Chapter 2: Capitulo 2

Elsa había apartado la mirada del pelirrojo con desprecio, ¿Cómo es que ese idiotaestaba feliz de terminar en Griffyndor? Por lo que Draco Malfoy le contaba, en esa casa estaba la peor escoria del mundo mágico ¿Quién esperaba que Hans terminara en Slytherin? Como si eso pudiera ser posible, él era tan inferior, su título poco valor tenia al lado del suyo; tenía bastante suerte de haber terminado en Slytherin, donde se encontraban los hijos de las familias más ricas e importantes del mundo mágico, tan importantes como lo era ella.

— ¿En qué piensas, Elsa? -le preguntó Draco, dándole una mordida a una manzana verde- deberías comer algo, no es tan buenocomo lo que suelo comer en mi casa, pero se deja comer…

— ¿En qué pienso? En lo patético que se ve ese pelirrojo de allí -le dijo apuntando con la mirada a Hans, quien comía una tostada- Solo imagina que alguien como él quedara en nuestra casa, seriamos la burla de todo Hogwarts

Draco rio ante sus palabras esa chica, le caía bastante bien, no importaba que fuera nacida de muggles, hasta entre ellos había clase. Elsa era guapa, elegante, fría y arrogante, cualidades que él y su familia apreciaban. Además, seria la futura reina; en definitiva, él solo tendría de amigos a las mejores personas. Era una pena lo de Hermione Granger, sangre sucia y además Griffyndor.

— Ya veo, no te agrada ese chico -el rubio miró disimuladamente al pelirrojo, quien hablaba con Harry Potter, ambos reían- ¿Quién es? Ese color de cabello es muy parecido a un Weasley -dijo con asco, mirando sin apartar sus ojos de la mesa de Griffyndor.

— Hans Westergaard -escupió con desprecio su nombre- Decimotercer príncipe de las Islas del sur, no es nadie jamás, será rey, es bastante patético… Ha estado enamorado de mi desde hace mucho tiempo, me desagrada.

— Vaya, tenemos a otro miembro de la realeza, no sería mala idea invitarlo a unirse a nuestro grupo, después de todo ¿Qué importancia tiene que sea el decimotercero aún a si tiene un título?

Elsa miró con desagrado a Draco ¿Acaso estaba pensando hablarle o lo que era peor, unirlo a sus amigos? Joder quería estar lo más lejos de él y ahora Malfoy pensaba invitarlo a que se uniera a ellos. Volteó su mirada a la mesa de los leones, en donde Hans hablaba con el otro pelirrojo

Notaba como Hans hablaba y reía con Harry Potter, ambos chicos se hicieron buenos amigos antes de ir a Hogwarts, leyó todo sobre la escuela y el día que fue con sus padres a comprar sus libros había escuchado que el joven Potter comenzaría sus estudios ese mismo año. "El niño que Vivió " como era apodado, era bastante famoso por haber sobrevivido al señor Oscuro.

También había leído que ese mismo mago quedo seleccionado en su Casa.

Elsa no había apartado la mirada de la mesa de los leones, había algo en Westergaard que llamó su atención

Cuando termino la cena, Draco Malfoy el tomó de la mano para salir atrás de los Griffyndor, quienes habían salido del comedor; tenían treinta minutos libres para conocer el castillo antes de ir a sus dormitorios.

— ¡Vamos Elsa, es nuestra oportunidad! -Malfoy la tomó de la mano, jalándola- solo tenemos treinta minutos antes que nuestro prefecto nos lleve a la sala común…

Al salir del comedor la chica se soltó de mala gana, acomodando su túnica.

— Suéltame Malfoy, no sé por qué quieres hacerte amigo de ese par ¿Qué pasó con todo eso de que los Griffyndor son inferiores? -Le preguntó cruzándose de brazos con una mueca de desagrado- Bueno de Potter lo entiendo, según veo es bastante popular, pero ¿Westergaard…?

— ¿Realmente no lo entiendes Elsa? Potter es realmente famoso, mi padre me pidió que me hiciera su amigo y el otro chico es un príncipe, tiene un título importante… Para nuestra desgracia son contadas las familias importantes en nuestro mundo, un ejemplo los Weasley, son Sangre limpia pero traidores y pobretones, jamás debemos mezclarnos con ellos.

Elsa escuchaba cada palabra del muchacho de cabello rubio y se mordió la lengua, luego de pensarlo debía darle la razón, odiaba admitirlo, pero Hans después de todo era un príncipe y el tan Potter famoso; luego de unos minutos asintió con la cabeza.

— Muy bien Malfoy, tú ganas, pero no me pidas que sea amable porque no lo seré -le dijo caminando a su lado por los amplios pasillos de la escuela.

Estaba impresionada con todo lo que había en ese castillo, desde pinturas que hablabanal fantasma de su casa, el barón sanguinario y a Peeves, un poltergeist bastante desagradable en su opinión, cuando llegara a su habitación le mandaría una carta a Anna contándole sobre todo lo que había visto desde que llego, su hermana estaría encantada de conocer Hogwarts.

Luego de la cena, Hans junto a Harry, Hermione y Ron habían decidido caminar por los patios de la escuela, Dumbledore les había dado treinta minutos libres para conocer la escuela con la condición se no adentrarse en el bosque prohibido. Decidieron sentarse en una de las bancas, la noche era bastante agradable, el cielo estaba adornado por las estrellas, algo poco común en Inglaterra dado a su clima lluvioso.

— ¿Qué les pareció la cena? –preguntó Ron dejándose, caer en el pasto satisfecho- Después de la comida de mi madre es lo más rico que he probado…

Hermione rio al ver al chico recostado en el pasto con los brazos detrás de la cabeza.

— Estuvo delicioso, pero debes aprender algunos modales a la hora de comer Ronald -lo regaño la castaña para mirara Hans, quien solo miraba a Weasley sonriendo -Por cierto, Hans, eres un verdadero Hatstall…

Los tres chicos voltearon a ver a la castaña, quien mantenía la mirada de sobre el pelirrojo.

— ¿No sabes lo que es un Hatstall? -los cuestionó con incredulidad la castaña.

Los magos negaron mirándose entre sí, pues jamás habían escuchado ese término antes, ni siquiera Ron, que era un sangre limpia.

— Un Hatstall es un mago o bruja con el que elSombrero Seleccionador tardamás de cinco minutos enelegira quécasapertenecerá…—explicó mirando a cada uno de ellos, posando su mirada en el príncipe — en tu caso, Hans, el sombrero se tomó 6 minutos para colocarte en Griffyndor.

Westergaard llevó su pulgar a su barbilla, recordando las palabras del sombrero seleccionador, algunas cosas que dijo lo confundieron bastante.

— ¿Saben? Cuándo el sombrero estaba deliberando en que casa debía colocarme dijo algo que me confundió bastante -Sintió la mirada de sus amigos sobre él, por lo cual prosiguió -dijo que tenía actitudes tanto de Slytherin como de Griffyndor, y que por herencia debía terminar en Slytherin… Realmente no entendí eso último, me dejo confundido.

— No deberías pensar tanto en eso Hans -Ron le dio palmaditas amistosas en su espalda- si el Sombrero te colocó en Griffyndor es que eres un digno miembro de nuestra casa.

Harry lo animó.

— Ron tiene razón, como te dije en el gran comedor no importaba en que casa quedaras, seguiríamos siendo amigos...

Los cuatro estaban tan entretenidos que no se dieron cuenta de que un par de Slytherin se les acercaron hasta que escucharon la voz de uno de ellos.

— Nos volvemos a encontrar, Harry Potter -el rubio lo saludó para luego dirigir su mirada al príncipe- También escuché sobre el príncipe Hans Westergaard, este año tenemos dos miembros de la realeza.

Hans abrió los ojos sorprendido ¿Acaso Elsa habló de él con ese chico rubio?

