CAPÍTULO XVIII
CAPÍTULO XVIII
Aquella noche salió sin rumbo solo caminaba sin pensar, era casi medianoche pero había mucha concurrencia esperando en florecer.
Se sentó en una banca cercana a un cerezo, parecía demasiado seco y viejo para florecer pero quedó allí observándolo. La vista se le nubló por las lágrimas.
¿Como se pudo enamorar de V en aquel tiempo? Se había enamorado de un sueño, algo de su imaginación y ahora sufría sin razón. Todo había sido tan real que no lo creía. Para cuando se dió cuenta, pétalos azulados caían a sus pies, alzó la mirada encontrándose con el cerezo totalmente florecido.
Lo observó por un momento dudando en su pedido.
—Solo deseo que seas real y sea donde sea que estés. Estés bien —susurró
Después de un momento se levantó intentando caminar con cansancio.
—Pudiendo pedir tu cura —aquello la detuvo —pediste eso
Aquella voz, su corazón se aceleró sin control, sus manos temblorosas y con lentitud giró. Allí estaba él con las manos en los bolsillos vistiendo ropa normal y una gorra.
—¿V? —cuestionó con dificultad
—Dije que te encontraría, eres mi Luna —se acercó
—¿Eres real? —intentó tocarlo pero se detuvo con temor
—Estoy aquí Luna —la tomó de la mano —estoy aquí —repitió abrazándola
Correspondió al instante aunque no pudiese decir nada, se aferró a él con la poca fuerza que tenía derramando lágrimas.
—¿Que sucedió? —preguntó
—Te lo contaré todo pero antes debemos cuidar de ti —le acarició la mejilla
—Ya no tengo tiempo, ha avanzado más de lo esperado
—Pero se lo que debo hacer —la tomó de la mano
—¿De que hablas?
—Acompañame
La llevó hasta un auto negro, subieron emprendiendo viaje a quien sabe donde.
—¿como es que sabes conducir? —lo miró
—Cortesía de Alexandre, él ha estado muchas veces aquí —sonrió
—Creí que no podían pasar a este mundo
—Dije que no debíamos no que no podíamos
—¿Volveras a tu mundo?
—Ya lo sabrás
—No comprendo absolutamente nada, recuerdo ayer, hoy, hace un momento y viéndote conducir estoy más segura de que estoy muerta —suspiró
—Eres mi compañera, no puedes irte así nada más. No sucederá de nuevo
—¿Que?
No respondió, solo condujo hasta llegar a una casa de campo alejada de la ciudad. La ayudó a bajarse para luego entrar.
—¿Te gusta?
—Si —sonrió levemente —¿pero que hacemos aquí?
—Aquí recuperemos el tiempo perdido —la besó
—No creo poder —se negó
—Tendré cuidado, lo prometo
No pudo negarse, se dejó llevar y para su fortuna fue muy cuidadoso y amable. Se sentía plena, olvidando absolutamente todo su malestar. El efecto que tenía V sobre ella era asombroso.
Para cuando despertó notó que había sido real, continuaba en aquella habitación. Tomó una ducha totalmente feliz, abrió el guardarropa encontrándose con su ropa.
Sonrió y se vistió para ir a la cocina donde estaba el almuerzo preparado.
—¿Tambien cocinas? —sonrió acercándose
—Si, posiblemente soy un ser perfecto —dijo con orgullo
—No quiero que seas perfecto pero si perfecto para mi —lo besó —ahora me lo contarás todo —lo señaló
—En la noche cuando estés curada —suspiró
—No hay cura para mi, entiendelo
—Y tu no le irás, también entiendelo
—Como sea, ¿que haremos todo el día? —comenzó a comer
—No deberías preguntar —sonrió
—Ten piedad de mi —negó
La noche había llegado y la enorme luna iluminaba todo el lugar. Luna la observaba mientras pensaba lo curiosa que era su vida, todo giraba entorno a la luna y el lobo.
—Es el punto más alto, es el momento —susurró en su oído
—¿Que sucederá?
