Capítulo 37.

Entre a la cafetería y enseguida mi mirada se cruzó con la de Lucas. Éste me sonrió y me acerque a él.

- ¿cómo estás? - me preguntó.

- bien... ¿y vos?

- bien, ¿quieres pedir un café?

Asentí y Lucas pidió dos cafés a la mesera, a los minutos ya los teníamos en nuestra mesa.

- ¿qué me cuentas? ¿algo nuevo? - pregunté.

- bueno... he conseguido un trabajo en una compañía de autos.

- ¡fantástico!

Lucas rió - y... conocí a alguien.

Abrí mis ojos y sonreí - ¿dónde?

- en la compañía. Salimos algunas veces y... no te estoy contando esto para que pienses que quiero demostrarte que ya estoy... ya sabes.

- me parece perfecto, - sonreí - ¿y ella cómo es?

Lucas sonrió y seguimos con nuestra charla. Los dos estábamos tranquilos y la conversación había seguido como dos amigos que se contaban cosas de la vida y hablaban de cosas random. Extrañaba éstas charlas.

- la pasé genial - Lucas me dijo una vez que salimos de la cafeteria.

- yo también - sonreí - suerte con la chica, la quiero conocer, eh.

Lucas sonrió - podemos hacer una cita doble, si quieren.

- perfecto.- sonreí y asentí - Nos vemos.

Le di un beso en la mejilla y me dirigí hacia la parada de mi colectivo. Suspiré. Sentí que algo más se había relajado dentro de mi.

_____

Me tire en el sillón y justo en ese momento Tom entró por la puerta del departamento. Me sonrió una vez que me vio y se tiró a mi lado.

- ¿y?

- quedamos como amigos y todo se arregló, por suerte.- Tom me sonrió y yo le di un beso en los labios.

- me alegro.- levanté una ceja y Tom rio - en serio, Lucas... no es un mal chico y con tal que entienda que... - iba a decir algo pero se detuvo.- está todo perfecto.

Reí - ¿que entienda qué?

- nada - Volví a reír y me acerque a Tom.

- ¿que soy tuya? - lo besé y Tom sonrió.

- si vos lo decís.- sonrió y unió nuestros labios.

Me separé de Tom cuando escuché la llave de Haz en la puerta. Se paró en seco una vez que nos vio en el sillón.

- si que me va a costar acostumbrarme a esto.- se hizo el dramático y yo reí.

- ¿quieren que pida una pizza? Tengo ganas de pizza - dije haciendo una mueca y tocándome la panza.

- si, ¡que me muero de hambre! - Haz se quejó y se tiro en el sillón entre Tom y yo.

- ¿Haz? ¿En serio?

- ¿qué? - se hizo el inocente y yo negué con la cabeza.

Me levanté para pedir una pizza pero el teléfono empezó a sonar.

- ¿Hola? - atendí.

- ¿cómo anda la futura cumpleañera?

Yo sonreí - bien, mamá.

- no puedo creer que mi bebé va a  cumplir 21 años la próxima semana.

- mamá, no estoy tan grande- reí.

- para mi lo estás - se hizo la dramática y yo negué con la cabeza. - ¿qué vas a hacer?

- no sé, todavía lo pensé que nada. ¿Ustedes van a venir?

- ¡claro que si! No me lo perdería por nada en el mundo.

- oh, - me giré hacia Tom quien estaba mirando la televisión con Haz - entonces, tal vez invite a la familia de Tom también.

- ¿qué? ¿lo van a decir?

- creo que es hora...

- ¿y Haz?

- ya lo sabe.

- ¿qué? ¿Y cómo reaccionó?

- no muy bien, pero se le pasó enseguida.

- ¡que emoción!

- ¡no le digas nada a papá!

- ¡claro que no! Quiero que veas la cara de cuando se entere.

Reí y me despedí de mi madre.
Si que va a ser un cumpleaños interesante.

____

Ya había pasado una semana y mi cumpleaños era el día de mañana. Sentía como los nervios crecían en mi cuerpo, había invitado a la familia de Tom y a la mía, a Cami y a Lucas. Era la primera vez que Tom y yo estábamos en una fiesta como novios oficiales.

