2// El dia de mi perdición
Cuándo salí del baño maquiné la mejor idea para disimular la mordida en mi labio, así que fui a cocinar.
Y, adivinen que cociné... Decidí freír papas.
Sé que es muy loco, pero es un plan efectivo, así que en el momento que mis padres se descuidaron, con el tenedor hundido en el aceite caliente tuve la oportunidad y no tardé en hacerlo. Saqué el tenedor y observé sus puntas, cada una llevaba una gotita de aceite a punto de caer, así que no lo pensé mucho y me llevé una punta al punto del crimen, y la gotita cayó en el lugar perfecto
—¡AAAYYYY! —grité de dolor genuino
En ese momento mi mamá iba entrando a la cocina y yo me palpaba el labio levemente
—¿Que te pasó? —dijo sin ver aún mi labio, entonces lo descubrí —¡Ay, Dios! Eso no se te quitará así nada más... ¡Pero deja de tocartelo! ¡No lo toques!
Entonces aparté mi mano de mi labio, ella se acercó y lo miró, no me asusté porque estaba segura de que ya nadie se daría cuenta de eso.
—Tranquila mamá, ¿que puedo untarme? —dije de lo más tranquila
Ella lo pensó un poco y luego respondió —Creo que en mi habitación hay un pomo de aloevera para las quemaduras
Entonces solo me unté el pomo y dejamos de hablar de eso.
Una vez en mi habitación traté de recordar la noche anterior. Si recordaba que Elián me había besado, pero yo estaba muy borracha, a lo mejor estaba alucinando, y si pudieron haberme besado, pero ese tuvo que ser Javier. Así que dejé el tema yo también.
Los mese fueron pasando y yo seguía Encontrándome con Megan y Elián, pero ya me había convencido de que esa mordida no era de Elián, además cuando me vio la quemadura en el labio no mostró ninguna expresión en su rostro, así que dejé mis falsas teorías a un lado y seguí con mi vida se siempre.
Ahora estábamos en Julio del 2019
Iba caminando a casa de Megan, como acostumbraba, cuando llegué la puerta estaba entreabierta, así que no dudé en entrar porque Megan y yo teníamos la confianza suficiente, me dirijí rápidamente a su habitación sin detenerme a tocar o a escuchar, de lo cual me lamenté mucho, porque me traumaron mrk
Entré a la habitación sin detenerme y ante aquella escena lo primero que hice fue taparme los ojos.
¡MEGAN ESTABA TENIENDO SEXO CON SU TIO! ¡SU TÍO! ¿ENTIENDEN? ¡SU TIIIOOOO!
—¡AY! POR DIOS !LO SIENTO! —grité asombrada y con las mismas salí disparada de su habitación
Esa escena se grabó en mi mente.
Salí de la casa y caminé a paso rápido a la mía.
¿Megan con su tío? Es que aún no me lo creo. La imagen de ella encima de él mientras gemía y él... ¡Uys! Ya no quiero pensar en ello.
Así que fuí a mi habitación y allí me encerré a leer en Wattpad un libro llamado Damián, que no era el indicado para subirte los ánimos pero me entretendría
—¡Kiara! —escuché la voz de Megan —Kiara, dejame explicarte
Y entró a mi habitación, yo manejé la situación de la mejor manera, como si fuera algo normal
—Claro, explicarme que me mentiste todo este tiempo ¡y que engañaste a tu novio! —expresé
—Las cosas no son así, dejame explicarte
La miré, esperando que continuara
—Esto lleva mas de un año —dijo, a lo que yo abrí los ojos como platos —Yo no quería que pasara solo pasó y ya. Mira, tu eres mi mejor amiga debes entenderme, yo estoy enamorada de él y él de mi
Puse los ojos en blanco
—¿Y Elián? Tú novio —enfaticé las últimas palabras para que lo entendiera —Le has sido infiel desde hace mucho, desde que empezó la relación, y por lo que me dices desde antes de estar con él ¿a que juegas, Megan? ¿Te acuestas con uno y con otro así nada más? Además ¡es tu tío! ¿No te das cuenta de la gravedad de ese problema?
