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T R E I N T A

Luka ha traído su camioneta por lo que nos acercará al edificio a Denny y a mí, además a él le alegró mucho no tener que cargar sus bolsas de ropa en un taxi. Él se ha ido de copiloto y yo en la parte trasera, la música que Luka ha puesto es lo único que se ha escuchado desde que nos montamos pero no es un silencio incómodo, es solo que no hay gran cosa qué decir; saco mi teléfono y le mando un mensaje a Denny.

Oye, ¿y ahora? ¿Donde se quedará Luka?

Estoy en el asiento detrás de Luka por lo que me queda fácil mirar a Denny y esperar el par de segundos que tarda en sonar su celular. Al leer el mensaje suelta una sonora risa.

—¿Qué es tan gracioso? —pregunta Luka.

Denny gira la cara y me mira con una ceja levantada pero vuelve rápidamente la vista al frente.

—Nada, bobadas que manda Gabriel.

Cómo que dónde se quedará? Pues con nosotros.

¿No te parece un poco abusivo invitar a gente a casas que no son tuyas?

No, para nada.

Vamos, me lo agradecerás después.

No creo que eso llegue a pasar.

¿Por qué hiciste esto, Denny? Independientemente de tus teorías estúpidas del destino, fue grosero hacerme la emboscada.

Si te hubiera dicho que él venía, tú no vienes. Y no lo culpes, de verdad casi lo obligué.

O sea que él no quiere estar acá.

No es eso, es que no sabe cómo proceder.

¿Proceder con qué?

Denny, no es gracioso.

Él sí me creyó mi teoría estúpida de que algo se deben.

Esta es la oportunidad de pasar unas horas juntos, de hablar.

Pero es que yo no le veo sentido.

Yo sí.

Solo es para que hablen. Nada más va a pasar.

Claro que nada más va a pasar.

Bueno, si estás tan segura, no te preocupes. Ya ibas a pasar el fin de semana conmigo, ¿qué diferencia hace que sea con él? Nosotros dos hemos hablado cómodamente hoy, piensa que con él puedes también hablar cómodamente.

Te haré una pregunta, Denny Keiller y de la sinceridad que me des puede depender tu amistad conmigo.

Dispara

Es obvio que planeaste esto con Luka, dime, ¿él qué propósito tiene al haber venido?

Denny de nuevo me mira por en medio de los dos asientos, esta vez con seriedad. Vuelve a su teléfono y tarda un poco más en contestar.

Solo compartir contigo un poco de tiempo.

Quiere hablar. No le digas que te dije, pero siente que te debe un poco más que una disculpa, quizás una explicación.

Mira, él es consciente de que estás en planes de boda, no es que se vaya a lanzar a ti como un animal, él solo quiere... no sé, Cinthya, que las cosas entre ustedes mejoren, no ser ajeno a ti. Él está medio loco pero no tiene malas intenciones, independientemente de lo que pueda sentir, no hará nada para lastimarte, créeme.

¿A qué te refieres con "lo que pueda sentir"? ¿Acaso siente algo?

Las manos me han temblado un poco al escribir aquello de solo pensar que la respuesta pueda ser sí y que esta visita tenga para él otros matices. Vale, en Allington me había casi invitado a salir pero supuse que todo deseo de hacerlo de nuevo había muerto al decirle de mi compromiso; la verdad es que sí me pone algo nerviosa la idea de compartir con él más tiempo ahora que sabe que me voy a casar, no quiero que salgan temas incómodos o algo parecido pero al mismo tiempo estoy bien con eso, me siento segura de Santiago ahora, y quiero tener la confianza de que Luka me tratará con la misma familiaridad amistosa que Denny... además, si Denny estará con nosotros no será para nada raro.

Veo a Denny que empieza a escribir para responderme, pero entonces Luka se detiene y habla.

—¿Es acá?

Miro por la ventana y sí, ya hemos llegado. Denny guarda su teléfono sin darme respuesta.

—Sí.

Nos quedamos todos quietos y en silencio. Denny me observa, obviamente dándome la libertad de dejar o no pasar a Luka luego de lo que le dije. Suspiro. Tomaré esto como la oportunidad de devolverle a Luka el favor de haberme dado techo en el pasado cuando no tenía nada.

—Te quedas con nosotros, Luka. —No es una pregunta. Veo a Denny sonreír satisfecho y añado—: Y dormirás con Denny, por supuesto, porque no hay sofás y solo hay dos camas.

