Jimin no sabía que rayos sucedía con las personas, ¿Acaso no sabían que el baño era para ir a hacer tus necesidades y ya? ¿Por qué siempre tenían que ir a chismear a aquel lugar sagrado y no dejaban a los demás concentrarse en su liberación? Definitivamente, no entendía a la gente, y sobre todo, no entendía como podía ser posible que sus oídos estuviesen escuchando aquellas palabras.

¿A quien rayos se le había ocurrido aquella idea? ¿Cómo podían siquiera creer posible aquella situación? No, no, no, incomprendible y terrorífico.

En cuanto sus oídos captaron su nombre entre la plática que tenían los chicos fuera de su cubículo, en cuanto sus sentidos cayeron en cuenta de lo que implicaba aquello, simplemente quiso salir corriendo de ahí, volver el tiempo y evitar poner en marcha aquel terrible plan.

¿Yoonmin? ¿Real? ¡No! Ese no era el plan, esa no era la idea, no, definitivamente no tenía que haber sucedido aquello, ¿Quien habla comenzado el rumor? ¿Quien estaba diciendo todas aquellas mentiras?

Su corazón dió un vuelco al pensar en la reacción que tendría Yoongi...  Oh Yoongi, ¡diablos!, jimin podía considerarse hombre muerto, y como si le hubiese llamado con la mente, la puerta de los baños se abrió de golpe, y jimin ni siquiera tuvo que esperar a aque gritaran su nombre, para saber de quién se trataba.

—¡Jimin! —el corazón del pelinaranja se detuvo en cuanto escucho su nombre ser llamado de aquella forma, pues a pesar de saber lo que se avecinaba, aún así, se asustó por el tono que utilizo Min para llamarlo—, Jimin, te conviene salir antes de que yo te saque de ahí, ¡Ya!

Jimin brinco en su sitio al escuchar nuevamente el grito de Yoongi.

—¿Ustedes qué miran? —gritó nuevamente Yoongi, a quienes jimin imagino, era quienes estaban chismeando sobre aquello tan solo unos segundos antes— ¡Largo de aquí! —grito por último, haciendo que todos en el lugar salieran pitando al ver el rostro furico del peliazul.

—Padre nuestro que...

—¡Jimin! Déjate de juegos y sal ya.

—NamJoon, nunca olvides que te amo y que...

—¡Por un demonio! ¡Sal ya!

Con el corazón acelerado, los nervios a flor de piel y con la seguridad de que sería asesinado por Yoongi, Jimin salió del cubículo, mirando a todos lados en búsqueda de una vía de escape.

—Ni se te ocurra —dijo firmemente Yoongi, mirando de muy mala manera al pequeño pelinaranja.

—Yoongi, lo siento, ¿si? —dijo casi al borde del desespero—, nunca pensé que esto llegaría a ocurrir, es decir, ¿Cómo pueden siquiera imaginarlo? No es posible, no es factible, tu y yo, no —dijo negando firmemente, con la preocupación marcando cada una de sus facciones.

—Yo tampoco sé cómo llegaron a pensar siquiera esa posibilidad —con cada palabra, Yoongi avanzaba más hacia Jimin, quien simplemente pudo retroceder ante cada paso dado por el peliazul, hasta que ya no fue posible alejarse más, y su espalda choco contra la pared—, y tampoco tengo idea de cómo lo vayas a lograr, pero espero que pronto mis oídos dejen de escuchar esos rumores, ¿Quedó claro? —aquello último lo dijo dando un golpe a la pared con su palma, quedando demasiado cerca de Jimin.

El pelinaranja asintió, mirando con pánico a Yoongi.

Un leve "Oh" se escuchó desde la puerta, una expresión tan corta, pero que a ambos les transmitió el mismo sentimiento de desolación y tristeza que cargaba en si, Yoongi y Jimin se alejaron entonces, para girarse a ver hacia aquella dirección, logrando solo ver una mano soltar la puerta y esta misma, cerrarse con lentitud.

El corazón de ambos se saltó un latido y el temor se asentó de golpe en su estómago.

—¿Crees que haya sido? —preguntó Yoongi con el corazón latiendo a mil.

