(Dreamworld)

Nos situamos en otro sueño, después de dejar atrás a sus compañeras, en un sueño donde podrían estar en paz, el Morador había cruzado una grieta, no sin antes pedirle a la hermana Agatha que buscara a unas almas que él había arruinado sus sueños.

Morador: (Espero que encuentre a las demás... buenos, ahora debo seguir avanzando, debo volver a la realidad)

Pensaba comenzando a caminar, el sueño donde ahora estaba era un lugar vacío, con solo el suelo visible, por una razón el suelo era pura tierra, como si el caminara por un camino de un bosque.

Conforme seguía corriendo en el lugar, más visibilidad comenzaba a obtener y más expansivo se volvía la zona, convirtiéndose en un bosque, más y más se expandía, hasta que finalmente su vista pudo ver toda la zona.

Morador: (¿Qué?, Pero... Eso... es...)

Notando que, a lo lejos, hacia el norte, podía ver un castillo en ruinas, el Morador con curiosidad, corrió hacia el castillo en ruinas, siendo esta la única construcción en el lugar.

Después de unos segundos, llego al castillo, donde el Morador comenzó a investigar el lugar él solo, solo encontrando un montón de salas con fauna, paredes enredadas de plantas, flores, y algunos cuantos insectos que se ocultaban en el lugar.

Morador: (Parece que fue atacado hace tiempo... hay en las paredes disparos, de escopeta, pistola y de posiblemente... subfusiles Thompson...)

El Morador continuaba mirando el castillo, solo que este detendría su búsqueda, al comenzar a escuchar el sonido de un piano siendo tocado, buscando el origen del sonido, logro llegar a una sala, una sala enorme, que lleva a unos balcones que hacia mirar afuera.

Sentada en el piano, una pequeña niña sirvienta, de cabello castaño, su peinado consistía de dos colas a los lados de su cabeza, aquella niña tocaba el piano con tranquilidad, cosa que le agradaba al Morador.

Marie: ¿Qué haces parado allí?

Morador: ... Nada, solamente mirando como estas tocando ese piano.

Marie: No esperabas esto, ¿verdad?

Morador: La verdad es que no...

Marie: Lo sé, debes estar formulándote tantas preguntas, ¿no? ¿"Que hace una niña sola en un lugar en ruinas"? ¿"Que hago yo aquí"? ¿"No debería estar destruyendo una torre como en el Modo Historia"?

Morador: ...

Marie: Je, descuida, no fueron dirigidas esas preguntas para ti, sino para aquel que nos está viendo y leyendo.

Morador: ... ¿De qué me estás hablando?

Marie: Nada... ¿Quién eres por cierto?

Morador: El nombre no importa, solo me llaman "El Morador del Refugio".

Marie: ¿"Morador del Refugio"? es un apodo sin gracia, ¿no lo crees? Te vendría mas bien "Azul" te pega muy bien con tu traje azul y amarillo.

Morador: ¿Tú crees? ... ¿Quién eres tú?

Marie: Mi nombre es Marie Korbel, un gusto Azul.

Morador: ¿Korbel?

Marie: Si, ¿Qué tiene mi apellido?

Morador: (Suena mucho a la vinería Korbel, quien se encarga de hacer vinos espumosos en california...) No, es un lindo apellido.

Marie: Gracias, bueno, ¿y qué haces por aquí?

Morador: Estoy en busca de una princesa... oye... ¿tú vives aquí?

Marie: No, desde hace mucho tiempo no he regresado aquí... el lugar ha estado cambiando en mi ausencia...

Morador: Lo dices como si estuvieras deprimida... ¿Qué ocurre?

Pregunto preocupado el Morador, una agradable brisa había entrado por la ventana, cosa que le agrado mucho a Marie.

Marie: ¿Sabías que soy la Skullgirl actual?

Morador: ... ¿Tu?

Marie: Si, yo, no estoy mintiendo.

Morador: Tu... no puede ser, ¿Cómo es posible que una niña como tu sea la Skullgirl?

Marie: Es una larga historia... ¿me escucharas?

Morador: Claro...

El Morador sin perder tiempo, escogería una silla y se sentaría, Marie también lo haría ambos estaría frente del uno del otro.

Marie: Meses atrás, había estado sobreviviendo en las tierras No Man's Land, al lado de una niña, ambas nos volvimos amigas, se llamaba Patricia. Era difícil mantenernos las dos en unas tierras prácticamente muertas, así que buscamos como pudimos en sobrevivir, hasta que una cosa llego a la otra. Y conocimos el castillo del señor Hilgard. Un Gigan que había hecho su castillo en las tierras que previamente había llamado. El Gigan era un sujeto amable, nos dio un nuevo hogar. Al principio Patricia no le gustaba limpiar, pero se estuvo adaptando, en el castillo cumplíamos el rol de sirvientas, al ser yo... "quien se veía madura" todos me hacían caso, iban y me contaban sus secretos, era como la hermana mayor. Comíamos, limpiábamos y... éramos felices.

