"¿En que rayos me metí?" Esa era hasta el momento, la pregunta más honesta qué se había hecho asi mismo mientras veía la mirada amorosa de Suzune. Sin duda entendía que todo esto había pasado en parte a su deseo de perder la virginidad o al menos tenia que ver, pero aún si lo sospechaba no tenía forma de concreta de saberlo, aun así entendía que pase a tal vez haber cometido un error todavía estaba su sentido de la responsabilidad.

Por tanto si las Pleyades estaban ligadas a su destino, lo único que podía hacer al menos desde ahora era aceptar que ellas iban a amarlo incondicionalmente. Y eso lo sabría cuando el resto de las Pleyades le entregaran voluntariamente su "Alma Estrella" justo cuando ellas tuvieran esa oportunidad como lo hizo Suzune ahora para entregarle su "Alma Estrella" que si era sincero la sensación que tuvo con su unión le fue bastante familiar cuando se encontraba con Mizuki y Yumiko dentro de esa habitación, así que suponer que a ambas no les importo entregarle eso con cuatela cuando estaban teniendo sexo le parecía bastante probable, aunque aún tendrian que darle explicaciones sobre todo esto cuando regresaran.

— "Supongo que no tengo alternativas en esto, fui el causante así que debería tener la responsabilidad de esto" — Pensó Issei mientras veía la sonrisa de Suzune, que parecía realmente feliz con esto. — Bien, tomaré la responsabilidad de todas.

Comentó Issei haciendo que Suzune con curiosidad regresara su mirada al chico, que sin prisa o desesperación la tomó de las mejillas para volver a acercarla a él y unir nuevamente sus labios. En un beso qué al principio tomó por sorpresa a la cuarta de las Pleyades, sin embargo ella no tardo en corresponder dicho beso de la misma manera apasionada.

— Si realmente estaremos unidos por el destino de ahora en adelante, yo me voy a asegurar de hacerlas feliz — Dijo Issei ante la mirada sorprendida de Suzune.

Mirada qué no tardo en convertirse en una de completa felicidad, al tal punto que lágrimas del mismo sentimiento se comenzaron a filtrar de sus ojos por las palabras de su amado.

— Danna-sama~ — Dijo Suzune feliz por las palabras de aceptación de Issei.

Una felicidad que fue acompañada de la ruptura de sus medias, qué dejaron más al descubierto la piel de su trasero junto con su ropa interior, una que ahora ella entendía era un estorbo así como toda la ropa que tenia puesta. Sabiendo bien los sucesos que venían y a su vez desandolo, Suzune levantó su camisa preparándose para quitársela por completo junto con toda su ropa, algo que Issei también iba al instante a hacer al comenzar a quitar su saco escolar.

Ambos sabían lo que venía y lo que iba a pasar una vez reanudaran sus acciones o decidieran romper sus vestimentas para comenzar lo antes posible ahora que los dos estaban solos. O al menos eso era en parte lo que ambos creían, ya que en ese momento justo cuando Suzune se quitó su camisa e Issei su saco un ruido hizo al instante que los movimientos de ambos se detuvieran abruptamente, o dicho de manera correcta las repentinas voces en la habitación hicieron que pararan.

— Te dije que no era un mal chico, el va a tomar la responsabilidad de sus acciones One-chan — Dijo una voz femenina a un par de pasos de ellos.

— Algunos dicen eso y desaparecen una vez consiguen lo que quieren — Dijo un tono femenino diferente de voz. — Aun no confío en el.

Eso hizo que ambos girarán sus miradas rápidamente al origen, descubriendo así que ante sus deseos carnales no notaron el momento, pero además de ellos en esa sala estaban otras dos personas viéndola escena actual con calma, o más bien todo era visto con curiosidad por ambas.

Provocando dos cosas en un instante, la primera fue la sorpresa de ambos al ver la presencia de ambas chicas ahí, frente a ambos y la segunda fue la de ponerse sus ropas nuevamente aunque Issei con un poco de vergüenza ayudo a Suzune a acomodar sus ropas. Algo que solo tomo un minuto y medio aunque por la prisa el bracier de Suzune continuó abierto a pesar de tener abotonada su camisa, lo que por obvias razones hizo que ambas chicas miraran toda la situación con un cierto grado de diversión.

— Kyoko... Kazumi — Hablo Suzune con un tono que parecía tratar de parecer lo más estricto posible. — Creí haber dicho que no usarán las habilidades de sus dos Sacred Gear de esta forma.

Trato de reprender Suzune aunque para ellas e incluso Issei el regaño parecía no tener el peso suficiente debido a que sus vestimentas actuales les impedían por el momento tomarla enserió, más al ver en sus mejillas un notable sonrojo.

— No puedo tomarla enserió si se ve asi Maestra — Dijo la chica con la diadema blanca. — ¿No crees lo mismo Kazumi?.

— Si, One-chan — Respondió la chica con la diadema negra al ver la apariencia de su Maestra. — Aunque a pesar de verse así le sigo teniendo algo de miedo.

Sus palabras solo lograron sonrojar más a la Pleyade, ya que como ellas lo habían dicho su apariencia actual no era algo de lo que podrían llamar algo adecuado. Ya que a simple vista las ropas de Suzune le daban una mala presentación, su camisa no estaba correctamente cerrada con los botones y era posible distinguir qué uno de sus pechos no estaba cubierto por su bracier, su falda seguía estando un poco más arriba de lo que debería dejando al descubierto las medias rotas así como el inicio de su trasero con una ligera vista a sus bragas, sin duda era una apariencia estimulante para Issei pero para el duo de jóvenes que no parecían diferenciar mucho con su edad parecía ser algo que no les daba mucho que respetar.

— Ohh~ ¿Así que no me toman enserió? Es bueno saberlo — Comento Suzune al cambiar sus ropas usando un suave así como rápido movimiento de su mano.

Que en un instante le dio la vestimenta que tenia puesta durante toda la noche anterior, la vestimenta de sacerdotisa o Miko qué Issei recordaba brevemente.

— ¿Qué me dicen ahora? — Pregunto de manera suave pero dura Suzune, dando un escalofrío a ambas chicas asi como a Issei qué aun no había visto ese lado.

— Q-Que la Maestra es compasiva como Amable — Dijo la chica con la diadema blanca llamada Kyoko.

— Y que no castiga sin razón — Añadió con tono tranquilo la chica de diadema negra llamada Kazumi.

Pero aún si ambas dijeron eso tratando de evitar un castigo, solo causaron que esto molestara todavía más a Suzune al punto qué se acercó a amabas con una suave sonrisa.

— ¡Ambas respeten a su Maestra! — Les ordenó Suzune en un tono autoritario al mismo tiempo que les daba un golpe en la cabeza a ambas.

— ¡Duele! — Dijeron ambas al unísono.

Mientras cubrían su cabeza justo en el lugar que fueron golpeadas, algo que a vista de Issei fue bastante curioso. Esto por la buena relación que tenían entre las tres, sin duda ver esta situación fue una buena oportunidad para el castaño para conocer un poco más a la Pleyades qué parecía ser más una madre que un maestro desde su perspectiva.

— "Parecen llevarse bien" — Pensó Issei al percatarse de algo.

Y es que mientras Suzune estaba dandole a ambas chicas un ligero sermón, sintió a pesar de la distancia entre ellos el aroma femenino de ambas jóvenes. Mismos que pase a ser diferentes en cada una, hubo a sorpresa de Issei un aroma similar en las dos qué si comparaba con algo, seria con el aroma femenino de Suzune pero no su aroma natural sino otro que el ya había a pesar del corto tiempo sentido antes.

Así que confundirlo sería imposible para el, más ahora que sus sentidos estaban al 100% desarrollados sino es que más, por lo que confundir dicho aroma era de una manera simple imposible. Lo sintió en la habitación en el fin de semana junto con Yumiko y Mizuki durante horas, llego de nuevo a sentirlo en el auto con Mizuki al igual que unos minutos atrás con Suzune cuando ambos estaban en el sillón, por lo que su sorpresa fue mayor al sentirlo en ambas jóvenes que mantenían la cabeza baja mientras Suzune las sermoneaba.

— "Este dulce aroma es..." — Pensó Issei con sorpresa al ver que las chicas para su sorpresa.

Estaban liberando de forma conciente o inconsciente sus feromonas qué le decía a cualquiera que las pudiera detectar un solo mensaje, ambas chicas deseaban de manera urgente aparearse con alguien o dicho de otro modo ambas deseaban por muy sorprendente que fuera tener sexo.

Ciertamente este mensaje no era algo en lo que cualquiera se fijaría o siquiera un momento consideraría posible, inclusive el solo entender el mensaje le sería muy difícil de entender para cualquiera. Esto por que las feromonas estaban de forma casi perfecta, camufladas con sus aroma natural así que distinguir uno del otro al momento como lo hizo el era imposible o por lo menos demasiado complicado.

Pero con su sentido del olfato perfecto el diferenciar uno del otro no había sido ni un poco complicado para el, incluso aun si estuvieran rodeados por más gente no sería complicado para el detectarlo. Fue por eso que distinguir ambos fue fácil al igual que sorprendente para Issei, poder sentir el aroma de las feromonas qué en estos momentos Suzune expulsada en el dúo de chicas frente a ella.

Qué pase a ser jóvenes parecían tener el doble de feromonas qué Suzune, aunque esto se debía a que la interrupción de las dos y sus palabras hicieron que el ánimo lujurioso y deseoso de Suzune bajara por cada minuto que pasaba. Caso contrario a ambas qué parecían estar aumentando la cantidad de feromonas que tenían, no obstante hubo algo más que Issei pudo a pesar de la situación notar, y eso era que tanto la maestra y las dos alumnas tenían el mismo aroma de pureza, uno que Issei pudo sentir en Rías y Akeno antes de sus partida a las clases en la Academia.

Dicho aroma puro no lo sintió en Mizuki o Yumiko, por lo que solo podía llegar de manera natural a asociarlo con una cosa que todos tenían antes de perderlo y eso era la virginidad, poder distinguir quien poseía aún su virginidad era algo que no había sido considerado o pensado por el castaño. Que aún sorprendido sentía de manera más clara, las feromonas de las dos jóvenes que pase a tener un rostro "tranquilo" parecían estar pensando en algo más, ya que por unas fracciónes de segundo sus miradas iban hacia el como si quisieran averiguar o comprobar algo importante sobre su persona.

— ¿Comprenden? — Pregunto Suzune al final del sermón mientras le daba al dúo de chicas una mirada seria.

— ¡Si! — Respondieron ambas mientras bajaban ligeramente la cabeza.

— No pensé que tuvieran un lado así de serio — Comentó Issei mientras daba un paso al frente quedando junto a Suzune.

— T-Tengo que serlo, de lo contrario no van a respetarme adecuadamente — Le explico Suzune algo avergonzada por el lado que habría querido que su "amado" no viera.

— "No creo que eso sea necesario" — Fue el pensamiento de Issei al ver la mirada de respeto que le dirigían a Suzune.

Misma que calmandose un poco más se dirigió nuevamente a sus alumnas, solo que esta vez ambas miraban a Issei con curiosidad y duda, una que Suzune por experiencia debía aclarar antes de que ambas sacaran sus propias ideas.

— Déjenme presentarlos — Dijo Suzune mientras los tres jóvenes la miraban de forma atenta. — Danna-sama, ellas son Kyoko y Kazumi Nishimura como ya lo pudiste notar son hermanas y son mis alumnas, también son usuarias de una Sacred Gear cada una.

— Un placer conocerlas — Saludo Issei mientras hacía una ligera reverencia.

— Chicas, el es Hyoudou Issei — Señaló Suzune al castaño mientras ambas solo miraban al mencionado. — También es usuario de Sacred Gear como ustedes y así mismo es... Mi Alma Estrella.

