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CAPÍTULO 27

Despertar al lado de la persona que se ama es una meta universal de todo ser humano, incluso para quienes se rehúsan a admitirlo. En el caso del Capitán Rogers no era que lo negara, sino que por mucho tiempo lo creyó perdido. No fue fácil saber que despertó de un largo sueño de setenta años y que había perdido a su chica favorita, Peggy Carter.

Sin embargo, Rebecca Stark había llegado inesperadamente a su vida para remover todos los viejos pensamientos que le impedían intentar volver a ser feliz. Se dio cuenta esa noche en la que ella se entregó a él, aunque en realidad sentía que había sido mutuo. Esa chica que se veía dulcemente frágil por fuera pero que escondía un corazón de fuego le había cambiado la vida, repudiaba que su vida estuviera amenazada constantemente y estaba decidido a terminar con eso.

Esa mañana, al despertar y verla dormir a su lado le llenó el corazón de un calor inmenso. Se contenía mucho de no besarla y abrazarla para no despertarla, pero en un acto reflejo a sus pensamientos la besó en los labios. Entonces ella abrió los ojos.

-Buenos días... - dijo ella con la voz suave y adormilada, se acomodó de lado para quedar más cerca de Steve, que sonreía enternecido por lo que veía.

-Buenos días, cielo...¿dormiste bien? - le preguntó él ahora sintiéndose libre de pasar su mano por la cintura y brazos de ella.

-Como nunca, porque tu estás conmigo - le respondió ella en un tono dulce. Él no pudo evitar acercarse más y besarla, ella levantó su brazo hacia el cuello de él.

-Señorita Stark, ¿está usted coqueteando conmigo? - le dijo él aprisionándola entre su cuerpo y la cama, ella sonrió ampliamente.

-Claro que no, Capitán Rogers, sería incapaz de algo así - respondió ella justo antes de darse cuenta que vestía de nuevo su camisón rojo - espera, ¿tú me vestiste mientras dormía?

-Sí, estuve a punto de no poder dejarte dormir y tuve que hacer algo al respecto - respondió él acercando su nariz para acariciar el cuello de ella. De pronto, sintió que Becky lo empujaba hacia arriba y él se movió rápido pensando que algo pasaba. Sin embargo, quedó enormemente sorprendido al sentir que ella se movía para sentarse sobre él, con una pierna a cada lado y sonriéndole con sensualidad.

-Pues ya desperté, no tienes que preocuparte por eso - dijo Becky acercándose para besarlo con toda la pasión que había en ella, él la encerró en sus fuertes brazos mientras ella se apoyaba en sus rodillas para quedar más cerca de él.

Steve no podía controlarse, amaba a esa chica de todas las formas posibles. Pasó sus manos por el cuerpo de ella levantando de nuevo el camisón hasta quitárselo y quedó de nuevo vulnerable en sus brazos. Becky lo abrazaba por el cuello mientras seguía besándolo, cuando supo que Steve se había liberado, ella volvió a sentarse en él mientras lo sentía dentro de ella cada vez más profundamente.

-Oh, Capitán América - le dijo ella en un suspiro mientras la boca de él formaba una O al verla tomar el control. Steve la aferró en sus brazos y de un giro quedó de nuevo sobre ella y juntos volver a amarse de una forma aún más intensa.

Steve sabía que Becky había detonado algo en él y muy a su pesar tuvieron que levantarse de la cama pues había que volver a su realidad en el helicarrier. Becky se duchó mientras Steve establecía de nuevo la comunicación con JARVIS, quien le notificó que el peligro había pasado. Después él fue quien tomó un baño mientras ella preparaba un desayuno ligero. Después de que ambos comieron y limpiaron de nuevo el departamento, salieron del edificio rumbo al helipuerto donde el pequeño quinjet los esperaba.

Esta vez fue Steve quien piloteó la nave mientras JARVIS daba a Becky los pormenores de lo que había sucedido en el helicarrier durante su ausencia. La situación con Vlad no había pasado a mayores y simplemente se estaba burlando por cámara de la trampa que les había tendido a los Vengadores, quienes afortunadamente habían resultado ilesos. Todos se encontraban en el helicarrier cuando Steve y Becky llegaron.

Ambos avanzaban apresuradamente hacia la sala de operaciones en donde se encontrarían con el director Fury y la agente Hill. Ahí confirmaron que no había peligro con el rumano por lo que poco después fueron a reunirse con sus amigos en el gimnasio de la nave en compañía del director. Tony y Bruce estaban probando nuevos dispositivos mientras que Natasha y Clint hacían ejercicio. Thor y Sif seguramente seguían vigilando al rumano.

-Cielos, Fury, ¿el Capi está bien? - preguntó Tony al director. Steve frunció el ceño y Becky se mantuvo callada.

-¿Por qué no habría de estarlo, Stark? - respondió el director.

