Agosto del año 764 de la era del dragón.

Giin y Trunks se encontraban en la maquina del tiempo, ninguno decía nada, solamente pensaban en qué es lo que harían una vez que estuviesen en la época planeada. Ambos estaban muy nerviosos y asustados, no tenían idea de que era con lo que se encontrarían una vez hayan llegado.

—Todo estará bien —susurró el pelivioleta mirando de reojo a la fémina— ¿Cómo está tu ojo?

—Estoy bien, no te preocupes —ella respondió sin dejar de mirar al frente— se en lo que estás pensando, ya te he dicho que no fue tu culpa.

De pronto un sonido interrumpió la conversación, el característico pitido proveniente de la maquina del tiempo anunciaba la llegada de ambos jóvenes a la época acordada. Los dos se miraron y asintieron para después abrir la cúpula y salir al exterior.

—Oye Trunks, ¿Estás seguro de que es aquí? —la joven preguntó con cierta duda, al salir de la máquina y encontrarse en medio de un desierto rocoso, sin señales de vida en ninguna parte.

—Si, no puedo equivocarme, coloqué las coordenadas exactamente como lo indicó mi madre —respondió mientras presionaba un botón que hizo que la máquina se convirtiera en cápsula.

—Veamos, si estamos en el año 764 quiere decir que aún faltan dos años para tu nacimiento, además Gohan tal vez tenga unos... siete años aproximadamente.

—Exactamente —Trunks respondió mirando su reloj, suspiró un poco y se acercó a la joven— al parecer faltan tres horas para que Goku llegue a la tierra, ¿Ya pensaste en que vas a hacer?.

—Un poco, lo estuve meditando y hablé con mi madre al respecto, le diré a Goku que yo también soy un androide... pero no le diré que Gohan y mamá me hicieron parte de su familia.

—No lo entiendo ¿Por qué no se lo dirás?.

—Es complicado, lo que pasa es que...

Aquella conversación fue interrumpida de manera intempestiva, debido a que ambos sintieron una presencia maligna aproximándose, eran dos ki demasiado poderosos que podrían hacer temblar a cualquiera.

Ambos se miraron a los ojos con sorpresa, era imposible que esto estuviera pasando: Freezer y su padre se estaban acercando, y no había señales de Goku en ninguna parte.

Minutos después una gran nave pasó cerca de donde se encontraban, lo cual confirmó todas sus sospechas, los jóvenes guerreros se miraron y asintieron para después salir volando hacia donde la nave había aterrizado.

➵

Mientras tanto en unas montañas alejadas, un pequeño grupo de personas miraba con mucho terror hacia donde provenían aquellos ki tan poderosos.

Yamcha, Puar, Ten Shin Han, Chaoz, Bulma, Vegeta, Krilin, Piccolo y el pequeño Gohan no daban crédito a lo que veían, definitivamente era la nave de Freezer, ¿Acaso Goku no lo había derrotado en el planeta namek hace un año?. Ni el mismo Kaio-sama entendía lo que estaba ocurriendo.

—No cabe duda de que Freezer sigue con vida —Gohan les informó con mucho temor en su mirada.

—Y también... hay otro individuo mucho más poderoso que lo acompaña —prosiguió Krilin.

—¡Escuchen, ni se les ocurra volar! Esos tipos tienen rastreadores, si nos encuentran será nuestro fin —Vegeta exclamó mientras señalaba donde había aterrizado la nave— debemos caminar a ese lugar, ¡Andando insectos!

—Vamos —dijo Piccolo con un tono tranquilo mientras colocaba su mano en el hombro de Gohan, transmitiendole un poco de seguridad.

—Si señor —el más pequeño asintió mirando a su maestro.

—¡Esperen! —Yamcha interrumpió haciendo que todos volteen a mirarlo— antes que nada díganme, ¿Tienen la seguridad de que este ki pertenece a Freezer?.

—Así es pero este no es todo su poder, aún le falta mucho para llegar a sus límites —fue Gohan quien respondió aquella pregunta.

—¿Y ustedes se atrevieron a pelear contra ese demonio? —Ten Shin Han preguntó sorprendido ante esa respuesta.

