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Capítulo 0.2: Cielo Y Castigo

Estoy cansado ...

Deje escapar un suspiro y observe mis manos abiertas. Por que no puedo sentir nada ...?

Cuantas veces me e preguntado eso ...?

Lo que hago ...

Lo que e echo ...

Los cientos que e matado ...

Eso debería lograr hacer que sienta algo ...

Mato personas.

Terminó sueños.

Pero al final ... Nada.

Absolutamente nada.

No hay ninguna diferencia en mis acciones. Siento lo mismo cuando me preparo un café con galletas, que cuando le arrebató la vida a alguien ...

Eso me hace un monstruo? No. Debo recordar. No debo olvidar. Yo sólo sigo órdenes. Yo sólo hago mi trabajo.

Mato persona que ya habían muerto y a quienes quieren detenerme.

Sólo eso ...

Los monstruos; viven y tienen metas, son existencias con un propósito claro y establecido.

Yo, por otro lado, no ...

Soy algo mas parecido a una máquina, una simple arma, que está a la disposición de una entidad que se cree con el derecho de juzgar las acciones de otras entidades iguales a el.

Algo como yo ..., no es digno de un nombre.

Sólo soy un Zero.

Levanto la vista para ver el horizonte. La vista no es nada mas que divina. Un infinito claro de nubes azules que se extiende por toda la eternidad y mas haya.

El cielo. El lugar donde todas las conciencias humanas van a terminar en el momento que sus cuerpos dejan de funcionar e inevitablemente son obligados a descubrir la gran mentira de la existencia ..., la cual es que el infierno nunca a existido.

Pocos en este lugar tienen permitido conservar sus cuerpos o cualquier sentido de haber tenido uno. Este lugar es la culminación maxima e infinita de cientos de millones de conciencias humanas futuras, pasadas, y presentes.

La entidad conocida como 'Dios' de este lugar, es sólo aquel que fue la primer creacion de la coniencia colectiva de infinitas conciencias humanas.

La entidad conocida como Dios, es solo la creación derivada de la nesecidad subconsciente del ser humano por desear que algo más grande que ellos mismos los esta esperando del otro lado del umbral de la vida y la muerte.

Siempre que veo hacia arriba, puedo ver la abominación que infinitas conciencias humanas son capaces de crear.

El 'cuerpo' de Dios vuela sobre mi cabeza ...

Un hombre ...

Una mujer ...

Un bebé ...

Un anciano ...

Un animal ...

Cambio ...

El siempre cambia ...

Se deforma. Una ves, hace millones de años, este dios fue una entidad con un cuerpo definido.

Ahora, es sólo una repugnante y bizarra parodia del cambio. El Dios deforme y omnipotente. El gigante sobre las nubes.

Incluso si su entera existencia se vuelve la una de una tortura infinita.

El aun los ama de verdad.

Lo suficiente, como para crear a un guardian.

Uno ajeno a las reglas del ciclo de la vida y muerte.

Uno capaza de regresarlos a casa siempre que se pierdan o sean hurtados por otras entidades de manera temporal de su destino final.

El creo un Zero.

El ...

... Me creo.

Puedo escuchar su 'voz' en mi cabeza. El susurra. Justo ahora, el me esta informando que otra 'alma' esta siendo llevada de este lugar de eterna paz.

Antes eso, yo sólo puedo preguntar una cosa.

"... Cuál es su nombre"

"પ્બી્રपकपुसفدتهبڤسകതദപുനതपकतरबबदਕਵਨੁਪਰلجفتسلاهههلبΔΔΔΔΔ"

La 'voz' inducidora de locura de Dios se escuchó. Mi mente fue bombardeada con toda la información requerida.

Esta ves su nombre era ...

Mikihito Takeru

De vida fue un simple oficinista japones de 19 años, que murió cuando salió de el edificio donde trabajaba en un 'desafortunado' accidente automovilístico causado deliberadamente por una entidad completamente ajena al mundo mortal.

Dicha entidad invasora y causante de su prematura muerte, parece que ahora mismo está tratando de convencer a su conciencia para que reencarne en otro mundo como una especia de 'Heroe De La Justicia legendario'.

Yo puse los ojos en blanco y suspire. Otra ves un Japonés. Por que las entidades invasoras siempre están robandonoslos?

Tal ves nunca sepa la respuesta eso.

Sólo se que pasa mas ameunudo.