Su mirada se posó sobre ella, se veía hermosa con su túnica verde y plata, la forma en que llevaba el cabello, ese aire de altanería a la hora de caminar, como si todos fueran inferiores a ella; cuando la chica sintió la mirada sobre ella frunció el ceño cruzando los brazos.

— Me presento, mi nombre es Draco Malfoy -se presentó con cierta arrogancia y prepotencia, lo que le recordó a sus hermanos.

Una pequeña risa escapó de Ron cuando escuchó el nombre del chico, a lo cual el platinado lo volteó a ver con desagrado.

— ¿Mi nombre te hace gracia? No necesito preguntarte el tuyo: pelirrojo y túnica de segunda mano. ¡debes de ser un Weasley! -escupió con desagrado.

Wesley bajó la mirada apenado por las palabras del rubio, tanto Harry como Hans se enojaron por la forma en que Malfoy había humillado a su amigo. Ese chico les desagradaba, tampoco habían pasado por alto la forma en que había mirado a Hermione con asco.

— Potter, Westergaard, como se darán cuenta algunas familias son mejores que otras, nosotros podemos ayudarles —el rubio le extendió la mano esperando que ambos la tomaran.

Ambos se miraron directamente a los ojos, Harry lo miró con cierto desagrado, le recordaba a su primo Dursley, un matón que se la vivía molestando a otros y para Hans no era tan diferente, esa actitud le recordaba a sus hermanos mayores, quienes no perdían la oportunidad de torturarlo; sobre todo su Hermano Rudi, quien lo golpeaba y encerraba en la torre del castillo.

— Gracias, pero sabemos quién es el equivocado -Harry había rechazado su amistad, lo que enojó a Malfoy, quien volteo a ver al pelirrojo…

— ¿Qué dices Westergaard? ¿De verdad quieres perder el tiempo siendo amigo del pobretón Weasley y Potter, cuando puedes estar con nosotros? Nosotros pertenecemos a las mejores familias…

— Gracias, pero no me interesa ser amigo de alguien como tú -Hans le mantuvo la mirada- si nos disculpas, tenemos que regresar a nuestro dormitorio…

Elsa abrió los ojos con sorpresa, pensó que Hans aceptaría, después de todo el gustaba de ella, pero los había rechazado por quedarse con ellos. Volteó a ver a Malfoy, quien estaba igual que ella, se sentían tan humillados… Ese par había rechazado su amistad, prefiriendo a ese pobretón.

La princesa sintió la ira recorrer por sus venas al ver como Hans se alejaba hablando de lo más cómodo con esa chica ¿Acaso Westergaard había rechazado unirse a ellos por esa chica? Ni siquiera les llegaba a las suelas de los zapatos, era tan simple y desaliñada, no era nada comparada a ella.

Cuando Malfoy vio a Hermione hablar tan cómoda con Hans, sintió la vena de su frente asomarse del coraje, ¿Cómo osaba ese sujeto hablarle con tanta familiaridad a Granger? ¡Diablos! ¿Qué pasaba con él? No podía estar celoso, apenas conocía a esa niña, además que no estaba a su altura; era una sangre sucia, alguien que no merecía su atención.

— ¡Espera! -Elsa lo llamó, conteniendo su enojo- ¡¿Cómo te atreves a rechazarnos?! -miró de arriba a abajo aHermione con una mueca de asco- Por estas personas no eres más que un perdedor Westergaard, a lo único que puedes aspirar es a tener amigos tan insignificantes como estos...

Hans apretó los puños, estaba furioso, una cosa es que se metiera con él y otra muy distinta que menospreciara a sus amigos, las únicas personas después de Anna que se habían acercado a él, ofreciéndole su amistad a Hans. No le pasó por alto la manera tan despectiva con la que había mirado a Hermione.

— Escúchame bien, estoy cansado de tus estúpidas humillaciones ¿Lo único que tienes para presumir es tu jodido título? Porque fuera de eso eres una mierda de persona, siento lastima por los habitantes de Arendelle tendrán a una reina tan estúpida y mimada…

Hans escupía cada palabra con desprecio, lo que dejó helada a la futura reina. El pelirrojo jamás le había hablado de esa manera, de hecho, cada que ella lo molestaba junto a sus hermanos, él se quedaba callado, soportando el dolor de su poder y ahora la había insultado, algo en Hans Westergaard había cambiado y eso le daba curiosidad.

— No te hagas el digno conmigo Westergaard, no creas que por quedar en esa jodida casa eres valiente… Mi título me pone muy por encima de ti, te lo he dicho muchas veces, no eres más que un error para tu familia, tienes a doce hermanos que están por sobre ti… No vales nada tu tonto título de príncipe no tiene ninguna clase de valor...

— ¡Basta! -habló Potter, caminando para quedar a un lado de Hans- no sé quién seas y tampoco me importa, pero no tienes ningún derecho de hablarle a Hans de esa manera…

Hermione sintió pena al ver el rostro abatido del pelirrojo.

Hans se había portado bien con ella, y no pensaba tolerar que un par de tontos lo humillaran. Así que fulminó a Draco con la mirada, realmente se arrepentía de haber creído que podían ser amigos.

— Harry tiene razón, ninguno de ustedes tiene el derecho de molestarlo -la castaña posó su mirada sobre la futura Reina- No te conozco, pero me doy la idea de que clase de persona eres,y realmente la que no vale la pena eres tú.

Malfoy se puso a lado de Elsa, no pensaba permitir que ese grupo de leones los humillaran; ellos eran Slytherin y no se dejarían de los asquerosos Griffyndor, esos malditos come flores no estaban a su altura.

— Mide tus palabras Granger -amenazó sin apartar sus ojos grises de ella- no eres nada comparado con Elsa, tan solo mírate, dientes de castor y cabello de arbusto… -el platinado la miro de arriba a abajo con desprecio- Ustedes los Griffyndor son tan patéticos.

Al escuchar como Malfoy insultaba a Hermione, Hans no lo pensó dos veces y lo tomó de su túnica.

— ¡Jamás vuelvas a insultar a Hermione en nuestra presencia! ¡¿Te ha quedado claro, bastardo?! -los ojos verdes del pelirrojo ardían con furia- Hermione no necesita parecerse a Elsa para ser linda, ella es especia, ¡Así que déjanos tranquilos!

— Hans tiene razón, Hermione es linda tal cual es… -Ron se acercó a la castaña para colocar su mano en su hombro- No necesita parecerse a la princesita mimada, ella es especial tal y como es…

— ¡Así que será mejor que se larguen! No queremos problemas, pero tampoco nos dejaremos de ustedes dos -Harry había quedado a un lado del pelirrojo, que aún mantenía sujetolos miraba con desdén -Será mejor que nos vayamos Hans, no valen la pena…

El pelirrojo soltó a Malfoy para darse la vuelta y caminar de regreso al castillo, cuando escuchó la voz de Elsa.

— Realmente Westergaard, eres patético -soltó con burla- ¿Sabes Malfoy? -miró al mencionado con una sonrisa arrogante- ese sujeto se muere por mí, lleva enamorado bastante tiempo, siempre intentando llamar mi atención… ¡Vamos Westergaard! niégame que no te gusto, así que hacerte el digno no va contigo…

Los de Griffyndor abrieron la boca con sorpresa, Hans escuchó la risa burlona de Malfoy, sabía que esa endemoniada rubia se estaba burlando de él.

Quería humillarlo, pero ya no se lo permitiría, ella no era mejor que él.

Nadie más lo volvería a humillar.

— ¿Quieres que acepte que estoy enamorado de ti? -su mirada se posó en la rubia platinada- pues sí, estoy enamorado de ti… Pero toma enserio mis palabras, pienso olvidarte, no permitiré que me sigas humillando, no eres mejor que yo, nada más eres una tonta niña mimada y prepotente que guarda sus malditas inseguridades tratando como mierda a los demás, pero entérate princesa, nadie tiene la culpa de que seas un fenómeno.

