Al día siguiente en la escuela, Jungkook estaba siendo azotado contra el casillero por haberse olvidado de hacerle la tarea a su compañero.

—Te dije que lo pagarías caro, Jeon.

Y lo volvió a estampar contra el casillero. Sus lentes volaron al piso y uno de los vidrios se rompió.

—Dije que no haría más tarea de nadie.

—Lastima, chico. Vas a tener que hacerla.

Y le dio un puñetazo en el estómago.

Ah pero la paliza que el chico de cabello morenos se ganó de una tercera persona  fue peor que el golpe que le dio a Jungkook.

—Déjalo en paz — gritó YeonJun empujándo al otro chico hacia atrás. En ese momento Taehyung estaba en dirección por haberle tirado encima una bandeja a un chico que lo había pisado a propósito en la fila de la cafetería.

Jungkook tenía suerte de que Yeonjun se encontrara ahí.

—Quítate, marica.

Oh, Yeonjun se enfadó y lo volvió a echar hacia atrás. Cuando el chico se tambaleó Yeonjun ayudó a levantar a Jungkook y lo llevó hasta el baño y cerró la puerta con la traba. Jungkook descansó la espalda en la puerta.

—¡Te dije que fueras antes! —regañó Soobin a Yeonjun que también estaba en el baño. Jungkook levantó la cabeza al verlo.

Yeonjun se acercó a Jungkook.

—Perdón por ser un cobarde. Otra vez.

Pero esta vez Jungkook estaba tan quebrado que se lanzó a los brazos de Junnie y rompió a llorar por el miedo y la impotencia.

Lo único que necesitaba en ese momento era un amigo. Y a pesar de todo lo que Yeonjun había hecho y dicho, Jungkook iba a darle otra chance. Aparte se notaba que Junnie quería arreglar las cosas.

Soobin se acercó a ellos y también los abrazó.

—Ayer dijeron que me iban a hacer algo si yo no les hacia la tarea. Ya estoy cansado...

—Lo vamos a solucionar, Jungkook. Pero tú debes ponerte firme ante el resto. Deja de ser la víctima anímate a decir cómo te hace sentir. — aconsejó YeonJun.

—Yo también quiero pedirte disculpas por haberte pedido mi ensayo de historia. —Dijo Soobin. Jungkook se separó de ello y se levantó para lavarse la cara.

—Tu lo hiciste de buena formas. —Jungkook le sonrió —Y me diste pastilitos, no importa.

—Si importa... porque también te use para algo que yo mismo debía solucionar.

Yeonjun al escuchar a Soobin decir eso bajó la cabeza. Él se había comportado mal con Jungkook por la situación en su casa, pero no podía dar excusa con eso, Yeonjun sabia perfectamente que solo manipulaba  a Jungkook por maldad, para pertenecer al resto y para desquitarse su mal humor con alguien.

—Tu no lo merecías. — le dijo Junnie con cara larga —¿podemos empezar de nuevo?

Jungkook se lavó la cara y les dijo que sí a ambos.

—Gracias, chicos.

Y lo volvieron a abrazar.