— El placer es... ¿Eh? — Dijeron ambas chicas mientras se sorprendan. — ¡¡¿Su Alma Estrella?!!.

Gritaron sin poder creerlo, algo a lo que Issei no se sorprendió sino que entendio perfectamente la reacción de ambas por sentir lo mismo cuando se enteró.

— Así es — Confirmó Suzune sin alguna duda al respecto.

Haciendo que ambas en menos de dos o tres segundos estuvieran al lado de Issei observandolo con total detalle, como un experto lo haría con una gran pintura o escultura.

— Entonces el es el hombre que todas las Pleyades han estado... — Comento Kyoko aun sorprendida.

— Esperando... Eso explicaria el por que estaban así de cariñosos cuando apenas llegamos... — Añadió Kazumi sonrojado al instante a Suzune y dejando un poco nervioso al castaño.

Debido a que ambas habían estado de un modo casi invasivo tocando sus brazos y hombros, cabello como su rostro, incluso tocaron su abdomen notando el físico de un atleta o mejor dicho uno mejor que el de cualquiera debajo de su uniforme.

— Tiene un buen físico... — Comentó con aprobación Kyoko mientras tocaba del modo más atento la espalda de Issei.

— Más bien un físico perfecto — Apoyo Kazumi mientras le tocaba atentamente los músculos de los brazos del castaño.

— "Estas niñas..." — Pensó Suzune celosa de sus alumnas al ver como lo tocaban y aprobaban el físico de su "Alma Estrella".

Sin embargo justo cuando Kazumi tomo de las manos a Issei noto algo que causo un rostro con ligera confusión, al ver de manera atenta la muñeca del castaño.

— ¿Uh? ¿Donde esta la Marca de Orion? No está en su muñeca — Señaló Kazumi extrañando a Issei y captando parte del interés de Kyoko qué no tardo en ver al lugar mencionado.

— Es verdad... El Arco y la Flecha no se encuentran en su muñeca — Comento Kyoko mientras Issei miraba con un rostro aun extrañado su muñeca.

— "¿La marca de Orion?" — Pensó Issei un tanto extrañado.

Algo que no pasó desapercibido por la cuarta de las Pleyades qué aplaudió al menos tres veces, captando la atención del trío de jóvenes que la miro.

— Es suficiente, hablaremos de eso otro día, por ahora díganme ¿Por que ambas están aquí? — Cuestiono Suzune ante lo que ambas chicas soltaron al castaño.

Quien aun se sentía curioso por eso, no obstante antes de preguntarle a Suzune sobre eso, Kazumi el dio la Pleyade una carpeta verde con varios documentos a los que la pelinegra rápidamente puso total atención debido a su importancia.

— "Tendré que hacerlo después" — Pensó Issei mientras notaba la seriedad con la que Suzune leía las primeras hojas.

— Según nos informó William, de todos los usuarios que rescatamos algunos ya han sido reubicados en otras locaciones qué Grigory no podra encontrar de una manera sencilla — Informo Kyoko antes de poner un rostro ligeramente abatido por lo siguiente. — El resto... No lo logro a tiempo y fueron identificados por ellos antes de poder escapar.

— Sin embargo Grigory no tardo mucho en encontrarlos y eleminarlos — Añadió Kazumi con el mismo sentimiento que la joven que tenia como hermana.

— Comprendo... — Dijo Suzune antes de suspirar mientras cerraba la carpeta.

En la que Issei alcanzo a distinguir algo similar a una lista de personas con una foto y datos al lado, sin embargo con lo que alcanzó a ver la mayor parte de la lista estaba marcada con un sello rojo, dejando solo unos pocas fotografías sin esa marca roja.

— ¿Cuantos fueron? — Pregunto Suzune mientras Kyoko suspiraba ligeramente.

— De los treinta y dos usuarios, solo han sobrevivido cuatro — Reveló Kyoko ante lo que Suzune suspiro pesadamente.

— ¿Solo cuatro? Supongo que tuvimos suerte esta vez — Comentó Suzune sin percatarse de algo.

Y es que Issei con lo poco que había oído logro comprender gran parte de todo los sucesos, gracias al físico perfecto todo su cuerpo mejoró incluyendo sus órganos a tal punto que era superior en muchos de los aspectos comunes o poco comunes en las que podía llamarse único. Por eso era capaz de entender rápidamente las cosas aún sino recibía toda la información, con una memoria eidetica perfecta junto a la mente perfecta los atributos mentales de Issei habían llegado a un nuevo nivel.

Percepción, control, reacción, sabiduría, conocimiento, inteligencia, resistencia, deducción, aprendizaje, comprensión y atención entre otros más estaban en un nivel que superaba incluso a cualquier prodigio que existiera o fuera bueno en eso había sido superado por Issei. Y este aún lo desconocía totalmente, así que al tener todo eso sin saberlo dejo un tanto sorprendido al castaño que aún si había oído poco comprendió el problema con rapidez asociando todo lo que sabia en estos momentos.

— William se aseguró de que escaparan así que están a salvo — Dijo Kazumi con cierto alivio.

— Bien, con eso puedo estar tranquila al respecto — Dijo Suzune con cierta calma.

— Otra cosa — Dijo Kyoko mientras de su saco sacaba una carta. — William mandó esto para usted, dice que quiere verla un día de estos, para discutir con usted algo importante.

— ¿Algo importante? — Dijo Suzune con duda mientras tomaba la carta y la abría leyendo su contenido. — Ya veo... Tendre que reunirme con el más tarde.

La carta le había informado que William había encontrado varios usuarios sin sus Sacred Gear en sus cuerpos qué fueron a forma cruel abandonados en lugares que nadie visitaría normalmente. Por tanto la única respuesta a eso era que los Angeles Caídos estaban comenzando a extraer las Sacred Gear de los usuarios estuvieran al momento despiertos o no.

— Por cierto Maestra... — Hablo Kyoko recordando que Issei estaba presente y escuchando todo. — ¿Esta bien que nos encontremos hablando de esto frente a él? No creo que esté listo para este tipo de información.

Sus palabras hicieron que el trío por fin se fijará de nuevo en Issei qué para este punto estaba con un rostro pensativo al respecto de lo que había escuchado.

— Más que no estar listo... Es como si eso no le preocupara — Comento Kazumi un poco más curiosa por el castaño qué por fin se percato de la atención del trío.

— ¿Hice algo malo? — Pregunto Issei de manera honesta.

— Nada de eso Danna-sama, es solo que olvide que estabas presente escuchando la conversación — Explico Suzune antes de suspirar ligeramente. — Te explicaré esto más adelante, por el momento será mejor que te mantengas...

— Están cazando a todos los Usuarios de Sacred Gear, ¿No? — Comento Issei de la nada tomando por sorpresa a Suzune así como a sus alumnas. — Es por eso que te encargaste de protegerme cuando estaba vulnerable en esa lugar... No fue por que fuera tu "Alma Estrella", sino por que soy un usuario de Sacred Gear qué juzgando por lo que escuche has tratado de salvar constantemente.

Mencionando eso, tanto la expresión de Suzune como la de Kyoko y Kazumi, dio un cambio repentino de sorpresa a algo de incredulidad ante la deducción de lo que se suponía había sido un chico que no conocía nada de lo sobrenatural.

— ¿Como es que...? — Pregunto Suzune sorprendida.

— Era algo que me había preguntado al saber que era tu "Alma Estrella", cuando lo descubriste fue cuando estábamos en la habitación, así que el por que estabas defendiendome en ese lugar cuando me encontraba vulnerable es otra, y oyendo sus conversacion entendi qué era por la Sacred Gear qué poseo — Explico Issei al trío que seguía sorprendido. — Sabiendo eso y usando las partes que recuerdo me atrevo a decir, que has estado ayudando a los usuarios de Sacred Gear de Grigory qué a juzgar por sus palabras y gestos es una organización sobrenatural qué está a cargo de asesinar a todos los usuarios de Sacred Gear, o al menos esta asociado a ello en parte.

Oír como Issei había deducido todo eso con solo haber oído un par de cosas dio sin dudas una gran impresión sobre las Hermanas Nishimura qué ahora tenían una perspectiva diferente del castaño.

— O bueno... Eso es lo que pienso, no se si estoy en lo correcto o no — Dijo Issei mientras las Hermanas miraban hacia donde estaba su maestra.

Quien aun parecía sorprendida de que el castaño al que ella creía tendría un largo camino para aprender muchas cosas con respecto al mundo sobrenatural había al instante, sobrepasado sus expectativas y llegado aún más haya de eso, haciéndole recordar que el despertar anormal de su amado no había sido normal sino todo lo contrario donde gritaba que era el mayor prodigio entre todos.

— Estas en lo correcto — Aclaro Suzune mientras aun mantenía cierta sorpresa de esto. — Mi objetivo durante años fue salvar a los Usuarios de Sacred Gear de las garras de Grigory, quienes no tienen una sola consideración con sus vidas, si resultan ser un peligro simplemente los eleminan sin darles una oportunidad de defenderse o saber por que los asesinan.

— Comprendo, entonces esos dos que se encontraban ayer hablando con ustedes eran miembros de Grigory... — Entendió Issei mientras Suzune solo asintió como confirmación. — Entonces, eso significa que las Sacred Gear son más peligrosas de lo que creía si buscan matarnos tan rápidamente antes de crecer.

— No exactamente — Dijo Kyoko ante lo que Issei le presto atención. — Ellos solo asesinan a los Usuarios de Sacred Gear a quienes consideran pueden ser bastante peligrosos para Grigory, de no ser así los reclutan para volverlos miembros de sus organización y hacer lo mismo, buscar a los Usuarios que consideren peligrosos.

— Justifican todo esto diciendo que es para proteger a la Humanidad, pero la verdad es que solo lo hacen para tener sus propios beneficios y eleminar a los que puedan causarles problemas en el presente o el futuro — Explico Kazumi con un tono que demostraba enojo así como frustración. — Por eso no puedes confiar en los Angeles Caídos, o alguno que otro miembro de Grigory.

Al ir obteniendo más información de las chicas presentes, el rompecabezas en la mente de Issei iba completandose más y más llegando a más conclusiónes que se podrían decir eran verdad en parte. Sin embargo la atención de Issei se fue hacia lo último mencionado por Kazumi, el en un principio creyó que los miembros de Grigory eran otros seres sobrenaturales agenos a las Tres Grandes Facciones qué menciono Rías pero al final resultó ser una de ellas, la de los Angeles Caídos.

— Ya veo, entonces Grigory me ve como un peligro si trato de matarme... — Dijo Issei mientras las Hermanas solo daban un ligero asentir confirmandolo.

— "Creo que la historia habría sido algo diferente si hubieran sabido que eres un Usuario de una de las Trece Longuinus, específicamente del que contiene el alma de un Dragón Celestial, el Boosted Gear qué es el enemigo natural del Divide Dividing qué a estado despierto desde hace años" — Pensó Suzune con cierta seriedad ante la pelea que habria en el futuro. — Ahora que comprendes a que peligro se exponen los Usuarios cuando no saben usar su Sacred Gear, entiendes lo imperativo que es que ellos aprendan a usarlo o a saberlo ocultar de ellos.

— Lo se, pero ahora para mi creo que la primera opción es la unica viable... Ellos ya saben quien soy así que ocultarme es imposible, así que la única opción ahora es que aprenda a usar mi Sacred Gear al punto que consideren seriamente si vale la pena enfrentarme — Comento Issei de cierta manera seria causando que el duo de hermanas suspirara.

