Jisung tenía el plan perfecto, ideado por su tía, pero es perfecto.

Seducir a su alfa y ponerlo tan caliente que Jisung quede en estado tan solo con la primera vez.

Jisung de verdad quería hacer que Minho se sintiera orgulloso de si mismo, y si conseguía quedar preñado antes de su celo sería perfecto. Por supuesto que eso lo sabrían cuando el doctor Jeon haga los cálculos y diga cuando tiempo tendrá el bebé, descubrir que ha quedado embarazado antes de su celo será un doble regalo para el líder alfa.

Debía aceptar que, aunque sonará cruel, todo era mejor sin Seungmin, Hyunjin y hasta Jeongin alojándose en la casa grande, su alianza con Felix se mantenía y aunque todavía tenían algunos roces como discusiones y de más detalles menores, la casa mantenía un ambiente pacífico y hogareño.

Los estragos del incendió en los cultivos bajaron en un 20% la producción de las tierras del alfa, pero debido a sus buenas relaciones y establecidos términos con sus mercaderes, le dieron un poco más de tiempo para entregar pedidos de la cosecha.

Jisung aún tiene miedo de que Minho descubra que Siwon era Hyunjin, sabe que otro infierno podría desatarse cuando Chan llegué a Ganan ya que Chan conoció a Hyunjin, pero confía en que logrará ganarse la confianza y seguridad de Minho para que cuando la verdad llegué, el líder no sea tan duro.

Quiere confiar ciegamente que por el amor que Minho le profesa, la verdad no será tan cruda ni arrasadora, eleva oraciones a la Luna para pedir protección y que haga al alfa sereno y comprensivo.

Aunque sus creencias podrían jugar en contra.

Hace una semana que Hyunjin se fue, el vacío de la presencia de Seungmin era evidente, Jisung ya no se sentaba en el salón a tomar el té escuchando anécdotas sobre Minho que contaba el omega menor, ahora se sentaba solo con su tía y a veces Felix, pero Felix solo lo hacía por cortesía, el omega rubio podía entender el sentimiento de abandono y aunque Jisung no fuera su persona favorita, Felix sentía empatía.

El regreso de Chan está previsto para dentro de dos meses, Minho lo necesitaba más rápido en Ganan, pero el alfa Chan aún debía arreglar algunos pendientes con gabinete del Ministro Ki, parecía que cada día tenía una nueva razón por la cual debía relevar a Minho se su cargo como Líder, pero Chan no permitiría que le quitaran a Minho lo que por línea de descendencia era para él, habían sido años de mucho dolor siendo el hijo del tirano Jaebum como para que Minho no fuera reconocido por lo que es.

El único hijo de lo que fue una imponente dinastía, la familia Lee.

Minho tenía muy poco o nada de tiempo para mimar a Jisung y eso solo le ponía sensible, Jisung estaba jodidamente acostumbrado a la atención de Minho, pero sin un administrador en Ganan y con Felix haciendo lo más que podía para ayudar, el tiempo del alfa estaba muy limitado.

Y aunque estuviera limitado, Minho era el alfa más feliz y dichoso de todo el norte, si ni siquiera Changbin con todos sus increíbles dotes de alfa legitimo sería tan dichoso como lo es Minho, Changbin es soltero, Minho regresa todos los días a su hogar para dormir junto a su hermoso omega con la seguridad de que pronto podrían trabajar en lograr ese cachorro que lleve sobre sus hombros la descendencia Lee.

Minho a veces se reprende por tratar de imaginar que diría su padre si Minho le mostrara a su cachorro, ¿Sería tan cruel como lo fue con él? ¿Aceptaría al pequeño como su nieto o lo haría vivir como un bastardo igual que él?

Quisiera creer que el hombre se doblegaría ante su nieto, pero ni en sus sueños más profundos pasaría algo como eso.

—Buenas noches mi señor, —recibía Tzuyu en la puerta, —la cena esta recién servida para usted en el comedor.

—¿Mi esposo?

—Ya ha cenado, estaba esperándolo, pero está un poco cansado de las labores de hoy por lo que mejor fue a tomar un baño, —explicó Tzuyu.

Minho asintió caminando a paso tranquilo hasta el comedor, Felix estaba allí.

—Buenas noches, —dijo el rubio, —Chan envió una carta —extendió el papel.

