El caos se había desatado en la Isla Libertad gracias a las decenas de hombres y mujeres alterados con Extremis que no tenían ningún reparo en explotar en pedazos sólo para extinguir la vida de alguno de los Vengadores. Sin embargo, el equipo de Nick Fury no se dejaría vencer tan fácilmente; habían recorrido un largo camino dando caza a Vlad y buscando eliminar los efectos del suero que no bajarían la guardia tan pronto.

Las extensas nubes de humo negro provocadas por las explosiones podían verse a muchos kilómetros a la redonda, los quinjets de S.H.I.E.L.D. seguían llevando agentes al lugar para buscar contener la situación sin que se extendiera a la ciudad. Black Widow seguía combatiendo desde el quinjet lanzando pequeñas balas con Litio que evitaba la explosión cuando éstas impactaban en el sistema Extremis. En cambio, el Capitán Rogers peleaba cuerpo a cuerpo al lado de Hawkeye y Hulk; la situación no era nada sencilla pues cada vez que se deshacían de uno, parecían multiplicarse por tres.

Thor y Lady Sif continuaban avanzando por dentro de la estatua hacia la corona buscando localizar a Tony. Por las escaleras y diferentes accesos internos salían enemigos buscando eliminarlos pero la fuerza asgardiana no era alabada en vano. El tiempo pareció detenerse cuando escucharon el pesado metal del traje de Iron Man impactarse con el concreto en la base de la estatua, los cinco Vengadores miraron hacia el lugar para encontrarse con el rumano vistiendo sólo algunas partes del armadura.

Tal parecía que lo que Vlad necesitaba principalmente era sostener su columna vertebral fuertemente lastimada por Becky, ya que el traje le cubría todo el tórax, las piernas y de las manos a los codos para usarlas como armas. A sus pies se encontraba Becky, la había dejado caer al suelo casi dos metros antes de llegar a tierra por lo que estaba tratando de desaturdirse y levantarse lo más rápido que pudiera pero Vlad la pisó en la espalda con la pierna cubierta por el traje.

-Míralos, Lilienne, ¿en serio crees que vale la pena perder tantas vidas por una sola persona? - le habló Vlad a Becky que trataba de zafarse de la prisión del suelo y la pierna de Vlad, un golpe en seco al rumano en el tórax lo desequilibró y se vio obligado a caminar hacia atrás.

Becky volteó hacia arriba y vio cómo el escudo del Capitán América volvía como boomerang a él para una vez en su brazo propinarle un fuerte golpe en la cabeza a un chico de unos 20 años con el rostro incandescente por el Extremis. De momento era todo lo que Steve podía hacer por Becky.

-Jarvis, envía dos trajes de mi hermano ahora mismo, a uno cárgalo con Litio - dijo ella en voz muy baja mientras se levantaba del suelo con la cara y los brazos llenos de rasguños.

-Enseguida, señorita Stark - respondió por el auricular.

-Lilienne... - comenzó Vlad mientras recuperaba la compostura por el golpe y volvía a acercarse a ella.

-No, Vlad. Esta vez, no - le dijo ella con voz profunda mientras levantaba su mano extendiendo una pared luminosa color azul que impedían avanzar al rumano. Los ojos de ella brillaban en el mismo tono mientras lo miraban con odio.

-Oh, Lilienne, por favor déjate de trucos conmigo - dijo Vlad mientras con un simple movimiento de su mano desvanecía el escudo creado por Becky - no te niego que esa aura color azul que a veces te rodea me hace desearte un millón de veces más, como en los viejos tiempos.

-Cállate, no pienses que te agradezco que me hayas convertido en esto ni que logras vengarte por algo que mi padre no hizo y menos a ti - respondió ella lanzando varias descargas con sus manos, se veían como electricidad en una esfera de energía.

-Preciosa, el cadáver de tu padre llorará al ver a sus hijos reuniéndose con él en el infierno - rió Vlad mientras decía eso, Becky sintió cómo de nuevo él inmovilizaba su cuerpo e intentaba entrar a su mente sin tener éxito.

-No vas a poder conmigo, no puedes controlarme ya - dijo ella sin poder mover un sólo músculo, tenía miedo pero jamás dejaría que él se aprovechara de eso.

