-La joven mujer se alejo de aquel suave pulgar que delineaba sus labios, mismos que temblaban prediciendo el acercamiento del muchacho en frente suyo. Su sonrisa y el temblor de su cuerpo desapareció reaccionando de inmediato, quiso huir de aquella mano que sujetaba con fuerza su cintura y de aquel cuerpo que lo acorralaba a la pared-  Eso no pasara, no hagas esto~ - suplicó al sentirse sofocada por el calor de ambos cuerpos, no quería sentir aquello de nuevo, odiaba ser totalmente sumisa ante el juego del joven, solo quería acabar con aquel juego pero  con cada paso y palabra solo ella perdía un turno para hacer sus movimientos-

Vamos, me gustas desde hace tiempo, tuve curiosidad sobre ti desde el primer día que te vi y pronto me iré asi que quiero que me regales un beso, nadie nos verá o nos molestara  -se alzo de hombros mientras afianzaba su agarre en la cintura de su amiga,  la sonrisa de niño inocente se dibujo nuevamente en sus labios al ver la duda en los ojos contrarios, odiaba aquella cabellera que cubría ese bello rostro ademas de estorbar al momento de intentar robarle un beso que la pequeña se negaba moviendo su rostro de lado a lado o bajando la mirada escondiéndose en sus pechos, exactamente esos eran los causante de su curiosidad que acabaron descartados al conocer la personalidad de la niña en frente suyo- vamos, solo uno pequeño~ -suplico abultando los labios logrando que la joven se sonrojara y nuevamente se perdiera en sus pensamientos-

 no...no por favor~ - suplicó negando rápidamente ante la insistencia de su amigo, solo agradecía que no sujetara su rostro para robarle lo que tanto guardaba para su amado que algún día conocería- yo... yo te daré un beso -soltó con desesperación, calmando así al contrario que acaricio con suma delicadeza su cabellera y la estrujo en sus brazos provocandole de nuevo esa pequeña picazón en su corazón- sera en tu cumpleaños, te daré un beso, será mi regalo para ti~ - mencionó estrujando con sus pequeñas manos la chaqueta del muchacho, amaba estar acurrucada en esos brazos pero preferiría que fuera de otra manera y no por un simple impulso del joven por conseguir lo que quiere-

Pero no será un piquito de pollito -sentencio sonriendo mientras abultaba sus labios y así besarle la frente y la punta de la nariz  que se encontraba rojiza por el frío que los rodeaba- Como será mi cumpleaños lo quiero en mis labios, nada de mejillas, frente o nariz, esos ya me los diste, quiero en los labios y un poco de exploración -soltó sonriendo de lado, dejando completamente helada a la mujer que anhelaba  ser acurrucada en sus brazos- No puedes cambiar de opinión, ya esta hecho el trato -señalo con la mirada sus manos entrelazadas por el meñique de ambos-

Yo..yo  ..  -las palabras se fueron como el vapor que fluía de sus labios entreabiertos, estaba congelada en su lugar y no era por el frío, sabia que si no lograba cumplir lo que prometió, el contrario podría torturarle de una manera inimaginable hasta dejarle completamente sumida en la oscuridad como lo había hecho con otras mujeres y el juego habría acabado solo para ella como la perdedora- Lo haré, solo si tu te vas,  debes irte o de lo contrario si te beso y te quedas, yo... yo no volveré a verte ni hablarte, nuestra amistad para mi será como si nunca hubiera existido -dudo al soltar aquellas palabras pero el mismo odio que se tenia por dejarse llevar por sus impulsos y sujetar aquellas manos, le llevaron a poner esa condición, obviamente no lograría sentir tanto dolor si él se fuera pero si se quedara, solo ella sufriría el doble en silencio al verlo destruir más mujeres-