Jamás unas simples palabras la habían lastimado como las dichas por el pelirrojo, quien mantenía su mirada sobre ella, sintió como las lágrimas amenazaban por salir, lágrimas de enojo y el más profundo deprecio.

— Sobre estar enamorado de ti, -escupió con desdén- te juro que te olvidaré, nunca más volverás a humillarme ¿Le quedó claro, su alteza?

Elsa no supo que fue, pero sintió su corazón encogerse, vieron alejarse a los leones y la chica apretó sus puños, conteniendo las ganas de congelarlo. Hans Westergaard se las pagaría, se vengaría de él, pagaría su insolencia.

— Tranquila Elsa, esos asquerosos leones nos la pagarán, nos vengaremos de cada uno de ellos –el platinado intento tranquilizarla- somos serpientes, solo hay que esperar el momento indicado.

— Te juro Malfoy, que Westergaard y su grupo de patéticos amigos me las pagara¡Lo juro! –la voz de la chica estaba lleno de odio sin apartar la mirada de donde se habían ido.

Ambos rubios regresaron a su sala común. La sala común era una sala tipo mazmorra, con lámparas y sillas de color verdoso. Esta mazmorra se extendía en parte bajo ellago, haciendo que entrara una luz en la habitación de un tono verdoso. La sala tenía un montón de sillones abotonados de color negro y verde oscuro, sofás de cuero, cráneos, y armarios de madera oscura. Una de las mesas de madera tenía unajedrez mágico. Las paredes estaban adornadas con tapices que relataban las aventuras demagos y brujasmedievales. La sala era de un ambiente bastante grande.

Al llegar la prefecta los esperaba en la puerta

— Hace diez minutos pasaron la media hora que el profesor Dumbledore les dio, no deberían estar por los pasillos, si algunos de los otros prefectos los ve nos quitaran puntos… No le den motivos al imbécil de Percy Weasley de reprenderlos, el muy idiota se siente la gran cosa solo por ser prefecto, alguien debería bajarle los humos.

Elsa y Draco se voltearon a ver riendo, en definitiva, esa chica les caía bien, tenía el mismo desprecio por los leones que ellos. Gemma Farley pertenecía a una importante familia de sangre pura.

Draco la había visto algunas veces en una que otra reunión con amigos de sus padres, la chica era castaña de ojos verdes, delgada y con buenas curvas.

— Gemma, te presento a la princesa Elsa, futura reina de Arendelle -el chico las presentó- es nacida de muggles pero es una digna miembro de Slytherin.

La chica la miró de arriba a abajo para luego sonreírle.

— Vaya, vaya… Así que eres una princesa ¡Eso es maravilloso! En nuestra casa solo está lo mejor, mucho gusto Princesa Elsa, en Slytherin lograrás todo lo que te propongas… Solamente hay un par de reglas que debes seguir, nunca dejar que esos estúpidos de Griffyndor nos superen y jamás traer a nuestra sala común a algún alumno de otra casa… Por cierto, la contraseña es -miró a ambos lados para acercarse y susurrarle- "sangre pura"… Bueno entremos.

— No te preocupes, jamás traeríamos a alguien que no sea un Slytherin y sobre los leones créeme que no dejaré que ninguno me supere -escupió Elsa con desprecio, entrando a la sala común.

Al entrar varios chicos los esperaban, al verlos se acercaron a ellos. Draco los presentó, todos eran hijos de familias importantes; Elsa estaba acostumbrada a tener su propio dormitorio, pero en Hogwarts tendría que compartir cuarto con otras chicas. Sus compañeras serian Pansy Parkinson, Astoria y DaphneGreengrass, las cuatro desempacaron sus pertenecías.

— ¡Esto es tan cansado! -habló la platinada, dejándose caer en la cama- Me refiero a que en el palacio tengo a alguien que haga esto por mí.

Las hermanas Greengrass rieron tomando asiento en sus propias camas.

— Te entendemos, en casa los que se encargan de esto son los Elfos. Aquí nadie lo hará por nosotros, ¡Por cierto! Me presento, mi nombre es Astoria, un gusto princesa -se presentó sonriéndole levemente.

— Mi nombre es Daphne, un miembro de la realeza muglee no todos los días se ve… Esa chica que ves allí en silencio es Pansy Parkinson -apuntó a la pelinegra con la vista- Está enojada por que Weasley le tiro su equipaje por accidente…

Escuchó a la azabache gruñir sacando algunas cosas de su equipaje.

— ¡Estúpida comadreja! Me rompió uno de mis pares de zapatos favoritos…

Daphne se puso de pie para darle unas palmaditas en la espalda.

— Vamos Pan, no te enojes, no es para tanto. Sabes que puedes comprarte diez pares más de zapatos.

— Por cierto, ¿Vieron a Potter? Dios es guapísimo -suspiró Astoria, ganándose la mirada de su hermana y sus compañeras- ¿Qué? ¿Me van a decir que es feo? Es un chico bastante lindo, con ese cabello rebelde despeinado y sus lentes es muy guapo.

Su hermana la miro escandalizada ¿Acaso a Astoria le gustaba Potter?

¡Es que se había vuelto loca! Potter, el chico que había quedado seleccionado para Griffyndor, un león. Seria repudiada por su propia casa; los Slytherin y los Griffyndor jamás se mezclaban. Joder, eso iba contra Salazar.

Astoria sintió la mirada de sus compañeras sobre ella.

— ¿Qué? Por Dios chicas, no pongan esa cara, solo dije la verdad. Potter es guapo, por cierto, supe que el amigo pelirrojo de Potter, ese que parece un Weasley es un príncipe, es bastante guapo ¿No creen? Aunque prefiero a Potter…

— No digas estupideces Astoria -Pansyacomodó sus vestidos en su closet- Son Griffyndor, nosotras no vamos a mezclarnos con personas de tan baja calaña -la pelinegra dirigió su mirada a Daphne- ¿Estás segura que es tu hermana? No vaya a salir una traidora a la sangre, sabes que si alguien llega a escucharte serás repudiada.

La castaña se encogió de brazos.

— Me da lo mismo, pienso que esa rivalidad de casas es estú fin, algún día veré a alguna de ustedes con un león y me reiré en su cara.

Sus compañeras se sintieron ofendidas, pero no dijeron nada, cada una continuó desempacando, ya era bastante tarde y su primera clase sería pociones con Severus Snape, no querían llegar tarde.

Los Griffyndor caminaban de prisa por los pasillos, cuando al doblar se toparon con Percy, quien los estaba buscando. Percy dijo la contraseña, "Caput draconis" y entraron.

Al llegar se encontraron a Fred y George, quienes al verlos se acercaron bromeando con ellos, Hans rio ante sus bromas, eran bastante divertidos. En definitiva, le agradaban esos chicos. Compartiría habitación con Harry y Ron; esta era una cuarta parte de la suya en el castillo, pero no le importaba, se sentía contento de estar en Hogwarts.

Las clases habían comenzado. Su primera clase fue pociones, en la cual le fue fatal. Snape no había parado de bajarles puntos. Harry y Hanssospechaban que tenía algo en contra de ellos, además que no disimulaba su preferencia por Slytherin. Tanto Malfoy como Elsa no habían dejado pasar la oportunidad de burlarse de ellos cuando le bajaban puntos.

— Te lo digo Hermione, Snape nos odia ¿Te fijaste como nos miraba? -habló Harry caminando rumbo a los jardines, en donde tendrían su clase de vuelo.

— Harry tiene razón, esa mirada de desagrado cuando me pregunto que se obtiene por mezclar no sé qué cosa… -Hans caminaba a un lado de Ron acomodando su túnica- Fue de profundo desprecio y para terminarla de rematar, las burlas de Malfoy y la reina de las nieves ¡Joder! Me desagradan -puso una mueca de asco para rodear los hombros de la castaña con sus brazos- ¿Sabes que los muy idiotas se proclamaron a sí mismos el príncipe y la princesa de Slytherin?

Tanto Ron como Harry estallaron en una sonora carcajada.