-No, pero será más divertido obligarte a ver - respondió Vlad tomándola del cabello y obligándola a girarse y arrodillarse viendo de frente a la estatua - míralos bien, Lilienne, memoriza el momento.

Con lágrimas en los ojos y sin poder zafarse, Becky vio como sus amigos comenzaban a cansarse y la batalla hacía estragos en ellos. Intentó con la telepatía detener sin éxito que Clint fuera golpeado en la cara, que Hulk fuera enterrado por estructuras de metal, que Steve tuviera una intensa batalla con cuatro hombres que lo igualaban en tamaño, que un chico casi a punto de explotar estuviera alcanzando el quinjet que piloteaba Natasha y que cada vez que dejaban a uno fuera de combate, llegaran más.

-Todo esto, Lilienne, es por ti; habría sido mucho más sencillo si te hubieras entregado a mí de forma voluntaria. Tal vez ya no pueda controlarte, pero puedo de todas maneras ayudarte a ver lo que sigue - Vlad sujetó aún más fuerte a Becky mientras levantaba su mano hacia la cabeza de la estatua, con ayuda del traje de Tony lanzó un rayo que dio justo en uno de los picos, el cual cayó hacia atrás provocando una enorme explosión color dorado.

Becky en ese momento dejó de forcejear, su mirada se perdió en el infierno que se desató en la parte más alta de la estatua y que iba bajando rápidamente. Poco después de la explosión dorada, había visto un pulso electromagnético expandirse, supo que era el reactor Arc. La onda expansiva del Extremis fue devastadora y Becky no pudo más que ver cómo las ardientes llamas cubrían todo a su paso. Thor, Banner, Barton, Steve, Tony, y hasta Natasha en el quinjet, habían sido alcanzados por la marea de fuego.

Por encima de todo se escucharon los desgarradores e incesantes gritos de Becky, quien entre lágrimas se arrastró por el suelo intentando alcanzar la máscara vacía del Capitán América. Todo había dejado de tener sentido, el mundo no podía extinguirse más para ella, no quedaba nada.

-Te lo dije, Lilienne, no puedes jugar conmigo, no puedes vencerme... - la voz de Vlad era de absoluta diversión y satisfacción, le llenaba verla destrozada en tantos pedazos que nunca podría unirse de nuevo. Ella seguía llorando sintiendo su cuerpo desconectado y de vez en cuando abriendo los ojos para comprobar que su peor pesadilla se había vuelto realidad.

-Señorita Stark, los trajes llegarán en un minuto - escuchó Becky la voz de Jarvis por el auricular provocando la extraña sensación de que el humo había desaparecido por un segundo.

-Ya es muy tarde, Jarvis... lo perdí, los perdí a todos - respondió ella en un susurro con la voz claramente lastimada al no haber contenido sus gritos, se quedó inmóvil en el suelo escuchando cómo Vlad caminaba sin que a ella le importara a dónde. Se arrastró al cuerpo sin vida de Steve y se recargó en su pecho como tantas veces lo hizo y que él le respondía cubriéndola con sus brazos. Esta vez no hubo respuesta.

-Sea fuerte, señorita Stark, y recuerde lo que puede hacer ahora - le dijo Jarvis.

Becky en un momento comenzó a sentir una extraña presión en la cabeza y el pecho, levantó un poco la vista y vio a Thor combatir con dos hombres. Lo vi morir, recordó ella sin dudar ni un momento en ello. De vez en cuando veía desaparecer el cuerpo de Steve y quedar cegada por una intensa luz blanca, pero después volvía a sentir el pecho de él bajo su cabeza.

Becky.

Su visión volvió a relampaguear, sentía una descarga en el pecho.

Becky.

En su cabeza aún lo escuchaba hablarle. Steve.

¡Becky!

La voz de Thor la desorientó y el relámpago la volvió a cegar; poco a poco comenzó a acostumbrarse a la luz y al ruido que había a su alrededor. La Estatua de la Libertad aún se erguía frente a ella mientras en sus distintos niveles se libraban batallas. Becky estaba tan aturdida que sin voltear quiso tomar la mano de Steve que yacía en el suelo, miró hacia abajo al no sentirla y casi se desmaya al no ver nada ahí. Detrás de ella escuchó el choque del metal, miró hacia atrás y vio como Iron Man peleaba con Vlad mientras uno de los trajes arrojaba dardos con Litio desde el aire sin aun poder impactar a Vlad.

