Cuándo llegué a su casa estacioné el auto para luego bajarme, fui a tocar la puerta y ella la abrió. Noté que estaba en pijama, ella lo notó.

—Disculpa es que no voy a salir —se hizo a un lado para que yo pasara.

—Vives con el —deduci por algunas cosas.

—Si —levantó los hombros —ahorita regreso —me imagino que se fue a la cocina.

Yo estaba viendo algunas fotografías,diplomas y otras cosas sin sentido que había allí. Al rato ella llegó.

—Toma —me dio una lata de cerveza.

—Tu que vas a tomar —agarré la lata.

—Agua es que aún no puedo tomar —se sentó a mi lado.

—Cierto —abrí la lata.

—Y cómo has estado —tomó un sorbo de agua.

—Terminé con Kimberly —dije tranquilo tomando.

—Y eso —ella se sorprendió.

—Me volvió engañar y le terminé —levanté los hombros.

—Wow —dejó el vaso en la mesa.

—Si y cómo se llama tu hija —me terminé la cerveza.

—Abigail —dijo con una sonrisa.

—Lindo nombre —la miré —pero aún no me has dicho quien es el padre —dije directo.

Ella me iba a responder pero un llanto la interrumpió.

—Ya regreso —se fue a la segunda planta.

La curiosidad me gano así que fui detrás de ella, la encontré en una habitación cargando a Abigail. Mientras ella estaba dormida.

—Ella es realmente hermosa —dije detrás de ella.

—Si —dijo mientras veía cómo dormía.

—Se parece mucho a su madre —la abrace por la cintura.

—Juan —dijo nerviosa a mi tacto.

—Extrañaba ponerte nerviosa —le di un beso en la mejilla.

Ella acostó a la bebe para después verme, me hizo una seña para que saliéramos de la habitación. Ya estando afuera ella habló.

—Pero que te pasa —ella seguía sonrojada por lo que hice.

—Ya te dije extrañaba ponerte nerviosa —yo estaba tranquilo.

—Tienes que irte —dijo calmandose.

—Ya va a regresar verdad —dije serio.

—Si —me miró directo a los ojos.

—Cualquier cosa me llamas —bajamos al primer piso.

—Está bien —ella me besó la mejilla.

Después salí de la casa y me subí al auto, espere unos minutos hasta que ese llegó. Cuando se bajo vi que estaba despeinado, luego que se limpió la boca y se arregló la camisa. Para más tarde entrar a la casa.

Me dio una colera pero lo único que hice fue golpear el volante, más al rato recibí una llamada de mi mamá. Así que la fui a traer y a dejarla a la casa, me iba ir para mi apartamento.

(...)

*Al Día Siguiente*

Fui al parque a caminar un rato y para despejarme, al fondo veo a Tn, a ese pendejo y a Abigail que Tn la estaba cargando. Más tarde veo que le dice algo a Tn luego el se va y ella se sienta en una banca a jugar con la bebé.

Seguí con cuidado que no me viera ese mal agradecido, vi que se junto con otra mujer la cual beso apasionadamente. Pero ella no iba sola; en un cochecito habían dos bebés, los cuales el saludo muy feliz. Me dieron ganas de ir a matarlo pero no quería ir a la cárcel, y mejor me contuve.

Al rato iba ir donde Tn pero ella ya estaba caminando a mi dirección, así que yo me escondí cuando paso por donde yo estaba note que iba llorando. Así que rápido me le acerque.

—Tn que tienes —dije preocupado cómo que no sabia nada.

—Estoy harta de lo mismo —dije viendo hacia otro lado.

—Te refieres a tu esposo —me dio asco decir eso.

—Él nunca va donde sus amigos —se le escapó una lagrima —va donde su familia osea su esposa e hijos —dijo calmandose.

—Entonces por que sigues con el —dije tratando de no ir y matarlo.

—Yo ya no quiero es por que mi papa y mi madrastra están recuperando su dinero —se secó las lagrimas.

—Entonces te casaron a la fuerza —dije serio.

—Si —dijo viendo a Abigail.

—Vengan conmigo —dije ya que no vi que ese imbecil regresara.

—Está bien —por fin me miró.

