#Sorpresa(2/2)

#SusanitaTieneUnRatón,UnRatónChiquitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnn

―¿Escuchaste? No estás embarazada ―Le repito a Lore las palabras de la doctora. Es más, casi hasta con lágrimas en los ojos de la sorpresa.

Lorena no reacciona, solo mira fijo a la doctora con la boca abierta.

―¿Te encuentras bien, Lorena? ―interroga ginecóloga.

―¿En... serio? ―tartamudea ella.

―Nada más que la verdad ―Le responde.

Lore me mira y sonríe con lágrimas al no creer la buena noticia que le acaban de dar. Lleva las manos a su boca y salta para abrazar a la doctora, quién al principio se sorprende, pero luego le devuelve el abrazo.

―Pero... ¿cómo puede ser? Mi periodo hace ya varios días que no viene y soy regular ―expone Lore.

―Bueno, eso era antes de que perdieras la virginidad. Con tu primera relación tus hormonas cambian y tu cuerpo debe adaptarse ―explica―. Sin embargo, también tus análisis no salieron muy bien; tenés las defensas bajas, nada de vitaminas, nada. Tenés anemia, por eso los mareos, tu fatiga, debilidad. No se trataba de un bebé. ¿Tus padres?

Ambas nos miramos.

―Mis padres... no creo que les interese mucho mi anemia ―contesta con una sonrisa que se contrasta con sus ojos―. Trabajan día y noche.

―Es mi deber explicarles...

―No, por favor, prometo cuidarme, comer, venir regularmente aquí, hasta medíqueme, pero no le diga nada de esto a mis padres ―ruega.

―Está bien, pero si no llego a saber de ti, tengo tus datos registrados. Llamaré a casa de tus padres.

El miedo se apoderó nuevamente de Lorena.

―Lo juro, lo prometo, voy a cuidarme ―expone.

―Yo también prometo cuidarla ―acoto.

La doctora suspira con seriedad y luego dice:

―Bueno, entonces te daré a ti todos los recaudos necesarios y las pautas para que comience el tratamiento, ¿si?

Después de almacenar en mi memoria interna cada ítem y palabra de la doctora, salimos del hospital jurando mil veces más que volveríamos. No obstante, ella tenía razón, de alguna manera Lore debía hablar con sus padres y contarles lo sucedido. Ignoro totalmente la relación que tienen con ella y tal vez los conoceré dentro de poco, pero debía darle tiempo para conocerla a ella primero. Mi reciente ¿amiga?, parece una buena persona a pesar de lo sucedido un mes atrás. Ella no tenía a nadie más que a Damián, él era su único amigo, novio y persona con la que hablaba. Obvio, no era más que una farsa, pero él era su refugio. ¿Cómo puedo odiarla por eso? Yo tengo a personas que están ahí para mí siempre, todo lo contrario a la chica rubia que camina a mi lado, que desde hace apenas dos días atrás se encontraba más que perdida.

Y yo estaba más que dispuesta a ser su amiga e iba a demostrárselo.

―¿Tenés algo que hacer ahora? ―Le pregunto apenas cruzamos las puertas.

―No, nada ―respondió.

―Mi mejor amiga tiene un café en el centro y hoy voy a visitarla, ¿te gustaría venir? ―Me mira algo dubitativa y con un miedo notable. Sé que no quiere enfrentarse a otro de mis amigos y la ira de ellos―. Ella es la mejor persona del mundo, te lo juro. Ya sabe lo sucedido y de todos nosotros es quien menos podría tratarte mal. Porfa...

―Gracias por todo lo que haces por mí, pero no me animo ―responde.

―Su nombre es Fiorella y quiere conocerte. De verdad que ni va a mencionar el tema.

―¿Estás segura? ¿Quién en su sano juicio no me trataría mal después de lo que hice?

―Ella, porque no te juzga. Por favor ―Le vuelvo a rogar.

Piensa unos segundos y finalmente responde:

―Está bien, te acompaño.

En el camino vamos hablando de todo. Ella me cuenta que está por cumplir 18, le gustaría ser pediatra y que quiere terminar el colegio cuanto antes. Le gustan las cosas dulces y escuchar música todo el día y ver series, ya que ella era su única compañía. También me dijo te tuvo una mejor amiga, pero hace dos años se fue a vivir a otra ciudad y que tienen muy poco contacto porque ella si pudo hacer amistades en su nuevo colegio.