—Solo confía en mí —la condujo a la cama
—¿Es una pócima? —se sentó
—En realidad es el tratamiento más extremo que puedo ofrecerte —deslizó un dedo por su cuello
—¿Que quieres decir?
—Lo siento Luna, pero será lo último que sufrirás
Notó sus ojos brillar intensamente y en un movimiento rápido sintió un dolor indescriptible. La estaba mordiendo con fuerza en el cuello y no podía alejarlo, se sintió tan débil que perdió la conciencia.
••••••••••« V »••••••••••
Durante el festejo de Alexandre se reunió con él para tratar algo importante.
—Sabía que la cazadora causaría problemas en algún momento, se la ha visto rumbo al palacio de los príncipes. Seguramente está allí en este momento —dijo agitando una copa
—¿Crees que la reciban? La desprecian tanto como a nosotros —cuestionó V
—Si pero si es información en nuestra contra les interesará. Luna está causando más problemas de lo que pude imaginarse, ¿porque continuas teniéndola? Sé sincero conmigo —lo miró fijamente
—¿Sinceridad? De pronto comencé a querer tenerla en mi cama —respondió con tranquilidad y Alexandre rompió la copa
—¿Escuché bien? —se sorprendió y asintió —vaya, ya era hora pero no digas cosas así delante de ella, ten más tacto y sutileza
—Lo intento
—Eres como un animal en celo —rió —¿quieres algún consejo erótico de este experto? —se señaló con orgullo
—No, mi instinto siempre hace el trabajo —sonrió de lado por la expresión de su hermano
—Te lo diré de nuevo no...
No continuó ya que una joven entró sin golpear.
—Disculpe la interrupción Conde, pero la joven busca al Duque —salió
—Ve por ella tigre —lo animó
—Soy un lobo —enarcó una ceja —y deja de llamarte Conde se oye ridículo
—En el mundo humano el conde dracula fue el vampiro más poderoso —encogió los hombros
—Pero aquí no hay humano que te admire o tema —se levantó
—¿En serio no quieres un consejo? El cuello siempre funciona —le guiñó el ojo
—¿Desde cuando das esos consejos? —rió
—Solo siguelos y triunfarás
Salió rumbo a la habitación de Luna donde luego de asustarla notó que tenía mucho frío. La única solución era hacerle compañía en la cama pero no pudo contenerse, se detuvo solo por su pedido.
Al amanecer se levantó sin hacer ruido para no molestarla y fue a ver a su hermano.
—Tigre, ¿como estuvo? Mis chicas dijeron que dormiste ahí —sonrió con picardía
—Solo eso, dormí. Tenía mucho frío y soy muy cálido —dijo con fastidio
—¿Porque tan molesto?
—Regresaremos en cuanto despierte, me mantendré en alerta por cualquier cosa
—Haré lo mismo, posiblemente sucederá lo que nuestro padre no quería
—Pero no será por nuestra mano, esa es la diferencia —suspiró —¿que consejo me das?
—No asesines a nadie mientras no estemos seguro, te conozco como eres cuando te transformas
—Eso no, de lo otro
—Mi hermano al fin consiguió una compañera, solo disfruta —sonrió
—Pero que tonto, y así te consideras un experto —negó
—Soy mayor, respetame —lo señaló
—Pero eres un tonto
—Bien mi consejo es, tratala con delicadeza creo que es imposible para una bestia como tu —se molestó
—Lo dices por que tu eres tan frio que no puedes subir la temperatura en la habitación —sonrió con arrogancia
—Tanta confianza, definitivamente esa chica es la indicada. Largo de aquí —le dió la espalda
—Eres mayor pero te ofendes con facilidad —negó —quiero pedirte un favor
—Me pregunto que será —volvió a mirarlo
—En unos días envía a algunas de tus novias a mi palacio para que hagan ropa moderna para Luna
—Bien, ahora vete
Salió sonriendo para buscar a Luna y así regresar a su territorio, aunque le preocupaba lo que la cazadora podría hacer en alianza de los príncipes el tacto de Luna lo distraía considerablemente. Ella despertaba algo en su interior que no había sentido ni con el espíritu pero de algún modo la recordaba.
Extra, extra!!! ♡´・ᴗ・'♡
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