Me partía el alma verla así mejor nos fuimos caminando a mi apartamento, pero agarré a Abigail entre mis brazos por que yo la queria tener. Cuándo llegamos a mi apartamento mi nena digo... Abigail ya estaba dormida.

—Dónde la podemos acostar —me preguntó cuando entramos.

—En mi cama —nos fuimos a mi habitación.

La acosté en mi cama y a su alrededor pusimos almohadas y cobijas, dejamos la puerta abierta por si llegaba a llorar o algo. Nosotros nos fuimos a la sala a descansar.

—Tienes sed —le pregunté viéndola.

—Si agua por favor —nos fuimos a la cocina —me alegro verte de nuevo —me miró.

—Créeme que yo también —le entregué el vaso con agua.

Estuvimos hablando de cosas sin sentido,riéndonos y todo.

—Creo que ya es hora de irnos —Tn se levantó del sillón.

En eso empieza a llorar Abigail ella iba ir, pero yo la detuve por que yo quise ir. Mientras que ella se quedó en la sala yo fui a traerla.

—Dime la verdad de por que regresaste a Los Ángeles —me preguntó cuándo regresé a la sala.

—Por ti —me le acerqué con Abigail entre mis brazos.

—No mientas —dijo mientras se le llenaba de lagrimas los ojos.

—Sigo enamorado de ti —la besé pero me separe por que aún tenía a Abigail en mis brazos.

—Nos tenemos que ir —agarró a Abigail.

—Yo las llevare —agarré las llaves del auto.

Bajamos al parqueo y nos fuimos a su casa, ella iba en silencio ni me miraba. Cuando llegamos la agarré de la mano.

—Lo que te dije fue verdad —suspire —pero entiendo de que tú ya no sientas lo mismo —la solté.

Ella quería hablar pero no lo hizo, abrió la puerta y se bajaron.

—Eos vemos —cerró la puerta.

Yo me quedé viéndola caminando directo a la puerta, hasta que entró a la casa yo me fui.

Jessie sabe toda la verdad de quien es el padre y que quiero el divorcio, pero después de lo que paso con Juan la verdad ya no se en que pensar. Cuando entré escuché unos ruidos raros.

Subí al segundo piso y fui a dejar a Abigail a mi cama no sin antes ponerle cobijas y almohadas para que no se fuera a caer, pero de nuevo escuche ese ruido ¿gemidos? Y venían de nuestra habitación. Asi que fui a ver y no fue para nada bonito lo que vi.

—Ya veo por que regresas tarde —dije viendo a Michael.

—Te lo puedo explicar —se sentó en la cama.

Él estaba con la chica del parque en una posición muy personal.

—Ni te molestes —me quité el anillo —sigue en lo que estabas —dije seria —adiós —salí cerrando la puerta.

Mi ropa no importaba por que no tenía mucha en la casa de Michael, así que fui a hacer las maletas de Abigail, cuando ya estaba todo listo una voz me interrumpió.

—No te vayas —dijo poniéndose a mi lado.

—Se toda la verdad —lo voltee a ver —que tienes otra esposa y dos hijos —dije seria.

Ni le di tiempo a que hablara por que le pegué la cachetada que sentía que ya no tenía mano, agarré la maleta y a mi hija para salir de esa casa. Cuando ya estaba lejos vi que estaba en la puerta con la chica, pero después entraron.

Me fui a la casa de mi papá a decirle toda la verdad, cuando entré el se me quedo viendo sorprendido.

—Hija que paso —me ayudó con la maleta.

—Quiero el divorcio con Michael —me fui a sentar en el sillón.

—Por que hija —se sentó a mi lado y agarró a Abigail.

Le conté todo lo que paso hasta ahorita, el quedo en shock completamente. Al minuto habló.

—Mañana mismo —dijo serio —mi hija merece alguien mejor que ese imbecil —dijo seguro.

—Gracias papá —le agradecí con la mirada.

Estuvimos hablando todo el día hasta que en la tarde me fui a instalar a mi habitación, Abigail se quedó dormida así que puse a su alrededor almohadas y cobijas. Para luego meterme a bañar, cuando salí vi que tenía un mensaje, entré al chat.

(...)

🥰🥰🥰