Ella soltó unas lágrimas, su cabeza gacha
—Lo sé... Es que... No me entenderías, yo me enamoré de él, Kiara, ¡me enamoré de él!
—Ok, ya, entiendo —traté de calmarme
»Es tu mejor amiga, debes entenderla, debes apoyarla —repetía en mi mente
»Tranquila —proseguí —Lo resolveremos solo... ¡Ash! No sé que pensar en este momento!
Ella lloraba en lo bajo, así que la atraje hacia mi, haciendo que se acostara en mi lado y la abracé, su llanto tomó fuerza y verla así, tan débil y temblando a mi lado, porque estoy segura de que estaba consciente de su grave error, me partió en alma y no pude contener las lágrimas que salieron de mí y la abracé más fuerte... Hasta quedarnos dormidas.
Megan decidió pasar la noche en mi casa y por parte de su madre no hubo problema, ya había dormido en mi casa muchas veces. Dediqué toda mi noche a hacerla sentir mejor, a darle todas mis fuerzas y todos mis ánimos, porque sé que en algún momento ella también lo hizo.
No podía imaginarme un mundo sin ella, porque no era solo mi mejor amiga, era mi hermana. Y la amaba mucho.
Pasaron varios días, Megan superó lo que pasó, y decidió seguir con su tío a espaldas de Elián. Elián pareció enterarse y terminaron, pero no duró mas de un día sin ella y volvieron
Hoy era exactamente 13 de Julio del 2019
Yo estaba súper mega hiper aburrida, no había nadie en mi casa, papá trabajaba, mamá trabajaba y yo chateaba en facebook como solía hacer todas las tardes, eran las 1:47 pm, la noche anterior Elián publicó una foto en su historia, estaba bebiendo en su casa con algunos amigos, así que decidí enviarle
Kiara: ¿por qué no me invitaste?
Elián: Porque no hubieses venido
Kiara: ¿quien dijo? Claro que iría
Elián: Si te invito un fin de semana ¿vienes?
Kiara: ¡Claro! Me hace falta un día de esos
Elián: ¿por qué no vienes ahora a mi casa? Y nos tomamos unas cervezas
Miré la hora, ahora eran las 1:58 pm
Kiara: Podría ¿le digo a Megan?
Elián: Nah, Megan no quiere venir a mi casa ni porque vengas tú. Pareciera que la relación fuese solo mía...
Kiara: No sé que decirte, Elián
Me sentí mal en ese momento, él era mi amigo, pero Megan mi mejor amiga, y yo no podría decir nada.
Elián: Megan no me quiere, esa es la plena
Kiara: Yo no sé nada XD
Elián: Entonces ¿vas a venir?
Kiara: No lo sé, Elián, es que tu vives en la misma calle que la familia de Megan, y se vería feo que su mejor amiga vaya a verse con su novio
Elián: Ays ¿que? Ni que vivieran al lado. Ven que nadie te va a ver. Yo quiero pasar un rato contigo, Kira.
Y en ese momento fue cuando Elián usó las palabras mágicas. Soy su amiga, puedo ir a su casa sin ningún problema
Kiara: Bueno, dame una hora.
Elián: 😍
Te espero...
Corrí a bañarme, mi mamá llegaba a las 04:00 pm y yo no podía tardarme en la calle, además nunca se podría enterar de que salí sin permiso.
Al salir, me puse un jean de tiro alto y un crop toss color rosa viejo, unas tenis negras y me solté el cabello en rulos, no me maquillé, no lo veía necesario. Estuve lista en menos de 30 minutos, me puse la cadena que me dio un amigo y le escribí a Elián para decirle que me esperara en la avenida.
Y en cuando llegué él ya estaba allí, habían varios chicos con él, pero eran mototaxis, entonces fui a saludarlo pero empezó a caminar, y yo lo seguí, tuve que correr un poco para alcanzarlo
—Hola, Elián —dije
El no me respondió solo sonrió, y caminaba sin mirarme. Me percaté de que estaba fumando, el olor a cigarrillo llegó a mi nariz tan rápido como lo que tardaba en llevárselo a la boca.