Bueno, independientemente de eso, tengo que intervenir en el encuentro de esta entidad invasora y el alma.

Esta entidad hizo algo que hizo hervir con nada menos que ira apocaliptica a Dios.

Ella intervino en el mundo de sus creadores los humano.

Y sólo por eso ...

... Ahora Dios queria sangre.

Un portal obalado no tardó en abrirse frente a mi. Eh echo esto cientos de veces. Al dar un paso adelante y pasar por el umbral del portal, el escenario que mis ojos percibían rápidamente cambio a una habitacios con decenas de decoraciones doradas. Debajo de mis pies, había una alfombra de terciopelo roja que conducía hasta lo que parecia ser un glorioso trono digno de un rey de reyes.

En dicho trono, estaba sentada una 'Diosa' que parecía representar el concepto de amor y fertilidad. Sus abundantes pechos eran apenas contenidos por un delgado braziers blanco que dejaba poco a la imaginación. Su figura perfecta de reloj pondria a muchas mujeres humanas hirviendo de envidia.

Su lacio cabello 'rubio' bajaba como hermosamente en una cascada de pequeños hilos de oro líquido a sus espaldas. Sus ojos color carmesí sangre se indicaron en mi figura.

"Llegas demaciado tarde, perro", ella dijo, y yo procedo a avanzar en su direccion, sin importarme en lo mas mínimo lo que diga.

"Mikihito ya a sido rencarnado. Ya no hay nada que puedas hacer. Regresa a tu patetico mundo y-¡Augh!"

Mi se disparó y tomo por el 'cabello' a la 'Diosa'. Tomadola sólo por el cabello, la arrojó fuertemente frente a su trono. Su cuerpo vuela por un par de segundos antes de caer de una forma bastante aparatosa en contra de la alfombra. Su pequeño brazier hace poco para cubrir cualquir indicio de decencia.

"Que ceees que estas-", anres de que continue corro en su dirección y le doy una patada en el estómago, arrojando como un muñeco de trapo en contra de una pared llena de adornos dorados, "¡Auhg!", ella exclama cuando decenas de inutiles aodrnos de oro Caín sobre su divina figura. Al levantar la vista, ella sólo puede me ver a mi, acercandome a ella con nada menos que intenciones de violencia.

Ahora mismo soy la voluntad de Dios ...

Y dicha voluntad, exige dolor y sangre de la entidad frente a mi.

Y, por la expresion en su bello rostro, parece que la Diosa sólo ahora parece que se acaba de enterar de esto.

"¡No! ¡Por favor! ¡No!"

No voy disfrutar de nada de lo que esta apunto de pasar.

1000 horas mas tarde. El cuerpo de la Diosa, antes divino y represemtante de fertilidad, ahora es nada mas que un torso con tripas expuestas y cabeza con cerebro expuesto. Cada una de sus extremidades habían sido arrancadas a la fuerza, sus intestinos caían de su vientre. Hace mucho que sus ojos habían sido arrancados por un par de pulgares. Cada uno de sus dientes ahora decoraban el suelo. Su nariz habia sido completamente] arrancada de una mordida.

Incluso con todas sus heridas mortales y con su cerebro parcialmente destruido, ella aun seguia viva. Ella era una diosa, se nesecitaba algo mas aya del burdo trauma de su cuerpo físico para terminar con su existencia.

Me agache un poco para recojer el torso sin extremidades por el cerebro expuesto.

Un portal ovalado se volvio abrir frente a mi. Yo lo pase mientras dejaba que las tripas de la Diosa se arrastraran por el suelo.

Y entonces, estaba de vuelta en el cielo. No dude en arrojar el cuerpo deforme e incompleto de la Diosa frente a mi creador. Mi credor seguia furioso con la Diosa.

Me di la vuelta y deje que el hiciera lo suyo. Ahí cosas que nisiquiera yo soy capas de ver. Una de esas, es el castigo que mi creador le tenia destinado a la Diosa.

Cuando el termine con ella, sera de nuevo mi turno para volver por Kimihito Takeru. Ya hablando rencarnado, no existe mucho que pueda hacer. Las reglas para que yo pueda actuar son claras, sólo estoy permitido a ir por el cuando este muera de nuevo o empieze a afectar la estabilidad de el otro mundo de cualquier forma o manera.

De nuevo, pude escuchar los gritos de la Diosa a mi espalda.

Estoy cansado ...

(Cantinuara)

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