El conspirador me mira mal pero yo me encojo de hombros, si pensaba que estaba la posibilidad de que él o Luka durmieran conmigo, se equivocó; no voy a molestar mi comodidad por una emboscada, no gracias.

—Puedo tomar un hotel —propone Luka con cortesía.

—No, duerme conmigo. —Denny le hace un puchero—. Hace frío y podemos acurrucarnos.

Suelto una carcajada cuando Luka le da un manotazo.

—No me pienso acurrucar contigo.

—Bien, entonces solo dormir normal, cada uno en su lado. La cama es grande al menos. Y ya está tarde, es mejor no salir a buscar hotel a estas horas.

—Son menos de las once —apostilla Luka—. Pero la verdad sí estoy cansado.

—Entonces vamos —digo—. Entra por ahí, le diré al vigilante que nos de un parqueadero por la noche.

—¿No habrá problema?

—No, usualmente me deja uno cuando traigo auto. —Y cuando vengo con Santiago, añado mentalmente—. Denny, bájate para poderme bajar yo.

Denny obedece y cuando estamos los dos afuera —con las bolsas de ropa en las manos—, cerramos la puerta. Me asomo por la ventana y Luka me sonríe.

—¿Hablas primero con el vigilante?

—Sí. De todas formas ve entrando, él no pone problema. Luego busca la subida al primer piso y nos vemos en la recepción.

—De acuerdo.

Luego de que el vigilante le dijera a Luka cuál tomar, con Denny esperamos cerca del elevador. Me pasa un brazo por los hombros, tan meloso como cuando alguien siente un poco de culpa y quiere pedir perdón.

—No te enojes por esto. Puede ser bueno, ya verás.

—Y estarás con nosotros todo el tiempo —afirmo.

—¿Temes quedarte con Luka a solas?

—No.

—Me alegra escuchar eso.

—No volveré jamás a quedar contigo luego de esto —manifiesto.

Denny se pone frente a mí y me mira a los ojos con una seriedad atípica en él.

—Cinthya, si estás de verdad molesta, lo arreglaré y nos iremos mañana o algo. No quiero que pienses que te estoy obligando a hablar con él y Luka también es consciente de que puede que no quieras hablar con él y está bien con eso. El haber venido sin decirte fue para que no dijeras que no pero no hay obligación de nada.

Lo miro sin expresión; la verdad es que sí me siento algo traicionada con la manera en que hizo las cosas, prácticamente se está burlando de mí al hacerme esta emboscada pero en sí no me incomoda tanto que ambos estén acá. Desvío la mirada al otro lado del pasillo y con el mismo fastidio en el gesto, le contesto:

—No pasa nada, no estoy molesta.

—Te quiero mucho, Cinthya.

—Lo sé, Denny, yo también te quiero.

—Recuérdalo siempre, ¿vale? —Me mira con intención, serio y casi temeroso—. Siempre recuerda que te quiero.

De repente Denny me parece demasiado enigmático y misterioso para mi gusto así que omito preguntar más; ya Luka está acá, ya nada puede ser peor. Ya le dije a mi mamá de mi boda, ya afronté su predecible desaprobación y estoy sumamente cansada por hoy. Los párpados me pesan y sé que al poner la cabeza en la almohada caeré rendida, no quiero ni pensar más en los significados de las palabras raras de Denny, por mí que planee lo que quiera, ya pensaré en eso mañana.

Intento mover mi cobija hacia arriba pero me resulta imposible porque tengo todo el cuerpo enrollado y la cobija está prisionera. Tengo un calor fastidioso en todo el cuerpo y siento enojo cuando no me puedo quitar toda esta mierda de encima y me veo obligada a abrir los ojos del todo para desenredarme. Ya que esta habitación tiene una ventana mucho más pequeña que la otra, se concentra más el calor y mi frente llena de sudor es prueba de ello. ¿No se supone que esta ciudad es fría?

Me siento en la cama completamente a oscuras, resoplando y de mal humor. Debe ser de madrugada; al acostarme me dormí rápido pero hace como veinte minutos desperté de repente y no he podido dormir más, es una suma del calor, de seguir pensando en mi mamá y de algún perro callejero que no ha dejado de aullar desde hace rato.

Me doy por vencida y me levanto sin encender luces, me coloco un suéter porque el calor solo es en la cama, no fuera de la habitación y salgo hacia la cocina; no es altamente recomendado pero comer algo a veces hace que las ganas de dormir me vuelvan.