Era un poco incómodo que no me hablara, así que intenté sacar conversación
—¿Y que más? ¿Que me cuentas? —inquirí
Tenía que caminar casi corriendo porque él caminaba muy rápido
Volvió a sonreír y negó con la cabeza
—¿Qué? —seguí —¿Por qué no quieres responderme? ¿Que te pasa? Esto es incómodo
Sé que algunas veces yo era irritante, pero me valía vergas, yo soy como soy y ya.
—Nada, solo que tengo la cabeza en otro lado —respondió al fin
Al escuchar su voz por primera vez desde que llegué un escalofrío me recorrió el cuerpo, pero lo aparté de mi tan rápido como llegó.
Solo asentí, ya estábamos llegando a su casa
—¿En serio vamos a tu casa? Te dije que no quiero que la familia de Megan me vea, se ve mal.
—No te van a ver... Mira —señaló una esquina donde había una sombra —Puedes pararte en esa esquina y yo pasó, miro si no hay nadie y luego tu sigues
Asentí, por suerte su casa estaba al cruzar, no tendríamos que caminar más.
El pasó, miró y con un gesto de la cabeza me dijo que pasara. Pasé lo más rápido posible, sin mirar a los lados por miedo a que me viera alguien, y entré volando a su casa sentándome en el mueble que estaba de un laso donde nadie me podría ver si pasaban, Elián quiso cerrar la puerta y yo lo atajé
—¡No! Eso sería peor —dije, los nervios se notaban en mi voz
El sonrió, como en burla y yo puse los ojos en blanco
—Ok... —dijo y se sentó a mi lado
Había un chico en su casa, pero estaba muy concentrado en su celular como para fijarse en que alguien llegó.
—¿Y qué haz hecho todos estos días? —le pregunté a Elián
—Pensando —hizo un gesto como para restarle importancia —Nada más que mi novia me es infiel con su tío y yo ando aquí recibiendo cachos como el más cabrón
Yo lo miré, sin saber que decirle. Él también me miró, pero me miraba de una forma muy inusual, nunca me había mirado así. En sus ojos había profundidad, era como esas miradas que te lanzan los chicos para que sepas que les gustas. Pero Elián no tendría esas intenciones, tal vez yo lo estaba malinterpretando
—Y ¿que te hace pensar que Megan anda con su tío?
—Porque yo vi unos mensajes, la familia me lo dijo y también tuvieron un problema por aquello —informó
Era cierto, la mamá de Megan sospechaba algo, el tío le había mandado unos mensajes comprometedores, y su cuñada le había mostrado los mensajes a Elián. La verdad era que la familia de Megan era muy chismosa.
—Pues, yo no sé ni que decir —miré a otro lugar, esquivando su mirada.
—Tú debes saber, ella te cuenta todo a ti —aseguró
Yo me quedé en silencio, aunque supe que era un error, porque mi silencio le diría todo, así que dejamos el tema.
Volví mi mirada hacia él. Se había acercado mas a mi, mucho a decir verdad, ahora su mano me rodeaba los hombros y su mirada... Su mirada estaba posada en mis labios.
—No me mires así —dije tratando de contener una sonrisa
La verdad es que yo me río por todo, asi que era imposible contener la sonrisa, pero no se trataba de eso. Yo me sonrojaba de nada, y de seguro debía estarlo ahora, porque cuando los chicos se ponen así, para mi es inevitable reír y sonrojarme.
—¿Por qué? —esbozó una pícara sonrisa
—Porque es raro, es incómodo
Él rió
—Raro seria que yo hiciera esto —dijo para luego acercar mas su cara a la mía, como para besarme pero no lo hizo, luego se alejó
De seguro yo ya estaba roja
—Mejor ya deja de comportarte así, sabes que me sonrojo muy rápido —pedí
—Pero es que no puedo —susurró con la voz aún más ronca de como la tenía
—¿Por qué? Estas actuando muy raro, nunca te había visto así —lo miré —Elián, mirame —tome su cara y la puse frente a mi, analizando sus ojos
—¿Que? —preguntó extrañado
—¿Tú te sientes bien?