— Es bueno que lo comprendas, pero es importante saber también que no todas las Sacred Gear están diseñadas para el combate, hay algunas que si lo están en gran manera pero otras simplemente no lo están al enfocar sus funciones en otro aspecto — Aclaro Kyoko mientras veía al castaño como si ella fuera superior en el aspecto de sus Sacred Gear.

— Hay Sacred Gear qué pueden crear o sanar, atacar o defender, ilusiones o en casos raros crear espacios artificiales y hay algunos que poseen habilidades en relación a alguna especie sobrenatural asi como con algo moderno — Añadió a su lado Kazumi con un tono diferente al de su hermana que demostraba algo de curiosidad.

— Supongo que las Sacred Gear son algo únicas a su modo, en ese caso el Boosted Gear sería una Sacred Gear del tipo qué ataca ¿No? — Pregunto Issei trantado de aclarar en que se enfocaba la Longuinus qué poseía. — Aun no se mucho de sus funciones, así que sería bueno que me explicaran lo que puede hacer o por lo menos su habilidad principal.

— Bueno, el Boosted Gear es una de las Sacred Gear del tipo Longuinus con un descomunal nivel de ataque qué... ¿Eh? Dijiste... — Dijo Kyoko procesando todo lo que acaba de escuchar. — ¿Boosted Gear?.

— One-Chan, ¿El dijo Boosted Gear....? — Pregunto Kazumi a su hermana a su lado un segundo después.

Tratando de confirmar que no había oído mal lo dicho por Issei quien desconocía a pesar de la situación lo que significaba el tener una Longuinus en tu poder.

— ¿Es tan impresionante? — Pregunto Issei con duda sorprendiendo al dúo totalmente mientras Suzune solo suspiraba ligeramente.

— Espera.... Tu... ¡¿Acaso no sabes que la Boosted Gear es una Sacred Gear clase Longuinus?! — Pregunto Kyoko en verdad sorprendida.

— Bueno... Se que es una Sacred Gear de clase Longuinus gracias a la explicación de antes, pero desconozco que tan fuerte es la Sacred Gear con la definición de un Longuinus — Explicó Issei tratando de al menos no parecer tanto un idiota.

— Maestra... — Llamo Kazumi a Suzune que una vez las miradas se fijaron otra vez en ella suspiro.

— Todavía no le llegaba a explicar esa parte... — Dijo Suzune mientras daba unos pasos hacia su amado.

— ¿Esa parte? — Pregunto Issei con algo de duda. — ¿De que parte hablas?.

Ya que parecía que el Boosted Gear qué estaba en su brazo era mucho más de lo que el creía, y los rostros de las tres con creces se lo confirmaban.

— ¡La parte en la que las Longinus son conocidas como las Encarnaciones de la Destrucción de Dios! ¡Las Herramientas de Destrucción Divina! ¡O incluso Sacred Gears Supremos! — Dijo Kyoko aun con sorpresa por el poco interés de Issei en ese tema.

— ¿Destrucción de Dios? ¿Destrucción Divnia? ¿No estas exagerando un poco con eso? — Pregunto Issei dudoso por esos titulos que escucho. — Se que hay un Dragón Celestial poderoso sellado y eso, pero no creo que pueda usar todo ese poder para destruir un Dios... ¿No?.

— El Boosted Gear puede usar todas las Habilidades del Dragon Celestial dentro de el, por tanto alcanzar el poder que le permita a su usuario pelear contra seres divinos no es ningúna exageración, es al menos lo normal — Dijo Kazumi dejando a Issei sorprendido.

— ¿Estas diciendo que el Boosted Gear puede hacer que su usuario pueda...? ¿Contra un Dios? — Pregunto Issei sin poder creerlo del todo. — Entonces las Sacred Gear pueden...

— No toda Sacred Gear puede hacer eso, las que pueden lograrlo son muy pocas y es por eso que el término Longuinus esta en un nivel especial — Dijo Suzune de la manera más certera posible. — Por que a pesar de haber miles de Sacred Gear por el mundo, solo hay Trece Longuinus y de esas Trece una esta en tu posesión.

La expresión de Issei por fin mostró que comprendía el valor de una Longuinus a pesar de su poco interés anterior, con el poder para alcanzar a un Dios y siendo a su vez único, le dejo claro que todas las palabras que Rías y Akeno le dijeron no habían sido vacías, realmente tenían un peso enorme que no había visto antes.

— Ahora entiendo por que me querían muerto — Comentó Issei mientras veía su mano izquierda.

— Por supuesto que te querran muerto, el Hakuyuurkou es miembro de Grigory así que apenas le llegue la noticia de un posible despertar del Boosted Gear es al menos un hecho que vendrá a ver si eso es verdad o no — Comento Kyoko antes de recibir una mirada seria de Suzune.

Dando a entender que ella aun no decía nada al respecto sobre la rivalidad entre los Dragones Celestiales cuando estaban vivos, algo que sorprendió a Kyoko ante su mirada como a Kazumi qué entendió lo mismo. Sin embargo si ambas con un simple movimiento de ojos entendieron que no debían hablar de eso, Issei se dio cuenta también de lo mismo por lo que endurecio ligeramente la mirada.

— "¿Tan débil soy como para ocultarme información importante?" — Pensó Issei con cierta frustración, ante la negativa de conocer toda la verdad. — "Aún así con solo esto comprendo que aquel que Kyoko-san llamó Hakuyuurkou debe de ser el otro Dragon Celestial, uno que al igual que el mio debe de estar sellado y siendo usado por alguien más".

Los pensamientos de Issei no estaban de cierta manera equivocados, con lo de su suposición del Hakuyuurkou estaba con creces acertada mientras que lo otro de si era tan débil para que le ocultaran la información, estaba equivocado. Ahora aun sino había manifestado el poder del Boosted Gear, podía enfrentarse a mano limpia contra los Angeles Caídos dentro de la Iglesia Abandonada y ganar con un amplio margen, ninguno que no fuera al menos de Clase Alta o Clase Suprema se le podía comparar.

Ese era su límite físico actual, saber usar correctamente toda esta fuerza y sacarle provecho era un muy asunto diferente al cual Suzune no era nada indiferente. Ella sabía perfectamente que todo el poder al que Issei se sujetaba no era normal, nada en el lo había sido desde que despertó su poder qué parecía tener el instinto de un depredador qué se adaptaba a cualquier tipo de situación, si tuviera que resumir el talento de Issei en una frase sería con seguridad la siguiente.

[El que aprende a observar, no tiene necesidad de preguntar]

Eso podría definir el aprendizaje de Issei sin dudas, que si bien puede ser algo que todo ser viviente posee naturalmente, en Issei iba a un nivel realmente ridículo no solo por su capacidad mental que se veía había aumentado en grandes niveles con solo unas horas de haber despertado sus poderes. Sino también por el hecho de la inconsciencia de Issei en comprender las cosas, un ejemplo de ello era su aura qué si bien antes había requerido que Rías al igual que Akeno y Suzune le ayudarán en su control, ahora eso ya no sería algo tan necesario o primordial debido a que aún si solo paso una vez el cuerpo de Issei se grabó en si mismo la forma de controlar su aura sin tener una gran filtración.

¿Como sucedió? Sencillamente fue por el gen perfecto que ahora poseía, uno que a pesar de fortalecerlo también buscaba la forma más efectiva de mantener sano su cuerpo, y la filtración de aura era algo en lo que respecta debía intervenir debido a los posibles problemas a largo plazo que podían causar si no se arreglaba pronto ese problema. Por ende hizo que Issei de manera inconsciente aprendiera a poder controlar la filtración su aura, usando el único momento cuando Akeno y Suzune estaban abrazándolo antes como fuente de información.

Aún sino pudo verse a simple vista Issei pudo ver las fluctuaciones del aura que Akeno y Suzune tenían al controlar una parte de su aura que se filtraba, ver las fluctuaciones fuera y dentro de ambos cuerpos hizo que entendiera de alguna manera vaga como controlar su aura. O al menos de una forma que no llegara a filtrarse tan irresponsablemente como antes, donde su aura se filtraba en cada segundo que pasaba pero desde que esa conversación con las tres comenzó, por más tiempo que pasara su aura ya no se filtraba de su cuerpo sino que mantenía una calma impresionante.

Algo que Suzune ya había notado en los minutos anteriores, y era por esa misma razón que quería mantener información oculta de Issei, no por que fuera débil ni nada sino por que temía qué aprendiera aún más rápido de lo que lo estaba en el momento haciendo. Ya que justo cuando Kazumi guardo la carpeta que tenia con un Círculo Mágico el aura de Issei al que se suponía aun no podía acceder por sus grandes inexperiencias comenzó de una manera suave a fluctuar haciendo que el aura se volviera ligeramente refinada en comparación que antes.

En otras palabras entre más observará a alguien usar su poder o habilidad, el iba a aprender más rápido que cualquiera a usar el suyo, y eso ya iba más haya de lo ordinario, aun si no poseía la Marca que identificaba al Avatar de Orion todas sus habilidades seguían siendo fuertes o aún más con el Boosted Gear qué todavía no se manifestaba pero ya estaba despierto en su totalidad.

- Es suficiente por ahora, Danna-sama ahora que ya sabes el peligro al que los usuarios de sacred gear se enfrentan lo mejor sera que te quedes aquí donde te encuentras a salvo - Comentó Suzune mientras se giraba a sus alumnas. - Ya conseguí el permiso de Gremory, por lo que pueden cumplir con su objetivo, no obstante debe ser cautelosas.

Sus palabras desconcertaron un poco a las Hermanas Nishimura, pero después de su ligera reprimienda intuyeron qué aun habían cosas que no debían decirse al castaño, al menos no por ahora.

— Como ordene Maestra — Dijeron las dos al mismo tiempo.

— Bien, cuando terminen regresen aquí para darme el informe — Dijo Suzune al momento que las dos hermanas sentían.

— ¿Aquí? ¿No iremos al Almacén? — Le pregunto Kyoko a su maestra.

— Rías Gremory me permitió usar una zona de este edificio como alojamiento en lo que prepara algo más adecuado y su razón ya la saben — Dijo Suzune de manera tranquila a sus alumnas.

— Entonces volveremos en unas horas Maestra — Dijo Kazumi mientras bajo sus pies aparecía un Círculo Mágico.

Mismo que transporto a ambas fuera de la Sala del Club, dejando solo a Issei con Suzune qué suspiro ligeramente para si misma antes de mirar al castaño qué no parecía estar del todo contento.

— Se que aún tienes preguntas, pero por ahora no puedo responderlas así que se paciente, ¿Si? — Hablo Suzune mientras caminaba hasta estar frente al Hombre que amaba y abrazarlo. — Te prometo que respondere a todo lo que quieras cuando regrese.

— ¿Iras a ver a William...? — Pregunto Issei mientras correspondía el abrazo.

— Tengo que ir, lo que me dijo dentro de la carta requiere mi atención así que por favor espera a que vuelva contigo — Dijo Suzune con voz renuente a irse de ahí en ese momento. — Quisiera quedarme más tiempo pero...

— Lo se — Respondió Issei mientras sus manos se adentraban dentro de la falda de Suzune.

En los agujeros qué tenia a los lados, un movimiento que no paso desapercibido por la mujer que sonrió ligeramente en respuesta, al alejarse ligeramente de su amado para ver su rostro.

— Después de todo ambos aún tenemos algo pendiente... — Dijo Issei mientras acercaba su rostro al de Suzune.

— Cierto... El solo recordar eso hace que no quiera irme — Respondió Suzune con pasión mientras besaba a su amado.

Aun si estaba ligeramente molesto por la falta de información, Issei sabía que todo era por que Suzune quería protegerlo un poco más antes de que aprendiera a usar sus poderes. Sin mencionar que desde un par de minutos, desde que se enteró que Tres de las Siete Pleyades le entregaron su "Alma Estrella" supo por que sentía el anhelo por Yumiko como Suzune, como si ellas sintieran lo mismo y este mismo sentimiento comenzó a sentirlo desde la sumisa Suzune.