-¿Tony? - se levantó del suelo tambaleándose tanto que volvió a caer de rodillas a unos metros de donde Vlad intentaba liberarse de la batalla.

-¡Becky! ¡Lo encontré! - escuchó una voz en el auricular.

-¿Thor? - intentó reconocerlo, no podía entender qué sucedía.

-Encontré a Tony, pero necesitas llegar a la cima de la Estatua - Becky sintió que se le revolvía el estómago, le dolía la cabeza y tenía náuseas, ¿dónde estaba toda la tragedia que había ocurrido minutos antes? Sentía la pérdida, la tristeza, la impotencia y la ansiedad de haber perdido a los que amaba. Y, sin embargo, seguían peleando frente a sus ojos.

-Señorita Stark, el traje la llevará más rápido hacia la zona donde está el señor Stark - dijo Jarvis mientras uno de los trajes rodeaba a Becky con los brazos de metal y se elevaba por los aires hacia la estatua. Volteó hacia abajo para ver cómo el otro traje mantenía inmovilizado a Vlad con ayuda de descargas. Al llegar a la zona de la corona, Becky vio a Tony atado fuertemente con cadenas mientras unos tubos canalizaban la energía del reactor Arc al contenedor de Extremis.

-¡Tony! - dijo ella acercándose sin poder creerlo, sentía que todo era una ilusión y que pronto desaparecería y volvería al suelo junto al cuerpo de Steve.

-¿Qué diablos estás haciendo aquí? - le preguntó más preocupado por que estuviera en peligro que por los motivos que los habían hecho discutir antes.

-¡Dios! ¿Estás bien? - le preguntó ella acercándose para tocar su brazo, después se pasó las manos por la cara llena de moretones y sangre de sus propios rasguños, algunos cortes de sus brazos eran profundos, estaba a punto de entrar en shock y Tony lo notó al ver que aceleraba su entrecortada respiración.

-¡Becky, mírame! Maldita sea, ¿qué fue lo que te hizo? Oye, necesito tu ayuda, ¿entiendes? - Tony intentó distraerla para evitarle una crisis, ella sin poder hablar por el nudo en la garganta se acercó a él para escucharlo.

-El traje cargado con Litio no resistirá mucho - informó Jarvis a ambos.

-Voy a darte instrucciones para que me desconectes del reactor Arc - al decir esto, Becky claramente entró en pánico - sólo será por unos segundos porque me pondrás el reactor que viene con el traje que está a tu lado y después yo me encargaré del resto, ¿está bien? - ella asintió muerta de miedo.

-La resistencia del traje se ha reducido al 65%, señor - volvió a informar Jarvis.

-Esto será rápido, ¿sí? Primero da vuelta al aro de metal que rodea el reactor, cuidando que no muevas los tubos con Extremis - Becky así lo hizo, controlando el temblor de sus manos retiró el círculo de metal que evitaba que el reactor se saliera del cuerpo de Tony - tomándolo por las orillas, saca el reactor de la base lo más firme y lento que puedas - Becky continuó la labor sin emitir un sonido.

-Resistencia caída al 32% - repitió Jarvis, si el traje se apagaba, el Litio dejaría de fluir en el cuerpo de Vlad que había quedado atrapado dentro de él y todo sería un caos de nuevo. Abajo, los Vengadores seguían en una fuerte batalla por controlar a todos los sujetos.

-Tranquilo, Jarvis, el momento llegará... Bien hecho, pequeña, ahora con tus dedos alcanza el cable interior y desconéctalo - cuando lo hizo el reactor Arc conectado al Extremis quedó en sus manos y completamente separado del cuerpo de Tony, el traje en automático desconectó el reactor nuevo para que Becky pudiera instalarlo en Tony.