Bueno, drogado no estaba, sus ojos estaban de un color normal
Él se levantó y se miró en el espejo, no tenía nada. Se sentó a mi lado de nuevo y su atención cayó en la cadena que llevaba
—¿Me la prestas? —preguntó mientras la tocaba
—No puedo, me la dió un amigo y no puedo perderla
—¿Que amigo? —dijo soltando la cadena
—Arturo, ya sabes, el que es gay
Se tranquilizó y empezó a quitarse una que él tenía
—Hagamos un intercambio, yo te presto esta y tú me prestas esa —me mostró la cadenita, mas corta que la mía, dorada y llevaba una pequeña "k" dorada
La verdad, Elián tenía el poder de manipularme, debía aceptar que yo era débil ante él. Me quité la cadena y se la di, luego el quiso ponerme la de él y yo me recogí el cabello para que pudiera hacerlo.
Se me quedó mirando y me acarició el cabello
—¿Y si te robo un beso? —dijo de golpe
A lo que quedé estupefacta, no podía creer lo que decía
—¿Qué? ¡No! Eso nunca va a pasar —expresé
Él volvió a reír
—¿Que te está pasando? —proseguí —Nunca te habías comportado así
—Porque nunca hemos estados solos, sin Megan —dijo
—¿Qué?
—Es una historia muy larga —sonrió
—Cuentamela, aún me quedan 30 minutos
Entonces, por primera vez desde que llegué, el amigo de Elián levantó la vista de su celular
—Ah ¿que tu te vas ya? —preguntó, a lo que yo asentí —¿Por qué?
—Por mi mamá —respondí al mismo tiempo que Elián dijo "Por su mamá"
Él miró a Elián de una forma que no sé expresar y volvió su atención a su celular
—¿Quieres una cerveza? —preguntó Elián a lo que yo asentí
—Hey, pri, hazme un favor de comprarme dos cervezas —le dijo a su amigo
A lo que él asintió, Elián le dió la plata y el chico salió
—Kira, lo que pasa es que tu siempre me haz llamado la atención —admitió
Yo no hablé, solo Sonreí y puse cara de "¿Estas hablando en serio?"
—Y cuando tú tenias novio —siguió —Yo siempre tuve envidia, porque eres una chica tan linda, de buenos sentimientos, amable y cariñosa. Y la novia mía que ni atención me da, que anda con otro tipo sin decirme la verdad. Y tú ahí, siempre tan linda, que solo con tus gestos ya uno sabe que te gusta y que no. Una chica transparente, divertida, que siempre dice lo que siente o lo que piensa. Tú eres el tipo de chica que yo busco.
Yo no hablé, solo lo miré, sonriendo. Él ya debía saber que aquello me agradaba, que me dijera todas esas cosas lindas
—Elián, nada puede pasar entre nosotros —aseguré
—¿Por que?
—Porque tu eres el novio de mi mejor amiga, y aunque ustedes terminaran nosotros nunca podríamos estar juntos
—Pero ella nunca se va a enterar —aseguró
—Eso no importa —pensé un poco —Ademas, tú tienes una mala reputación. Esa de que siempre estas con las chicas solo para follartelas y ya, y conmigo no puede pasar eso.
—Contigo no va a pasar eso, dejame demostrarte que yo puedo tener algo serio contigo, dejame hacerlo
—No, no podemos, Elián, no podemos —cerré los ojos
Él se acercó a mi, su cara al lado de la mía
—Nada malo va a pasar —susurró
Volteó un poco su cara y se quedó mirando mis labios, llevó uno de sus dedos a mi labio inferior luego lo bajó y mi labio también lo hizo. Solo ese gesto me hizo suspirar.
Entonces el amigo de él llegó con las cervezas y una de ellas ya estaba abierta. Puso música y nos pasó las cervezas, y la abierta, claro, me la dieron a mi.