— Entonces ustedes dos serán la princesa y príncipe de Griffyndor -Bromeo Ron aguantando la risa.

Ambos lo miraron de mala gana, lo que hizo al pelirrojo reír.

— Vamos chicos, solo bromeo… ¿Pero no crees que el apodo les queda, Harry?

El pelinegro asintió llegando al patio delantero, en donde tendrían su clase. Las cosas iban bien, hasta que Neville tuvo un accidente. Malfoy se había burlado de él, tomando la esfera que su abuela le había regalado. Tanto Harry como Hans intentaron quitársela, lo habían logrado, peroMinerva los había visto pidiendo que la siguieran.

Ambos chicos caminaban con la mirada en el piso, estaban en problemas, pero no se arrepentían por lo que hicieron. Malfoy se merecía una lección para que dejaran de molestar a los demás.

Minerva se detuvo en una de las puertas donde el profesor Flitwick daba su clase de encantamientos.

— Profesor Flitwick, ¿Podría permitir queOliver Wood saliera un momento por favor? -pidió la subdirectora con amabilidad.

— Claro Minerva, joven Wood puede salir -dijo para continuar sus clases.

Dicho esto, se alejaron de la sala de encantamientos.

Con los tres chicos detrás de ella, cuando estuvieron a una distancia prudente la subdirectora habló.

— Según tengo entendido este año fuiste seleccionado capitán del equipo de quidditch de Griffyndor, también escuché que te falta un buscador y un cazador, creo que los jóvenes Potter y Westergaard podrían hacerlo, hace unos minutos los vi en sus escobas y son bastante buenos volando.

Oliver miro a ambos chicos, para luego sonreírles.

— Claro profesora, si usted piensa que son buenos entonces no veo porque no puedan unirse al equipo -dirigió su mirada a los chicos- Los veré a las cuatro de la tarde para poder ver en qué posición los colocaré.

Ambos asintieron para regresar a la clase de vuelo, realmente se encontraban muy felices, por lo poco que conocían el quidditch era el deporte más popular y ellos eran los primeros Gruffyndor de primer año en 100 años en pertenecer al equipo de su casa.

Los días pasaban y su primer juego fue contra Slytherin, Harry como Cazador se había enterado por Hermione que su padre jugó la misma posición, James Potter había sido un cazador y el mejor que había tenido su casa; Harry era bastante bueno, había hecho varias anotaciones Hans, por su parte, era un buscador.

Su trabajo era atrapar la snitchdorada, lo cual no era tarea fácil, pero como Oliver le había dicho, de lo único que se tenía que preocupar era de atrapar la snitch,lo cual había logrado, dándole la victoria a Griffyndor.

Los meses fueron pasando, había tenido varios altercados con Elsa, que en una ocasión lo había atacado con su poder, lo que causó que terminara en la enfermería.

Además, el profesor Quirinus Quirrell intentó robar la piedra Filosofal para revivir a Lord Voldemort, aquel nombre le era tan desagradable por alguna razón que ni él se lo podía explicar; sentía una especie de lazo con ese Mago oscuro, también se había enterado por Harry que él fue el culpable de la muerte de sus padres.

Dios, ese día estuvo a punto de morir; estuvieron varios días inconscientes.

Por fin el curso había terminado, así que le prometió a cada uno de sus amigos que les escribiría; se despidió de ellos para regresar al castillo, donde lo esperaban sus hermanos de seguro para torturarlo.

En Arendelle, Elsa había regresado al castillo, donde sus padres junto a Anna y algunos empleados la esperaban. Ella había invitado a Draco a pasar parte del verano en su palacio, el cual había aceptado ya que sus padres estarían en Francia, visitando a algunos parientes y no le apetecía ir.

— Alteza un gusto tenerla de nuevo con nosotros -reverenciaron para marcharse a cumplir sus obligaciones.

La reina Iduna y el rey Agnarr abrazaron a su hija mayor, la habían extrañado tanto, estaban realmente felices de tenerla de nuevo con ellos. Elsa les presento a Draco, el cual fue del agrado de sus padres, mas no de Anna; había algo en el chico que no le gustaba.

— Elsa, hija que bueno que estés aquí, hoy saldremos a las islas del sur, es el cumpleaños del príncipe Hans…

Elsa sonrió de lado mirando Malfoy, era la ocasión perfecta para vengarse del estúpido pelirrojo. Ella era una astuta serpiente y había encontrado la mejor oportunidad de hacerlo. Hans Westergaard le pagaría todas las que le debía; miró a Draco y una sonrisa arrogante se dibujó en sus labios.

— Papi, no quiero ir… -abrazo a su padre llorando- No quiero ver a Hans, padre, desde que llegue a Hogwarts no ha hecho más que meterse conmigo llamándome "fenómeno" o "chica de las nieves", no me obligues a ir papi…

El llanto de la princesa era cada vez más fuerte, Anna no le creía, ella era testigo de cómo Elsa y los hermanos de Hans lo habían molestado y el jamás se había defendido, algo no estaba bien en lo que su hermana decía.

— Alteza -habló Malfoy con educación -fui testigo de todo lo que ese sujeto le hizo a su hija, fui yo quien la defendió, Hans Westergaard junto a su grupo de amigos no perdían oportunidad para molestarnos…

El rey intentaba consolar a su hija, quien no paraba de llorar, estaba realmente enojado, ¿Cómo ese pequeño bastardo osaba a meterse de esa manera con su Hija?, su princesa, la futura Reina de Arendelle. Lo haría pagar tal humillación, pidió a sus guardias que tuvieran listo todo, saldrían enseguida a Las islas del sur.

Iduna, por su parte, se negaba a creer que Hans hubiera hecho todo lo que Elsa decía.

Ella lo había tratado un poco más que su esposo por la amistad que tenía con Anna, y en lo poco que lo había tratado se había dado cuenta de que el príncipe era un buen chico.

No pasó mucho para que todo estuviera listo para partir, se encontraban en el barco cuando Anna tomó del brazo a su hermana, la conocía lo suficiente para saber el desprecio que le tenía a su amigo pelirrojo.

— Sé que mientes Elsa, conozco a Hans y sé que no se metería contigo, ¡Es todo lo contrario! Eres tú quien se la vive metiéndose con el -la encaró la pequeña princesa- Junto con tu amigo sé que esto es una vil mentira, ¿Qué esperas que lehagan a Hans?

Elsa se soltó del agarre de su hermana, la adoraba, pero odiaba que se pusiera del lado de ese sujeto, odiaba que Anna la retara solo por defenderlo.

— Aunque no lo creas, hermanita -escupió con sarcasmo- todo lo que digo es verdad, Malfoy puede confirmarlo, así que deja de defenderlo.

Anna no le creía, conocía perfectamente a su hermana, pero sabía que sería inútil discutir con ella, por lo cual se dio la vuelta alejándose de ellos.

En las islas del Sur, Hans caminaba por uno de los pasillos que conectaba con el salón del trono, al llegar a la enorme puerta pidió permiso para entrar haciendo una reverencia.

— Acércate, Hans -pidió el rey sentado en su trono- ¿Qué necesitas?

— Padre -saludó el pelirrojo inclinando la cabeza- mañana será mi cumpleaños, por lo que quería pedirle permiso para invitar a algunos amigos.

El rey pareció pensarlo, no era mala idea, después de todo gracias a Dumbledore su reino estaba a salvo, no sería mala idea conocer a otros magos, lo podría usar a su favor.

— Puedes invitarlos, incluso a Dumbledore, ahora Hans déjame solo tengo otros asuntos…

El pelirrojo asintió para ir a su habitación y mandarles cartas a sus amigos, incluso invitaría a Hagrid, a Neville, a los gemelos Weasley y a la profesora McGonagall; no paso mucho para que confirmaran su asistencia, todos menos Neville quien se encontraba de vacaciones con su abuela, pero le mando un bonito porta retratos mágico como regalo, deseándole un feliz cumpleaños.