Minho asintió y se sorprendió de ver a Felix despedirse, creía que el omega se quedaría para acompañarlo como antes.

Aunque fuera algo triste, estaba feliz de que su buen amigo y casi hermano entendiera que sus sentimientos no eran más que amor fraternal. El mismo Felix mantenía su distancia.

Se sentó a la mesa y abrió la carta, comenzó a leerla mientras degustaba de su cena, dio una mirada rápida a todo el lugar y notó que Jisung había pedido que cambiaran algunas cosas de lugar, si miraba más a detalle todo parecía ser más del estilo de Jisung, como si la casa de verdad fuera suya.

Lo cual es totalmente cierto.

Minho sonrió como tonto enamorado una vez más después de miles.

En la carta Chan informaba que podría estar de vuelta antes de lo previsto, el gabinete ya no tenía más excusas y Chan ya tenía la mayor parte de acuerdos firmados, también informaba que había salvado al hermano de Jisung de meterse con cierta mafia que manejaba drogas, y que las tierras del coronel estaban mucho mejor y recuperándose de aquel saqueó, la economía de los Han se mantiene estable, si saben manejar bien sus recursos saldrán a flote y se mantendrán sin necesidad de que Minho interfiera de nuevo.

Buenas noticias para lograr sonrisas en su omega.

Al terminar su cena, el alfa fue por cortos minutos a su despacho tratando de adelantar algo del trabajo del día siguiente.

Subió las escaleras y al llegar a la puerta de su habitación el olor a cerezas frescas hizo a su alfa gruñir de placer, Jisung recién bañado desprende un olor tan embriagador.

El omega estaba en la tina, quitaba el jabón en su lechosa piel y Minho admiraba desde la puerta todo ese arte, tan majestuoso y perfecto.

Jisung sintió el aroma a alfa y giró a mirar a Minho. Le sonrió algo coqueto y sorpresivamente sin vergüenza al encontrarse desnudo.

El omega se movió sensual y cautivador bajo la penetrante mirada del líder, Minho sentía su cuerpo hervir, el fuego de Jisung estaba quemándolo.

El omega secaba su piel muy delicado, movía sus caderas de un lado a otro tarareando una melodía suave, el alfa entendió en cero segundos que su omega estaba seduciéndolo y aquello lo encendió como nunca.

Jisung se vistió con un pijama muy diferente a los que normalmente usa, sus pijamas son de seda, su padre siempre se aseguro de que sus hijos omegas fueran vestidos solo con lo mejor y la ropa de Jisung es especialmente fina, pero lo que viste hoy es igual de elegante aunque mucho más sensual.

La tela es suave y lisa, pero con cierta trasparencia que Minho esta seguro de que podría desgarrar esa delicada tela para devorar completo a su pequeño travieso.

—¿Te gusta? —preguntó el omega dando sigilosos pasos cerca del alfa, Minho asintió tomando a su omega entre sus brazos, —mi tía lo trajo de Paris para mi como regalo de bodas, —comento, la mitad de eso era verdad y la otra casi.

—Bendita sea tu tía, te ves precioso —el alfa expreso todo su gusto deslizando sus palmas por el contorno de las caderas del omega, se sintió orgulloso de que Jisung tuviera caderas firmes y anchas, sus cachorros serán bien incubados en el interior del omega. —Me encanta.

Jisung sonrió grande, su tía era tan buena planeando ese tipo de situaciones.

—¿Por qué no tomas un baño? Yo podría ayudarte, —sugirió para después elevarse a dar un beso sobre los suaves labios del alfa.

Minho aceptó encantado y a la velocidad de la luz se desvistió para meterse a la tina. Jisung entró segundos después del alfa, en sus manos una esponja con jabón para lavar la ancha espalda del alfa, su pecho y hasta su abdomen.

Minho mantenía sus ojos cerrados disfrutando tanto de la sensación de ser atendido por Jisung, su corazón latiendo feliz y su alfa tan complacido con él.

Jisung admira cada centímetro de su alfa, no es completamente un saco de músculos duros como alguna vez fue uno de sus muchos pretendientes, el alfa tiene la cantidad perfecta de músculos tonificados, la piel se suave y aunque hay muchas marcas en ella es preciosa, las manos de Jisung soltaron la esponja para deslizar únicamente sus manos sobre la piel, Minho abrió los ojos algo sorprendido y Jisung ya no pudo darle más largas a lo que deseaba.