CAPITULO III: LA SELVA DESCONOCIDA
Franco y Cabral se encontraban explorando la selva, el navegante estaba fascinado con la fauna de nameku. flores negras y enredaderas azules que cubrian los enormes arboles eran apenas una parte de lo que este planeta tenia por ofrecer.
despues de unos minutos caminando vislumbraron un rio a lo lejos, tambien se fijaron en una manada de criaturas de seis piernas, pelaje negro, boca de mosquito y ojos como platos.
-shivings-dijo cabral en voz baja.
-¿son peligrosos?-pregunto franco mientras se agachaba.
-ellos no, pero...-cabral dirigio su mirada rio abajo al tiempo que se agachaba-ellos si-dijo mientras señalaba el lugar.
franco dirigio su mirada al lugar que este señalaba, al principio no entendia que le estaba señalando, pero despues de unos segundos fue capaz de ver movimiento entre los arboles. unas criaturas de cuatro patas y piel roja se acercaban cuidadosamente a la manada.
-karms-susurro franco mientras acercaba su mano a la funda, temblando.
-controlate-le ordeno cabral mientras le agarraba la mano-se que puede dar cosa verlos y mas para un novato, pero no intentes ninguna estupides- dijo cabral muy serio.
-¿cosa? estoy temblando de emocion, estoy impaciente por analizarlos y registrarlos-susurro con entusiasmo
cabral lo miro con cara de ¿estas bien? y acto seguido se concentro en los karms.
mientras hablaban, los karms ya habian devorado a los shivings y estaban vomitando sus huesos.
-es nuestra oportunidad de rodear el rio ya que estan cansados- informo cabral-no hagas ruido a menos que quieras morir-adivirtio
-claro no te preocupes-dijo franco en tono tranquilizador.
sin embargo cuando dio el primer paso hizo crujir una rama de manera escandalosa, atrayendo la atencion de los karms.
-sos un pelotu-sus palabras fueron interrupidas por el rugido de un karm hambriento.
-CORRE-grito cabral mientras agarraba a franco del brazo y lo obligaba a correr.
mientras huian del karm, franco desenfundo su arma y trato de darle, pero le resultaba dificil darle y los disparos iban a parar contra los arboles
-MAS RAPIDO-gritaba cabral mientras corrian.
derrepente cabral cambio de direccion y franco lo siguio, mas adelante se percato de una montañas de hojas.
-hojas caidas en plena primavera- penso franco (sabia la epoca de antemano gracias a su computadora)
cuando estaban a punto de de chocar contra ella, cabral lo agarro del hombro y lo saco del "camino", sin embargo el karm choco de frente con la montaña revelando una trampa de redes, el karm rugia movia amenazadoramente sus patas pero no podia zafarase.
-uf uf estubo muy cerca-menciono franco con cara radiante mientras que analizaba a la criatura con su reloj inteligente.
-es una suerte que haya puesto esta trampa hace poco, tu pelotudes casi nos mata- comento cabral aliviado.
-de todos modos salio bien ¿no?- dijo franco algo desesperado.
de cualquier forma...-saco su pistola y apunto al animal indefenso.
-ESPERA- franco se puso adelante del karm-no hay necesidad de matarlo.
-por supuesto que la hay- le contradijo cabral intentando apartarlo-si no lo matamos se liberara y buscara a su manada para volver por nosotros, ademas esta anocheciendo, necesitamos comida.
-pero...-balbuceaba franco tratando de proteger al animal.
-¡sin peros!-cabral aparto al joven explorador y de un disparo mato a la criatura. en el piso franco miraba con los ojos y la boca abiertos como el animal dejaba de retorcerse.
-perdoname franco pero asi funciona la supervivencia-se lamento cabral mientras enfundaba su arma- dejas de lado tu humanidad con tal de aferrarse a la vida, sin importar los medios.
-el fin no justifica los medios, cabral- dijo franco algo enojado, nego con la cabeza y volvio a sonreir-bueno, ¿que hacemos ahora?
cabral lo miro un tanto desconcertado y dijo
-bueno... anda a juntar madera para hacer una fogata- dijo mientras sacaba su cuchillo- yo voy a despellejarlo para cocinarlo.
-no hace falta-dijo entusiasmado mientras se descolgaba la mochila, la abria y metia la mano tratando de buscar algo.
-¿que estas buscando?-pregunto cabral desconcertado.
-ya vas a ver- atino a responder.
entonces saco de la mochila un cubo del tamaño de una pelota de basquet, la apoyo en el piso y presiono uno de los botones ubicados en la parte frontal, inmediatamente el cubo se abrio en dos y salio una especie de pared que se transformo en una mesa 65x48.
-en esta plancha podemos cocinar- informo franco satisfecho.
-es impresionante lo que se puede lograr en tan solo 10 años- murmuro impresionado.
entre los dos despellejaron al animal y pusieron en la plancha los todos trozos de carne que pudieron. contaron historias, cantaron y bebieron de la cantimplora de franco, por ultimo fueron a dormir en sacos de dormir.
FIN
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