Anteriormente ...

-No lo creo-.

-¿A qué te referías con eso? -. Preguntó Jane, cuando se hubieron acostado en la cama los dos, apoyando su cabeza en su pecho.

-Olvídalo, no es nada importante-. Respondió Kendall mientras acariciaba su cabello, ella se levantó y sujetó su quijada haciendo que lo viera.

-Está bien, si no quieres hablar de eso, lo comprendo-. Le dio un breve beso en los labios, Kendall le correspondió con una sonrisa.

-¿Alguna vez te he dicho que eres la mejor? -. Le preguntó mientras se metían bajo las sábanas para dormir y no seguir pensando en Jacob, no sabía donde estaba, tal vez lo volvería a ver cuando volviera a su ciudad natal hasta dentro de dos días. Por otro lado Jacob siguió caminado en medio de la ventisca sin importarle si lo agarraba un resfriado, quería que su hermano comprendiera que lo que le pasaba no era una simple locura, quería que Kendall lo viera con sus propios ojos, sin embargo sin él no quería entenderlo, no lo obligaría, como bien dijo antes "tarde o temprano"

-Idiota-. Se desquitó con un poco de nieve mientras caminaba. -¿Por qué nunca podemos tener una conversación normal? -. Se detuvo para notar que el Nidhogg lo había seguido desde que se fue de la cabaña. -Vete ya, no quiero más problemas-.

- ¿Estás seguro? -. Le preguntó sabiendo que tenía razón. -Porque hay una fuerza inmensa en ti, una determinación y un deseo de descubrir cosas increíbles-.

-Sí es verdad-. Reconoció. -Pero no sé como hacerlo-.

-Tal vez no haz jugado todas tus cartas-.

-¿Hablas de ir con ...? -. Se interrumpió al ver como el Nidhogg volaba velozmente dejándolo atrás para coger rumbo a la tienda de Ramsey, no lo pensó dos veces y salió corriendo siguiendo el rastro de su mascota, había decidido llamarla así, estaba corriendo un buen tiempo hasta que llegaron a la puerta negra, Jacob se apresuró en golpear.

-¿Quién es? -. Preguntó Ramsey un toque cansado.

-Soy yo, de nuevo-. Aclaró Jacob recostándose un poco en la puerta, en eso el Nidhogg aprovechó para posarse en su hombro, escucharon como la puerta se abrió dejando ver a un desaliñado pero presentable Ramsey.

-Pensé que no vendrías-. Jacob lo miró extrañado antes de entrar para que Ramsey cerrara la puerta. -La verdad no me importabas si lo hacías o no-.

-Necesito tu ayuda-. Soltó Jacob sin más sentándose en un sofá fino y elegante pero algo degastado.

-¿De verdad? -. Contraatacó Ramsey irónicamente mientras también tomaba asiento frente a él y se dedicaba a fumar su pipa. -¿Qué te hace pensar eso? -.

-El Nidhogg, lo he vuelto a ver más veces de las que se pueden contar con los dedos, y tú pareces saber mucho sobre el tema-. Finalizó señalando los distintos artefactos que están allí, desde frascos con pociones o menjurjes hasta armas de toda clase, tal vez Ramsey tenía la costumbre de coleccionar cosas fuera de este mundo.

-Ya veo, aún no comprendes nada de este mundo-.

-Exactamente-. El Nidhogg asintió al mismo tiempo que Jacob le daba la razón a Ramsey, este los miró con más interés. -¿Qué tengo que hacer para comprenderlo todo? -. Ramsey se quedó pensativo antes de ponerse de pie para buscar un libro en su estantería, luego lo puso sobre la mesa que había entre ellos y Jacob se acercó más para ver el libro debido a la poca iluminación.

-En primer lugar déjame decirte que definitivamente no eres humano-. Le comentó Ramsey mientras buscaba algo en el índice del libro.

-Yo lo ... sos ... yo lo sospeché desde un principio o al menos eso creo-. Dijo un poco sorprendido Jacob, Ramsey por fin volteó a verlo, al parecer ya había encontrado lo que estaba buscando.

-Creo que ya es hora de que conozcas más sobre nosotros-.