Seguimos hablando y hablando. También continuamos charlando cuando llegamos al café de Fiore, quien la recibe con los brazos abiertos y una merienda muy nutritiva ―según la madre de Fiore―, que la obligamos a devorar por completo. Y así cada día en el colegio, con las demás chicas e incluso Fabri, Julián y Manuel que al principio se encontraban algo reacios. Mediante pasaban los días, y eso días se transformaban en semanas, Lorena se iba convirtiendo en una persona más simpática y charlatana. Al principio no era muy fácil que se desenvolviera con todos los demás, solo lo hacía conmigo, pero poco a poco fue cambiando.

Pasó un mes de habernos conocido. La llevé a la iglesia e incluso visitamos el asilo para presentarla a Sally y los demás abuelos y quedaron encantados. Fabri también me acompañaba y aprovechaba para darle las clases de pintura que solía hacer. Creo que ellos amaban más que los visitara él a que hacerlo yo.

Por mi parte trataba de aprovechar todo el tiempo posible con mi novio porque en estas últimas semanas se la pasaba metido en su habitación/taller preparando una exposición para poder entrar a la universidad que él tanto quiere. Le rogué tantas veces que me dijera lo que estaba creando, pero siempre tenía una negativa de su parte; según él es sorpresa y que, gracias a ello, yo le voy a terminar pidiendo matrimonio.

Sí, me gustaba la expectativa de que me esté preparando algo especial, pero la idea de que íbamos a ir a universidades diferentes daba vueltas en mi cabeza día y noche. Él estudiará Bellas Artes en La Universidad Internacional de Arte, mientras que yo Periodismo de Moda en la Universidad Nacional de Diseño. Ya no íbamos a estar viéndonos seguido, solo los fines de semana con suerte, pero de lo que estaba segura es que, a pesar de extrañarlo desde ya, mis sentimientos por ese tonto artista no iban a cambiar.

Fabricio entró en mi vida como una tormenta de verano, de esas que son tan inesperadas pero que todo el mundo ama. Y es tan increíble como las cosas terminan siendo tan distintas a lo que pensábamos; jamás hubiese imaginado terminar mi último año al lado de él, en serio, mucho menos al lado de él. Creía terminar mi carrera y luego pensar en el plano sentimental, pero las cosas se dieron mejor de lo que esperé y no hay manera de desear a que fueran distintas.

Julián y Fabricio si irán en la misma universidad, por lo que mi hermano me prometió alejar a cualquiera entrometida que quiera robar el puesto de "la novia más hartante y con el hermano más candente del mundo", palabras textuales de mi mellizo.

En fin, estamos a punto de terminar la escuela, esa cárcel, internado, calabozo, que muchos detestan porque sufrieron demasiado, o ese lugar donde conocieron a los amigos que mantendrán por siempre. En mi caso tuve una combinación de ambas y es una etapa en mi vida que jamás podré olvidar, ni quiero olvidarla. Para crear más recuerdos, y aprovechando que el clima está cada vez más cálido, con el centro de estudiantes decidimos dejar atrás el baile de último año y remplazarlo con un día en una estancia con piscina, comida y música. ¿Chicas que se quejaban por no usar vestido? A la tarde haremos una mini fiesta donde se pueden vestir como quieran, usar vestidos o sus jeans desgastados favoritos; lo esencial es que se sientan felices, cómodos y lindos con lo que quieran, no con lo que otros le impongan. Que usen sus zapatillas de la suerte o los zapatos de tacón que más aman. Así que a la gran mayoría les encantó la idea, y más a mí, que tal vez será el último momento donde podremos estar todos juntos.

Llego a mi habitación para tirarme a mi adorada, deseada y cómoda cama para dormir al fin. Sin embargo, me llega un Whatsapp de Fabricio:

Notaron la fotiz de Fabri?? 7u7

Espero que les haya gustado este último mini maratóoonnn. Nos leemos en esta semana.

No se olviden de votar el capi anterior también. Gracias, gracias por todooooooooooooooooooooooooooooooooooo.