En la pequeña cocina solo está lo que Aida me dejó comprado, lo más básico y no muchas —si no ninguna— golosina. Me lamento internamente, debo siempre recordar comprar cosas no saludables porque siempre golosa. Sin muchas opciones me sirvo un vaso con leche y me siento en una de las sillas del comedor, hay un televisor pequeño acá pero no tengo ganas de hacer bulla ni de ver nada.

—Hola. —El murmullo que a mis oídos y por la hora me sonó de ultratumba me hace dar un respingo en mi asiento. Luka se sienta en la silla del otro extremo de la mesa—. Perdón.

Una risa surca sus labios, burlándose de mí. Trae una camiseta blanca, una sudadera oscura y un par de ligeras ojeras, como si no hubiera dormido nada desde que se acostó.

—¿Mala noche? —tanteo.

—Denny es demasiado inquieto —murmura en el mismo tono bajo que yo—. No ha terminado de lanzarme un manotazo cuando ya me quitó la cobija por el otro lado. Y tiene el sueño pesado, lo he regañado varias veces pero él ni cuenta se da. Dios, yo no sé cómo hace Gabriel para aguantar eso.

—Quizás duermen en camas separadas —aventuro—. O Gabriel lo deja durmiendo en el suelo, total si tiene el sueño pesado ni se da cuenta. Y si tienen alfombra es más fácil aún.

—Debí pensar eso hace unas horas —dice, riendo entre dientes.

—¿Qué hora es?

—No sé, como las dos o dos y media. Perdí la noción del tiempo luego de la cuarta vez que me despertó. Luego escuché pisadas, salí y acá estoy, no puedo dormir.

Bebo de mi vaso mirando a Luka; la única luz que encendí fue la de la cocina a sus espaldas por lo que veo de él una sombra opaca pero lo suficientemente clara para distinguir la miel de sus ojos que mezclado al estado alocado de su cabello propio de estar recién levantado, lo hacen ver atractivo y curiosamente joven... no es que sea viejo en sí, pero ahora no se ve de casi treinta.

—Apuesto a que estás arrepintiéndote de no haber ido a un hotel —bromeo.

—No tanto. En un hotel no te encuentro en el comedor a las dos de la mañana.

—En un hotel estarías durmiendo plácidamente y no sería necesario salir a las dos de la mañana, sin importar a quién te encuentres.

—Touché. —Luka se inclina hacia adelante, poniendo los codos sobre la mesa—. Lamento lo de mi llegada repentina.

—Dijiste que Denny te obligó.

Luka menea sus manos como si fuera una balanza y estuviera tanteando cosas en cada lado. Cruza ahora los brazos sobre su pecho, abrazándose como si tuviera frío.

—Bueno, más que obligarme solo me lo propuso y yo dije que sí.

—Cuéntame qué te dio de argumentos para pedirte venir —pregunto—. Tengo curiosidad de si Denny es tan parlanchín con todos o si es que conmigo se explaya.

Luka ríe.

—Me dijo que era bueno para que habláramos, que podía ser importante y que a como están las cosas, no es que tuviéramos más oportunidades. ¿Qué te dijo a ti?

—Algo similar —confieso—. Eso de las oportunidades y además que él cree seriamente que tú y yo nos debemos algo. —Esboza una sonrisa y asiente por lo que imagino que Denny le dijo lo mismo a él—. Por un momento sentí que él sabía algo que nosotros no y que quiere que lo descubramos, luego recordé que no vivimos en una película de misterios y lo descarté.

—A mí me dio la misma impresión, ¿sabes? Él y yo no hemos sido los mejores amigos del mundo pero anda muy insistente con la casualidad de haberte reencontrado. Me ha hablado más en estas semanas que en los diez años que nos conocemos.

—Puede que estemos alimentando alguna fantasía suya que involucre el destino. Anda muy entusiasta con el tema.

—¿Y tú qué piensas?

Me inclino del mismo modo que él hace un momento, con mis manos bajo mi mentón. La mesa es un poco larga así que no estamos cerca el uno del otro pero como estamos entre sombras, el espacio da la ilusión de ser más pequeño de lo que en realidad es. Bajo la mesa cruzo mis tobillos y miro fijamente a mi acompañante.

—¿Sobre el destino? Que Denny tiene películas muy montadas en su cabezota. Sobre una deuda... bueno, mi amistad contigo empezó porque te debía un helado por salvar mi empleo, pero estoy segura de que lo pagué y quedamos a mano.

Ríe entre dientes y hago lo mismo porque el recuerdo me resulta gracioso.

—Tal vez la deuda es de mi parte.

