- solo déjame guardar mi bicicleta y nos vamos en tu coche ¿Te parece?

- si me parece perfecto

- awww, tienes un gatito - dije mirando al gatito

- el es chimuelo

- está bonito - cargue al gato - sus lindos ojos verdes

- lindos ojos verdes...

Mire a Hipo y note lo que ocurría

- bueno es que tu también tienes lindos verdes, digo lindos ojos verdes

- entiendo, nos vamos

- si claro

Hipo abrió la puerta y me subí, me sentí muy cómoda cuando sentí los asientos.

Hipo subió a la camioneta

- ¿Te gusta?

- ¿Que cosa?

- el auto

- bueno es que nunca me había subido a un auto tan bonito como este

- gracias

Comenzamos el viaje, yo le estaba dando señales para que no se perdiera y pudiéramos llegar a al pequeño hotel.

- es ese - dije apuntando un pequeño edificio de color crema

- ¿Segura?

- si, ¿Porque?

- es pequeño

- bueno ahora estás en el campo, aquí no verás edificios altos y llenos de lujos

- bueno tranquila, no quise ofender

Hipo ya no me miro durante los pocos minutos ni yo a él.
Solo acariciaba a su gato.

- ¿Le gusta que lo acaricien? - pregunte sin dejar de acariciar lo

- si, le gusta hacer amigos

- que lindo

Nos detuvimos y bajamos del auto

- ven es por aquí - lo lleve adentro del edificio directo a la recepción

- bien venidos - dijo la señorita

- hola buenas tardes... ¿Tendrá una habitación disponible?

- claro, ¿Quiere ver la?

- si

- por aquí

- ¿Quieres venir?

- ¿Ir contigo?

- claro, necesito una opinión femenina, aparte de la de ella

- está bien, vamos

Subimos las escaleras y paseamos por un pasillo.

- nos quedan 2 habitaciones disponibles

Se detuvo en frente de una puerta que tenía el número 8 y la abrió

- por favor entren

Entramos a la habitación, parecía cómoda y tranquila, no era el gran lujo que se a visto pero para mí punto de vista no está nada mal.

- la habitación incluye baño completo, recamara, comedor y cocina.

La habitación solo eran 2 habitaciones, en la primera estaba el comedor y cocina, claro que solo tenía la estufa y refrigerador, Hipo tendría que poner los muebles, en la otra habitación estaba una cama individual, una ventana que daba a la calle y un baño que solo estaba dividido por cortinas.

- y bien ¿Que le parece?

- bueno tiene todo lo que se necesita

- ¿Podemos ver la otra habitación?

- por supuesto, por aquí

Narra Hipo

Salimos del departamento y subimos al siguiente piso que al parecer era el último.

Nos detuvimos en frente de una puerta que tenía el número 17, la señorita la habrio y entramos.
Era un cuarto pequeño, pero no era totalmente el departamento, debido a que estaba dividido por paredes

- está habitación está dividido por 3 habitaciones, en la primera está la concina - dijo la señorita - y en las otras 2 será como usted guste

Las 2 habitaciones que se encontraban no eran muy grandes eran la mitad del primer cuarto.

- y ¿Que te parece?

- es pequeño pero cómodo

- también incluye su baño

En el tercer cuarto se encontraba el baño y este estaba dividido por paredes.

- me gusta

- muy bien entonces venga conmigo a la recepción para que le expliqué cómo será su pago.

Unos minutos después...

- y así quedaría su pago, tendrá que pagar cada día primero de cada mes, aquí tiene la yave - dijo y me dió una yave - debe cuidar la porque solo está esa y una copia mía por si acaso.

- entiendo - dije y la guarde en mi bolsillo

- ¿Ustedes vienen de luna de miel?

Esa pregunta me puso incómodo.
¿De luna de miel?

Narra Astrid

¡¿De luna de miel?! Me sonrojo solo de escuchar lo.

- no, apenas nos conocimos - dije apresuradamente

- si, estamos aquí por el trabajo - agrego Hipo

- exacto

- además yo estoy interesado en otra chica

Mire a Hipo algo sorprendida pero no le di importancia y mire a otro lado

- solamente lo acompañó porque es nuevo por aquí

- si, yo vengo de la ciudad

- oh, disculpen es que yo pensé...

- no se preocupe

Hipo y yo salimos del lugar y me pidió de favor que lo ayudará a subir sus cosas.
Mientras no llegue después de las 7 a mi casa estoy bien

- así que ¿Una chica? - pregunté mientras el abría su cajuela

- si

- a... Y ¿Cómo es ella?

- es la chica más linda de todas

- si, si pero yo hablo de cómo es... Su físico

- bueno su cabellera es rubia como el color del sol - al decir lo mire mi cabello y luego entre cerrando los ojos ví el sol - sus ojos verdes como el campo - me mire en el retrovisor derecho de su auto - sus labios de un tono rosa pastel - mire el tono de mis labios -y su voz es como una hermosa melodía - aclare más mis garganta - ellas es simplemente perfecta

- a qué bueno - dije cambiando un poco mi tono de voz

- ¿Que haces?

- nada

- ¿Cambiaste tu voz?

- no claro que no

- lo hiciste, antes tu voz era más...

- más... Más ¿Que?

- olvida lo debo estar alucinando

Sonreí y comencé a ayudar a Hipo con sus cosas.
Es un buen chico y es guapo ¿Que chica no le gustaría Hipo? Aclaró se me hace lindo pero no estoy enamorada de él, no lo amo simplemente me agrada.

Cuando terminamos de subir sus cosas nos salimos del edificio

- bueno, me tengo que ir

- si, oye ¿Quieres que te lleve?

- ¿Seguro?

- me hiciste un gran favor, como agradecimiento permíteme llevarte a tu casa

- gracias

Narra Hipo

Astrid  empezó a guíar me para que llegáramos a su casa me sorprendió ver qué vivía algo apartada de las demás casas.

- aquí es

Su casa no era como me la imaginé, su casa era más pequeña.

- ¿Aquí vives?

- si ¿Algún problema?

- no, ninguno

- Hipo, noto en tu rostro que no te agrada

- no, no es verdad

- si lo es - dijo Astrid molesta - ya te dije esta no es la ciudad, no encontrarás restaurantes tan lujosos con comida cara, no encontrarás edificios de 3 pisos, ni tiendas grandes, este es otro mundo y si no te parece te puedes ir

Astrid bajo del auto muy molesta y se fue directo a su casa, sin decir otra palabra.
Me sentí muy mal por eso, Astrid tenía razón el lugar no me gustaba y en cerio quería regresar a la ciudad pero aquí estaba mi nuevo trabajo y tenía que quedar me, se que no será fácil pero con el paso del tiempo me voy acostumbrar a vivir en el campo