Al día siguiente, Hans se la paso en su habitación, leyendo uno de los libros favoritos sobre "Animales fantásticos y donde encontrarlos" del Magizoólogo, Newt Scamander. Era un libro bastante interesante, admiraba a Newt, amaba su libro, se había propuesto algún día conocerlo en persona.

Y también, algún día viajaría por todo el mundo, conociendo las mismas criaturas que Scamandet había conocido durante su viaje.

El barco proveniente de Arendelle por fin arribó a los estaba furioso, así que pidió hablar con el rey William, Elsa junto a Draco se quedaron en los jardines hablando con los hermanos de Hans. La platinada los había presentado.

— No sabes lo mucho que te extrañé, Elsa -Rudi le dio un beso en la mejilla- ni siquiera me mandaste una carta.

— No tuve tiempo -respondió cortante- te he dicho que no te tomes esas libertades conmigo.

Agnarr le platicó al rey William lo que había pasado entre Elsa y Hans, por lo cual pidió que el príncipe fuera castigado por su osadía de meterse con su princesa, a lo cual el rey sureño estuvo de acuerdo, mandando a traer a Hans junto a sus otros hijos, al mismo tiempo que Elsa y Anna, obligando a Hans a disculparse.

No pasó mucho para que Hans entrara, notando como todos lo miraban. Se sorprendió al ver a Elsa y Malfoy mirándolo con burla; junto a sus hermanos notó la mirada de Anna entre tristeza y pena, así como la de los reyes de Arendelle, Agnarr lo miraba con Ira mientras Iduna con pena, incluso lástima, su padre con indignación y a su madre ni siquiera lo miraba.

— ¿Pasa algo, Padre? -cuestionó acercándose al trono- ¿Me necesitas para algún asunto? Me encontraba en mi habitación leyendo…

— ¡Cállate, Hans! No te hagas el inocente -escupió el rey, levantándose de su trono para caminar a donde el joven estaba- ¿Cómo te atreves a molestar a la princesa Elsa, poniéndole apodos denigrantes? ¿Te has olvidado que nuestro reino tiene tratos comerciales con Arendelle?

El pelirrojo abrió los ojos con sorpresa, esa condenada princesa le había contado una sarta de mentiras a sus padres junto con Malfoy, su mirada de incredulidad la dirigió a los mencionados notando la mueca de burla.

— Vas a ofrecerle una disculpa a la princesa Elsa ahora mismo -ordenó manteniendo los ojos fijos sobre el pelirrojo.

Hans suspiró, su mirada se encontraba sobre su padre.

— Lo siento, padre, pero no lo haré, no puedo disculparme por algo que no hice -encaró a la platinada– ¡Elsa, di la verdad! Tú eres la que toda la vida se ha metido conmigo, incluso usando tus poderes en Hogwarts, era lo mismo, no perdías la oportunidad de molestarme.

— ¡¿Cómo te atreves a llamar a la princesa mentirosa?! ¡Eres un pequeño bastardo! -Agnarr salió en defensa de su hija.

— ¡No estoy mintiendo! Su Majestad, su hija no es como usted lo piensa, en Hogwarts se la vive molestando a otros alumnos junto con Mafoy.

El rey, harto de la insolencia de su hijo, ordenó a uno de los guardias que trajera un látigo para obligarlo a disculparse, hizo que el mismo hombre le abriera la camisa y lo pusiera de espaldas.

— ¡Discúlpate ahora mismo, Hans! -ordenó, pero el chico se negó, sabía lo que venía, así que cerró los ojos.

Sintió su piel arder bajo el primer latigazo en su espalda, de seguro le había abierto la piel. El chico mantenía los ojos cerrados, mordiéndose el labio cada vez que su padre le exigía que se disculpara, él se negaba, no se humillaría ante ese par, jamás lo haría.

La mueca en el rostro de Elsa se había borrado, ella esperaba otra clase de castigo, quería hacer pagar a Hans por haberla humillado, pero no de esa forma tan cruel. El chico aguantaba los azotes sin quejarse, mantenía sus ojos cerrados mordiendo su labio inferior.

Draco Malfoy comenzó a sentir pena por ese sucio león, hubiera esperado otra clase de castigos, pero no algo tan cruel como lo que estaba viendo. ¡Joder! El jodido Griffyndor soportaba los golpes sin quejarse y sin llorar; volteo su mirada a sus hermanos, quienes parecían disfrutarlo.

— "Que escorias, malditos muggles" pensó con desagrado.

Hans sentía en su piel, como con cada latigazo el dolor aumentaba más que con el anterior, pero no se quejaría, tampoco lloraría, le haría honor a su casa y lo soportaría, él era un Griffyndor y los leones no lloraban, y menos frente a un par de asquerosas serpientes.

Se dejó caer de rodillas en el frío suelo.

Anna no podía parar de llorar, Hans estaba sufriendo y sin pensarlo, tomo el vestido de su madre para que la mirara. La niña pelirroja estaba llorando sin cesar, estaba muy alterada por aquella sangrienta escena.

— ¡Mami, dile que pare por favor! ¡Que dejen de lastimar a Hans! -pidió la pequeña desesperada.

La mujer, observó con tristeza a su hija.

— ¡Agnarr, ya fue suficiente, haz que se detengan! -pidió la reina a su marido, que asintió al ver a su hija en ese estado. Le pidió al rey que se detuviera.

Su alteza le ordenó a Hans marcharse a su habitación, el chico asintió sin mirarlo, acomodándose la camisa. Las heridas le quemaban, pero con paso digno caminó para salir del salón del trono; al pasar a lado de Elsa, el chico la miró con un profundo odio, algo que la princesa jamás había visto en el pelirrojo. Cuando salió, corrió a su habitación, acostándose bocabajo en la cama y dejando salir las lágrimas de dolor y humillación. Se sentía humillado, su cuerpo dolía, no supo cuánto tiempo estuvo así, pero solo quería dejar salir todo su coraje.

— ¡Esto Elsa, fue mucho! ¡Lo que le hiciste a Hans es imperdonable! ¡Espero que ya estés feliz, y que los idiotas de tus amigos lo disfrutaran! Son basura, pero ¿Sabes cuál es tu problema? Todo ese odio que dices sentir por Hans, se trata solamente de tus sentimientos reprimidos, ¡Te gusta! Pero quizá ahora es tarde porque te debe odiar.

— ¡Tú no me conoces, Anna! Jamás me fijaría en Hans, eso nunca pasará -gritó la platinada, intentando contener su poder- No sé cómo puedes ser amiga de ese sujeto, somos tan diferentes...

— Síguete engañando a ti misma, Elsa, pero cuando te des cuenta de las cosas será muy tarde, y prefiero ser amiga de Hans que de esos tarados que siempre andan detrás de ti como perros falderos.

La pelirroja la dejó con la palabra en la boca, quería ir con Hans, consolarlo y disculparse por lo que su hermana le había hecho; pero sabía que no era el mejor momento, Hans necesitaba su espacio para desahogarse, su amigo no merecía el desprecio de Elsa.

Anna se encontraba sentada en una de las bancas del jardín, estaba preocupada por Hans, cuando vio al mismo hombre que el año anterior le había llevado su carta a Hans. Se levantó para ir con él, iba con la misma mujer que le llevó su carta a Elsa; notó también que andaba acompañado de cinco chicos, y por su apariencia, tres de ellos debían de tener la misma edad de Hans, y los otros dos eran muy poco mayores, supuso entonces que debían de ser gemelos debido a su gran parecido.

— ¿Usted es el profesor Dumbledore? -le preguntó la chica, a la ve que jugaba con sus dedos.

El director le sonrió, para a continuación asentir con la cabeza.

— Albus Dumbledore, encantado de conocerla, señorita -se presentó el director.

— ¡Por favor, sígame, Hans lo necesita, ayude a mi amigo por favor! -suplicó la niña con los ojos llorosos, tomándolo de la mano para guiarlos a la recamara del pelirrojo.

