lo que acaba de escuchar.

-Así como yo estoy enamorado de ellas, después de todo son lo más importante de mi vida, lo que más amo, quiero, atesoro y adoro desde lo más profundo de mi corazón –Dijo Issei con una gran sonrisa a sus esposas que se sonrojaron por sus palabras ya que siempre les encantaba escuchar como él se expresaba de ellas, todas ellas lo volvieron a ver y le dieron una sonrisa, aun cuando estaban sonrojadas.

Mientras tanto las versiones jóvenes no sabían que decir, o mejor dicho que sentir, disimuladas mentes miraron al joven castaño, inmediata mente sus corazones les dolió leve mente, ya que este tenía una expresión de tristeza, a simple vista se podía ver la tristeza y la falta de amor que el deseada.

Grayfia y Sirzech estaban viendo al joven castaño, no pudieron evitar sentirse tristes por él, como su hermana lo estaba tratando.

(Nota: Para lo que no entiendan esta parte, Rias lo trata como un objeto, como suyo y de nadie más, mientras tanto solamente lo seduce sin darle nada, ni siquiera amor)

Después de todo el joven Issei había cambiado en ese poco tiempo, se había dado cuenta de muchas cosas, la charla que tuvo con su otro yo lo hiso mirar el mundo de una manera diferente a antes, principal mente quería disfrutar y pasar tiempo con las personas que eran especiales para él, por ese motivo había intentado pasar tiempo con Rias, Akeno y Asia, incluso con Xenovia, pero las cosas no iban nada como el quería.

Cada vez que quería pasar tiempo con Rias, llegaba en algún momento donde ella se le insinuaba, que, si bien no le molestaba, no era ni el momento, ni el lugar ya que lo único que quería era pasar un tiempo de calidad nada más, pero parecía que para ella solo era un juego.

Con Akeno era un poco mejor ya que a pesar de que se le insinuaba más que Rias, los tiempos de calidad con ella era verdaderos, en esos momentos él podía ver la verdadera Akeno, aquella niña escondía debajo de su máscara de sádica y masoquista, realmente le hubiera encantado que ella desapareciera aquellas máscaras y dejara a su verdadero ser salir, pero no era así, ella siempre andaba con esa mascara haciendo que lo único que lograra era alejarlo de ella.

Con Asia su tiempo era tranquilo, y se la pasaba muy bien, sin embargo, siempre que estaba con ella se sentía raro, era un sentimiento de molestia que no entendía ya que le gustaba el tiempo con ella, pero cada vez que ponía a hacer una oración siempre pensaba en las palabras de su yo mayor y se deba cuenta cada vez más que era verdad, aun cuando no quería creerlo.

Sobre Xenovia realmente podía tener una relación muy buena si dejara de decir a cada momento de tener hijo, de verdad con ella se había dado cuenta que las palabras de su yo mayor sobre ella tenía razón, realmente le era gustado si dejara esa idea por aparte, al menos por ahora y se esforzara por comprenderlo.

Lastimosa mente en cada uno de esos encuentros llegaba Rias y nuevamente empezaba una pelea, a pesar de que solo ha estado haciendo eso por pocos momentos se dio cuenta de verdad que tan mal estaba su reacción con sus chicas.

Incluso podía decir que su relación con las jóvenes Sona y Tsubaki eran mejor que las de ellas, una charla tranquila, unas risas por aquí otras por allá, en ningún momento había insinuaciones, ni máscaras, ni sentimientos de incomodidad, incluso se sentía muy cómodo en compañía de ellas, con tan solo hablar un poco.

Después de esa charla animaron al joven Issei y un tiempo después todos se retiraron, aunque el joven Issei no tuvo mucho tiempo ya que había llegado Rias y Akeno y lo arrastraron a su cuarto.

Cuando todos se retiraron cada uno se fue a su habitación a dormir, aunque el joven Issei estaba con Rias, Akeno y Asia que a pesar de que las tres estaban profunda mente dormías él estaba despierto.

Poco a poco se levantó de su cama sin despertar a ninguna de ellas, se puso unos pantalones y salió a la azotea de su casa.

La noche era tranquila y silenciosa, hacia un poco de frio, pero todo el cielo estaba despejado para observar lo hermosa que era esa noche ya que era luna nueva.