-¡No puedo creerlo! -. Dejó escapar con emoción. "Valió la pena esperar" se dijo a sí mismo, comenzó a leer ciertas cosas del libro sobre los distintos tipos de seres mágicos que hay, comenzando por las cinco clases de hechiceros que hay:

1. Supernaturals o "Os nádarrach": Aquellos que son de linaje mágico y puro, son la clase de magos más poderosos, capaces de dominar cualquier clase de magia (sea oscura, media o blanca), tienen características físicas distintivas. La fuente de su poder infinito es desconocida para los de otros linajes, a excepción de los magos o seres pertenecientes a este linaje, por este motivo no suelen ser tan vistos y así no atraer la atención de los Hidden y de las otras ordenes relacionadas con magia oscura. Además su linaje puede pasar de generación en generación a uno o más miembros de una familia, solo hay cinco familias registradas con ese linaje.

2. Occultis o "Hidden": Aquellos magos que usan su conocimiento tanto práctico como teórico en cuanto a artes oscuras, magia negra, hechizos inquebrantables fatales y maldiciones poderosas, son rivales eternos de los "Toitean" y buscan desesperadamente a los "Os nádarrach " para robarles su fuente de eterno poder y así dominar el mundo tanto mágico como humano. Se basan en atraer personas de aura o alma débil para ser sus vasallos, también se aprovechan de las personas con necesidades para hacer tratos engañosos, y si la persona lo acepta, queda marcada de por vida y al servicio y órdenes de ellos.

3. Médiums o "Meadhanach": Son todos los magos o seres mágicos que practican tanto la magia blanca como la negra, no deben confundirse con los "Hybrids", dado que el propósito de los Médiums es buscar desesperadamente un equilibrio entre los Hidden y los Toitean y así acabar con la destrucción de ambos mundos y preservar la poca magia que aún queda. Para diferenciarlos basta con ver las marcas de nacimiento de ambos; los Meadhanach tienen una marca con forma de pentagrama, mientras que los Hybrids suelen tener la marca de Géminis.

4. Híbridos: Son los que saben manejar las tres clases de magia, en especial la magia combinada (negra-blanca o gris), suelen confundirse con los Médiums por la similitud en sus poderes y conocimientos. Lo que la diferencia de los Médiums es que suele ser "dos caras" o espías según de qué bando solicite su ayuda primero o sus intenciones, dado que casi siempre trabajan por su cuenta.

5. Puros o "Toitean": Son la clase más común al igual que los Hidden, de quienes son rivales eternos, se especializan en el uso y enseñanza de la magia blanca, defensa contra las artes oscuras, hechizos potentes para repeler maldiciones poderosas y sanación. Suelen ser buscados por su gran capacidad de sanar heridas provocadas por artefactos o animales desconocidos que los seres humanos no pueden curar.

-Siempre han estado entre nosotros-. Dijo Jacob luego de un rato leyendo sobre las diferentes órdenes, grupos, clubes, linajes entre otras cosas que clasificaban a los seres mágicos en su mundo.

-Pero debo advertirte que no es fácil diferenciarlos de los humanos a algunos, veo que aún tienes que mucho que aprender, vuelve mañana-.

-Lo haré-. Después de eso salió de nuevo sin rumbo acompañado del Nidhogg, al principio pensó en volver a la cabaña donde estaba su hermano, pero desechó la idea rápidamente y pensó en volver a casa, tendrían tiempo de sobra para planear lo que haría cuando descubriera más acerca de ese mundo, si Kendall no quería asimilarlo, era su problema. Por otro lado el menor de los McQuoid estaba con su novia terminando de alistar sus maletas para volver a su ciudad natal, pero algo lo tenía consternado.

-Te noto un poco agobiado-. Dijo Jane mientras entraba a su cuarto con una bandeja donde dos tazas de tés humeantes acompañados con galletas de chocolate reposaban, como las que solía prepararles su madre a él ya su hermano cuando eran más chicos.

-Es Jacob, no dejo de pensar en lo que dijo-. Admitió Kendall cerrando su maleta de viaje.

-No te atormentes con eso, seguro lo dijo por furia-. Le indicó que se sentara con ella y se quedara un rato más antes de irse, siguieron así hablando de todo un poco, hasta que Kendall vio que el sol se había ocultado, debía irse, se levantó cogió su maleta y caminó hacia la puerta.

-Es tarde, debo irme -. Se dio vuelta para verla por última vez ese día. -¿Nos vemos mañana? -.