Qué se aferraba el en ese apasionante y lujurioso beso, donde sus lenguas iban enredandose una con la otra mientras a sus manos se les daba por apretarle con cierta fuerza el trasero de Suzune qué si no fuera por su deber actual habría ido desatando los nudos de su falda y de un mismo modo quitado su camisa.

— Si continuas no podré irme... — Dijo Suzune jadeando por el beso, como por el constante manoseo de su trasero.

— Lo se, aun así eso me hace desear aun más tu regreso — Dijo Issei sacando una sonrisa amorosa de Suzune.

— Yo también — Respondió Suzune con deseo mientras se alejaba del castaño al que aún veía con una sonrisa. — Tratare de volver lo más pronto posible.

—Estaré esperando — Dijo Issei antes de ver como Suzune desaparecía dentro del Círculo Mágico que creo.

Dejando solo al castaño que suspiro con cierto pesar mientras se sentaba en uno de los sillones, tratando de asimilar sus nuevos descubrimientos así como unas nuevas responsabilidades. Unas que de alguna forma se les habían impuesto al pedir esos Deseos, que ahora sabía por alguna razón fueron los causantes de lo sucedido con las Pleyades y con lo de su ahora físico Dragon.

Qué sin duda podía considerarse uno de los más perfectos existentes, cualquiera de esa especie qué lo viera notaría en el mismo instante capacidad física qué no era ordinaria sino superior. A cualquier Dragon se le ocurriria lo mismo al verlo por primera vez, "Este chico podra llegar al nivel de un Rey Dragon y superarlo" se tendría ese pensamiento apenas vieran al castaño.

Qué aun siendo inconsciente de muchas de sus nuevas habilidades, se recostó en el sofá tratando de pensar en que debia hacer a partir de ahora, donde el habia descubierto un nuevo mundo del que a decir verdad no creyó posible que fuera real. Más sin embargo lo era en más de un sentido al punto que fue miembro de la Nobleza de Rías por 10 segundos por tanto sabia o intuía que debía de haber una explicación para eso. Sin mencionar que en el momento que Rías le contó eso pudo notar que estaba desilusionada, al parecer ella había querido que fuera de su Nobleza pero por algún motivo no lo era o al menos eso se creía.

Sin mencionar que ahora sabía que era uno de los blancos de Grigory, solo por ser usuario de una Sacred Gear qué sin duda podía llamarse única. ¿Tal vez fue la desilusión de Rías? Saber que a quien casi pudo reencarnar como su Peon, era el Sekiryuutei de la época actual, aun si ese fuera el caso Issei sentía que le debía un favor a la pelirroja por la ayuda que le dio antes, y si no podía ayudarla con ser parte de su Nobleza entonces podía ayudarla de otra manera.

Por lo que buscar una manera de ayudar a Rías estaba presente en su mente, el no tenía pensado abandonar Kouh pronto y tampoco pensaba dejar a sus padres que estaban en su casa. Que si bien no tenían nada que ver con esto los Angeles Caídos podían secuestrarlos para atraerlo a una trampa, algo que lo hizo levantarse otra vez de su lugar preocupado por el riesgo de que los lastimaran para obligar que el saliera de su lugar "seguro".

— "No creo que estén en peligro, pero no está de más asegurarme... Un Deseo que mantenga a salvo a mis padres debería servir" — Pensó Issei al ponerse de pie.

Sin embargo fue con eso que recordó el hecho de que no tenía el Libro consigo, no lo vio su mochila en esa habitación donde se quedó dormido con el trío de chicas y tampoco podía verlo en algún lado de esta sala o en el escritorio del lugar. Recordole brevemente qué justo en el momento que lo trejeron aquí sus cosas se habían quedado dentro de ese almacén, esto por que al caer sobre esa gran pila de basura su mochila llegó a deslizarse hasta quedar medianamente oculta entre ellas.

Pero eso no era lo que preocupaba en ese momento a Issei, lo que ahora estaba con creces preocupandolo era el hecho de no tener el Libro consigo, provocando que a pesar de saber donde estaba, se activará una de las reglas del Libro de los Deseos.

[Regla 8]

[Si el empleador pierde el libro o la pluma, solo dispondra de veinticuatro horas para recuperar ambas cosas, de lo contrario perderá todo derecho con el libro y todos los deseos escritos con anterioridad serán anulados junto a su memoria sobre el libro.]

La advertencia final hizo que un gran y extremo frío se exparsiera por casi todo su cuerpo, fue gracias al Libro que pudo sobrevivir hasta ahora y si perdía todas las cosas que obtuvo entonces su muerte bajó la mano de los Angeles Caídos iba a estar totalmente confirmada. Aún tenía tiempo para encontrarlo, si esperaba un par de horas por Suzune o Rías y Akeno podria ir con ellas a buscarlo al almacén, pero con la variante de que el Libro era algo que podría cambiar de lugar por las acciones de un tercero hacia que esperar fuera en realidad la peor decisión actual.

— "Tengo que ir por el Libro ahora o de lo contrario podría perderlo para siempre, y calculando el tiempo que paso solo tengo alrededor de siete horas para encontrarlo o perderé todos mis recuerdos" — Pensó Issei mientras se giraba hacia la puerta de la Sala del Club. — Carajo...

Fueron sus últimas palabras antes de ir directamente a la entrada del Club, algo que rompía con más indicaciones de las chicas de no abandonar el Viejo Edificio Escolar donde recidia el Club de Rías. A quien le era desconocido que Issei iba a causar más problemas de los que tenían ahora, pero mientras Issei estaba llendo a recuperar el Libro de los Deseos, lejos de ahí a kilómetros de Kou.

Suzune estaba caminando con calma en los pasillos de una Escuela diferente, no vestía su traje de Sacerdotisa qué había usado en la Sala del Club, ahora tenía el mismo traje formal de oficinista qué usó antes, solo que ahora estaba acomodado perfectamente. La razón era muy obvia, aun así eso no significo que llamara con creces la atención entre los alumnos en los pasillos, quienes solo la seguían con la mirada mientras pasaba.

Murmurando lo hermosa que era como lo seductor y bien proporcionado de su físico, algo que Suzune ignoro mientras seguía su camino a un salón en especial que aún si no había estado ahí, sabía de sobra que nadie iba a molestarla por lo que siguió su camino hasta llegar a ese salón. Mismo que al entrar lo encontró vacío, teniendo únicamente las sillas y pupitres de los alumnos por lo que solo dio un suspiro mientras esperaba unos minutos observando por la ventana en donde habían alumnos en la activación física escolar, recordándole qué Issei la esperaba en la sala del Club.

— "Me pregunto que estara haciendo, no trajimos sus cosas así que debe estar por los alrededores del edificio explorando o descansando en la sala" — Pensó Suzune con una ligera sonrisa.

No había pasado mucho tiempo desde el momento que se separaron, pero aún así ya extrañaba al castaño sin lugar a duda, para las Pleyades estar con quienes eran sus "Alma Estrella" era como completar a una parte importante de su ser, como un rompecabezas incompleto que no estaría terminado hasta que la última pieza del mismo fuera colocada.

Eso sentían las Pleyades con el Avatar de Orion a quien se suponía estaban de una manera eterna destinados a estar juntos, aunque ahora esos sentimientos estaban dirigidos a Issei quien no era el Avatar de Orion. Pero que tendría los sentimientos más puros de las Pleyades dirigidos a él, no importado lo demás ellas lo seguirían hasta el final, algo que Suzune sabía bien al haberlo experimentado hace solo unos minutos atrás cuando lo abrazaba.

Si Issei le hubiera dicho que se quedara ella lo habría hecho, si el le decía que se rindiera en ayudar a otros usuarios que tuvieran Sacred Gear ella lo haría aún si no le hacía my feliz pero cualquier cosa que Issei le pidiera estaba primero ante todo lo demás. Incluso de ella misma, lo cual las otras Pleyades compartían sin la menor de las dudas, por eso había ido a ese lugar antes de visitar a William que iba a recibir una mala noticia al final.

Algo que ocurriría de manera similar en este momento mientras oía como abrían la puerta corrediza, donde una mujer se adentro con calma al aula cerrando con seguro la puerta detrás de ella. Dejando solas a ambas en ese lugar, por lo que al saber que nadie más iba a escuchar sus conversacion Suzune se giro para ver a la mujer que había entrado, que aún en calma camino hasta estar a unos pasos de ella.

— Vaya que no has cambiado mucho en estos cinco años... — Comentó Suzune al verla otra vez.

— Podría decirte lo mismo Suzune, pero no creo que pase desapercibido que han crecido tus pechos en estos años — Dijo la mujer mientras Suzune sonreía.

— Podría decir lo mismo de ti, aunque en tu caso tu figura se a hecho un tanto más seductora qué antes... Hasegawa Chisato, la Quinta de las Pleyades — Dijo Suzune sacando una sonrisa de la mencionada.

Qué como Suzune había dicho, ella era la Quinta de las Siete Pleyades existentes en todo el mundo aunque esta generación la totalidad de las Pleyades eran de Japón y no de otro País. Indicando que el Avatar de Orion era también Japonés, aunque al día de hoy se desconocía su identidad así como edad y la razón del por que aun no se había reunido con las Siete Pleyades a lo largo de los años.

— Ya han pasado años desde la última vez que me llamaron de esa forma, es bastante nostalgico oírlo... — Comentó Chisato mientras se cruzaba de brazos.

— Así es, aunque en mi caso el Titulo de Pleyade se me a dicho muchas veces, no obstante el Titulo Pleyade no deja de ser nostalgico — Dijo Suzune mientras daba un par de pasos más.

Y abrazaba a Chisato qué correspondió el abrazo de su vieja amiga y compañera de aventuras por el mundo.

— Realmente te extrañe ¿Sabes? Mis días eran tranquilos sin tus discusiones en las mañanas — Dijo Chisato con diversión.

— Yo también, aunque extrañaba más tu manera de cocinar la comida — Admitio Suzune sacando una risa de Chisato qué se separo de ella.

— Me alegro mucho de verte Suzune — Mencionó Chisato con una sonrisa.

— Digo lo mismo — Respondió con una sonrisa igual Suzune. — Pareciera que fue apenas ayer que cada una tomo su propio camino.

— Ni que lo digas, realmente no creo el hecho de que hayan pasado cinco años ya desde la última vez que las Siete nos reunimos — Dijo con nostalgia Chisato mientras volvia a cruzarse de brazos.

— Lo se, el tiempo vuela sin que uno se dé cuenta de ello — Admitió Suzune un segundo después de notar un aura que no reconocia sobre Chisato. — Chisato... Acaso tu has...

Dijo con sorpresa mientras Chisato solo sonreía ligeramente antes de sentarse a lado de Suzune, sobre uno de los tantos pupitres del salón, antes de ser imitada por Suzune qué parecía saber ya lo que su compañera y amiga pensaba decir.

— Aun soy virgen por si te lo preguntas, el aura que sientes a mi alrededor viene de un chico de esta Escuela, uno que sin dudas podría decirse es... Interesante en un buen sentido — Explico Chisato ante la mirada de su vieja amiga. — A sido un tanto entretenido estar a su lado, y creo que le gustó en cierto sentido romántico aunque admito que e sido culpable de al menos haberlo tentado un par de veces a propósito solo para ver sus reacciones.

— ¿Te gusta? — Pregunto Suzune ante lo que Chisato sonrió ligeramente, como si ya hubiera esperado esa pregunta.

