—Bien Carlitos, vayamos al interior del cuerpo humano en nuestra grandiosa nave Nanoiwai. Debemos de tener mucho cuidado de que nuestra nave no sea detectada como una presencia indeseada en el organismo o de lo contrario seremos atacados por los glóbulos blancos—.

5, 4, 3... La Nanoiwai está encendiendo.

— ¿La nave no dañará el cuerpo? — Me pregunta Carlitos.

—Tranquilo, está diseñada para que no dañe nada del organismo—.

2, 1. La Nanoiwai está en marcha.

—Muy bien, nos hemos transportado a la cabeza. ¿Carlitos, sabias que ésta guarda dentro un gran tesoro?—

— ¿Enserio? Pero no veo nada de color dorado o que brille...—

—Jajajajaja no me refiero a riquezas materiales Carlitos. Mira, es justo lo que estamos viendo —.

— ¡¿El cerebro?!— Me mira incrédulo.

—Sí, el cerebro. Éste es nuestro director, rige todas las funciones en nuestro organismo. Es decir, se encarga de dar las órdenes —. Le explico—. Es el órgano más complejo y delicado del ser humano—.

­— ¿Qué es toda esa capa protectora? —Me pregunta.

—Son los huesos del cráneo. En el cerebro convive una gran familia: La conciencia, el lenguaje y comunicación, la memoria, imaginación, la creatividad, personalidad... ¡Uff! entre otras cosas más —.

—Woow, fuera traído a mi abuelito, a él le falta memoria, tal vez podría haber tomado un poco de aquí —.

—Jajajaja no Carlitos, no se puede tomar nada de éste cuerpo... ¡Oh! Casi lo olvido, los sentidos. Estos tienen acceso a través de los receptores situados justo aquí en la cabeza —.

Nanoiwai cambiando de rumbo.

— Abróchate bien el cinturón, vamos descendiendo por la lengua—.

— ¡Woow es muy resbaladizo! — Grita emocionado Carlitos.

—Sí, es porque contiene glándulas salivales. La lengua es un órgano móvil. Desempeña importantes funciones, tales como la hidratación de nuestra boca y alimentos, la deglución, el lenguaje y... ¡El sentido del gusto! Sin este sentido no podríamos disgustar de tan deliciosas comidas, postres y debidas Carlitos —.

—O sea, que si éste sentido me falla... no podría sentir los deliciosos sabores de la comida de mi madre, o de los postres de la abuela. Mmm de solo imaginármelos mis glándulas salivales se activan más —.

—Jajajaja así es Carlitos... Cuidado la Nanoiwai se estremece; estamos ingresando a una arteria ubicada en la zona de cuello —.

—Woow ¿Qué es eso flotando? —

— ¡Son las células sanguíneas! Los redondo y colorados son nuestros glóbulos rojos, esos amarillentos son las plaquetas, y los de un color más claro son... ¡Cuidado, esos son los glóbulos blancos! Por poco la nanoiwai choca con uno...—

—Mejor vayamos al corazón —. Me recomienda Carlitos

—Bien, hemos llegado Carlitos —.

—Vaya... Sí que no deja de latir —.

—Si lo dejara de hacer ¡Estaríamos en un gran problema! Ya que la misión del corazón es hacer que la sangre circule por el cuerpo. La sangre que pasa por el corazón hace un recorrido muuuy largo lo cual llega con muy poca energía (oxigeno). Veamos su recorrido con la nanoiwai —. Le sugiero. Carlitos mira fascinado todo a su alrededor.

—Ingresaremos en la aurícula derecha—. Le digo antes de entrar —Aquí es donde pasa la sangre luego de ser recibida por el corazón. Luego pasa por aquí, este es el ventrículo derecho, y de aquí se envía la sangre a los pulmones. Una vez que pasa por nuestros pulmones la sangre llega oxigenada y entra a la aurícula izquierda para finalmente pasar a este lugar, el ventrículo izquierdo. ¡Y listo! Ahora la sangre puede hacer el recorrido por todo el cuerpo —.