-Claro-. Comenzó a caminar hacia su casa donde estaba Jacob, no lo estaba esperando, pero ninguno sabía que se encontraría con él otro en ese lugar, después de casi media hora de caminata divisó su casa e iba a entrar cuando escuchó voces dentro de esta.

-Tenias razón sobre mi-. Reconoció la voz enseguida, era Jacob.

-Hay muchas cosas que ni tú mismo sabes sobre ti-. No sabía cómo pero él también podía oír la voz del Nidhogg, eso lo extrañó, abrió la puerta lentamente sin hacer ruido, no la cerró completamente y se quedó escuchando.

-Supongo, ¿Por qué me elegiste? -. "¿Elegiste?", Esto era raro, ¿de qué estaban hablando su hermano y esa otra persona, si es que era una persona, ya que su voz no sonaba como tal.

-Veo potencial en ti Jacob-.

-¿A qué te refieres con potencial? -. Kendall decidió cerrar la puerta sonoramente e interferir, el Nidhogg se había esfumado otra vez. -Demonios-.

-¿Con quién conversabas? -.

-Con nadie, además no te interesa-.

-Te equivocas, si me interesa lo que haces-.

-¡No!-. Gritó histérico acercándose a su hermano. -No, solo quieres fingir preocupación-.

-¿Entonces después de todo este tiempo, no vale nada lo que he hecho por ti? -.

-No quise decir eso-. Se iba a acercar a él, pero se alejó casi llorando y lo miró con tristeza.

-Pero lo diste a entender-. Subió rápidamente las escaleras a la habitación, pero se detuvo antes de entrar. -Me decepcionas-. Sin más cerró la puerta para derrumbarse, Jacob se quedó abajo resignado y arrepentido de lo que había dicho, se dejó caer en el sillón, agotado de que siempre las cosas terminaran igual, a lo lejos divisó el Nidhogg.

-No puedo seguir con esto-.

-Descuida, ya llegará el momento adecuado-.

-Bien, debería ir a dormir-. Subió hacia la otra habitación, se cambió y se tumbó sobre la cama boca arriba. -Ojalá sea pronto-.

-No puedes alterar las cosas, eso solo lo empeoraría todo-.

-Estoy harto de que él no sea capaz de despertar, de abrir los ojos a la realidad-. Se sentó de manera rápida mientras dejaba salir todo su enojo contenido, el Nidhogg se limitó a mirarlo ladeando su cabeza.

-No es fácil y menos cuando no has dado tu primer paso-.

-¿Hablas de él? -. El Nidhogg hizo un movimiento de cabeza como diciendo "tal vez", pero hablaba de ambos.

-Algún día eso lo ayudaría a descubrir quién es en realidad, y tú Jacob, no estás muy lejos de saberlo-.

-Eso espero, porque no pienso renunciar a esto-. Dijo con determinación dejándose caer en la cama y durmiéndose casi enseguida, el Nidhogg se quedó mirándolo fijamente antes de hacer una marca en el brazo izquierdo, era la marca de un dragón y se acomodó al lado de él.

- Lo sé, harás cosas de las que creíste no ser capaz-.

Al día siguiente cuando Jacob se miró en el espejo, se extrañó al ver esa marca en el brazo, más tarde se lo diría a Ramsey quien debería tener una magnífica respuesta para eso y no pensaba decírselo a Kendall porque ya supondría otro problema, se vistió y bajó a desayunar pero como de costumbre su hermano se levantaba primero y estaba sentando comiendo mientras leía, al adentrarse un poco más en la cocina vio que en otro plato estaba su desayuno, podrían estarse peleando y no hablarse, pero Kendall nunca dejaría que se muriera de hambre y viceversa, cogió el plato sentándose frente a él para hacer las pases.

-Hermano-. Comenzó a hablar, Kendall bajó el libro mirándolo con fastidio.

-¿Qué quieres idiota? -.

-Quiero conversar, solo eso-.

-Bien, te escucho-. Bajó el libro de mala gana mirándolo casi con desespero.

-Lamento lo que dije ayer, solo que no me gusta que te metas en mi vida privada-.

-A nadie le gusta, créeme-. Soltó para luego retomar con su lectura mientras se terminaba su café y volteó a verlo al notarlo callado. -¿Eso es todo? -.

-No, quiero disculparme por no saberme comportar en casa de tu novia-.