Los tres miembros de Griffyndor se voltearon a ver preocupados, para acto seguido, ir detrás de la niña.

Al llegar a una de las tantas habitaciones, Anna abrió la puerta.

— ¡No quiero ver a nadie! ¡Déjenme solo! —gritó el muchacho, quien estaba recostado bocabajo sin camisa, la sangre bajaba por su espalda sin cesar.

— ¡Hans, soy Anna! -dijo la chica, entrando a la habitación- Hans, tus amigos están aquí...

Minerva llevó su mano a la boca, totalmente espantada al ver las heridas que el muchacho tenía en la espalda. Hermione se horrorizó al ver la sangre bajar, tenía heridas por toda su espalda; Harry apretó el puño con Ira al igual que Ron, quien sentía el coraje apoderarse de él.

Los gemelos Weasley se quedaron mudos de la impresión.

El profesor Dumbledore cambio su rostro a uno serio, su deber era proteger tanto a Harry como a Hans hasta que ambos pudieran cumplir con su destino, debía mantenerlos a salvo.

— ¿Qué te pasó, Hans? -exigió saber Potter, intentando contener su enojo- ¡¿Quién demonios te hizo esto?!

Hermione caminó para sentarse a un lado del chico, dejando salir algunas lágrimas a la vez que acariciaba su cabello, para nadie era un secreto que ambos eran los mejores amigos.

— Hans, ¿Qué fue lo que te pasó? ¿Qué clase de animal te lastimó de esta manera?

— Tranquila Hermione, estoy bien, no pasa nada… Ya sanará -el pelirrojo intentaba tranquilizarla sin mucho éxito.

Ron, al ver la situación gritó.

— ¡Maldita sea, Hans! ¡Tienes la espalda completamente lastimada! ¡Dime quién te hizo esto! -demandó saber, apretando sus puños y su varita con rabia.

Anna, al ver que su amigo no hablaba, les contó lo que había visto. Harry sintió un profundo desprecio por Elsa y por Malfoy, por lo que no lo pensó dos veces y salió corriendo con su varita en mano.

— ¡Potter, espera! -gritó Hans, intentando ponerse de pie para detenerlo, pero el dolor se lo impidió.

Hermione, preocupada por el estado de su amigo, se levantó para alcanzarlo.

— ¡Ronald! Quédate con Hans, yo iré por Harry -Weasley no estaba del todo de acuerdo, pero asintió.

Dumbledore se mantenía en silencio, volteando a ver a la profesora de trasformación.

— Minerva ve por Madame Poppy y cuéntale la situación, dile que venga preparada para que cure al joven Westergaard, también infórmale a Severus lo que pasó.

La subdirectora asintió saliendo con prisa de regreso a Hogwarts, el director le sonrió amablemente a Anna y le pidió a los gemelos y a Ron que se quedaran con Hans, él tenía algo que resolver con el rey.

En los patios traseros, Malfoy se encontraba de espaldas hablando con Elsa y con alguno de los hermanos de Hans; cuando Harry lo vio, apretó su varita y corrió a su encuentro.

— ¡Expulso! -gritó Potter atacando a Draco Malfoy, quien salió volando para golpearse con la pared- ¡Eres un bastardo mentiroso! ¡Te cobrare cada azote que le dieron a Hans!

Malfoy intentó defenderse, pero su varita había salido volando por el ataque de Harry Potter, quien apuntó de nuevo su propia varita y volvió a gritar lleno de cólera.

— ¡Expulso!

Elsa, intentó sacar su varita para ayudar a Malfoy, pero Harry se lo impidió, fulminándola con la mirada.

— ¡No te atrevas a meterte en esto, porque olvidaré que eres una chica y te pasara lo mismo que al imbécil de Malfoy! ¡Lo que le hiciste a Hans no tiene nombre! Quizá él tenga consideración de ti, pero ten por seguro que yo no la tendré -le escupió para luego mirar a los hermanos de Hans, quienes parecían estar petrificados- ¡Ustedes, bastardos! ¡Denme un motivo para maldecirlos! Son solo unos cobardes.

Draco se había puesto de pie limpiando su ropa, estaba a punto de atacar a Harry cuando Hermione le apunto con su varita.

— ¡Levicorpus! –atacó, dejando a Draco por los aires.

— ¡Eres un maldito, Malfoy! ¡Jamás, escúchame bien! ¡Jamás te perdonaré lo que le hiciste a Hans! ¡Tanto tú como esa chica me dan un profundo asco! ¡Eres tan patético! Como no pudiste ganarle a Hans en un duelo, recurres a este tipo de artimañas, realmente eres patético…

Hermione tomó a Harry del brazo para regresar con Hans, en esos momentos su amigo los necesitaba, por lo cual ambos chicos comenzaron a alejarse.

— Una cosa más… -hablo Granger, deteniéndose- ¡Expulso! -de nuevo, Draco salió volando por los aires.

Elsa ayudó a Draco a levantarse, el chico estaba furioso. Potter y Granger lo habían humillado y ni siquiera pudo defenderse; malditos fueran, ya se las pagarían, como que se llamaba Draco Malfoy.

— Vamos será mejor ir a que uno de sirvientes te ayude a reparar tu túnica -Elsa se mostraba calmada, pero estaba igual de enojada que Draco.

Maldito fuera Potter; al pasar por la sala de tronos escucharon la voz de Dumbledore, quien se escuchaba molesto.

En la sala del trono, Dumbledore le recriminaba al rey lo que le había hecho a Hans. Mientras que los reyes de Arendelle se limitaban a escuchar en silencio.

— ¡¿Cómo se atrevió a azotar de esa manera a Hans?! -recriminaba el profesor, caminando de un lado a otro como un león enjaulado- ¡Tenemos un trato! Usted cuidaba del chico y su reino estaba protegido por el ministerio.

El rey tragó grueso, él no podía perder la protección del mago.

— Solo fue un castigo, Hans hizo algo indebido y como padre adoptivo tengo el derecho a corregirlo… Además, no sé porque es tan importante ese chico.

Los reyes de Arendelle abrieron los ojos con sorpresa, Hans no era hijo de William y su esposa, ahora entendían por qué el trato que siempre le habían dado al muchacho; si no era hijo de los reyes, entonces ¿Quiénes eran sus padres?

— Ese chico, como le llamas, es nuestra última esperanza junto con Harry Potter; son los únicos que son capaces de destruir a Lord Voldemort, ellos serán los salvadores de nuestro mundo… ¡Y también de sus reinos! Nuestro trabajo es mantenerlos a salvo, así que no quiero que esto se repita, o me veré en la necesidad de terminar nuestro trato rey William…

Los chicos estaban consternados, Hans no era hijo de los reyes, sus padres lo habían recogido por instrucciones del director, ahora entendían por qué sus padres lo ignoraban; una idea perversa se le ocurrió a Rudi para lastimar a un más a su Hermano adoptivo. Elsa y Draco se voltearon a ver confundidos.

— Westergaard y Potter, la última esperanza del mundo mágico y el muggle… ¿Qué crees que el profesor Dumbledore quiso decir? -preguntó la princesa al rubio, ignorando por completo a los hermanos del pelirrojo.

— No lo sé, pero dudo que ese par pueda con Voldemort… Mi padre dice que es el mago más grande de todos los tiempos, ese par jamás podrán enfrentarlo, el señor oscuro los matará antes… ¡Debemos averiguar todo lo que está pasando, Elsa!

La platinada asintió, alejándose de la puerta con rumbo a las cocinas, para que ayudaran a Draco; pero ahora tenía más curiosidad por Hans Westergaard.

En la sala de Tronos dumbledore caminaba de un lado a otro por primera vez el *mado del director fue remplazado por uno de disgusto debian proteger tanto a Harry como A Hans hasta que pudieran enfrentar su destino .

El Rey Williams se levanto de su trono –quien diablos es Lord Voldemort —demando saber el Rey .