—Esto debe ser una broma, nadie es capaz de derrotar a ese monstruo, y no es uno solo, ¡No podemos hacer absolutamente nada!.

—¿Y qué vas a hacer Yamcha? —Piccolo inquirió haciendo que el mencionado volteara a mirarlo— ¿Te quedarás aquí? Bien, hazlo... ya todos sabemos que no tenemos salvación.

—¿Quieren que les diga algo? —fue Vegeta quien tomó la palabra con una sonrisa burlona— este será el fin de la tierra.

➵

—Su majestad, gran Frezzer —con mucho respeto, uno de los subordinados se acercó a los mencionados— hemos aterrizado.

King Cold y Freezer (Quien tenía casi todo su cuerpo reconstruido, producto de la explosión del planeta Namek) levantaron vuelo y salieron de la nave espacial, aterrizando frente a sus soldados y miraron a su alrededor, inspeccionando el territorio.

—El planeta tierra, no está nada mal —fue lo único que dijo Freezer mientras sonreía cínicamente.

—A mi no me interesan los terrícolas, mi único deber es acabar con ese súper saiyajin y no me importa que métodos utilice —Cold respondió seriamente— nuestra familia tiene que ser la más poderosa de todo el universo.

—Bueno, si peleamos juntos papá, es seguro que le ganemos  —Freezer agregó sonriendo con mucha confianza— además he aumentado mi poder, a lo mejor hasta puedo hacerlo yo sólo.

—Por cierto, faltan tres horas para que ese súper saiyajin llegue a la tierra, ¿Vas a esperarlo, Freezer?

—Por supuesto que sí papá, pero antes de que venga quiero matar a todos los terrícolas para que se sienta humillado —respondió sin borrar aquella sonrisa— aunque hay muchos humanos habitando este planeta tres horas serán suficientes.

➵

Giin y Trunks estaban escondidos a unos cuantos metros de los villanos, escuchaban atentamente la conversación que ambos tenían sorprendiéndose al escuchar que Freezer había aumentado su poder.

—¿Ese es Freezer? —Giin miraba a la criatura con desagrado, la base de datos del doctor Raichi y su hermano Gohan le habían dado algo de información sobre ese individuo, pero jamás lo había visto en persona— tiene el aspecto de un androide.

—Y quien lo acompaña debe ser Cold, su padre.

—¿Qué podemos hacer Trunks? Goku aún no llega y esos malditos están dispuestos a atacar.

—No lo sé, se supone que él debía estar aquí para derrotarlos ¡Maldición, no contaba con que esto pasara!

—No tenemos más opción que detenerlos —ella ajustó su pañuelo rojo en su frente, sintiendo un poco de seguridad en si misma.

—Hagas lo que hagas no te separes de mi —el pelivioleta ajustó su espada y miró a su pareja, tomó su cintura con cuidado y le robó un pequeño beso— todo estará bien.

Ella asintió con una sonrisa acomodándose, lista para salir a pelear en cuanto la oportunidad se diera.

➵

—¡Dispersense inmediatamente y maten a todos los terrícolas! —Freezer dio aquella orden muy seriamente— ¡Vayan!

—¡Giin, ahora! —Trunks exclamó desenvainando su espada, la chica asintió y salió un segundo después que él.

Los soldados de Freezer levantaron vuelo dispuestos a cumplir cada orden dada por el emperador del mal, sin embargo, se escucharon unos cuantos golpes junto al sonido de una espada para que finalmente sus cuerpos sin vida cayeran justo frente a Freezer y su padre.

Trunks y Giin aterrizaron frente a ellos con miradas frías mientras que este guardaba nuevamente su espada.

—¿Se les ofrece algo terrícolas? —Freezer preguntó sin siquiera inmutarse por la muerte de sus soldados.

—Hemos venido a matarlos a todos ustedes —fue Giin quien respondió mirando con profundo odio a los invasores.

No tenían idea de porque Goku no había llegado a la tierra o porque las cosas no eran tal y como Bulma les había relatado, solamente sabían que debían luchar para salvar la tierra, tal y como su maestro Gohan les había enseñado.