De pronto,  vieron como el quinjet de Natasha comenzaba a dar vueltas sin control sobre el mar, por el auricular escucharon los disparos para deshacerse de un individuo que aún no sabían cómo había llegado ahí. Por instinto, Becky levantó su mano para intentar frenarlo antes de que se estrellara en el mar. Sorprendentemente, el pequeño avión comenzó a moderar sus movimientos, pero Tony aún no era conectado al nuevo reactor y las esquirlas dentro de su cuerpo comenzaban a lastimarlo.

-¡Tony...! - se desconcentró Becky al ver a Tony comenzar a ponerse pálido y el quinjet volvió a descontrolarse.

-El quinjet primero... tú puedes - Tony hablaba con dificultad. Becky concentró ahora sus dos manos en detener el quinjet y evitar que cayera al mar junto con Natasha. Poco a poco el avión comenzó a verse rodeado por una energía color azul y se estabilizó justo a unos metros de impactarse con el mar, evitando que se estrellara.

-Estoy en los controles de nuevo, te debo una, Becky - se escuchó la voz de Natasha de nuevo, Becky cayó de rodillas al nunca antes haber usado con tanta intensidad sus habilidades. Se levantó como pudo para correr hacia Tony, que ya se encontraba más débil.

-¡Tony! - le habló con lágrimas en los ojos, tomó el reactor libre de Extremis y con sus dedos introdujo el cable en el cuerpo de Tony y lo conectó de nuevo por dentro, vio cómo la vida volvía a su hermano y con cuidado introdujo el círculo del reactor y lo aseguró de nuevo con el aro metálico. Con un pequeño rayo que emanó de su mano, rompió las cadenas que sujetaban a Tony y él pudo ponerse de pie frente a ella.

-Vaya, te contrataré en Industrias Stark como... - comenzó a hablar Tony pero se vio interrumpido por el choque del cuerpo de Becky en un abrazo desesperado, pudo escucharla llorar con su cara pegada el pecho de él, manchando de sangre la camiseta gris que vestía él, sin pensarlo la cubrió con sus brazos al nunca antes haberla visto tan afectada - oye, tienes que ser fuerte, debemos terminar con esto, ¿puedes hacerlo?

-Sí, debemos detener a Vlad y la bomba - respondió ella controlando sus emociones. Se separó de él y miró el contenedor, levantó su mano hacia él y comenzó a rodearlo con un resplandor celeste. El líquido incandescente comenzó a estabilizarse.

-¿Qué haces? La fórmula está perdiendo consistencia - dijo Tony al ver que el suero perdía luminosidad y movimiento.

-No será por mucho tiempo, sólo estoy condensando el suero para ganar tiempo. Sólo tú puedes cambiar la fórmula mientras detenemos a Vlad - dijo ella bajando la mano una vez que el Extremis pareció no ser más que aceite hirviendo.

-¿Sabes? Con acciones como esas realmente demuestras que eres hija de nuestro padre - le dijo con su clásico tono engreído, después caminó hacia el reactor que aún estaba conectado y lo puso en el traje sustituyendo al que ahora llevaba en su cuerpo. Finalmente se puso el traje para tomar a Becky en sus brazos y bajar al nivel del suelo.

-Ya no queda más Litio en el otro traje, señor; la contención sólo durará unos minutos - habló Jarvis sobre Vlad.

-Aprovechemos esos minutos - respondió Becky.

La batalla aún no terminaba, el enemigo principal seguía activo pero el resto de los Vengadores habían disminuido la cantidad de hombres con el suero, el resto sería tarea fácil. Por el auricular escucharon que el doctor Banner había guardado a la bestia para ir hacia la cima y destruir la fórmula por completo, Thor y Lady Sif se habían unido a Tony y Becky, mientras Clint, Steve y Natasha continuaban manteniendo el perímetro de la estatua.

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Hola a todas!

He terminado un capítulo muy, muy largo por eso tardé tanto en subir. El final se acerca y tal vez por eso estarán quedando más largos que de costumbre.

Quiero agradecer siempre a todas las personas que leen, votan, comentan, me siguen y me dan ánimos para seguir escribiendo esta historia.

Sin duda me encantará saber lo que opinan de este súper capítulo.

Las quiero a todas y nos vemos muy pronto con algunas sorpresas.