-Bah, olvídalo, espero que no vuelva a pasar-.

-¿Como en los viejos tiempos? -. Preguntó extendiéndole el brazo donde el Nidhogg lo había marcado, que por suerte llevaba cubierto, Kendall dejó atrás su orgullo y chocó el puño con su hermano.

-Claro que sí-. Luego de eso, Jane llegó a la casa de ellos, ambos cambiaron su actitud para que hacerla sentir mejor, hicieron chistes, contaron anécdotas, hablaron de la escuela, mientras Jacob traía unos postres que estaba preparado entre los tres, Jane aprovechó para hablar con Kendall.

-Me alegra que ya hayan hecho las pases-. Dijo mientras se acercaba su té para tomarlo.

-Sí eso es algo bueno-. Habló mientras llevaba los postres, sintió una leve comezón en el brazo pero lo ignoró olímpicamente y siguió con lo suyo.

-Mentiría si dijera que soy capaz de vivir sin mi hermano-. Jane sutilmente lo miró con desprecio, como si quisiera que solo le dedicara tiempo a ella y nada más.

-También haría cualquier cosa por ti-. Confirmó Jacob, de nuevo sintió esa comezón seguida de un pinchazo y algo parecido a una voz retumbó en su cabeza, antes de que sospecharan algo se levantó tomando su abrigo y dejando a sus dos acompañantes con cara de sorpresa. -Ahora si me disculpan tengo que irme-.

-¿A donde?-. Preguntó Kendall separándose de Jane dispuesto a seguir a su hermano.

-Quedé con un amigo para estudiar unos temas de Química algo complicados que no entiendo y se ofreció a ayudarme-. Mintió rápidamente a la vez que cogía su mochila.

-De acuerdo, te deseamos suerte-. Habló Jane por los dos.

-De acuerdo, adiós-. Se despidió mientras salía de allí corriendo para no llegar tarde a su siguiente lección con Ramsey, a mitad de camino se encontró con el Nidhogg y siguieron corriendo, casi le reprocha por lo que había pasado en la casa, pero el Nidhogg le dijo que luego se lo explicaría y que Ramsey no debería saber nada sobre eso, antes que pudiera reprochar se encontró abriendo ruidosamente la puerta de la cabaña de Ramsey, este lo miró simplemente.

-Llegas tarde muchacho-. Dijo mientras preparaba lo necesario para la lección de hoy, ambos pudieron divisar que Ramsey vestía una clase de gabardina escolar color gris con rayas en las mangas y cuello negro con un escudo raro en uno de sus bolsillos, al parecer y luego de haber estado en una escuela había cogido esa prenda como una más.

-Lo siento, tuve un inconveniente-. Pues la inesperada llegada de Jane cuando se iba a ir lo sorprendió y su hermano casi le rogó que lo acompañara, no sabía qué pasaba entre ellos o porqué la actitud de su hermano, pero no le importaba y quién era él para negarle algo a su hermanito.

-No importa-. Lo miró dejando ver mejor su vestimenta, vestía con una clase de chaleco y pantalones a juego debajo de la gabardina y tomó el libro otra vez. -Veo que trajiste del nuevo al Nidhogg-.

-Oh, sí es que suele seguirme cuando vengo aquí, nunca se queda, pero parece que después de la primera vez decidió quedarse-.

-Menos mal, porque quería hablarte sobre ellos-.

-¿Todos tenemos uno ?, Me refiero a que si tú ...-. Ramsey lo interrumpió levantando una mano para encender las velas y no quedar tan oscuras.

-No, no todos los seres mágicos o especies tenemos uno, ellos suelen aparecer en casos especiales o buscan a alguien especial para guiarlo, obedecerle y ayudarlo con sus propósitos-.

-Como yo-. Aseguró sintiéndose confiado se si mismo. -Pero lo que aún no entiendo es porqué soy especial-.

-Escucha muchacho, esto no es una casualidad, debes pertenecer a algún linaje poderoso, o deber tener sangre no humana, sólo que no sé cuál linaje pertenezcas o qué tipo de sangre corra por tus venas-.

-Bueno, en este caso debo averiguarlo yo-. Ramsey le dio la espalda para buscar algo que había olvidado, en eso el Nidhogg aprovechó para persuadirlo.

-En efecto, pero primero debes hacer algo por mi-.