Él estaba mirando el cielo, pensando en todo lo que le había pasado en su vida hasta ahora, lo que había descubierto, el conocer a sus futuras esposas fue un impacto muy fuerte para él, pero como le dijo a su otro yo, ellas eran sus esposas no las de él, no tenía que pensar que si iban o no hacer sus esposas.

En ese momento, una luz apareció de tras de él, al darse vuelta el joven Issei se dio cuenta que era la joven Gabriel que había llegado.

Pero no era la única ya que en el tejado sin que él se diera cuenta estaba la joven Serafall, y en un piso inferior estaba Penemue flotando, detrás de la puerta que llevaba a la azotea estaban las jóvenes Sona y Tsubaki, todas ellas habían venido aquí a hablar con el joven castaño cuando se dieron cuenta que estaba solo, pensaron que era el momento.

Pero todas se dieron de las presencias de las otras en el lugar, principalmente Gabriel que era la única que el joven castaño pensaba que era la única en el lugar.

-Lady Gabriel –Dijo Issei sorprendido de ver a la serafín ahí, principalmente verla vestida de la misma manera que estaba hace unos momentos.

-Por favor, llámame solo Gabriel –Pidió ella de manera tranquila acercándose a él, poniendo nervioso a este.

-No tienes que estar nervioso, solamente quería tener una charla tranquila contigo –Dijo la serafín haciendo que el castaño ahora entiendo el porqué de su visita.

Ella camino hasta estar al lado de él, miro el cielo viendo la hermosa noche que había, donde todas las chicas también la vieron, mientras guardaban silencio y escuchaban la conversación que todos querían tener ya que no importaban con quien de ellas fuera la respuesta que el castaño iba a darles iba no solo para la que hablara con él si no para todas ellas.

-Es una noche muy hermosa –Dijo Gabriel en su noto habitual, tranquila y serena admirando aquella noche.

-Si es una noche muy hermosa –Dijo Issei mirando el cielo perdiéndose en su inmensidad, Gabriel lo volvió a ver, miro esos ojos, tenían la misma mirada que él les había dado a ella y las demás anterior mente.

Una mirada, admirando lo más bello que el mundo le puede dar, no pudo evitar sonrojarse un poco al recordar que esa mirada iba dirigía a ella, la hacía sentir especial, algo muy raro ya que ella había recibido una infinidad de alabanzas y elogios, pero él pudo mover su corazón, con una sola mirada y una simple palabra.

-Dime algo Issei –Pregunto ella a lo que el castaño la volvió a mirar.

-Que piensa sobre de, que nosotras nos convertimos en tus esposas en el futuro –Pregunto Gabriel, pero a diferencia de antes esta ve lo dijo en un tono tranquilo y suave, pero principalmente serio.

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El, porque no meto a Xenovia más seguido, muy sencillo, no hace mucho que se convirtió en demonio así que su relación con Issei es así, así como lo presenta en la novela, lo mismo pasa con Koneko ya que ella en ese momento no siente nada, hasta que pase lo del inframundo.

Sobre Rias, me expreso de ella de esta manera no porque la odie o algo así, si no es que, si leen la novela, ella es realmente así, cada vez que están junto y están en un momento cálido, ella siempre va a seducirlo y Issei como todo pervertido cae en el juego, aunque en mi fic Issei ya vio eso y ya no está cayendo en sus juegos.

Los corazones de las jóvenes Gabriel, Penemue y Serafall están empezando a cambiar, ahora de sentir ignorancia o cualquier sentimiento así, ahora siente curiosidad por el castaño, y están empezando a tenerle cariño, pero aun no llegan a quererlo, al menos no ahora.

Las cosas van despacio en los corazones de las chicas, ya que no quiero que se sienta forzado y más bien que se sienta más natural.

Sobre la joven Sona y Tsubaki, no tengo que decir que ahora son muy buenas amigas del joven Issei, su cariño por él es grande pero no pasa del que uno tiene por un muy buen amigo, pero tanto ellas dos como las otras tres están muy interesadas en seguir adelante y ver qué pasa.

Las relaciones entre las jóvenes chicas y el joven castaño van formándose poco a poco de manera natural y tranquila, además que el corazón del joven Issei está cambiando cada vez más ahora mira el mundo de una manera más madura que antes gracias a las charlas y consejos de su yo mayor y principalmente el libro que este le dio.