— Supongo que le e comenzado a tomar cariño... Después de algunos sucesos con los que me obligada a ayudarlo creo que yo comencé a sentirme bien a su lado en particular por que hay otras chicas de la escuela que van detrás de el — Comentó Chisato mientras miraba al techo de una cierta manera nostálgica. — Supongo en parte es por la idea del Harem qué todas tenemos al haber estado destinadas a un Hombre que nunca apareció... Decidí ser realista con eso, y así como algunas de las Pleyades hicieron escogere a un hombre para formar una familia.

Oyendo sus palabras Suzune no tardo en entender, que Chisato renuncio a la idea de encontrar al Heredero de Orion en la época actual donde se suponía ya debían de haberlo conocido y amado. Algo que a decir verdad le sorprendió un poco, esto por que Chisato era entre todas las siete Pleyades una de las más leales a Orion y las antes mencionadas también lo eran pero ante la nula aparición del Avatar la esperanza de que apareciera se fue con los años enfriando al punto que por fin algunas de ellas decidieron casarse con otros hombres.

Esto por que al consultar la razón por la que el avatar de orion aun no aparecía a las Pleyades dentro de la Bóveda Celeste, estas dijeron que esta generación podria ser la primera qué no llegará a conocer al avatar de Orion. Fue por esto que las Siete Pleyades se separaron y cuatro de ellas se casaron, las que no lo hicieron guardaron las esperanzas de encontrar por al que estaban destinadas a amar y apoyar con sus más sinceros deseos.

- Ciertamente, de las Siete Pleyades solo cuatro de nosotras se casaron y lograron tener una familia - Señaló Suzune de un modo ligeramente deseoso por eso. - Lo cual duró poco, si consideramos que tres de ellas han dejado de lado a sus esposos por varios años o son viudas como lo era la Segunda... Y probablemente la Tercera también lo es, o eso creo.

— Lo se, la Primera y la Tercera son las que aún tienen a sus esposos aunque a decir verdad están más separados que juntos — Admitió Chisato mientras se reía ligeramente con Suzune. — Solo Séptima sigue junto con su esposo y también con sus tres hijos, creo que realmente lo ama si logro tener una familia tan grande.

— Supongo que si — Respondió Suzune con un cierto pesar por lo que iba en un par de días o semanas a suceder.

Ya que ahora por fin habían encontrado a quien habían estado esperando por al menos casi toda su vida, al final fue por esto que Suzune había venido a ver con prisa a Chisato en lugar de a William.

— Bueno, basta de recordar el pasado y vamos asunto principal, ¿Que necesitas? Dudo que solo hayas venido a saludar o saber mi estado amoroso — Dijo Chisato ante lo que Suzune suspiro ligeramente.

— Me conoces bastante bien y para ser sincera, necesito que vayas a la Ciudad de Kouh — Comento Suzune mintras se sentaba en el pupitre frente a Chisato.

— ¿La Ciudad de Kouh? Si no recuerdo mal esa ciudad es el Territorio de dos Clanes Del Inframundo — Dijo Chisato recibiendo un asentir de confirmación.

— Así es, específicamente son los Clanes Gremory y Sitri, ya tengo el permiso del Clan Gremory así que no debería haber ningún problema — Explico Suzune un tanto nerviosa por lo que seguía.

— Entiendo, pero ¿Para que quieres que vaya? — Pregunto un tanto confundida Chisato.

— Por que encontré a quien estábamos esperando por años — Reveló Suzune a Chisato con una suave sonrisa.

Causando la sorpresa como confusión de Chisato, que solo observó la expresión en el rostro de Suzune antes de entender el significado de sus palabras al extenderle su mano donde una marca apareció, una que diría exactamente lo mismo a todas las Pleyades qué lo vieran.

"Ella ya no tenía su Alma Estrella"

Mientras tanto en las calles de la ciudad de Kouh, Issei caminaba tratando lo mas qué podía en no llamar la atención de la mayoría de los transeúntes que pasaban a su lado o lejos de él, después de todo el aun tenia parte del uniforme escolar qué les decía a cualquiera que era un alumno que se había escapado de la Academia, y si algún oficial de policía lo vería era un hecho que lo llevarían a la estación para llamar a sus padres.

Un resultado que no le beneficiaba en lo más mínimo, era por eso que antes de la escapada de la Academia dejo su saco al igual que su camisa en unos arbustos, y ahora solo tenía su playera roja con los pantalones del uniforme y sus tenis, un estilo que no parecía ser escolar pero si se enfocaba bien podrían llegar a notar que su pantalón era el de un uniforme escolar, era por eso que se movía de un lado a otro tratando de no llamar para nada la atención.

— "Carajo... Esto de verdad si que es un problema" — Pensó Issei mientras veía con preocupación un par de oficiales.

Mismos que iban caminando por uno de los caminos que debía recorrer para dar con el almacén donde aun esperaba que El Libro De Los Deseos estuviera, pero al mismo tiempo estaba preocupado por el hecho de que el aún era un blanco de los Angeles Caídos, así que estaba debía con creces estar atento ante cualquiera que resultará un tanto sospechoso a la vista.

Sin embargo por lo que podía recordar al igual que suponer, los Angeles Caídos así como los Demonios podían camuflarse al 100% entre las personas al punto que no sospecharias qué estas a lado de uno. Era por eso que estaba atento ante cualquier tipo de aroma que fuera extraño, ya que recordando sus encuentros anteriores se percato de que cada especie parecía con seguridad tener un aroma único.

Los Humanos por ejemplo a pesar de ser diferentes con aromas diferentes, aun se podía distinguir un aroma familiar entre ellos o al menos el podía distinguirlo así como distinguio el aroma familiar de un Demonio qué tenía Rías y parcialmente Akeno, que además del aroma común de un Demonio tenía un aroma más en ella, uno que de cierta manera le era familiar por algún motivo.

Incluso las Pleyades qué eran humanas tenían ese mismo aroma familiar que a pesar de ser avatares aun poseían y fue por eso que comprendió qué aun si era ignorante de las muchas especies de lo sobrenatural aun podía saber quien en su alrededor era sobrenatural aún si no sabia que especie era específicamente.

Como ahora que podía distinguir aún en la multitud el aroma familiar humano, y ningún otro aroma ajeno a este asi que a pesar de haber muchas personas podía y estaba seguro de que no había nadie del mundo sobrenatural presente. Aunque a pesar de eso existía la posibilidad de que un humano estuviera colaborando con el grupo de Angeles Caídos aún estaba algo tranquilo, esto por que así como el podía detectar el aroma de la especie, también podía detectar fácilmente el aroma que tenia poder mágico, con lo que podía de manera segura identificar quien podría estarse ocultando entre la multitud.

— "Detectar cosas con el olfato si que es extraño, usualmente estas cosas pasan desapercibidos pero ahora puedo con facilidad detectarlos" — Pensó Issei mientras cruzaba una calle.

La misma por donde los oficiales habían ido, pero ahora estaban lejos a una gran distancia donde aun si voltearan no iban a ser capaces de discernir si era un chico de preparatoria o un universitario. Y sin duda eso era lo mejor para Issei, qué dio pasos bastante rápidos tratando de ser lo más parecido a una sombra en el ojo del ser humano común que no prestaba con calma atención a esto.

— "Un par de calles más y llegare" — Fue el pensamiento de Issei.

Al ver las ligeras marcas de una mano en algunas paredes, mismos que fueron con seguridad hechos por el al pasar por ahí, por tanto iba en el camino correcto. Pero mientras se fijaba en las marcas qué dejó la noche anterior, un curiosos aroma que ya había sentido antes llegó a su nariz en solo unos segundos, donde pudo ver con cierta sorpresa a una mujer observando una de las marcas qué dejó sus manos.

Una que estaba sobre el barandal de un modo casi imperceptible, tanto que ella notará eso llamo la atención de Issei asi como el aroma que venía de ella, uno al que no era ajeno no por no ser humano sino lo contrario, era una humana pero el aroma que desprendia tenía algo que lo diferenciaba de los demás humanos, este aroma solo lo había olido hasta ese momento en dos personas o dicho de un modo concreto en solo dos chicas.

— "Este tipo de aroma... Es uno casi igual al de las Hermanas Nishimura" — Pensó Issei recordando el aroma de ambas.

No el que le dijo que ambas estaban de cierta manera exitadas, sino que era un aroma diferente, otro que embas tenían consigo y que también pudo sentir en el rubio qué lo cargo cuando estaba de un modo casi inconsciente en la noche. No sintió este aroma en otras personas con quien estuvo en contacto, solo con ellos tres y lo unico qué podían tener los tres en común era una cosa, la misma que el tenía en su brazo izquierdo.

— "Este tipo de aroma único, que solo es perceptible en ellos, pueden ser el de una Sacred Gear..." — Supuso Issei mientras seguía su camino.

Acercándose más a la mujer, que como si supiera que se acercaba levanto con algo de sorpresa su mirada, dirigiendola en la dirección de donde Issei venía. Viendo al castaño acercarse con una mirada qué le decía estar curioso de ella, rápidamente comenzó a caminar tratando de parecer lo más normal posible cuando pasó con prisa al lado del castaño.

Aun si fue solo por un corto instante las miradas de ambos se encontraron, en el que aún si no dijeron nada pudieron de cierta manera comprender que había al menos una cosa en lo que se parecían y pasé a sentirlo ninguno dijo algo sobre eso limitandose a seguir con sus mismo camino que los alejaba uno del otro.

Para Issei era un sentimiento familiar a causa de las Hermanas Nishimura, pero para la mujer había sido uno Extraño al que no estaba familiarizada, por lo que optó por alejarse lo más rápido de ahí y pase a que Issei se detuvo para verla la mujer no se detuvo y continuó alejando su presencia de ese lugar. Dejando solo ligeramente extrañado a Issei qué dio a esto un solo ademán con sus labios, sin embargo no tardó en percatarse en algo más que había olvidado por completo y por las prisas no pensó al verla.

— "¿No se supone que Suzune esta en la búsqueda de usuarios de Sacred Gear, a quienes ahora los Angeles Caídos están cazando?" — Recordó Issei antes de su golpe mental por haber olvidado eso.

Por lo que girando rápidamente noto la desaparición de la mujer, que debió en parte a la multitud no la podía ver, aún así podía sentir su aroma alejándose de ese lugar y mezclandose con los demás.

— ¿Debería ir tras ella? — Se susurro con duda Issei al notar como el aroma de esa mujer iba perdiéndose o mejor dicho iba debilitandose poco a poco.

Pero antes de que pudiera tomar alguna decisión al respecto su teléfono vibro, lo que significaba que había pasado ya una hora quedando ahora seis para llegar de manera segura al Libro De Los Deseos. A dicir verdad aun tenia tiempo para ir en busca del libro, por lo que podría seguir a esa mujer pero con el riesgo de que no se encontrara ahí debia aprovechar con creces el poco tiempo que tenia si había cambiado de lugar.

— "Supongo qué ella puede esperar, los Angeles Caídos no salen hasta la noche por lo que estara bien" — Pensó Issei al girarse y seguir su camino.

Ignorando el hecho de que en una calle que dejo muchos metros atrás apareció una mujer con vestido rojo y de cabello azul qué parecía estar observando a los alrededores con serenidad, antes de un ligero atisbo de sorpresa que surgió en dirección a donde se había ido la mujer antes. Mismo camino por donde no dio duda de seguir lentamente mientras en su espalda a varios metros estaba Issei cruzando la calle, misma que lo llevaba hacia donde estaba el almacén donde al menos esperaba encontrar el Libro.

Y es que sin saberlo Issei había puesto a esa mujer en un gran peligro, donde no podría sobrevivir si la encontraban y la identificaban antes de que el le pudiera decir algo al respecto del peligro que le asechaba. Pero mientras eso sucedía en las calles, en la Academia todo iba de la manera más inesperada posible para el caso del "Noble Pervertido", y es que la noticia de Issei sacando el 100% en uno de los exámenes más difíciles de uno de los profesores más estrictos recorrió la Academia como si fuera pólvora.