-¿Qué cosa?-. El Nidhogg le dijo la otra mesa en la que había una daga, una cadena y un mapa del bosque y sus alrededores.

-Toma esos artefactos de ahí-.

-¿Para qué los necesito? -.

-Solo hazlo, luego lo sabrás-. Aprovechando que estaba distraído, tomó los artefactos y los guardó en su maleta, Ramsey siguió enseñándole sobre los linajes, grupos y organizaciones registradas que estaban en todo el mundo, aprendió a diferenciar algunos para no confundirlos con simples personas como la novia de su hermano o los idiotas de la preparatoria, cuando menos lo esperó el Nidhogg le envió una señal a modo de pinchazo para irse, Ramsey lo notó y cerró el libro.

-Bueno, eso es todo por hoy-.

-Sí, volveré mañana-. Salieron de ahí caminando bajo la luna llena, al Nidhogg que nada se le escapaba le contó que había un castillo en donde más personas como él y Ramsey solían reunirse para aprender más de lo que Ramsey le estaba enseñando, no le dio muchos detalles acerca de el lugar dejándole la tarea de averiguar en todos los mapas posibles, llegaron a la casa de Jacob y el Nidhogg siguió con su camino indicándole que bajara más tarde a la zona señalada en el mapa, entró y se extrañó al encontrar a su hermano aún despierto en la sala.

-Creí que no volverías sino hasta mañana-. Habló Kendall volteándose para verlo.

-Estábamos tan absortos en el estudio que no nos dimos cuenta de la hora-. Respondió llevándose al brazo izquierdo a la nuca.

-Ya veo, estoy seguro de que serás un experto en Química dentro de poco-.

-Sí, voy a dormir, hablamos mañana-. Subió rápidamente a la habitación y esperó a que su hermano se durmiera y todo estaba a oscuras para salir por la ventana en silencio, apenas bajó el Nidhogg ya estaba esperándolo para indicarle el camino, después de media hora de caminata se adentraron el bosque como le había indicado el Nidhogg, divisaron un árbol extraño que parecía un humano de madera gigante y ahí, Jacob sacó los artefactos.

PRESENTE:

-¿Estás listo para dar el primer paso? -. Preguntó el Nidhogg creciendo un poco hasta alcanzar el tamaño de una persona como él, pero conservando aún sus rasgos animales como los ojos, cuernos, cola y alas.

-Si-. Lo miró por unos instantes antes de impacientarse. -¿Ahora qué? -.

-Corta la palma de tu mano donde tienes la marca-. Jacob lo miró raro, pero luego de divisar una mirada algo penetrante por parte de Nidhogg lo hizo, cogió la daga y se hizo un corte leve pero sangrante, maldijo por lo bajo.

-¡Agh!, Lo tengo-. Soltó la daga para cogerse la mano tratando de no mostrar dolor, el Nidhogg dejó escapar algo de fuego sobre la sangre de Jacob y este se transformó en un símbolo en la tierra como el de la multimedia pero más grande.

-Ahora toma un poco de mi sangre-. Cortó un con la misma daga la pata / mano izquierda del Nidhogg y este ni se inmutó.

-¿Eso es necesario? -.

-Tanto el animal como el ser deben estar juntos en el juramento o pacto, es igual que lo hicieras con una persona-. Acto seguido le dijo el centro del símbolo para que dejara caer la sangre, le indicó que se pusieran frente a frente en el centro.

-De acuerdo-.

-Ahora repite después de mí: Juro solemnemente que me entregaré de lleno a este mundo, combatiré contra todo lo que pueda ponerme en riesgo y daré mi vida por encontrar la verdad y mi propósito en el mundo mágico-. Al finalizar de decir esto una especie de fuego grisáceo los rodeó, las gotas de los dos se juntaron hasta transformarse en un dije con forma de Nidhogg que inmediatamente se adherido a la cadena y fue a parar en el cuello de Jacob, este salió de su asombro cuando hubo un pequeño estallido y el símbolo dejó de brillar para convertirse en una marca como hecha por el fuego y desaparecer como cenizas arrastradas por el viento, después de eso no supo cómo estaba en su cama, ahora ya estaba más cerca de lo que siempre había querido, ahora debería que investigar sobre el dichoso castillo, su tipo de sangre, su linaje mágico y prepararse para lo que pudiera venir después del juramento.