Yo me quede recogiendo todo con Juan cuando terminamos él habló.

—Quieres ir a pasear —dijo cuando terminamos de guardar todo.

—Claro —nos fuimos a su auto.

Fuimos por un helado luego fuimos a una azotea que según el conoce bien el lugar.

—Cómo es que te sabes tantos lugares geniales —lo miré.

—Exploró mucho —dijo orgulloso.

—Ya veo —dije viendo la vista tan hermosa.

—Tn —dijo.

—Dime —lo voltee a ver.

—Te quiero hacer una pregunta —dijo nervioso.

—Qué pasa —lo miré de frente.

—Quieres... —fue interrumpido por que empezó a sonar mi celular.

—Es Mario —contesté.

Luego de un rato colgué pero vi que Juan estaba algo enojado.

—Qué me querías decir —dije guardando mi celular.

—Qué te dijo Mario —cambió de tema.

—Qué ya me fuera para la casa —empezamos a bajar de dónde estábamos.

—Ok —me ayudó a bajar.

—Pero que me querías decir —insistí.

—Olvídalo —nos fuimos hacia el carro.

—Sabes que no lo haré —me puse enfrente de el antes de que se metiera al auto.

—Pues yo no te dire —dijo serio.

—Seguro —dije en un tono seductor.

—Si —se estaba poniendo nervioso.

Lo iba a besar pero cuando ya estábamos a punto me fui al lado del copiloto y me subí, el se subió segundos después.

—Odio que hagas eso —dijo serio.

—Tú no me quieres decir así que ahora te aguantas —dije seria yo también.

Quería provocarlo por no decirme lo que me quería decir; así que me abrí un poco la blusa el de inmediato se puso nervioso.

—Para —dije de la nada.

—Qué —el apenas podía hablar de lo nervioso que estaba.

—Detén el auto —dije muy cerca de su bella carita.

—Por que —en ningún momento me vio.

—Por que estas nervioso —me senté en sus piernas.

—Tú me pones así —trataba de no mirarme.

—Así —agarré mi cabello en una coleta alta.

—Si —se puso más nervioso.

—Pues que bien —agarré sus manos para ponerlas en mi cintura.

—Espero que después no te arrepientas —hasta que por fin me vio.

—Tú sos muy malo conmigo —bajaba y subió mis manos por su abdomen por encima de su camisa —así que yo ahora seré mala contigo —me volví a sentar en donde estaba desde un inicio.

—Me las vas a pagar —trataba de calmar su respiración así que volvió a encender el auto.

—Te espero —trataba de no reírme.

El no me volvió a dirigir la palabra cuando estábamos a punto de llegar me acomode la blusa, ya afuera de la casa me acerque a besar a Juan pero el no me lo devolvió así que "enojada" me baje del auto. Para luego entrar a la casa.

—Hermanita estoy feliz —me abrazó.

—Me imagino —le sonreí cuando nos separamos.

—Por cierto nos vamos a casar dentro de dentro de un mes —dijo feliz.

—Me alegro —lo mire.

—También que me ire a vivir con Dayana ya sabes ocupamos un espacio solo nosotros dos —dijo nervioso.

—Y a mi me vas a dejar —dije triste.

—No osea nos puedes ir a visitar cuando quieras —me abrazo.

—Tranquilo entiendo —le sonreí.

—Se que te pido demasiados favores pero necesito que me ayudes con algunos arreglos —dijo acordándose.

—No hay problema —dije emocionada.

Pasamos todo el día arreglando algunas cosas, viendo lo que faltaba para la boda, la iglesia, osea todo. Por que además nos dormimos tarde tipo 3:30 de la madrugada.

*Al Día Siguiente*

Me desperté por que mi celular estaba sonando así que media dormida conteste sin ver quien era.

*Llamada*

—Diga —dije adormilada.

—Bueno niña todavia no se ha levantado —dijo bromeando.

—Es que aún es temprano —me talle los ojos para después acomodarme en la cama.

—Es la 1 de la tarde —dijo riéndose.

—Qué —me senté rápido en la cama.

—Jajajj si oye ocupo decirte algo sera que podemos salir —dijo nerviosa.

—Claro a que hora —me levanté de la cama.

—Paso por ti dentro de 30 minutos —dijo.

—Esta bien —fui a buscar ropa.

—Nos vemos —colgó.

*Fin de la Llamada*

Estaba con la intriga de que era lo que me quiere contar, así que rápido me bañe y cambie para después bajar a desayunar.

—Buenos días —me entregó el desayuno.

—Gracias —me puse a comer.

El igual de puso a comer y luego de unas platicas que tuvimos.

—Saldré con Dayana —dije lavando el plato para después guardarlo.

—Igual saldré ocupo ir a hablar con Juan —imitó mi acción.

Iba a hablar pero justo sonó un auto, el me dijo que si; así que salí a montarme al auto de Dayana.

—Que es lo que me querías decir —la mire.

—Te lo digo en mi casa —así que nos fuimos.

Al llegar ella fue directo a su habitación a buscar algo me imagino, estaba bajando con una caja en sus manos.

—Que es eso —ella se acercó a mi.

—Mira por ti misma —ella estaba otra vez nerviosa.

Abrí la caja encontrándome con esto.

—Para Mario —la mire.

—Si se lo quiero dar de cumpleaños —la puso en la mesa.

—Ya que cumple pasado mañana y yo no le he comprado nada —dije acordandome.

—Vamos a comprar —agarró sus llaves.

Nos fuimos al centro comercial.

*Narra Juan*

Estaba jugando videojuegos con Mario ya que el vino con la intención de hablar, pero terminamos jugando pero se que al final me va a decir lo que me quiere decir.

—Que era lo que querías hablar —dije cambiando de juego.

—Cuando sea la boda va a venir Manuel —dijo.

—Tu padre —lo mire.

—Si —sonó algo frustrado.

—Pero por que te pones así —ya había cambiado el juego así que me fui a sentar a su lado.

—Por que el quiere pasar tiempo con Tn —dijo —pero eso ella no lo sabe —agarró el control.

—Aja —dije tratando de comprender todo lo que me decía.

—Mejor sigamos jugando no quiero seguir pensando en eso —miro la pantalla.

Jugamos toda la tarde hasta que el tuvo que irse así que yo me fui a bañar y a pensar en todo lo que había pasado con Tn, salí directo a cambiarme me fije en la hora 7:40 de la noche. Se me ocurrió algo de ir a visitar a Tn más bien cómo secuestrarla y pagar por lo que me hizo en el auto.

Así que espere a que se hiciera más noche me puse un suéter, me monte en el auto para irme a la casa de ella cuándo llegué me bajé directo a la parte de atrás de la casa. Por que sabia que ahí estaba su habitación mire que una luz estaba encendida así que la llame.

(...)