—Voldemort es el mago tenebroso mas poderoso de todos los tiempos todos creen que murio pero no es asi

Esta en alguna parte pero se que regresara y cuando eso pase solo Harry y Hans podran derrotarlos —el semblante del director era serio —Cuando eso pase no solo el mundo Magico estara en peligro tambien el muglee Voldemort quiere destruir lo que el concidera inferior .

El Rey Williams trago grueso si lo que Dumbledore decia era verdad tener a Hans en el castillo era un peligro para su familia para su reino .

—Dumbledore eso no era parte del trato jamas me dijiste sobre exponer de esta manera a mi familia —El rey le reclamo —Hans es un peligro para mi Familia , Para mi reino .

El directo suspiro negando —Hans no es ningun peligro para ti o tu reino El chico junto a Potter estan protegidos por una poderosa Magia —lo tranquilizo para seguir hablando —Con El Sacrificio de Lily Potter tanto Hans como Harry estan protegidos por lo menos hasta los 17 años es cuando el hechizo se rompera entonces ambos estaran en peligro por ahora el no representa peligro alguno .

El Rey Agnarr se acerco al directo — digame algo Arendell tambien esta en peligro si ese tal Voldemort regresa —Su voz se escuchaba precupada —Hay algo que se pueda hacer .

—Si Lord Voldemort regresa tanto el mundo magico como el Muglee estara en peligro nuestra esperanza son Harry Y Hans solo ellos pueden destruir al Señor tenebroso .

En el habitacion de Principe Ron se encontraba sentado a un lado de Hans estaba enojado queria maldecir el mismo a Malfoy y a esa princesa mimada ya encontraria el mejor mento para hacerlo

Anna se acerco a Hans y coloco su mano sobre su mejilla — Hans quiero disculparme por lo que Elsa te hizo —la niña bajo la mirada apenada—No se que ha pasado con ella me refiero a que Elsa no era a si desde que regreso de Esa escuela ha cambiado .

El pelirojo le sonrio para tranquilizarla —No es tu culpa Anna tranquila las heridas sanaran todo va a estar bien si te pones triste yo tambien lo estare tu no tienes la culpa de nada Anna .

Harry junto a Hermione entraron a la habitacion la mirada de Potter se suavizo cuando vio a Hans

Sentia unas ganas tremendas de maldecir a Malfoy Hans era su mejor amigo y verlo en ese estado era terrible

Hans se encontraba boca a abajo el dolor era muy fuerte la piel le quemaba a causa de los latigasos

—Que fue lo que paso Harry —Le pregunto Ron poniendose de pie —ambos se encuentran bien —cuestiono preocupado .

Hermione asintio sentandose en la cama junto a Hans —Estamos bien Harry le dio su merecido a Malfoy

Esa serpiente lo pensara dos veces para volver a meterse con nosotros .

—No quiero que tengan problemas por mi culpa —El pelirojo suspiro cerrando los ojos —Lamento preocuparlos chicos .

—Hans —Harry lo llamo —Eres nuestro amigo Nadie merece lo que te hicieron

Me refiero a que no debes preocuparte entre nosotros nos cuidamos y protegemos .

—Harry tiene razon somos Gryffindor despues de todo esta en nuestra naturaleza meternos en problemas —se encogio de brazos Ron bromeando .

Hans presento a Anna con sus amigos todos los Gryffindor estaba sorprendidos la pequeña niña ers tan diferente a su hermana mientras Elsa era arrogante , narsista fria

Anna era amable , bondadosa tierna a todos les habia caido bien la niña se despidio su madre debia estarla buscando

No paso mucho tiempo para que La profesora McGonagall junto a Severus Snepe madame pomfrey entraran a la habitacion la enfermera se llevo una mano a la boca asustada por las marcas en la piel del pelirojo

—Minerva quien fue el desgraciado que le hizo esto al Joven Westergaard —pregunto enojada la enfermera

—luego hablamos de eso necesito que cures al joven Hans —Pidio la directora sacando a los chicos de la habitacion

Al quedarse solos la enfermera comenzo a preparar unas posiones para que las heridas dejaran de sangrar y cerraran rapido pero desgraciadamente le quedarian las cicatrizes.

Cuanso termino de preparar la posion se acerco al chico —Esto le va a doler mientras esta haciendo efecto la posion —Hablo la mujer sintiendo lastima del chico la mujer comenzo a colocarle la mediciona en la espalda sintiendo tenzarse

El chico se mordio el labio inferio intentantando soportar el dolor

Cuando la medicina hizo contacto con su piel sintio como si mil cuchillos le atravesaran la piel el dolor era insoportable llego un momento en que ls gritos del chico se comenzaron a escuchar en todo el pasillo.

—Diablos Hans tiene las bolas muy bien puestas soportar todo ese dolor Mi respeto para Westergaard —rio Fred chocando los puños con su gemelo —Ahora sabemos cuanto puede soportar ya no le tendremos concideracion en los entrenamientos .

—Por sierto Fred no crees que nuestro "Amigo " Draco Malfoy merece un pequeño presente de nuestra parte —al decir la palabra amigo movio los dedos el aire con ironia —Digo a la chica no por concideracion a su pequeña hermana

Pero a Malfoy podemos darle un regalito asi no le quedara ganas de volver a meterse con uno de nosotros

Minerva al escuchar a los gemelos frucio el seño conocia los conocia a la perfeccion ese Par planeaba algo

Esa sonrisa de complicidad solo significaba que estaban planeando alguna broma .

—Ustedes dos —Los llamo la profesora de tranformaciones—Ni se les ocurra hacer alguna tonteria los conosco se que estan planeando algo .

—Profesora no aremos nada malo es una promesa —dijeron los gemelos con voz inocente —nada malo le pasara a Malfoy .

Luego de unos minutos que parecieron horas

madame pomfrey salio de la habitacion dejando a Hans descansar un poco

La enfermera suspiro —Lo deje un rato recostado pude curar algunas de sus heridas le quedaran marcas ¿ Minerva quien fue el que lastimo de esa manera al Joven Westergaard ?

McGonagall le indico que se alejaran un poco para podef hablar donde le explico lo que habia pasado como el Rey lo habia mandado a azotar la enfermera estaba indignada por como habia lastimado al chico .

En los patios del castillo Draco se encontraba sentado junto a Elsa a un lado de ellos se encontraba Rudi el hermano mayor de Hans y prometido de Elsa ambos rubios se encontraban hablando sobre lo que Dumbledore habia dicho

—¿ No entiendo a que se referia El director sobre Potter y Westergasrd —dijo pensativa la princesa — lei que Voldemort murio ahora nos enteramos que ese par de idiotas son la ultima esperanza .

Draco miro a ambos lados no queria que nadie los escuchara–Veras Elsa mi Papa me conto que el señor Oscuro no esta muerto se encuentra en algun lugar y algun dia regresara dudo que Ese par pueda hacer algo Lord Voldemort es el mago mas grande de todos los tiempos potter y Westergaard son dos moscas a su lado.

Rudi se burlo abrazando tomando a la Platinada —Hans es un don nadie me encantaria ver como ese tal Voldemort le Patea el trasero de seguro sus padres fueron tan poca cosa como el .

Elsa lo miro con disgusto por alguna extraña y retorcida razon le molestaba que Rudi se expresara a si de pelirojo

—No sabes de lo que estas hablandon

Y te lo he dicho muchas veces no te tomes confianza que no tenemos –la rubia le quito la mano de su cintura .

La noche habia llegado al igual que algunos invitados Hans se encontraba en su habitacion a un sentia un poco de dolor pero lo soportaria como el Griffyndor que era .

La reunion era bastante aburrida Lo unico que lograba animar al principe era la presencia de sus amigos Noto como Ron miraba la comida sabia que tenia Pena de acercarse .

—Ron —lo llamo a lo que el mencionado lo miro —Puedes comer lo que quieras no tengas pena .