Incluso la noticia donde Katase y Lynn se quedaron atrapadas en la Academia con Issei por la lluvia ya era bien sabido, sin duda se había vuelto un tema candente en la Academia donde la reputación del castaño había cambiado enormemente en solo una hora. Si antes su reputación era la de un "Pervertido sin remedio", o la de "El Líder Pervertido" ahora era en sorpresa de muchos alumnos el "Noble Pervertido de la Academia Kouh", en donde incluso los profesores tuvieron con sorpresa que reconocer gracias a la reputación de Chibasara Sae y la de las dos alumnas que eran conocidas por no soportar a los pervertidos.

En cuestión de solo una hora Issei dejo de ser "El Líder Del Trío Pervertido", "El Pervertido sin Remedio" o incluso "La Bestia Pervertida". Cualquiera de esos apodos habían dejado de asociarse al castaño, y ahora para sorpresa de los estudiantes Hyoudou Issei se convirtió en el "Noble Pervertido", dejando a su antiguo dúo de amigos como el "Dueto Pervertido" qué todos aun parecían de manera genuina odiar.

— No puedo creer que la reputación de Issei cambiara tan rápido... — Comento Motohama al ver los foros estudiantiles de la Academia Kouh.

Donde daban a relucir la historia sobre lo sucedido con el dúo de chicas, que al parecer los del Club de Periodismo con rapidez lo nombraron como "El Noble Pervertido que salvó a las Doncellas del Mal" y así mismo nombraron a los resultados de Issei en el examen como "El Noble Pervertidos que Logro el 100%".

— ¿Qué clase de encabezados son estos? Pareciera que quieren besarle el trasero a Issei — Señaló Matsuda mientras veía su teléfono.

— ¡¿Y que me dices de esto?! — Dijo con un claro enojo Motohama. — "El Trío a sido reducido a un Dueto, ¿Podra ser este el Fin del Trío Pervertido Dentro de la Academia Kouh?".

Claramente era una pregunta y a su vez una burla para el dúo de pervertidos en el salón, con la nueva reputación de sus "amigo" muchos ya daban por hecho un cambio o mejor dicho una separación al trío de pervertidos conocido por todos.

— Vaya que se volaron la barda con los encabezados — Dijo Aika mientras reía ligeramente mientras daba un "Like" a todos los encabezados mencionados.

— Vete al diablo Aika, es fácil decirlo si no es de ti de quien hablan — Contesto Motohama molesto mientras veía a las chicas junto a la mencionada.

— Obviamente hablarían de ustedes en los encabezados cuando la noticia de lo sucedido llegara a ser lo conocido en la Academia — Señaló Aika mientras les sonreía burlonamente a ambos.

— Como sea pero, ¿Como supieron todo lo que sucedió tan pronto? — Cuestiono Matsuda mientras seguía leyendo parte de los encabezados. — Lo tiene una sola hora desde que nos enteramos nosotros.

— Odio decirlo pero tiene razón, esto a superado por mucho a los encabezados anteriores... — Comentó Murayama con sorpresa al leer las reseñas. — Incluso a superado con creces al encabezado qué fue popular por semanas, "El Príncipe de la Academia Kouh no tiene Novia".

— Y eso es lo sorprendente... Que quien supero al "Príncipe" fue Hyoudou Issei, esto realmente durará semanas — Dijo Aika mientras leía algo que la dejo con un rostro sorprendido. — No lo puedo creer... Ashworth-san, realmente fuiste tu quien le entrego la historia a los del Club de Periodismo.

Comentó Aika mientras todos veían a la mencionada, antes de ir rápidamente al final del artículo donde le agradecían la historia de lo sucedido.

— ¡Espera! ¡¿Fuiste tu?! — Gritó Katase justo cuando Sae volvía a entrar al aula.

Haciendo que todos rápidamente en un par de segundos regresaran a sus lugar correspondiente, sacando un suspiro de la profesora que volvió a pararse frente toda la clase.

— Parece que ya saben la "noticia" que el Club de Periodismo público hace solo un par de minutos — Comentó Sae debido a un llamado del director por este asunto, que incluso lo sorprendió a él. — Se que es algo sorprendente para muchos, pero les sugiero que guarden esa sorpresa al final de la clase.

Ante esas palabras la mayoría asintio al instante, haciendo que Sae volviera con calma a escribir en el pizarrón para ser capaz de seguir con la clase.

— No puedo creer que les contarás todo lo sucedido al Club de Periodismo - Susurro Katase a Lynn qué ya había comenzado a escribir lo del pizarrón.

— ¿Y que es lo que esperabas? ¿Que esto lo mantuviera en secreto? — Susurro de vuelta Lynn. — No gracias, es injusto el como tratan a Hyoudou-Kun sin conocer su verdadera personalidad.

— ¿A quien le importa como tratan a ese idiota? Debiste de quedarte callada — Le susurro Murayama a Lynn en apoyo de su amiga.

— Opino lo mismo que esas dos, nunca le debiste decir algo a los malditos del Club de Periodismo — Susurro también justo detrás de ellas Motohama. — Gracias al maldito Encabezado, nuestra reputación se hundió considerablemente.

— Siendo sincera sus reputación ya era un asco desde antes, así que esto no hace una gran diferencia en realidad — Susurro del mismo modo Aika mientras escribía algo en su libreta. — Si ponemos la reputación de ambos en una escala del 100%, es casi un hecho que ambos tendrían un -100% y en pos a lo que sabe ahora sus reputación sería ahora un -200% y la de Hyoudou de un mismo modo -100% pero ahora subió a un 10%, batiendo un récord de salida al convertir un -100% a un +10%, lo que da inicio a una buena reputación.

Expuso Aika mientras mostraba de una forma clara su libreta, en la que podían verse representado en una gran gráfica de líneas con sus rostros mal dibujados que demostraba como habían caído las reputaciones de Motohama y Matsuda, mientras que la reputación de Issei fue en constante ascenso.

— En conclusión... Hyoudou tiene un 10% de probabilidades en conseguir novia y en perder su virginidad — Concluyó Aika de manera orgullosa.

— ¿Qué clase de estupidez es esa? — Dijo Murayama extrañada.

— Una que parece tener lógica — Añadió Katase aun extrañada pero de un mismo modo de acuerdo con el resultado de su pervertida compañera.

Qué sonrió orgullosamente mientras en su asiento Lynn sonreía ligeramente, no de burla sino de satisfacción debido a el resultado de Aika, y es que ya sabía que este sería el resultado sobre lo sucedido el viernes. Cuando se hiciera público en la Academia la reputación de Issei sin la menor de las dudas cambiaría siendo de un pervertido a alguien noble de cierta manera que le beneficiaba bastantes si queria la ayuda del castaño en el futuro.

— Que estupidez, eso no tiene lógica en ningún lado — Dijo Motohama con una gran seriedad.

— Hasta un niño de preescolar podría sacar un mejor resultado que toda esa tontería que hiciste — Apoyo Matsuda sentado detrás de su amigo de Lentes.

Qué como el observó a Aika observar al frente tratando de contener una sonrisa lo mejor que podía, mientras que el dúo de chicas del Club de Kendo veían de la manera más atenta al frente como si no hubieran estado hablando con ellos, un acto que incluso Lynn imito dejando en un instante confundidos al dúo qué aún no comprendía el por que, pero pronto entendieron la razón.

— Vaya, no sabía que eran unos genios en el tema — Dijo Sae con una seriedad impresionante en el frente de la clase.

Tensando al dúo de chicos que notaron segundos después, que sus palabras no habían sido susurradas sino en voz alta que Sae pudo escuchar perfectamente.

— Si son tan listos, ¿Por que no pasan al frente a resolver el problema? — Señaló Sae al pizarrón a su espalda.

En donde habían varias fórmulas que a simple vista parecían no tener sentido o forma, al punto que de resolver eso era bastante probable que invocaran a un Demonio en el salón de clases.

— Vamos, estoy esperando... — Dijo Sae con un tono amenazante qué tenso a la totalidad de los alumnos presentes que miraron con lástima al dúo pervertido.

— "Carajo... ¡Esto es tu culpa Issei! ¡Nos las vas a pagar!" — Fue el pensamiento de ambos al ver la ira de sus profesora.

Qué parecia en cualquier momento iba a asesinar a alguien, causando mas terror al dúo de pervertidos qué se pusieron de pie aceptando su destino, mientras que a lo lejos de ahí en el almacén abandonado sobre una gran pila de bolsas estaba Issei de pie buscando constantemente entre la mayoría de estas su mochila.

— ¡Achuu~! — Estornudó Issei casi de la nada. — Creo que alguien está hablando de mi... Espero que sea de algo bueno.

Limpiando ligeramente su nariz, Issei se limito a ver sus alrededores buscando el color o la forma de su mochila entre esa gran pila de bolsas, qué parecía haberse vuelto más grande en comparación a su visita anterior durante el atardecer.

— Maldición... A este paso tardaré una o dos horas en encontrarlo — Se comento así mismo Issei mientras movía algunas de las bolsas.

Tratando de ver o sentir alguna textura que no fuera suave o de plástico, algo a lo que su vista y tacto no encontraba al meter su mano entre las bolsas bajo el.

— Rayos... Espero que mi mochila esté aquí debajo de esto o estaré perdiendo mi tiempo — Se volvió a decir Issei así mismo al arrojar unas bolsas a un lado.

— [¿Por que es tan importante esa mochila? ¿Tienes algo de valor en ella?] — Dijo una voz gruesa en los adentros de la mente de Issei.

— Digamos que hay algo importante en ella, y si no logro encontrarla en dentro de unas horas lo perderé para siempre, algo que no es bueno en lo absoluto — Dijo Issei moviendo más bolsas.

— [Curioso... No sabia que tenias en tu poder un objeto que tiene un tiempo de recuperación] — Volvió a comentar esa misma voz en la mente del castaño.

— No lo obtuve hace mucho, así que ser irresponsable y perder algo como eso es una tontería — Respondió Issei antes de detenerse ligeramente, recuperando un poco el aire por el calor que hacía.

— [Si es tan importante deberías de usar tu nuevo sentido del olfato, no creo que te sea complicado detectar entre toda esta basura el aroma de tus cosas que deben tener un poco o mucho de tu aroma corporal] — Dijo como consejo la voz en su mente, que hizo que Issei se detuviera.

— No es mala idea... ¿Por que no pensé en eso antes? — Comentó Issei antes de cerrar sus ojos concentrándose.

Respirando una gran cantidad de aire a su alrededor, qué trajo consigo muchos aromas que si era sincero no queria sin duda saber que era o había sido, pero a pesar de todos esos aromas que podrían ser bastante asquerosos. Hubo uno que capto completamente su atención, y ese era uno bastante familiar al punto que no pudo evitar sentir la nostalgia.

— Lo encontré — Dijo Issei emocionado mientras se bajaba de la enorme pila de bolsas.

— [Era de esperarse, con este tipo de físico que supera mis expectativas el identificar un simple aroma familiar no era más que un simple problema] — Dijo de nuevo esa voz en la mente de Issei.

Qué una vez bajo de la pila de bolsas su mente por fin proceso lo que estaba por incredulidad suya sucediendo, ya que a causa de su bajada noto dos cosas. Una era que había estado hablando con algo en ese lugar donde estaba totalmente a solas, y lo segundo era que cuando esa voz hablo su muñeca izquierda brillaba en un tomo esmeralda..

— ¿Quien...? — Trato de preguntar Issei antes de detenerse al tener la respuesta de esa pregunta.