Morador: ¿Qué fue lo que paso?

Marie: Nada, solamente aparecieron unos hombres malos y acabaron con todos, incluso con el señor Hilgard. Patricia fue la única que se quedó allí peleando. Yo solo escape, tenía miedo, demasiado miedo. Pero conforme seguía corriendo... el arrepentimiento comenzó a invadir mi corazón, hasta que llegue un punto en el que solo podía pensar una cosa. Rezar.

Morador: ¿Rezar?

Marie: Me dirigí a No Man's Land nuevamente. Yo... yo...

Morador: ¿Qué sucedió allí Marie?

Marie: Entre a una iglesia, una de la religión de la Trinidad. Comencé a explorarla, mirando a Aeon, Venus y Madre. No sé porque, pero tenía el presentimiento de que me veían. Entonces... entonces... simplemente lo encontré.

Morador: ... el Skull-Heart, ¿no?

Marie: Si... lo tenía una monja, se llama Double, me lo ofreció, dijo que la Trinidad había escuchado mis plegarias y suplicas, que con ese objeto podía vengar de aquellos que me hicieron daño, a mí, a Patricia, al señor Hilgard, a todos...

Morador: No dudaste en tomarlo, ¿no?

Marie: Si, no lo dude, cogí el Skull-Heart, desee con toda mi fuerza: "Que me diera la fuerza para salvarla" me refiero a Patricia... solo recuerdo que... fui rodeado por llamas azules y... oh...

Morador: ... ¿Qué siente ser una Skullgirl?

Marie: Horrible... podía sentir el odio del Skull-Heart en mí, un odio a la humanidad, era como un veneno, ahora le pertenezco a la Trinidad, quienes me ordenando acabar con todos y conquistar el mundo.

Morador: Entonces, ¿Por qué no lo haces?

Marie: Mi voluntad es fuerte, más fuerte que el propio Skull-Heart... y por eso, puedo manipular el poder de la Skull-Heart, para cumplir mi venganza.

Morador: ¿Te refieres a los esclavistas que asaltaron el castillo?

Marie: Si...

Morador: Bueno... ¿y quiénes son?

Marie: Gente mala, gente horrible, gente que merece lo peor, los malditos Medici... ya tuve suficiente con tener que perdonarle a uno de ellos y pedirle que se marchara de la ciudad.

Morador: ... No tienes tanta venganza eh...

Marie: No me gusta matar a inocentes... no lo tolero... esa chica, pese a tener sangre de ellos, era una buena chica, y curiosamente tenía un perro, que tenía un parasito.

Morador: (Creo que se de quien habla...)

Marie: Pero bueno, esa es toda mi historia.

Morador: Bueno, ahora creo que lo justo sería...

Marie: No, no es necesario, sé quién eres... lo sé, te he visto y sentido...

Morador: ¿Eh?

Marie: Al ser una marioneta de la Trinidad, puedo sentir y saber lo que las diosas hacen, son mis titiriteras, se lo que hacen y quiere que haga... tu eres el Morador, aquel que viene de un mundo paralelo, destruido por las guerras nucleares, se a quienes te has enfrentado y quienes has perdido... puedo sentir un enorme dolor en tu corazón, y un vacío existencial en tu alma... por no saber las respuestas que buscas.

Morador: ... de... que estas... hablando...

Marie: Descuida, yo también se lo que siente ser una marioneta Azul... no somos tan distintos tu y yo, mientras que la Trinidad me controla y desea que haga su voluntad... tu por tu parte tienes a tu propio titiritero.

Morador: ...

Marie: Je... sabes, cosa divertida: La razón por la cual estas aquí, es por un experimento de Venus y Aeon, las dos diosas de la Trinidad.

El Morador abriría sus ojos de sorpresa, asombro y, sobre todo, desconcertó.

Morador: ¿Cómo?

Marie: A veces Venus y Aeon se aburren de estar sentadas en su mundo, esperando la orden de su Madre para acabar con todos y causarles el fin del mundo, ellas ya lo han hecho antes... con Filia, con Painwheel, con Cerebella, con Parasoul, con Patricia, con Nadia, con Valentine... incluso con Double, quien es la más cercana al rostro de Madre...

Morador: ¿Qué?

Marie: Ellas son quienes hacen que el destino fluya, ellas pueden jugar todas las veces que quieran, ellas pueden escoger a los personajes y hacer que ellos consigan el Skull-Heart... lo he visto y sentido en todas mis líneas... es por eso que me extrañe que ahora... tú seas el protagonista aquí... no se supone que debas estar aquí.