No paso dos veces para que el pelirojo se acercara a la comida Tanto Hermione como harry rieron al ver al chico comer

—Ronald esos modales recuerda donde estamos —Lo reprendio la castaña —No tienes remedio —

Harry se acerco al principe quien sonreia al ver a su amigo comer y como la castaña lo regañaba ese par no tenia remedio

—Hans —el pelinegro coloco su mano en su hombro a lo cual el chico volteo a verlo —Te traje un regalo espero te guste — el chico hizo aparecer unos libros dejando al pelirojo sorprendido

—Wow Harry son los libros que ha escrito Newt Scamander —el pelirojo habrio los ojos con sospresa y al mismo tiempo emocionado —Harry mucho de estos libros son muy caros no debiste gastar tanto

El pelinegro se rasco la cabeza apenado – la verdad no sabia que regalarte a si que le pedi a Hermione que me acompañara al callejo callejon diagon ella me dijo que los libros serian un buen ragalo y por el dinero no te precupes no es importante .

Elsa rodo los ojos con fastidio como siempre Harry Potter intentando llamar la atencion para nadie era un secreto que el chico era Rico pero siempre buscando ser el centro dd atencion

—Potter es un idiota —Le susuro Draconal oido —Esd idiota cuatro ojos , Cara rajada me las pagara por lo de la tarde .

Elsa Rio ante el apodo que Draco le habia puesto a Potter realmente ese Leon le desagradaba tanto como Westergaard ambos eran pateticos

—Por ahora no podemos hacer nada Snape fue claro un problema mas y la pagaremos nos vengaremos cuando regresemos .

Ron se acero con sierta timides a su amigo Su mirada estaba en el piso —Hans —el aludido volteo a verlo — Yo tambien te tengo un regalo —el chico hizo aparecer una caja que le entrego al principe .

Hans tomo el regalo abriendolo con cuidado abriendo los ojos sorprendidoa dentro de la caja venia un bonito sueter con los colores de su Casa y en medio

Tenia la letra H de su nombre.

—Quiza no sea la gran cosa ...digo como principe debes estar acostumbrado a cosas mejores pero los jersey Weasley son tegidos a mano por Mama y me pidio que te lo diera —se aventuro a decir avergonzado el chico .

Tanto Elsa como Malfoy hicieron una mueca de desagrado por el regalo que Ron le habia dado a Hans Para ellos Ronal Weasley era tan patetico.

—Me Gusto mucho Ron es un gran regalo agradecele a Tu madre por hacerme un jersey Weasley realmente lo usare feliz — el pelirojo le sonrio para colocarselo encima de su topa —Me queda perfecto gracias .

Tanto Dumbledore como Minerva sonrieron una vez mas se dieron cuenta que Hans era tan diferente a Lord Vomdemort .

Hermione se sentia timida ella queria mucho al pelirojo era su mejor amigo el primer chico que le habia tratado bien

Reuniendo valor la pequeña se fue acercamdo al pelirojo que se encontraba hablando con Harry toco su hombro y le pidio hablar a solas se alejaron un poco de sus amigos

—¿Que sucede Hermione ? —Le pregunto el pelirojo preocupado al ver el sonrojo en las mejillas de la chica

—Este...yo —La chica de cabello castaño jugaba con sus dedos para levantar la mirada y le sonrio —Tam..bien te tengo algo espero te guste —De su tunica saco una caja de terciopelo.

El pelirojo la abrio dentro habia una medalla con la inicial de su nombre Hermione le mostro la que ella llevaba en su cuello era dos piezas similares que estaban hechizadas caulquiera de los dos que este pasando un mal momento la otra brillara .

Hans le agradecio colocandose el dije en el cuello ambos se abrazaron mientras un par de rubios los fulminaban con la mirada en ese momento si las miraras mataran tanto Hermione como Hans estarian muertos .

La fiesta continuaba Dumbledore le habia regalado una capa de invisibilidad segun las palabras del director en algun momento podria necesitarla. McGonagall le habia regalado una Ninbus 2021 la escoba mas rapida del mundo magico

Por primera vez Hans se sentia feliz

Por primera vez celebraba su cumpleaños con amigos de verdad

Rudi el decimo principe miraba con envida y celos a Hans odiaba que toda la atencion fuera para ese perdedor , ese inpostor por lo cual no lo penso dos veces pidio la palabra para poder humillaria a ese bastardo lo dejaria en ridiculo como el don nadie que era.

—Buenas noches queridos invitados quiero decirle una palabras a mi querido hermito Hansy—el mencionado se le quedo mirando —hermanito durante 12 años te has preguntado porque Papa y mama te ignoran?

El rey se le quedo viendo a su decimo hijo ¿ acaso sabia la verdad sobre Hans ? Eso no podia ser verdad estaba asustado sintio la mirada de Dumbledore sobre el .

—La respuesta es muy sencilla hermanito la verdad es que no eres parte de esta familia ese hombre que esta alli —Apunto a dumbledore con la mirada —Te trajo aqui cuando eras un bebe y nuestros padres te recogieron no eres mas que un inpostor no eres digno de llevar el titulo de principe .

Las palabras de Rudi fueron como agua fria busco al dirctor con la mirada pero al verlo supo que Rudi no mentia todo era verdad el no era un principe se sintio traicionado

Cuando adumbledore lo intento sujetar el se solto dolido —¡No me toque como me pudo mentir de esa manera Digame quienes som mis padres ? Quien soy realmente digame la verdad —el chico ya no podia controlarse —Quiero la maldita verdad ahora tiendo el desprecio de toda mi familia .

El director suspiro era hora de decirle la verdad se la debia al chico le diria lo que el concideraba suficiente

—Es verdad lo que su hermano adoptivo le dijo yo te traje siendo un bebe Hans tu eres un chico muy especial junto a Harry estan destinados a grandes cosas .

—Profesor no lo entiendo —Potter se acerco a donde estaba Hans —Porque dice que somos especiales .

—Hace 13 años luego de la tortura de Alice y Frank Longbottom que los dejo en San Mungo tu Madre fue arestada por los aurores eras un bebe de dias de nacido yo fui quien te encontro no podia entragarte a tu verdaders familia ya que seria un verdadero problema si crecias con la creencia de la supremacia de la sangre fue por eso que le pedi al rey William que tr mantuviera a salvo.

—¿quienes son mis verdaderos padres ?—pregunto intentando prosesar toda la informacion.

—Tu Madre es Bellatrix Black y tu padre —el director se quedo en silencio unos minutos —Tu Padre es Lord Voldemort

Hans no lo podia creer el Hijo de la loca mujer que torturo a los padres de Neville y su Padre era la persona que hace pocas semanas intento matarlos ademas que ese mismo sujeto habia asesinado a los padres de Harry ¿ Como podria mirarlos a la cara ? Sintio su mundo destruirse .

Malfoy frucio el seño ¿ Hans impuro Westergaard amante de los sangre sucia era un Black ? Eso lo hacia su primo debia hablar con sus padres tenia que contarle lo que acaba de pasar

Harry sentia su cabeza darle vueltas Hans su mejor amigo era hijo del asesino de sus padres todo esto era mucho para el pero de algo estaba seguro Jamas culparia a Hans por lo que su padre habia hecho su amigo ers tan diferenre a ese asesino

—Como puede decirme todo esto como disblos mirare a la cara a Harry y Neville sabiendo que los psicopatas de mis padres Mataron y torturaron a sus padres.

—esto no cambia nada Hans continiaremos siendo amigos estoy seguro que Neville piensa igual nada cambia nuestra amistad tu no eres como Voldemort .

—El joven Potter tiene razon la sangre no te hace igual que a Voldemort

Estas destinadon a algo Grande ambos son especiales son los unicos que pueden terminar con Lord vomdemort los salvadores de nuestro mundo .

Tanto Hans como Harry eran concientes que en un futuro deberan enfrentarse a voldemort acetaba su destino sabian que Voldemoet regresaria