Ya fuera la voz o el brillo en su muñeca la respuesta a su pregunta apareció con rapidez en su mente al deducir todo por lo que sabia, por tanto solo había entre todo una respuesta a su pregunta.

— [Parece que no te tomo mucho, me impresiona lo rápido que analizas y encuentras la solución... Aunque no quita que eres un poco despistado o ingenuo] — Dijo la voz mientras Issei solo podía asentir. — [Pero a pesar de eso, tu ya sabes quien soy, ¿Cierto?]

— Si, lo se, tu eres el Dragon Rojo de la Dominación... Ddraig — Nombro Issei a quien se suponía era el alma de uno de los dos Dragones Celestiales existentes, uno que ahora estaba sellado dentro de su brazo izquierdo.

— [Correcto, sin duda eres por mucho el primer Usuario que me causa tanta curiosidad] — Comentó Ddraig ante los ojos de Issei qué veía la luz esmeralda en su muñeca izquierda. — [Eres único que a logrado tener el 100% del poder de la Boosted Gear apenas este despertó].

— "¿El primero?" — Pensó Issei con un poco de sorpresa al oír eso.

— [Y por si eso no fuera suficiente, tu cuerpo es uno de los más compatibles que e tenido como huésped... Incluso tu físico se transformo totalmente al de un Dragón] — Señaló Ddraig ante lo que Issei recordó que su humanidad ya no existía. — [Uno que aumenta aún más tu compatibilidad conmigo con un porcentaje mayor al 100%].

— Entonces, ¿Yo soy el Sekiryuutei más fuerte? — Pregunto Issei con una gran expectativa.

— [¿El Sekiryuutei Más Fuerte? Hmp~ aun estas muy lejos para considerar eso chico] — Respondió Ddraig con un claro tono de burla. — [Yo nunca dije que fueras el Sekiryuutei más fuerte, dije que eres el primero de todos los usuarios en ser el más compatible a una escala mayor al 100%, para ser llamado "El Sekiryuutei Más Fuerte" tendrás que esforzarte mucho más].

— Y-Ya veo... Entonces yo no soy el más fuerte de todos los Sekiryuutei — Llego con cierto pesar a admitir el castaño.

— "[No, aun no lo eres, pero tienes el potencial para serlo sin duda]" — Fue el pensamiento de Ddraig mientras veía al castaño desde el interior.

Y es que de la misma forma que Suzune, Ddraig entendía la forma de aprendizaje del castaño que sin duda podía llamarse absolutamente anormal, al punto que en todos sus años el jamás había conocido a otro que tuviera este tipo de aprendizaje totalmente anormal. Al punto que no era posible compararlo con alguien más que conociera, por que para la mayoría en el mejor de los casos solo debía entrenar al menos unas semanas para dominar algo, los más talentosos solo necesitaban unos días, pero Hyoudou Issei solo necesitaba horas para hacerlo o inclusive minutos.

Era por eso que debían mantener en un nivel aceptable el aprendizaje del chico, o de lo contrario habrían problemas de diferentes maneras, uno de ellos era un claro caso de arrogancia qué podría ser capaz de desarrollar si comprendía por si mismo de lo que era capaz. Por eso el Dragon había optado por hablar con su Portador antes de que comenzará con el uso del Boosted Gear, aunque le parecía perfecto tener un usuario tan especial y único como Issei, sabía que si no tenían cuidado el castaño podría tomar pronto un camino que lo matará.

Y desperdiciar el potencial de un usuario tan único y especial como Issei le parecía un desperdicio, por eso siguiendo con los ejemplos de Suzune, Ddraig optó por uno de los caminos más tranquilos y seguros.

— [Tienes potencial, lo reconozco, sin embargo aun tienes un largo camino que recorrer] — Advirtio Ddraig ante Issei qué suspiro ligeramente.

— Comprendo, supongo que Sae-Sensei tenía razón, en este mundo hay fuerzas que no pueden ser superadas de forma convencional — Admitió Issei mientras miraba en dirección a la pila de bolsas.

Específicamente un lugar donde aun era capaz de detectar el familiar aroma de la mochila pero aún si lo podía oler, no era capaz de verlo por ningún lado aún si se encargó de mover todas las bolsas de sus lugar constantemente.

— ¿Donde...? — Pregunto Issei antes de notar el aroma de su mochila.

Llendo en una dirección como si alguien lo hubiera tomado de su lugar, causando que se tensara completamente debido en su gran parte a la última de las reglas.

[Regla 12]

[Quién intente abrir el libro por la fuerza recibirá una advertencia, si se llegan a superar las tres advertencias, aquel que a intentado abrirlo será sin excepción borrado de la existencia.]

No sabia si realmente era real eso, pero considerando que sus deseos ya habían sido cumplidos dejaba claro que podría ser real el ser borrado de la existencia y el no quería ser el responsable de eso o al menos el causante al no haber sido lo más cuidadoso posible con el Libro.

— Maldita sea... — Musito Issei antes de comenzar a seguir el aroma.

Pero apenas dio dos pasos su cuerpo no dio un tercero al desplomarse al suelo y quedarse ahí donde la conciencia dio un último momento de lucides antes de ser enviado nuevamente a la oscuridad. Un suceso que fue observado por Ddraig, el cual simplemente suspiro al ver que sus sospechas fueron reales e Issei volvió al momento a quedarse inconsciente.

— "[Era de esperarse que volvieras a perder el conocimiento, tu fuerza no está equilibrada todavía y tu te has forzado a venir aquí aun cuando no debías hacerlo]" — Pensó Ddraig con seriedad mientras levantaba la mirada manteniendo esa seriedad. — "[Pero a decir verdad me dejas impresionado con tus acciones, más aún con todas las que haces inconscientemente que van más haya de lo ordinario...]"

Las palabras del Dragon podrían ser una clara referencia al cuerpo perfecto de su usuario, pero en realidad también iba en parte dirigido hacia los ocho objetos que estaban flotando en ese espacio. Mismos a los que anteriormente Issei tuvo en su interior antes de expulsarlos, dentro del castaño habían ocho peones fantasma y alrededor de ellos habían otras piezas a los que cualquiera podría reconocer.

— "[Quien hubiera imaginado que mi próximo usuario iba a nacer con uno de los cuerpos más perfectos al igual que especiales que han existido en el mundo... No, en la Historia]" — Pensó Ddraig seriamente sin saber como debía reaccionar a este tipo de situacion.

Donde el cuerpo de su usuario seguía de manera sorprendente adaptándose a las Evil Pices que alguna vez estuvieron con el durante diez segundos, y es que el por que estos salieron de su cuerpo pasados los diez segundos se debió al cambio por el que estaba pasando en ese momento a causa de su Fisico Perfecto. Que aún iba adaptándose al Boosted Gear, era por esa razón que antes rechazo a las Evil Pices cuando entraron en Issei, el físico ya se encontraba bajo una gran presión en su proceso de adaptación y transformación a un Dragón.

En ese momento crucial se necesitaban mantener las cosas bajo control en otra definición, debía haber armonía dentro del cuerpo que resonaba con el Boosted Gear al mismo tiempo causando que los retumbares ocurrieran. Por tanto en ese momento, donde se necesitaban tener la mayor armonia posible entre ambos fue interrumpido por la repentina aparicion de los Ocho Peones, que como se sabia a causa de sus funciones debía cambiar la especie del usuario a la de un Demonio.

Algo que comenzó a hacer apenas entró en el cuerpo, rompiendo así la armonía, con la invasión de un extraño objeto así como un cambio repentino en la especie del usuario causaron un gran choque al que el físico perfecto no otra opción que expulsar lo que había roto la armonía al instante, utilizando el aura Carmesí que comenzó a filtrarse del cuerpo de Issei.

Sin embargo todo el daño ya había sido hecho, por tanto el Físico Perfecto tuvo un nuevo objetivo además de adaptar a todo el físico para usar al Boosted Gear de la manera más eficiente posible. Con la interrupción de los Ocho Peones y su intento de modificar la especie de Issei, el Físico Perfecto decido adaptarse a los Peones que entraron en el, aun si estos estuvieron diez segundos en su interior pudo memorizar su estructura al 100%, así como pudo identificar la especie en que quería cambiarlo.

Era por esto que Issei se desmayo en ese lugar de nuevo, el Físico Perfecto estaba casi por adaptarse al 100% a los poderes y habilidades del Boosted Gear, pero con la nueva información que obtuvo con las Evil Pices causó que a su vez se adaptará a ellos, era por esa razón que habían con Ddraig los fantasmas de ocho peones. Los cuales proporcionaron la información de las otras Evil Pices, gracias a la habilidad de "Promoción" que tenían integradas en cada uno de los ocho peones.

Con esa información el Físico Perfecto se comenzó a adaptar no solo a los "Peones" sino también a la forma de "Caballero" al igual que la de "Alfil", "Torre" y "Reina". Y era por esta adaptación qué ahora estaba al límite, el físico de Issei había forzado a cambiar todo constantemente una y otra vez buscando obtener el resultado que se pudiera llamar "Perfecto" durante horas.

Mismas en las que Issei no le dio aun un descanso lo suficientemente adecuado, y esto en consecuencia lo forzo aún más al límite que normalmente no sería fácil de alcanzar con su nuevo físico. Pero este a pesar de ser perfecto aún no estaba bien sincronizado con Issei, es por que que el Dragon en su interior había dicho eso al verlo colapsar antes, "Tu fuerza aun no esta equilibrada".

La fuerza de su nuevo usuario sin duda le dejaba sin palabras, pero a la vez era emocionante saber que monstruos o un ser anormal como el podían existir aún en un mundo relativamente de "Paz". A pesar de eso sabia que ahora su usuario era un objetivo fácil, por lo que usando parcialmente el físico de su usuario con lo que tenía permitido hizo aparecer las alas Dragon del chico.

Mismas que ahora parecían tener de un modo extraño en algo más de tamaño y su vez una mayor cantidad, siendo en el momento seis pares de alas que ante las órdenes de Ddraig cubrieron totalmente el cuerpo del castaño. Y tan solo pasados unos segundos las alas parecieron dejar de ser rojas para volverse igual que todo su entorno, casi como un camuflaje qué nadie podría notar si no chocaba contra las alas directamente, ya que visto desde una distancia lejana o cercana pareciera que no hubiera nada en ese lugar.

Algo que la mujer afuera de la cerca no noto mientras revisaba los alrededores con un gran detalle, como si buscará en ese lugar algo realmente importante, al punto que estaba bastante seria a pesar de sentir que estaba cerca de él pero sin poder verlo de frente o de lejos.

— "¿Donde estas?" — Pensó Hasegawa Chisato buscando al Hombre que ella casi habia renunciado a esperar por varios años. — Hyoudou Issei...

Y es que después de descubrir que "ese" hombre había sido encontrado por una de sus Siete compañeras Pleyades, en su interior sintio su mundo se sacudirse de manera violenta al punto que casi llego por la impresión a desmayarse. Ya que para cualquiera de las Siete Pleyades la existencia de ese hombre estaba sin un ápice de duda sobre todas las cosas, aun si tenia un trabajo estable de enfermera en esa escuela donde conoció a un chico con el que podría iniciar una relación y tal vez formar una familia se esfumó.

Todo eso se esfumó apenas supo que su hombre esperado había aparecido, todo sentimiento que había desarrollado por ese chico habían desaparecido sin dejar rastro alguno, a tal punto que ella ya ni siquiera recordaba su nombre o rostro concretamente. Lo único que tenia por prioridad era encontrarlo, encontrar a Hyoudou Issei que Suzune le dijo había quedado solo en la Sala del Club de una Academia en la Ciudad de Kouh, misma donde no dudo en venir apenas tuvo las indicaciones para encontrarlo.