Desconfié, porque mi mamá es de esas que no paran de traumarte diciéndote todo lo que te podrían hacer en la calle. Y siempre me ha advertido que no reciba una cerveza abierta porque me pueden drogar.
—¿Por qué está abierta? —sé que fue imprudente, pero necesitaba preguntar
Ellos dos rieron
—Le eché una pastilla —dijo su amigo en broma
Elián agarró mi cerveza y la inclinó hacía atrás
—Mira, cuando le echan algo o cambia de color o las burbujas se acumulan abajo —me informó para luego darle un trago para que yo tuviera confianza
Entonces me la tomé
Elián tarareaba algunas canciones. Me miró, sonriendo, mientras tarareaba una y sin avisar me plantó un besó en los labios, dejándolos húmedos... Yo solo Sonreí
Él se acercó más y yo lo dejé, con su otro brazo me rodeó la cintura, poniendo su mano en mi abdómen desnudo, ya que mi blusa lo descubría. Elián se inclinó y me besó, el beso fué posesivo, necesitado, como si lo estuviese esperando desde hace mucho. Llevó su mano a mi mejilla e inclinó su cabeza para profundizar el beso. Sentí una corrientes por todo mi cuerpo. Me separé, girando la cabeza a un lado, entonces unió su frente con la mía, y con su mano daba pequeños apretones en mi cintura. Nuestras respiraciones ya estaban agitadas. Sus labios volvieron en busca de los mios y yo no me aguanté más, sabía que no estaba bien pero no tenía las fuerzas para salir de esa situación. Entonces mi mano acunó su rostro, atrayendolo hacía mí, y estaba vez el beso fue mas desesperado y hambriento. Sentía sus dientes rozar mis labios y no me contuve al morder su labio inferior. El beso era lento pero desesperado, Elián mordía y succionaba levemente mi labio. Poco a poco el beso se volvió más rápido y Elián ya me tenía a recostada al mueble con él casi encima de mi, dando apretones en mi cintura y luego en mi trasero, mi mano se paseó por su cabello, acariciándolo. Ya no podía más, él tenía el control sobre mí, así que nos besamos hasta mas no poder.
Cuando nos separamos la culpa cayó sobre mí, él lo notó y me abrazó, hundí mi rostro en su pecho
—Me siento mal —admití
—No lo pienses mucho, solo vive el momento —me pidió
Me pasó la otra cerveza y me la empecé a tomar. Él se veía muy feliz, y a mi me gustaba creer que era por mi
—Yo nunca imaginé que esto iba a pasar —empezó —Yo pensé que te ibas a ir de aquí y no me dejarías besarte. No sabes lo mucho que lo deseaba
—Yo tampoco puedo creerlo, me parece algo imposible —admití
El sonrió
Y siguió besándome, muchas veces trató de tocarme los senos pero no se lo permití
—Vamos a mi habitación —propusó
Admito que eso me asustó
—¡No! —expresé —Eso sería peor, mejor quedemonos aquí, además, ya me tengo que ir, mira la hora
Miré la hora y ya eran las 3:32
—Ya me tengo que ir, mira —le mostré la hora
—Solo son cinco minutos, allá tendremos mas privacidad
—No, no puedo, por favor hazme caso
—Hazme caso tú —dijo —Aquí puede entrar cualquiera y te verá en cambio allá no
—No puedo, ya me tengo que ir —traté de convencerlo dándole muchos besitos, él estaba sentado en mis piernas ahora —Acompañame a mi casa —le pedí, él no dijo nada así que yo seguí —hazme el favor de ver si no hay nadie en la calle para poder salir
Él se levantó para ir al frente y yo lo atajé para darle un último beso, él no lo siguió, solo se dejó besar por mi y cuando acabé salió al frente. Cuando entró balbuceo algo que entendí cómo "Yo no voy a ningún lado" y entró a su habitación.
Yo incliné mi cabeza hacia atrás
»Dios mio, ahora que hago —pensé
Tuve la esperanza de que Elián saliera y me llevara pero la perdí cuando se quitó la camisa y la dejó en la sala.