—Woow, sí que es impresionante, aunque me dejó un poco mareado el recorrido —. Me dice llevándose una mano a la cabeza. Rio por su comentario.

—Éste también percibe nuestras emociones, se altera cuando estamos frente al peligro o nos sentimos enojados. O, late menos cuando nos sentimos afligidos. El corazón es el centro de nuestras emociones —.

—Mi abuelita dice que aquí mora el alma —.

—Así es Carlitos, pero le haremos una visita en otra ocasión. ¡Vayamos a los pulmones! —

—Los pulmones son el elemento fundamental del sistema respiratorio —. Me dice Carlitos.

— ¡Muy bien! Se encarga de transformar el aire que respiramos y del intercambio de gases, es decir, el oxigeno entra y el dióxido de carbono es expulsado —.

—Es importante mantener una buena alimentación y no fumar, ya que los pulmones se verían...—

— ¡Gravemente afectado!— Concluye Carlitos por mí.

—Jajaja así es pequeño. Ahora Vayamos al hígado —.

— ¿Dónde estamos ubicados?— Me pregunta.

—Estamos situados en la parte derecha del abdomen. ¿Sabes cuánto pesa el hígado? —

—No, seguramente unos cuantos gramos...—

— ¡Aproximadamente kilo y medio! —

— ¿Qué? Uff yo ni siquiera distingo su peso—. Me dice rascándose la cabeza—. ¿De qué se encarga?

—Este metaboliza los alimentos que consumimos, y evita el paso de toxinas a nuestro organismo, como el alcohol. No por ellos es que beberemos descontroladamente, porque este liquido afecta gravemente nuestro organismo—.

—Creo que papá no sabe esto, lo anotaré para comentárselo más tarde—.

—Sí, seguramente no lo sabe... ¿Tienes una idea de cual es la siguiente estación Carlitos? —

—La siguiente estación es... No, ni idea—.

— ¡En los riñones! Al igual que los pulmones estos también son dos. Para colocarte en contexto estamos situados a la altura de la zona lumbar de la espalda. Se encargan de filtrar las toxinas de los líquidos de desecho, también de acumular la orina en nuestra vejiga—.

­—Oh, así que esa es su función—. Dice Carlitos.

—Uff que largo ha sido nuestro recorrido. ¿No te parece Carlitos?... ¿Carlitos? — Carlitos se encuentra entretenido anotando algo en su libreta. Y levantando su vista me dice:

—Disculpa es que me encontraba anotando todo lo que has dicho, no quiero que se me pase nada por alto—.

—Muy bien. Te preguntaba ¿No te ha parecido muy largo el recorrido?—

—Para nada. ¿Cuál es la siguiente estación? —Dice en tono alegre.

—Bien, Pero ya casi terminamos, así que coloca mucha atención. ¡Hemos llegados a las extremidades!—

—¡Brazos y piernas! —Agrega Carlitos.

—Así es. Bueno, tal vez lo sepas pero las extremidades no son órganos vitales del ser humano. Lo que te quiero dar a entender es que podemos seguir viviendo sin brazos y piernas—.

—Entiendo... como mi tío Pedro, que perdió sus piernas en un accidente—.

—Exacto. Sin embargo son elementos que nos permiten movernos, manipular, crear, acariciar, sentir... —

—Herramientas muy fundamentales sin duda alguna—. Dice Carlitos

—Muy cierto mi querido amigo. Muy bien, es hora de que regresemos al exterior—.

5. 4, 3, 2, 1. Nanoiwai exportándose.

—Woow que maravillosa experiencia. Nos veremos luego, iré a contarle a papá el porqué no debe fumar...—

—Carlitos...—Lo detengo— Sabes que no debes contarle a nadie de nuestro viaje en la nanoiwai por cuerpo humano ¿No? —

— ¡Claro! Solo diré que es una clase más que el profesor me ha dado—. Y dicho esto, echó a correr.