Pero al llegar al Club descubrió que ese chico ya no estaba en ese lugar, dejando preocupada a Chisato qué sabía bien los peligros que lo asechaban y el peligro de su aura descontrolada qué se suponia le enseñaría a usar después de conocerlo a profundidad. Aún así no perdió tiempo y siguió el aura residual del chico que aún estaba presente en la Sala del Club, pero dicho rastro había terminado hace unas calles atrás y desde ese momento había estado rondando las calles tratando con rapidez el encontrarlo.

Había intentado seguir las señales de las "Almas Estrellas" de sus compañeras que habían sido entregadas a Issei, pero aún si lo intento no pudo seguirle el rastro al aparecer y desaparecer constantemente cada cierto tiempo. Dejando la última de las señales en ese lugar, donde no podía verlo por lo que optó por seguir viendo por otras calles alejándose del castaño inconsciente a algunos metros de ella.

Esto a causa de Ddraig qué queriendo a lo mucho proteger a su usuario, hizo en ese instante que el aura fuera más débil de lo normal al punto de casi no notarse aún si estabas cerca. De esa manera aun si alguien que podía detectar la magia o el aura no podría notarlo fácilmente así, y teniendo sus seis las alas encima era a decir verdad mucho mas complicado el poder detectarlo.

Con ello la ubicación de Issei seria de lo más incierta hasta que despertará de su inconsciencia, donde su físico aun iba a cada segundo adaptándose y mejorando de tal manera que podría sacar el 100% no solo del Boosted Gear, sino también de las Habilidades y sus ramificaciones qué usualmente le tomarían dominar a lo mucho varios meses. Pero el solo iba en un cálculo simple a necesitar tres o dos días, en tiempo récord podrían ser solo horas dependiendo del castaño.

Qué después de unas horas, sus alas se  comenzaron a mover lentamente de su lugar dando a entender que Issei ya no estaba del todo inconsciente y estaba a punto de despertar de su sueño, donde realmente lo sintió como solo minutos, por esa razón apenas recobro parte de sus sentidos comenzó a levantarse. Con cuidado las alas comenzaron a moverse dejando pasar la luz del sol que cego un ligero instante al castaño, que al poder acostumbrarse a la luz observo con una clara confusión sus alrededores.

— ¿Qué carajo...? — Musito Issei cuando logró levantarse parcialmente.

Quedando de rodillas en el suelo, donde pudo ver su sombra y la de sus alas qué se extendían orgullosamente justo atrás de su espalda, ver las seis le sorprendió enormemente siendo que era la primera vez que las veía, y al girar su mirada se percato de que realmente eran seis alas parecidas a las de un Dragón.

— Parece que no bromeaban cuando me dijeron que yo ya no era Humano... Sino un Dragón — Volvió a musitar Issei con cierta aceptación mientras sostenía del mismo modo su rostro. — ¿Cuanto es...?

— [Horas] — Respondió Ddraig antes de que Issei terminara su pregunta. — [Has estado inconsciente unas horas, debes ser agradecido por despertar ahora y no en un mes o dos].

— ¿Tan malo fue...? — Pregunto Issei sin saber que había pasado.

— [Realmente me sorprende lo poco que sabes de ti mismo...] — Comento Ddraig sinceramente confundiendo un poco a Issei.

— Siendo sincero desde ayer no se que soy exactamente... — Admitió Issei con honestidad antes de mirar de nuevo al lugar donde estaba.

— ¿Sigo aquí...? — Cuestiono Issei algo desorientado.

— [Así es, no diste tres pasos antes de desmayarte, aunque era de esperarse que te sucediera considerando que tu no has...] — Explico Ddraig brevemente antes de parar.

— Espera... ¿Dijiste que estuve horas en este lugar? — Pregunto Issei ante lo que Ddraig se extraño un poco.

— [Supongo que aún sigues un poco desorientado... Pero si, has estado aqui unas horas] — Respondió de manera normal Ddraig a Issei.

Quien al oír eso sintió como su cuerpo se tensaba al recordar su mision, una que a causa de su desmayo se había llegado del mismo modo a retrasar. Por lo que de un movimiento rápido sacó su teléfono, y de ahí noto cuanto tiempo había pasado con su estado inconsciente qué le dejó ahora solo dos horas y media para encontrar el Libro de los Deseos o de lo contrario iban a cumplirse las veinticuatro horas que le harían perder el Libro para siempre.

— ¡Maldita sea~! — Gritó Issei antes de ponerse de pie con la ayuda de las alas.

Qué lo levantaron un par de metros en los cuales Issei no se sorprendió nada y contrario a eso lo uso para llegar a uno de los techos de los almacenes, donde a pesar de no ser muy alto tuvo una vista decente de los alrededores.

— "Mierda, Mierda, ¡Mierda!" — Pensó Issei preocupado mientras cerraba sus ojos y concentraba su olfato.

Tratando de detectar su aroma que iba impregnado en su mochila, pero con el paso del tiempo, temperaturas y otros aromas mesclados ya no le fue posible encontrar su aroma. Mismo que ahora era demasiado débil que ni el mejor de los perros rastreadores podría seguir o encontrar, llevando la preocupación y frustración de Issei al máximo.

— ¡MALDICIÓN! — Gritó Issei mientras golpeaba una toma de aire a su lado.

Misma que se rompió y salió disparada a varios metros de su posición, donde aun el techo se vio dañado dejando caer una parte de este al interior del almacén, en donde una nube de polvo se levantó.

— [¿Tan importante es esa cosa?] — Fue la pregunta de Ddraig al ver como había reaccionado su usuario.

— Lo es... Como no tienes idea — Llego a decir Issei antes de prepararse para irse volando del lugar.

Sin importarle si alguien llegaba a verlo volando sobre la ciudad, lo único que le importaba era poder encontrar el Libro de los Deseos que le había dado todo los logros que tenia ahora y que sin el iba a perder como olvidar por completo. Por eso estaba dispuesto a arriesgarse en la posibilidad de ser visto revelando así el secreto de la existencia sobrenatural de la cual ya había deducido era un secreto en el mundo, pero con el gran riesgo de perder el Libro de los deseos.

Ese secreto se volvió pequeño, ya que si lograba encontrarlo solo tendría que ser inteligente y desear que todos olvidarán haberlo visto volar en la ciudad. Eso así como desear que el Libro viniera a el en caso de que lo perdiera, evitando así los sucesos de este día que sin duda no iba a ser de los mejores que recordar.

Pero en el momento que se preparó en alzar el vuelo se detuvo abruptamente quedándose estático en su lugar, como una estatua lo haría sin moverse antes de parpadear ligeramente. Como si sus recuerdos le estuvieran mostrando un hecho que había pasado por alto por la preocupación y frustración que tenia a causa de la situación, por lo que llendo un poco más despacio saco su teléfono.

Notando así que tenía varios mensajes, algunos de los mensajes eran del duo a quienes llamo amigos pero ahora eran idiotas, otros eran de Aika qué hasta el día de hoy desconocía como ella había obtenido su número. Otro mensaje era de sus padres que decían haber salido ayer de emergencia a ver a su abuela, que parecía había tenido algún tipo de problema que ellos debían atender, un par de mensajes más le seguían.

Aunque estos eran solicitudes de lo que podría llamarse una red social, donde a decir verdad no tenía muchos amigos o conocidos que agregar pero que ahora tenía alrededor de cien o doscientas de esas solicitudes. Mismas a las que no le presto atención debido al número en la parte inferior, mismo que decía haber llamado tres veces en el día y el último había sido hace solo una media hora al que obviamente no respondió por estar inconsciente, pero que esa persona hizo que le enviara un mensaje.

[Número: XXX-XXX]

[Hola desconocido-kun, no respondiste a ninguna de mis llamadas así que te envío esta mensaje para decir que encontré tus cosas (mochila) entre la basura cuando iba de paso en un atajo para llegar a mi escuela. No tenía nombre ni nada, pero tenía tu número telefónico en un recibo, espero que sea tu teléfono y no este por error molestando a otra persona jejeje.

En fin, la tuve todo el día esperando para entregártelo pero al no poder contactarte se lo entregaré a un oficial de policía para que lo busques en la estación. Te enviaré la dirección de la estación en donde iré a dejar tus cosas, pero si lees esto a tiempo y puedes alcanzarme en Burger Kouh del centro junto a la estación del metro a las 3:00 pm te daré tus cosas, estaré ahí una hora probablemente antes de irme, por lo que espero puedas leer mi mensaje justo a tiempo y puedas alcanzarme, te espero.]

Apenas leyó eso Issei sintió como si una gran carga se le quitara de encima, a tal punto que casi cae sentado por el alivio de saber que sus cosas estaban a salvo y en un lugar que conocía y no estaba tan lejos de su ubicación. Por lo que dando un suspiro de alivio salto del techo y se dejó caer suavemente al suelo donde el grupo de alas que tenia amortiguo todo su camino hasta tocar el suelo.

No sabía quien le había mandado este mensaje pero mientras le entregará su mochila donde estaba el Libro estaría totalmente agradecido, por lo que dio unos pasos ocultando sus alas ante su cercanía con la cerca de metal que en comparación con antes no fue difícil saltar rápidamente. Ya que ya habían pasado una media hora desde que le llegó ese mensaje, así que esa persona debía seguir ahí esperando por lo qué ignorando los otros mensajes siguió su camino hasta el lugar donde se suponía esta el que le envío ese mensaje.

Y es que había sido una suerte que sus pensamientos le arrojaran una ligera o pequeña posibilidad de que alguien se haya puesto en contacto con el por sus cosas, ya que podía recordar que en su mochila aun iba el recibo del número que tenia su nuevo teléfono, así que si alguien lo había encontrado había una probabilidad de que tratara de ponerse en contacto con el, y al final así fue, algo que evito un escándalo con el volando a toda velocidad por toda la ciudad.

— "Fue una suerte que recordara eso y las notificaciones, que ahora que lo pienso un poco mejor me hace pensar, ¿Por que hay demasiadas solicitudes de amistad? No es nada normal" — Pensó Issei mientras un poco más tranquilo que antes.

Mientras salía de ese lugar aún con algo de prisa debido al retraso de media hora que tenía, sin duda habían muchas cosas de las cuales debía ocuparse pero ahora lo más importante era tener el Libro con el antes de hacer cualquier cosa. Llendo por un camino más transitado qué antes no tardo mucho en llegar al lugar que le había dicho el desconocido que tenia su mochila, esto por que ahora no tenía en si razón para ocultarse de los oficiales o Angeles Caídos qué para su sorpresa no encontró en ningún momento.

Dejándolo más tranquilo en ese aspecto del que pensaba ya no debía preocupar en esa situación, por lo que observando la puerta del local de comida decidio no perder más el tiempo y entro viendo las cosas usuales de este local al que habían venido un par de veces con sus amigos o antiguos amigos a juzgar por los nuevos mensajes que le enviaron. Donde habían cosas que decían no estaban feliz con un suceso, algo que simplemente ignoro sin dudar mientras observaba las mesas del lugar buscando alguien que tuviera una doble mochila consigo o su mochila.

Misma que no tardo en ubicar al verla a lado de una chica, misma que parecía se estaba preparando para comer así que a cierto paso veloz se acercó hacia ella en un deseo de terminar con este día que a decir verdad no querría repetir jamás y supo que probablemente no volvería en su vida a ocurrir cuando vio parte una parte del Libro dentro de la mochila así como la pluma roja que podía verse un poco gracias al cierre roto de la mochila.

— "Al fin..." — Pensó aliviado Issei antes de dar un paso más llamando por fin la atención de la chica. — Soy desconocido, disculpa por no responder tus llamadas antes... Estaba un poco ocupado.

Continuará...