Le pedí a su amigo que entrara y viera si puedo entrar, pues, tenía miedo de encontrarlo desnudo allí.
Él entró y cuando salió estaba riendo y con un gesto me dijo que entrara.
Yo entré, aún asustada. Elián estaba sentado en su cama usando su portátil. Mi mirada viajó a su pecho, y la desvié enseguida. Debía convencerlo de acompañarme a mi casa.
Me senté en sus piernas
—¿Por que te pones así? Es que yo tengo que irme y tú no entiendes eso ¿quieres que yo me gane un problema? Si mi mamá no me encuentra en la casa me mata —le dije
—Yo solo quiero tener un tiempo a solas contigo y tu no quieres, te parece mucho. Además yo en tu casa no puedo besarte porque nos ven
—Pero después vamos a tener todo el tiempo del mundo para besarnos —puso voz de novia melosa para convencerlo pero eso empeoró las cosas
Él me rodeó la cintura con su brazo y me tumbó en la cama, cayendo él encima de mí.
—¿Eso quiere decir que entonces si me darás una oportunidad? —dijo sonriendo
—No sé, te respondo luego —me calló con su boca cuando me besó
Esta vez me besó de una forma apasionante, de esas que te excitan en menos de un segundo, pero yo era fuerte ante eso. Soy virgen, y aunque me excito, a veces pensar tanto en lo que hago evita que me excite. Y este era el caso, pensé en el error que estaba cometiendo, le estaba siendo infiel a mi amiga, la estaba traicionando.
Elián empezó a acariciar todo mi cuerpo mientras me besaba, luego se levantó, quedando sentado aún en mis piernas y se quitó los zapatos, luego empezó a bajarse el pantalón.
A mi me dio un ataque de risa, pero era por los nervios
—¡No! ¡No! ¡Elián! —dije entre risas cuando intenté levantarme, pero él cayó encima de mí, empujándome a la cama de nuevo.
Su boca atacó mi cuello y su mano se fue a los botones de mi pantalón, tratando de desabrocharlo, yo quité su mano y él la llevó debajo de mi blusa, directo a mis pechos, y antes de que llegara la aparte, él me romou la mano y la llevó al lado de mi cabeza. Para luego llevar su mano a mi pantalón de nuevo, yo se la volví a quitar
—Solo abrazame —dijo en medio del beso mientras llevaba mis manos a su cuello
Yo lo abracé, estaba sedada por sus besos y sus caricias. Su mano volvió a mi pantalón y yo tardé en asimilar todo.
Me manipuló. Con su berrinche me hizo entrar en su habitación y ahora quiere hacerlo para follarme.
Quité su mano de mi pantalón de nuevo y me rebelé
—¡Quitate! ¡Quitate! —le grité mientras lo golpeaba y lo empujaba en el pecho —¡Me manipulaste! ¡Me manipulaste para que entrara aquí! ¡Quitate que me voy! —le grité y él se apartó
—Bueno, vete —lo dijo como si nada, y eso me prendió como a un fosforito
Evite volver y salí de su habitación, miré por la ventana y no vi a nadie así que salí volando de su casa.
Me manipuló, solo quería follarme para vengarse de Megan y ya, porque sabía que le dolería mas si fuese con su mejor amiga. Todo lo que dijo fue mentira. Me mintió y me manipuló para seguir con su sucio plan
»Malparido —fué lo que pensé
Iba llegando a la avenida cuando un grupo de chicos empezaron a piropearme
—Uy, mamasita, si estas linda —decian algunos
—¡Ay! ¡Ustedes no me molesten! ¡Que fastidio! —les grité, estaba muy enojada
Ellos solo rieron.
Yo llamé a uno de los mototaxis de la esquina y pedí que me llevara. Miré hacia atrás, tenía la esperanza de que él viniera por mi, que se disculpara y que me explicara las cosas. Pero esto no era una película, él nunca vino por mí, y tal vez no me volvería a buscar.
Me monté en la moto y esta enseguida arrancó.
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