- ¿estás lista para mañana? - dijo Tom mientras se acomodaba en mi cama.

- creo que si - me acosté a su lado.

- ¿no te estás arrepintiendo y vas a salir a corriendo? - reí - porque si lo vas a hacer avísame porque yo también me muero de los nervios.- volví a reír.

- solo estoy nerviosa por la reacción de mi padre, una cosa es Haz, y después está mi padre... él es otro nivel.

- dímelo a mi, lo único que quiero es que no me decapite.- reí.

- no te preocupes, primero me decapita a mi y te va a dar tiempo para correr - bromeé - le va a costar acostumbrarse pero se le va a pasar, como a Haz. Tal palo tal astilla.

- buenas noches, Jenn.

- buenas noches, Tom.

____

Me miré en el espejo y miré con atención mi atuendo.

Me acomodé la remera y miré por el espejo a Tom quien entró a mi habitación.

- Estás hermosa - me abrazó por detrás.- feliz cumpleaños.

- Gracias Tom, por milésima vez - sonreí y Tom me besó el cuello.

- abajo ya está todo listo, con Haz preparamos todo.

Me giré hacia él-¿en serio?

Tom asintió - es tu cumpleaños, hoy somos tus sirvientes.- reí.

Bajamos al living y estaba todo perfecto, un cartel grande que decía "feliz cumpleaños", comida y bebidas por todos lados y la música que ya estaba a un alto volumen. 

A los minutos la gente ya había empezado a llegar, saludos por acá y por allá, grandes abrazos de ambas familias y preciosos regalos de todos.

Me sentía tan feliz y no había nada que podía ocupar ese espacio. Me giré hacia Tom y cuando me miró, me guiñó el ojo. Le sonreí y le indiqué que me acompañe a la cocina.

- ¿estás listo? - pregunté.

- ¿no hay nada para golpear que tu padre puedas agarrar, no? - reí y Tom me besó. Tomó mi mano y me guío hasta el living donde estaban todos.

Nos acercamos hasta donde estaban los padres de Tom y ellos nos miraron con una sonrisa.

- Sabía que algo pasaba... - Nikki sonrió y nos abrazó.

El padre de Tom nos abrazó y me giré hacia mis padres, mi corazón dio un salto al ver a mi padre con una gran sonrisa en su rostro. Mi madre aplaudía de la emoción.

- en mi mente sabía que ibas a empezar a salir con chicos, y... estoy contento que sea con Tom.- mi padre sonrió y lo abrazó a Tom.

Ver a mi padre y a Tom abrazarse mi corazón empezó a latir más rápido y sonreí.

Nuestros propios pensamientos son los que siempre nos quitan de nuestra felicidad, porque decidimos escucharlos en vez de ignorarlos.

Después de hablar con toda la familia y pasar un buen cumpleaños, Tom me tomo del brazo y me señaló la cocina.

- ¿qué pasa?

- te tengo una sorpresa.

- ¿sorpresa?

Tom asintió y sacó un pequeño paquete de su bolsillo.- Feliz cumpleaños.

- Tom... - empecé a abrir el paquete un collar hermoso apareció en mi vista.

- es hermoso...

- una rosa porque para mi vos sos una rosa... eres delicada pero al mismo tiempo fuerte. Eres hermosa y siempre estás creciendo. Quiero protegerte y cuidarte. Te amo, Jenn. Nunca lo olvides.

Lo miré y sentí que una lagrima caía por mejilla. Lo abracé y lo besé.

Me rodeó con sus brazos y sentía que estaba protegida, sentía que podía tirarme en ese momento y él me iba a agarrar. Me sentía segura... feliz.

• • • fin • • •

Bueno, como todas las historias, llegó el final.  Espero que les haya gustado leer ésta novela tanto como a mi me gustó escribirla.
Les quería agradecer por todos los comentarios y votos que recibí a lo largo de la historia, saber que a alguien le gustó algún capítulo, o que se rieron con algún comentario me daban una sonrisa en el día.
Espero que la querida Jenn siempre esté en sus recuerdos, porque siempre los personajes que creo son parte de mi y espero que les haya sacado una sonrisa.
Gracias a todas/os y espero que nos encontremos en alguna otra novela que publique.
❤️