Capítulo 9.

La semana había pasado tranquila, no nos habían dado ninguna tarea así que estaba libre después del trabajo. Con Camila me había unido más y más, era como si nos conociésemos de toda la vida cuando estábamos juntas, y nuestros almuerzos después de clases se habían hecho diarios, ya sea en su casa o en algún lugar, terminábamos todos los días almorzando juntas.

Con Lucas me había visto unas veces ésta semana después de ese beso, no habíamos quedado en nada ni hablamos del beso. Solo nos gustaba estar juntos y disfrutábamos de la compañía del otro.

¿Se acuerdan de la chica alta rubia con miles de pecas? Resulta que se llama Victoria, y resulta que es la nueva novia de Tom. Y desde que la trajo por primera vez a casa y pensó que era la sirvienta de los chicos, me cae mal. ¿Mal? ¡Para el culo! Cuando estaba con Tom, era una "dulzura", pero parece que tiene doble cara la chica ésta. Al estar las dos solas en la sala, le explique que soy la hermana de Harrison y me dijo que no podía ser, como de alguien tan lindo como Haz había salido alguien como yo. Salí de la habitación para tratar de calmarme y no sacarle las pestañas baratas que tenía puestas.

- ¿dónde está mi taza Haz? - le pregunte a mi hermano mientras abría y cerraba los diferentes cajones.

- creo que está para lavar - me estaba por girar cuando vi la puerta abrirse.

- ¡te lo dije Tom! ¡No estoy loca! - miré hacia la puerta y me encontré con la mirada de Tom quien siguió hacia la zorra de dos car... digo Victoria.

- después hablamos de eso, ahora no - me voltee para agarrar mi taza y prepárarme un té. Lo miré a Haz y abri mis ojos bajando mi mirada enseguida, Haz rió por mi cara recibiendo una mirada extraña de Tom.

- ¡hola preciosa! - Victoria se acercó a mí y acaricio mi pelo - ¡que lindo pelo que tienes! ¿Como te haces esos rulos?

- agua - le sonreí sarcásticamente y me acerque a Haz con mi taza en mano - me voy a cenar con Lucas - dije dándole un sorbo a mi té.

- ¿a que hora volves?

Me encogí de hombros - me trae en auto igual, no te preocupes.

- ¿tienes una cita, linda? ¿Quien es este chico? - dijo emocionada Victoria.

- solo un amigo - volví a sonreírle sarcásticamente y me dirigí hacia las escaleras.

- ¡está bien! ¡Pero necesito conocer a este amigo tuyo hermanita! - Harrison gritó y rodé mis ojos negando con la cabeza.

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- ¡ayuda! - le grite al teléfono una vez que Camila atendió.

- ¿¡qué pasó!?

- no sé que ponerme...

- ¡nena! ¡Me hiciste asustar!

Reí - es un código rojo, Lucas me pasa a buscar en media hora y no sé que ponerme. ¡Código rojo! Cuando estoy estresada se me pone la mente en blanco.

- okey, okey. Cálmate. Primero lo primero ¿a donde van?

- a cenar, no sé a dónde.

- puede ser un jean casual, pero con unos zapatos negros.

- puede ser, ¡ya se! ¡Se me vino a la cabeza un conjunto! Gracias, Cami.

- de nada, ¡y la próxima vez no me asustes así! ¡Y suerte! Diviértete, pero no tanto.

- ¡Cami! Solo vamos a cenar.

- ¡quién sabe que hacen estos niños de ahora! - reí y termine la llamada.

Me termine de cambiar y baje a la cocina ya con mi bolso en mano. Puse mi celular en mi bolsillo para estar atenta por si Lucas me mandaba un mensaje. Me senté en el sillón esperando a que se haga la hora y prendí la televisión. Escuche unos pasos en las escaleras y me gire encontrándome con Tom.

- ¿ya se fue Victoria?

Tom asintió y se sentó al lado mío - ¿vos ya te vas?

Asentí - en un rato.

La hora llego y mi celular vibro, leí el mensaje de Lucas que me decía que ya estaba abajo, lo salude a Tom quien me saluda con la cabeza y me dirigí hacia la puerta para encontrarme con Lucas.

Narra Tom.

Había algo dentro de mi que no estaba bien. Sentía como mis adentros hervían. Mi corazón latía fuerte y me quedaba sin palabras.

Y todo esto porque me senté al lado de Jenn en el sillón.

¿Que onda?

Verla irse por la puerta con otro chico hacia algo dentro mío que no sabía que era. Cada vez que estaba con ella, o la veía en su maya en la pileta, o la escuchaba reír, me pasaba lo mismo.

¡Es la hermana menor de tu mejor amigo! ¡Cálmate! ¡Diablos! La imagen de Jenn en maya apareció en mi mente y no tenía que otra opción que llamar a Victoria en esta situación de necesidades.

Narra Jenn.

La cita con Lucas fue genial. La pasamos de maravilla. Después de cenar en un restaurant riquísimo fuimos a jugar bowling, que por cierto, gane. Competitiva Jenn es alguien que siempre gana.

Después de que se hicieron las 12 de la noche, Lucas me llevó a mi casa.

- la pase genial hoy, gracias Lucas.

- yo también, Jenn - sonrió y se acercó a mí uniendo nuestros labios. Se separó de mi y le sonreí.

- creo que ya es tarde, debería ya subir - Lucas asintió y subí al departamento.

Abrí la puerta y estaba todo oscuro. Prendí la luz y me encontré con Haz sentando en el sillón.

- ¿que son estas horas de llegar hermanita?

- no lo sé - me encogí de hombros y me dirigí a las escaleras.

- esperate, señorita, de ésta no sales libre.

- ¿de que, Haz? Tengo 20 años, no 16.

- tengo que conocer a este tal amigo tuyo de una vez por todas.

- ¿quien sos? ¿papa?

- no, pero estoy a cargo de vos, y debería conocerlo antes de que empiecen algo serio.

- Haz, ¡salimos solo cuatro veces! - dije levantando mis brazos al cielo - ¿que te pasa? ¿No tengo el derecho a salir y divertirme? ¿No tengo el derecho a salir en citas como vos lo haces? ¿No tengo el derecho a experimentar?

Haz suspiro y puso sus manos en su cintura - tienes razón, Jenn, lo siento. Es que... - hizo una pausa.

- ¿que Harrison?

- solo no quiero que te lastimen, no como la ultima vez. No soporto verte mal.

Suspiré y cerré mis ojos con fuerza. No, otra vez no me voy a dejar manipular.

- lo se, pero no soy la niña tonta de hace unos años, hermanito.

- lo sé - se acercó a mí y me abrazo.

Escuche unos pasos y una Tom en bóxers apareció en mi vista.

¡Dios mío! ¡Que perfección!

¡Jenn! ¿Que estás diciendo?

Tom se paró en seco - creí que estaban durmiendo.

- está bien, hermano. Ya subíamos.

Escuche otros pasos y una Victoria con solo una toalla aparece, me sonrió falsamente y se dirigió a La Cocina.

- ¿noche divertida? - subí una ceja y me dirigí a mi habitación.

-si solo supieras en quien estaba pensando, Jenn... si solo supieras...-