Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

35. Reunión

Por Jimena

-Bueno señores, como ya hemos discutido con anterioridad, los siguientes puntos que se leerán tienen que ver con el manejo de...

...

No podía ni siquiera prestar atención a lo que hablaba mi jefe y ese ya era un problema, venía en representación del departamento de Tatiana. Era de suma importancia tomar nota y establecer puntos.

Jimena!... -hablo mi jefe algo molesto, pues tenía rato hablándome y lo había ignorado.

-Si ingeniero.

-¿Qué tienes que decir al respecto de lo que estamos planeando?

Me quedé congelada, no entendía a que se refería el ingeniero, me la pasé divagando todo este tiempo que no sabía que decir, en el último de los casos tenía que preguntarle a que se refería.

-Lee fracción Vlll Párrafo tres. -Susurro Natalia muy cerca de mi. Eso provocó un sobresalto y una sensación extraña por todo el cuerpo. -¡Jimena concéntrate! -Me dije, respire hondo y volví en sí. Leí lo que me dijo que revisará y entonces pude responder, si es que eso era lo que él quería... Sino Natalia me habría jugado una buena broma y perdería demasiada credibilidad en esa reunión.

El jefe se me quedó viendo, como si tratará de buscar un error o algo mal en lo que había dicho. Alguien más apoyo mi opinión y eso dió fuerza a lo que plantee.

-Muy bien. -Sólo dijo eso y continuó con los siguientes puntos.

...

-Gracias. - mencioné a Natalia dándole una vista de reojo.

Seguía siendo la misma chica de antes, siempre ayudando al prójimo, cosa que odiaba pero a la vez admiraba de ella.

Por otra parte sus rasgos habían cambiado un poco con la edad, no es que se viera vieja más bien, refinada. Sus ojos se volvieron más profundos, seguía conservando la misma nariz pecosa que tanto me encantaba, sin mencionar que ese labial hacían lucir sus labios más carnosos de lo que ya eran.

Por dios Jimena... Deja de pensar en ella! - me dije haciendome una nota mental.

La siguiente media hora paso rápido, por suerte sólo hablaron de algunas cosas más, pero eso no significaba que sería la única vez que estaríamos reunidos.

-Es todo por hoy, continuaremos trabajando como hasta ahora, por el momento algunos ingenieros que están incluidos en este trabajo se encuentran fuera. Esperamos la siguiente reunión para concluir y poner en marcha lo que se habló.

Todos comenzaron a recoger sus cosas para irse cada uno en su mundo, pero claramente sentía la mirada fija de Natalia cubriendome y esperando el momento preciso para atacar. De qué forma ¿Me reclamaría por dejarla plantada? No, por supuesto que no podría, ella me había engañado, ni siquiera tenía el derecho de hacerlo. Necesitaba salir de ahí cuánto antes.

-Jimena y Rodrigo ustedes quédense un momento. - Hablo mi jefe, sacándome un gran peso de encima. Ni siquiera voltee a verla y rápidamente me metí a la oficina principal donde ya me esperaban.

...

Tarde más de lo previsto, para suerte mía ya habían pasado dos horas y era imposible que ella me estuviera esperando afuera.

Tan pronto salí de la oficina me enfrasque en el bar donde aquella vez tuve el accidente.

La verdad quería emborracharme hasta perderme y no saber más de Natalia. -Ahaha... Otra vez la estaba recordando - me dije.

Mi tarde se convirtió en noche, algunas chicas se acercaban con la intención de coquetear pero en ese momento no tenía cabeza para eso. -Maldita sea por qué me pasa esto ahora. No me conformaba con extrañar a Isabel y ahora Natalia. -pense. -¡Acaso el mundo me quiere ver arder!

Seguía lamentandome y bebiendo por supuesto. Encontraba en la bebida una forma de escapar más fácilmente de mis problemas del corazón.

Se que ese era un pésimo pasatiempo pero al menos me hacía sentir más tranquila.

Después de media noche perdí la noción de mi, lo último que recordaba es que fui un rato al baño, me quedé sentada en una banca del pasillo y creo no se bien, me quedé dormida.

-Señorita, disculpe se encuentra bien. -pregunto una mesera del sitio.

-...

-¡Señorita... !

-No se preocupe, yo me haré cargo. -hablo una mujer acercarse a mi y sujetando mi cuerpo con sus manos.

-¿Qué... er...es? - pregunte como pude.

Callate Jimena y camina!

-¿Eres... tú, Nati?

-...

Sollozando* -Porqu...e me dejas..te deamar. Te amo... Pero... Te odio tanto por es..o.

-Por favor Jimena deja de hablar.

-Nunca debist...e de haber...me engañado... Y...o no te perdo...perdono por eso. Eres muuy crue...l.

-¿Qué dijiste?...

-...

-¡Jimena, responde!

-...

....

Al día siguiente...

-Ah... Mi cabeza. -cubriendome la cabeza con la enorme almohada que tenía a mi lado. -Cielos no debí de haber bebido tanto. -Me maldecia aunque en el fondo yo sabía que esa había sido mi decisión.

Qué rayos! -Salte repentinamente. -Esta no es mi cama. -Volte a ver a mi alrededor. Volví a acostarme tratando de recordar lo que sucedió anoche.