Morador: ... Lo sé... incluso yo lo sé, no pertenezco aquí... y aun así... ah...

Marie: Si... lo sabes y aun así ayudas a las personas... mira, la cosa es así, ellas te trajeron aquí, porque deseaban ver como reaccionarias, cual sería tu reacción, tal vez por aburrimiento, tal vez porque se sintieron triste por el horrible destino que tuviste, o tal vez por otras cosas... tal vez por... un sentimiento a ti... no lo sé...

Morador: Dijiste que podías saber las intenciones de la Trinidad Marie.

Marie: No siempre idiota, bueno... un poco...

Morador: Ah...

Marie: Continuando... se supone que tu eres un "Experimento", que salió... curiosamente... bien... bastante bien... así es amigo mío, esto no es un modo de Fallout, esto es Skullgirls jejeje.

Morador: ... ¿A quién le hablas Marie?

Marie: Al Jugador...

Morador: ... ¿Jugador?

Marie: Si... el hombre que te controla

Morador: ¿Cómo?

Marie: No te asustes... sé que no deberías decirte esto, pero me da la gana... ahora escucha, se supone... y oí bien... se supone, que Venus y Aeon, deberían tener control sobre ti, que ellas deben controlarte, ya que ellas te trajeron aquí, a esta dimensión... pero en lugar de eso, es el quien te controla... todo lo que has hecho, fue por voluntad del Jugador, quien te ha llevado a conocer a las personas que conoces... no sé si lo hace porque es fanático,, no sé si lo hace... porque es una buena persona... no lo sé... solo él sabrá...

El Morador quedo en silencio, quien este se levantó de la silla y se dirigió a una parte del castillo, mirando las ruinas de este.

Morador: ... La verdad... no sé qué decir... me siento ahora más vacío... tengo dudas de mi existencia aún más... maldita sea no sé qué hacer...

Marie: Solo continua...

Morador: ...

Marie: Sigue... continuando, a ver el final de esta historia... tu historia en este mundo...

Morador: ... Solo soy una marioneta vacía Marie... como tu... solamente que... la diferencia aquí... es que yo no estoy siendo influenciado por un objeto mágico, es por un ser... que debe estar sentado, disfrutando y acosándome cada maldito paso que doy... que lo jodan...

Marie: ... Je...

Morador: Ahora... dime... ¿cómo salgo de aquí?

Marie: ¿Buscas a una princesa?

Morador: Si...

Marie: Bueno... sígueme...

Dijo Marie, parándose de su silla, dirigiéndose ahora, acompañada del Morador, a una grieta, a las afueras del castillo, justo en el jardín del catillo Hilgard, a apenas entrada, se encontraba una grieta, junto con varias raíces de luz a su lado.

Marie: Esta grieta te mandara directo con el bastardo que tiene la princesa... sálvala, príncipe Azul.

Morador: Gracias Marie...

Marie: Una cosa... la razón por la que no he atacado, es porque Aeon me mando a un sueño profundo... he estado aquí todo el tiempo... pero cuando despierte... muy posiblemente no recuerde nada de esto... ya sabes como son los sueños.

Morador: Entonces... ¿este es un adiós?

Marie: Si... muy posiblemente nos vamos a enfrentarnos, el destino así lo quiso... me gustó mucho hablar con alguien... me siento mal, no recordare nada, no recordare que el experimento Peacock es mi amiga Patricia, no recordare lo que chistes con Filia, no recordare ni siquiera... a ti...

Morador: ... Lo siento... pero descuida... se una solución... lo sé... yo... te prometo que te salvare...

Marie: ... Je... venga, ve a la grieta, nos veremos en la realidad... amigo...

Dijo Marie, alejándose del Morador, una vez un poco lejos de este, solamente movió su mano en señal de adiós, sonriendo al Morador, mientras el Morador solo miro el cielo y sin mirar atrás, se adentró a la grieta.

Marie: Adiós...

Tras cruzar la grieta, solo miro la oscuridad, cosa que ahora no le importaba al Morador, este miro arriba, mirando unos cielos amarillentos.

Morador: Espero que sepas lo que haces... no sé nada de ti... pero... si has hecho esto por qué quieres ayudar... te lo agradezco... ahora te pido que me des la fuerza y la guía para ganar a aquel que tiene la princesa... ¿lo harás?

Decía el Morador, al Jugador.

(Jugador)

Mientras tanto, en un cuarto, se podía ver a un joven sentado, enfrente de su computadora, este sonreiría a la pantalla.

Jugador: Lo hare...

Fin.