—Espero que no —fue lo único que murmuró Jimin, pues el también temía que quien haya entrado a aquel baño justo en ese momento, fuera SeokJin o incluso NamJoon—, creo que, creo que lo mejor es salir de aqui antes de que se creen más rumores.

La voz de Jimin sonaba apagada, y su mirada se mostraba perdida, por ello, sin dar una mirada a Yoongi, Jimin camino hacia la puerta de los baños y salió de ahí.

El pequeño pelinaranja, camino casi como un zombie, yendo directo al salón de clases para intentar averiguar si sus sospechas eran ciertas.

Una vez en la puerta del aula, Jimin entro con pasos pesados y la mirada atenta, siendo seguido de cerca por Yoongi, algo que solo sirvió para comprobar su más terrible temor, pues en el momento en que ambos entraron al salón, una mirada fría por parte de SeokJin fue lo primero que obtuvieron, seguida de una un tanto decepcionada por parte de NamJoon.

Ambos chicos se encontraban juntos, y en sus rostros no se mostraban aquellas cálidas sonrisas que siempre les dedicaban al verles, al contrario de aquello, SeokJin una vez los vio y les transmitió su descontento con la mirada, apartó su vista de ellos y se concentro en otra cosa, evitando mirarles de nuevo.

—No puede ser —murmuro Jimin, con los ojitos aguados y la voz entrecortada.

—Fue un mal entendido, encontraremos la forma de hacérselos saber.

—Dudo mucho que nos escuchen ahora, especialmente SeokJin, él es un tanto rencoroso y en este momento no va a escuchar ni entender ninguna explicación, para él, lo que acaba de ver es la verdad y tratar de disuadir ese pensamiento, será complicado.

—Lo sé, pero no me daré por vencido, por lo pronto, hay que evitar seguir alimentando este rumor, eres muy buen amigo Jimin, pero creo que es mejor, tu por tu lado y yo por el mío, mientras arreglamos las cosas con ellos, y la gente deja de lado ese tonto rumor.

—De acuerdo —dijo el pelinaranja. Yoongi asintió, y comenzó a avanzar hacia su asiento, siendo detenido por la mano de Jimin—, ¡Ah! y, Yoongi —el peliazul se giró para mirarle—, ¡Fighting!

Yoongi sonrió levemente al pelinaranja y después, camino hasta su asiento junto a SeokJin, solo para descubrir que sus pertenencias, ya no se encontraban ahí, sino que se encontraban, a unos cuantos asientos alejados del pelinegro.

Jimin también se percató de aquello y simplemente pudo sentir la culpa creciendo en su pecho.

Él había provocado todo aquello, él y su tonta idea de darle celos a los chicos que les gustaban haber si así lograban conseguir algo, sin embargo, mientras que SeokJin había mostrado claros indicios de estar molesto con aquello, NamJoon nunca había mostrado alguna reacción, hasta ahora y ciertamente, la reacción que estaba obteniendo, no era de su agrado, pues el peliplata evitaba mirarle, algo que lastimo duramente el corazón del menor.

Si tan solo se hubieran detenido cuando SeokJin se mostró disgustado con sus acercamientos, si tan solo la gente no los hubiese emparejado de aquella manera, si tan solo pudieran ver qué sus ojitos brillaban, si, pero al ver a NamJoon, no a Yoongi, si tan solo pudieran darse cuenta de lo coloradas que se ponían sus mejillas al estar cerca de NamJoon... Si tan solo el que se diera cuenta de todo aquello, fuera NamJoon, todo habría sido tan diferente.

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Ay Mimi, todes sabíamos que esto iba a terminar mal, pero bueno, un poquito de drama no le afecta a nadie, ¿Cierto?

Bueno mis lunitas, espero que les esté gustando la historia, este mini drama no durará demasiado, tal vez de parte de SeokJin si, pero nuestro NamMin podrá arreglárselas un poquito mejor ❤️

Y eso sería todo, espero tengan un excelente fin de semana, coman bien, tomen awuita y cuidense mucho ❤️ les amito mucho, y les mando muchos besitos cariñositos, bye bye 😘😘

✿Kim☆Palomita✿