-¡No, no, no no! Será posible que me haya acostado con alguien. ¡Pero... Hay no! - seguía maldiciendo.

Me levanté de la cama y ví que la puerta del baño estaba abierto, me acerque para ver si alguien estaba ahí, cosa que no fue así. Tome una ducha muy rápido y me puse la misma ropa que tenía. No sabía si quedarme a esperar a que alguien subiera o salir de ahí. Opte por la segunda.

Abrí la puerta y comencé a caminar por el pasillo rumbo a las escaleras, claramente sentí el aroma del café recién hecho y posiblemente de hot cakes con un toque de... ¿canela? -¿Qué extraña manía de usar canela en un hot cake? -mencione, lo que me hizo recordar cuando lo preparaba... Pare en seco y me plantee la posibilidad de que estuviera en casa de alguien de quién se supone estaba huyendo.

...

Pase por la sala, la cual estaba desierta. Esto ya me estaba preocupando. Primero despertar con un fuerte dolor de cabeza, luego descubrir que estaba en casa ajena y por último que en esta no había nadie.

De repente se oyeron ruido de llaves tratando de abrir la puerta principal. Por instinto me escondí tras la puerta de la cocina. Para mala suerte mía, quién estaba entrando no era otra que Natalia.

-Si, ya revise esos papeles. Sólo falta que me aclaren unas cosas y estará listo. -caminando rumbo a la sala mientras hablaba por celular. -No, papá oye ya estoy bastante grandesita para que estés opinando acerca de eso. Sabes que, hablamos luego. -colgando la llamada mientras dejaba unas bolsas de compras sobre la mesa principal.

Me asome un poco para verla y pude notar que algo le preocupaba. -Esa no era la chica de la que me había enamorado. - pensé. Nuevamente se volvió a incorporar, como si por arte de magia sus problemas se hubieran  acabado. Me volví a esconder ya que su mirada estaba centrada en la cocina.

Se dirigió a esta donde seguramente me encontraría escondida, pero antes de abrir la puerta cambio de dirección y fue directo a las escaleras. -¡Va ha buscarme! - pensé.

Rápidamente fui corriendo a la entrada principal para salir de su casa sin que se diera cuenta pero me topé con que estaba cerrada con llave. -¡Demonios! - masculle. Intente forzar la puerta pero fue inútil.

-Vas a algún lado. -menciono Natalia quién me miraba desde las escaleras. Sus palabras me hicieron saltar del susto y a su vez de miedo, era la primera vez después de mucho tiempo que la tenía cara a cara y no sabía que hacer.

Ella comenzó a acercarse hasta donde me encontraba, no supe cómo actuar así que sólo me quedé parada sin hacer ningún movimiento. Al estar frente a mi, mantuvo su vista puesta en mi, no podría desifrar que era lo que veía o tal vez que pensaba en ese momento. Hasta que de la nada se lanzó a mí con un abrazo dejándome paralizada de la impresión.

-Yo... -ni siquiera terminé de decir lo que quería decir cuando sentí la bofetada en mi rostro.

Había cambiado por completo su mirada a una más tensa y oscura.

-¿Que rayos Natalia, por qué me golpeas?

-No hagas preguntas estúpidas, eso fue por dejarme plantada. -Hablando muy cerca de mi que casi podía sentir su respiración. -Y esto... - uniendo sus labios con los míos en un beso tan aferrado que me hizo olvidar que segundos antes me había dado una bofetada. - Por que te eché mucho de menos.

Me separé un poco de ella, la verdad estaba tan impresionada por eso último que deje de razonar por un instante lo que estaba sucediendo. Pero luego llego a mi mente su reclamo que reaccione de la peor manera.

-¿Qué dices?, tú no tienes ningún derecho en reclamar nada. Fuiste tú la que se equivocó primero así que no me vengas con el cuento de la santa por qué no te queda.

-¡De que demonios estás hablando Jimena!

-Sabes a lo que me refiero y ya me cansé de pensar en ello, tengo un fuerte dolor de cabeza. Te exijo me dejes salir de una buena vez.

-No, no te dejare ir hasta que me digas por qué nunca llegaste a la boda. Nadie se explicó lo que pasaba, ni mucho menos yo que era tú prometida.

-Por favor Natalia no me hagas repetir algo que no quiero recordar. Déjame salir. -hablando ya algo cansada de la situación.

-No, necesito escuchar tú argumento.

-Me gire con odio hacia ella, la mire tan retante que se reclinó un poco hacia atrás.

Con todo el dolor de mi alma le dije lo que mis ojos habían visto y aún más importante que ella me había visto cosa que le valió en ese momento.

-Yo... Jimena. Eso tiene una explicación.

-Olvidalo, ya no quiero oír excusas. Te pido me dejes salir. Y lo que tengas que tratar conmigo sea solamente de trabajo.

-Espera... Por favor.

-¡No! Por favor tú! -sonando algo alterada.

-Esta bien. Espera. -Dijo resignada mientras abría. -Pero antes quiero que sepas que seguiré insistiendo para que me escuches.

- Haz lo que quieras. -mencione y me fui de ahí.

____________________________

Comenten, den LIKE y compartan

No olviden pasar por la otra historia

La amante perfecta

Nos leemos luego.

🤗😉

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro