28♡
Subió sobre el regazo del alfa dentro de la bañera, que importa que su costoso pijama se moje todo o que termine roto por tratar de quitarlo, Minho le miraba hipnotizado, Jisung lleva calor y deseo en sus ojos brillantes.
—Minho —susurraba mientras levanta un pequeño bote lleno de agua para retirar el jabón de la piel del alfa, —te amo, —confesó, por primera vez desde que se casaron, Jisung ha dicho sus sentimientos reales.
Minho no sabía como reaccionar, pero optó por mostrar su felicidad y se levantó un poco para alcanzar los labios de Jisung y hundirse en ellos.
El omega abrió los labios permitiendo así, que la ágil lengua del alfa probara toda su boca, el calor subiendo en ambos, estar mojados y tan juntos dentro de la tina era tan sensual y perfecto.
El alfa sujetó a Jisung de las caderas vanagloriándose una vez más de lo magnificas que son, su polla tan dura y presionada contra la de Jisung, demasiado delirio para él.
Terminaron el beso sabiendo que ya no podía esperar más para unirse de verdad en cuerpo y alma, una hermosa mordida en el cuello de Jisung sería el adorno perfecto que completara la belleza del omega.
—Te amo Jisung, y estoy seguro que de ahora en adelante te amaré por siempre, —expresó el alfa. Jisung asintió con una sonrisa, el sentimiento es mutuo.
Con cuidado salieron de la tina, el alfa no se vistió por que sabía que al llegar a la cama pondría a Jisung sobre esta y se hundirá en él para darle tanto placer que olvidará su nombre.
Con una manta en su cintura guiaba a Jisung mientras lo toma de la mano, el omega a su lado igual de feliz, las feromonas del alfa comenzaron a liberarse para mezclarse con las del omega.
Entonces Jisung sintió un dolor fuerte en su parte baja y cerca de su estómago, calor esparciéndose desde el centro de su cuerpo hasta calentarlo todo.
—Ah, —gimió, Minho le abrazó rápido y le miró a los ojos para diagnosticar que sucede con su omega.
El orgullo lo lleno de pies a cabeza.
Es jodidamente perfecto lograr algo como un celo adelantado.
Según los cálculos de Jisung su celo debe llegar en un mes o menos y justo ahora aspirando el delicioso aroma de su alfa, Jisung entró en celo.
Minho debía aceptar que preñar a Jisung sin el celo era una hazaña que deseaba cumplir, pero adelantar el celo del omega era otra de las grandezas que un alfa podría lograr y sentirse tan pleno y orgulloso, ya tendría oportunidad de embarazar a su omega sin el celo en un tiempo, ahora lo importante es atenderlo.
El celo pone a los omegas en diferentes situaciones, algunos se vuelven mucho más sumisos y caprichosos, otros son exigentes y demasiado necesitados, Minho escucho a Lucas decir que su omega no estaba feliz si no tenía su polla dentro todo el tiempo.
Eso era exigente.
Minho está ansioso por descubrir como será Jisung en el celo, lo emociona e intriga.
—Minho —gemía el omega, Minho se apresuró a colocarlo sobre la cama, lo tomó en sus brazos fuertes provocando que el omega se deshiciera en jadeos, el cuerpo duro de su alfa es delicioso de sentir tan cerca. —Alfa más rápido —decía Jisung mientras tomaba la manta en la cintura de Minho, el omega usaba fuerza que Minho no creía que tenía, cuando menos lo pensó el alfa, ya se encontraba sobre la cama con Jisung sobre su polla aún vistiendo esa molesta y húmeda pijama.
El omega se encontró peleando por romper la costosa prenda y Minho encontró la escena demasiado tierna, Jisung trataba inútilmente de que quitar su ropa, el alfa se permitió admirar a su omega en tan adorable situación antes de invertir posiciones y ayudarle destrozando la delgada tela.
El omega gemía complacido de ver los músculos de su alfa en acción, Minho le quitó el pijama fácilmente.
El alfa planeaba seguir en esa posición, pero Jisung quería el control, Minho se lo dio sin problema, es una fantasía excelente que omega se diera la tarea de complacer al alfa.
Normalmente enseñan que el alfa se encarga de hacer al omega correrse y después busca su propio placer importando poco que el omega este agotado de recibirle.
Minho deseaba más que nada complacer a Jisung en todo momento y si él desea el control de todo a Minho no le molesta ser dominado por su omega, eso no le quita lo alfa.
—Minho hagamos un bebé, —decía Jisung con un tono tan suave y adorable el alfa se siente enternecido, esperaba que Jisung fuera del tipo de omega que se vuelve exigente, estaría encantado de mantener su polla dentro de Jisung, ello no le molesta en absoluto, pero Jisung es más como animado y tierno, juguetón.
—Todos los bebés que quieras amor, —concedió el alfa haciendo a Jisung sonreír mientras aplaudía alegre, el omega subió sobre el colosal cuerpo llevando su nariz al cuello del alfa, aspiraba profundo embriagándose del adictivo aroma, comenzó a frotarse contra el cuerpo del alfa mientras este le sostiene de la cadera.
Jisung se movía suave, como si quisiera tentar al alfa a perder el control, soltaba risitas tiernas y mordisqueaba los hombros del alfa.
Minho está encantado con las acciones del omega, también quiso jugar con él por lo que llevó su palma derecha al pene de su esposo, lo tocó despacio para tomarlo en su puño y apretar la punta.
El omega saltó de sorpresa, y gimió sobre los labios contrarios, presionó sus manos en los hombros anchos para unirse al alfa en un beso.
Sus labios moviéndose en armonía tan cálido y suave que parecía incorrecto siquiera pensar en alguien más profanando tan esplendido templo de adoración.
Adoración del uno por el otro.
El omega se alejó para jugar de nuevo, sus esponjosos labios deleitándose con cada centímetro de piel, su lengua dejaba lamidas pequeñas, pero sus dientes se encargaban de marcar al alfa cómo suyo.
Minho entendió que el celo lo hace posesivo, lo sabe porque un alfa es igual de territorial, por ello la marca del omega en el cuello es algo necesario de mostrar a otros.
El omega llegó a la polla dura, elevó su mirada a los oscuros ojos de su esposo y soltando otra tierna risa sus manos que parecía pequeñas en el pene del alfa le ayudaron a llevarlo a su boca, dejó un besito tan suave que solo hizo a Minho invocar todo su auto control, el omega si que sabe como jugar con su cuerpo.
—¿Puedo ponerlo aquí? —preguntó Jisung señalando su boca, Minho no sabía que eres más excitante, la inocente pregunta o los ojitos brillosos del omega.
—Joder Jisung, estoy a nada de perder la razón, —se quejó el alfa.
—Alfa... —llamó el omega juguetón, Minho le miró queriendo saber que diría, —¿Pondrás un cachorro en mí?
"Jodida mierda"
—Todos los que quieras precioso, tantos como quieras, —concedió una vez más, Jisung sonrió satisfecho y llevó su boca al pene grandemente necesitado.
Minho sentía que se correría si seguían con todo el juego previo.
El omega bajó a más no poner y todavía dejaba fuera unos tres centímetros de gloriosa longitud, no es que fuera enorme, pero sus dieciocho centímetros bastante gruesos eran algo digno de admirar.
Jisung de deleitó con la longitud tanto como le dio la gana, Minho sabía que su autocontrol estaba a nada de volverse una follada agresiva a la boquita de su omega.
Pero el omega se detuvo.
¡Gracias a la Luna!.
Jisung se acomodó sobre el alfa con su mirada fija en el rostro de este.
Jisung sabía que debía preparase para recibir a su alfa, pero se sentía lo suficientemente bien lubricado como para penetrarse sin preparase antes.
Alineaba bien la polla dura como el acero para comenzar a bajar sobre ella, la punta entró y el cuerpo del omega tembló, el alfa le sostiene fuerte para evitar que se penetre rápido, obedece a las peticiones de su omega, pero cuidará de él en todo momento, así el omega quiera una follada agresiva como primer encuentro lo principal es su bienestar.
Jisung lloriqueaba de placer al sentir como la dureza de Minho abría sus paredes para adentrarse todo, el alfa gruñía desde lo profundo de su pecho, el interior de su omega es la mejor jodida gloria que sabe que jamás encontrará con nadie más.
El omega es húmedo por dentro, su polla resbala con facilidad y las paredes se acostumbran a su tamaño, Minho supo que Jisung encaja perfecto con él cuando su pene estuvo totalmente dentro y el omega estaba feliz y complacido de ser llenado tan profundo y por una longitud bastante gruesa.
—Mmm... Ahora somos uno, —decía el omega con sus ojitos llorosos, el placer marcado en sus mejillas y la felicidad plasmada en su rostro, perfecta sensación de plenitud al complacer a su alfa y sentir lleno.
—Te amo Jisung, —declaró Minho, debía aceptar que le molestaba un poco que Jisung lo llamara como alfa y no por su nombre. —Te amo omega.
El omega sonrió y dejó a Jisung disfrutar de los demás.
Jisung cubrió su rostro de pronto consiente de todo lo que había dicho, pero se dijo que con Minho podría mostrar todo de si y eso incluía las actitudes caprichosas de su omega. Acomodó sus manos sobre el pecho del alfa y se elevó algunos centímetros para bajar suave, la polla dura tocaba profundo en su interior, no creía tener la fuerza suficiente para montar a su alfa como tanto quería.
Minho pudo notarlo por lo que le tomó de la cadera para elevarlo con sus manos, Jisung gimió al sentir como casi toda la longitud salía de su interior para después llenarlo de nuevo.
—Minho, —susurró y el líder se sintió pleno, era su nombre, era Jisung.
El movimiento se volvía errático con el pasar de los minutos, Jisung estaba agotado, pero no quería desistir, aún no, bajó sus labios los del alfa y se permitió ser agresivo para besarlo, Minho aceptó cada acción, gruñó cuando Jisung le mordió el labio lo que lo insitó a elevar sus caderas y golpear duro dentro del omega, Jisung lloriqueó cuando su punto más sensible fue tocado, estaba tan cerca de lograr que su alfa lo llenara.
Esa fue su motivación, abandonó la boca de Minho para acomodarse mejor y moverse con facilidad, retomó el ritmo de sus penetraciones, cuando su cuerpo tembló listo para dejarse ir, tomó la mano de Minho y pidió con la mirada que Minho tocara su pene.
El alfa lo hizo gustoso, se levantó de la cama para sentarse en esta, sabía que el nudo está cerca, es el primer nudo dentro de Jisung, la idea lo enloqueció.
Jisung se mordió el labio ahogando su grito de liberación, el espeso y blanquecino líquido salta fuera de su pene, sus paredes apretaban al alfa dentro lo que hizo a Minho gruñir.
Jisung mostró su cuello pidiendo su mordida, Minho tuvo miedo de que fuera el omega y no Jisung quien lo pedía por ello negó elevando sus caderas de nuevo, se corrió con la ultima estocada permitiendo que su nudo llenara a Jisung, el omega gimió alto y enterraba sus uñas en los hombros del alfa.
—Alfa por favor, —suplicó el omega, Minho negó, —Minho por favor márcame.
Minho tomó a Jisung de las mejillas para confirmar que era él, Jisung le miró con sus preciosos ojos color café oscuro, lágrimas suplicando por su mordida.
Minho empujó el nudo dentro haciendo a Jisung llorar de placer, el alfa mostró sus dientes y tomando a su omega del cuello, clavo estos en la tierna y lechosa piel.
Jisung lloró llevando sus manos al cabello de su alfa, dolía como el inferno, pero la sensación que se formaba en su pecho de por fin estar unido a Minho sobrepasaba cualquier dolor.
El nudo es grande, el líquido caliente que lo llena lo hace sentir completo, la ilusión de su cachorro hace a su corazón demasiado feliz.
Minho sacó sus dientes de su piel y lamió la sangre de la zona para cicatrizar, Jisung tomó a Minho de las mejillas para mirarlo a los ojos.
Dejó un beso pequeño sobre los labios del alfa, —Te amo Minho, —afirmó sus sentimientos.
El alfa asintió entendiendo que Jisung quería asegurarse de que Minho le cree, pero como no creerle si el alfa siente atreves del lazo que el omega no miente.
—De verdad te amo —reiteró recostando su cuerpo cansado sobre el de su alfa, Minho le besó la frente y recostados sobre la cama acariciaba su espalda desnuda.
—Lo sé Jisung, ahora estoy seguro de que me amas, —el omega cerró los ojos escuchando los latidos del corazón de Minho, tan pacíficos y relajantes, el nudo en su interior y la mordida en su cuello haciéndole sentirse completo.
Así alfa y omega se entregaron al descanso, el lazo recién formado afirmaba que ya no existían razón para no estar juntos.
Eso solo hasta que el alfa supiera la verdad.
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