—Eso también lo mencionó... —Mi voz baja un poco más—. Algo de que tal vez sientes que me debes una charla o algo más... —Evito decir "una disculpa o una explicación" porque muy dentro de mí siento que eso no viene al caso.

La mirada de Luka desconecta de la mía y la baja a la mesa, tiene una expresión serena pero a la vez parece que mil cosas pasan por su mente. Ojalá pudiera leer mentes en momentos así.

—O puede ser un helado —dice finalmente—. Puede que nunca nos tomáramos nuestro último helado oficial.

—¿Hay una cifra oficial para compartir helados?

—Podemos suponer que sí mientras descubrimos qué nos debemos.

Sus ojos pasan a ser penetrantes y con significados escondidos; creo que Luka y yo nos quedamos debiendo un par de cosas, un par de meses o un corazón completo pero de todas maneras es ese tipo de deuda que no se puede saldar porque la vida no se presta para eso.

—Entonces vamos a suponer que sí es un helado.

—O un día completo —aventura de nuevo—. ¿Qué planes tenías para mañana... o para hoy más tarde mejor dicho?

—Pues de momento voy a ir a San Patricio a ver a Carmen y también voy a pasar al cementerio temprano. De resto no tenía muchos planes, había pensando en invitar a Denny al cine o a tomarnos algo en la noche, supongo que podemos ir los tres.

Luka agacha la mirada y una diminuta sonrisa adorna su rostro.

—Me parece bien. Podemos ir a almorzar si quieres y luego te puedo pagar el helado.

—Le deberás comprar uno a Denny también.

Asiente sin mucha convicción. Denny tiene razón cuando dice que si me hubiera contado que Luka iba a estar acá no hubiera venido, no es que no me agrade Luka, al contrario, debo admitir que hay un algo en él que me atrae, lo que no sé es si es una atracción física o solo un fantasma del amor que le tuve en el pasado, y mi reticencia a de hecho compartir con él mucho tiempo nace del temor a descubrir cuál de las dos opciones es.

Michelle tuvo un novio durante su adolescencia que duró a su lado casi cuatro años, hoy en día son amigos y ella dice que siente una atracción fantasma por él, es como un magnetismo propio del tiempo y momentos que compartieron juntos, es un cariño borroso que le tendrá por siempre pero asegura en nombre de Dios —aunque no vale porque ella no cree en Dios— que jamás querría regresar con él, que ambos están en lugares distintos y buenos para ellos en este momento y que aunque haya aún una vibra allí, no es una vibra de "te amo y quiero que seas el amor de mi vida", es más una ceniza del fuego que ardió con ellos pero que ni con un milagro se volverá a encender porque ninguno así lo desea.

Eso es lo que creo por ratos que tengo con Luka.

Sin embargo, hasta no estar completamente segura, la otra opción sigue ahí moviéndose con el viento decidiendo si me llega de lleno o no, esa opción en la que como Denny dice, hay maripositas que aún se mueven con su nombre, la opción en la que ese mismo gusto, esa movida de piso como lo llama Michi, puede desequilibrarme la buena estabilidad emocional que ya tengo y dejarme en debate conmigo misma.

Estando en mi casa, con mi Santi o en cualquier lado en que Luka no esté, estoy plenamente inclinada a no intentar descubrirlo, a dejarlo como una duda más que revuele por mi mente sin respuesta ni importancia hasta que desaparezca, pero en este momento, teniéndolo en frente y durmiendo bajo el mismo techo, sabiendo que mañana estará con nosotros todo el día, siento deseos de resolver ese asunto, de poder ponerle el nombre de cariño fantasma o atracción completa a lo que siento cuando Luka me habla.

Me asusta pensar que es lo segundo pero una vez más siento que es otro de los temores que la vida usa para ponerme a prueba y como buena mujer terca y obstinada, no quiero evadirlo y dejarlo en cobardía.

No, yo quiero saber. Y para cuando vuelva el domingo a casa, ese asunto estará resuelto. 

¡Hola! ♥

¿Nos extrañaron? 7u7 Hemos vuelto con la cabeza más clara pero con muchos líos novelescos así que se viene drama y quizás necesite más paciencia ?). Muchas gracias a los que siguen acá, amo su apoyo y siempre lo agradeceré. Espero volver con un capítulo pronto pero no prometo nada de momento. 

¿Qué les pareció este capítulo?

Les adelanto que el siguiente viene narrado por Luka bb y que les encantará ♥

🧡 Nos leemos 💛

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