-Deberías sentirte responsable, lo enviaste a él sabiendo el riesgo de que deje de ser virgen encerrándolo con mi hermana... aunque ya le había dicho que prefería que eso no sucediera - cuando Tony respondió, los ojos de Becky se abrieron aún más y Steve lo miró desafiándolo.

-Tony... no hagas esto, por favor - le pidió Becky tratando de sonar tranquila.

-No haré nada, hermanita...si me dices que el Capi no te ha tocado - le dijo él con un tono más serio, Becky esperaba que de un momento a otro comenzara a reír o decir algo gracioso, pero eso no llegó.

-Deberías ocuparte sólo de tus asuntos, Tony... - respondió Steve dando un paso hacia adelante y dispuesto a enfrentar al creador de Iron Man.

-Ella es mi asunto, Rogers - respondió Tony señalando a Becky, ella comenzó a preocuparse de lo que estuviera por suceder. El resto de los presentes se mantenían cautelosos.

-¿Tu asunto? Creí que era tu hermana - habló ella ofendida por el comentario de su hermano, Tony torció una sonrisa sarcástica.

-Sabes, Rebecca creí que eras más lista, pero supongo que el exceso de Litio dañó tu cerebro...y tú, Rogers, fui muy claro al decirte que no te quería cerca de mi hermana - se acercó Tony al capitán de forma amenazante.

-Tony, basta... - levantó la voz Becky dándose cuenta que todo estaba a punto de salirse de control, pero él no la escuchó y estiró la mano hacia un lado para llamar a una parte de su armadura y apuntarle a Steve.

-Hey, Stark...cálmate, amigo, no te... - llegó Clint para tomarlo del brazo que no llevaba armadura pero fue hecho a un lado súbitamente por el resto del traje de Iron Man.

-¿Eso es lo que quieres? No voy a renunciar a ella, Stark - dijo Steve una vez más tratando de hacerlo comprender, empujó suavemente a Becky hacia donde estaba el doctor Banner y tomó su escudo para la inminente pelea con su compañero de batallas.

-Muy mala respuesta, Rogers... - respondió Tony para después disparar su arma contra el escudo del Capitán, la onda expansiva que se liberó empujó a los demás hacia las orillas del lugar donde se encontraban.

-¡Tony! - volvió a gritarle Becky, desesperada desconectó el brazalete que llevaba en la muñeca sin darse cuenta, dando vía libre de nuevo al Extremis.

Cuando Tony volvió a descargar la energía del guante hacia Steve, una especie de escudo protector de color celeste la desvió de nuevo hacia Tony tomándolo desprevenido. Steve volteó de inmediato al ver de quién se trataba y bajó su escudo; en ese momento Tony aprovechó y le envió otra descarga al capitán, quien esta vez no pudo esquivarla. El impacto lo envió varios metros hacia atrás y lo hizo chocar con una reja de metal.

Becky corrió hacia Steve, Fury y Barton hacia Tony quien encendió los propulsores del traje y se elevó por los aires. Steve estaba bien, sólo le escocía en el pecho la descarga recibida pero de inmediato se puso de pie. Aparte de eso, se encontraban sorprendidos por la forma en que Becky había canalizado su poder sin volverse una maniática.

-Tony, dejemos esto y vamos a hablar... - dijo el capitán.

-No tengo nada qué hablar, ustedes dos son tal para cual...unos fenómenos hechos con sueros, quédatela, Rogers...yo no la necesito - las palabras de Tony hirieron el corazón de Becky, quien se levantó de donde estaba para avanzar corriendo hacia Tony, pero él se elevó por los aires antes y salió de allí sin decir más.

A Becky se le llenaron los ojos de lágrimas, pero no iba a dejar que un berrinche de su sobre protector hermano le arruinara el día. Regresó a donde estaba Steve y lo tomó de la mano, sin decir nada lo jaló suavemente para ir a revisar su estado de salud.

-¿Doctor Banner? ¿Cree que pueda recibirme en su laboratorio más tarde? Supongo que hay cosas qué revisar - le dijo Becky al científico con un semblante tranquilo sobre lo que acababa de suceder con sus habilidades.

-Seguro, ahí te espero - le respondió él de forma comprensiva, sabían que estaba triste por la actitud de Tony, ella asintió y se dio la vuelta nuevamente para llevarse a Steve.

-Ven, vamos a revisar que estés bien...

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Hola, amores!

Aquí el capítulo 27, estamos a unos 3 o 4 capítulos del final de esta primera parte, no me odien por lo que suceda les prometo que la secuela será mejor.

Quiero decirles que comencé a publicar una novela nueva con Chris Evans, el malo ahí es el complicado Tom Hardy con un papel muy problemático. Me encantaría que pasaran por el prólogo, que es lo publicado hasta hoy y me contaran lo que opinan. Se llama Caprichos del Destino.

Muchísimas gracias por leerme, votarme y comentarme, significa muchísimo para mí el saber lo que opinan de esta novela que es 100% para ustedes.

¿Qué opinan de la actitud de Tony? :)

Besos!!


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