CAPÍTULO 10
Es cierto que las más violentas pasiones pueden convertirse en sus extremos opuestos en un tiempo increíblemente breve, y por los medios impredecibles.
Kenneth Al Capone
Detestaba este estúpido lugar. El padre de Kenna no me quitaba la vista de encima, era evidente su odio. Su manera tan despectiva de inspeccionarme lo dice todo.
Como si él fuese mejor que yo ⸻bufo⸻. Niran solo es un hijo de puta capaz de vender hasta su propia hija al diablo con tal de que su legado continúe. Lo recordaba mostrarse de otra manera, pero supongo que las personas cambian o después de un tiempo se dejan ver realmente.
Por otro lado, mi mente no dejaba de culparme por el arrebato que tuve anoche. "La carne es débil" cuánta razón tuvo Enzo. Kenna es una mujer hermosa, es verdad, pero lo que me prendía de ella era la maldita actitud que se cargaba. Nunca en mi miserable vida, vi a una mujer con tanto coraje.
Es por eso que debía desaparecerla.
Me manché tantas veces las manos con la sangre de personas que tuvieron un valor sentimental para mí en el pasado, que tomaré esta medida preventiva como un postre agridulce.
Aunque lo único que podría frenarme y arruinarme los planes eran los del Pentágono, ellos eran la organización superior a cualquier mafia. Contaban con bases en todos lados y controlaban a algunas organizaciones como la que manejo. Las jerarquías al igual que acá, se respetaban y como primer círculo teníamos a los Benedetto, luego los Capos y aunque odiaba tener que rendirle cuentas a alguien, era eso o ser destituido de mi puesto y poner en riesgo todo el juego.
La Camorra por otra parte, eran un grupo nefasto de criminales asociados para ganar terreno contra nosotros. Unos ilusos queriendo alterar la orden de sucesión que se venía manejando desde hace más de doscientos años
Carraspeo cuando veo entrar a Kenna nuevamente por las dobles puertas del comedor. Llega a mi costado e inmediatamente me coloco de pie para ayudarle nuevamente con la silla en un gesto "caballeroso".
La realidad es que todo era puro teatro. Soy de los que creen que si se hace algo es mejor hacerlo bien o simplemente no hacerlo y punto.
⸻Grazie —Gracias.
Muevo mi cabeza en respuesta. El idiota que se estaba dejando quitar sus empresas llega segundos después admirando todo seriamente.
Por el color rojizo en su mejilla, algo me dice que le dieron su merecido.
⸻Buen provecho.
Comenzamos a comer en silencio, no pudimos comer mucho en mi casa debido a que mi hermana me escupió su jugo en la cara, como también a que estábamos llegando demasiado tarde.
Alzo la mirada cuando siento una patada debajo de la mesa. El heredero de los Carrington veía a Kenna con anhelo, me aburrían.
Yo no era del tipo de hombre que te amaba incondicionalmente, se podría decir que ni siquiera creía en ese horrible sentimiento. Lo mío era follar sin contemplaciones, tomar lo que me gustaba hasta aburrirme.
⸻Y cuéntanos Niccolo ¿Cómo es que se dio este repentino sentimiento entre ustedes?
La voz de Niran me devuelve a la realidad. No sabía que mierda inventar, pensé en ignorar la pregunta puesto a que los modales no eran lo mío, pero entonces la estúpida sonrisa y mirada de superioridad que me lanza el imbécil que vino con el viejo me hizo ver todo en rojo.
⸻Pues eso lo deberías saber tú más que nadie Niran, te pasó exactamente lo mismo con tu esposa. El primer amor nunca se olvida, creo que no me equivoco al decir que fuimos el primero del otro.
Trato de sonreírle cálidamente a la pelinegra que supuestamente amaba más que a mi vida. Patético.
⸻No, no te equivocas.
Sentía que pronto me daría derrame fácil de lo mucho que estaba sonriendo el día de hoy y de la hipocresía ambientando todo.
La pagarás muy caro Clyte.
⸻¿No les preocupa lo que la gente pueda decir? Ya saben, eso de que son familia ⸻el imbécil se acomoda en su silla.
⸻No nos preocupamos por cosas sin importancias Carrington, además, tenemos tres linajes mezclados, no somos familia directa y aún si fuese así, el amor que yo le tengo a Kenna traspasa cualquier pretexto legal o sanguíneo.
Me daba asco lo que podía llegar a decir, me estaba tomando muy en serio mi papel y esperaba que la mujer a mi lado cumpliera su parte del trato. Esto ya era demasiado humillante hasta para la pequeña mierda que tenía escondida.
⸻Creo que eso lo sabes mejor que nosotros ¿no? Padre ⸻Kenna interviene⸻. El amor que le tuviste a Beatrice fue especial y único. Debo admitir que por un tiempo busqué lo mismo y aunque no lo conseguí inmediatamente, ahora estoy más que satisfecha de haberlo encontrado ⸻me mira y puedo notar claramente su odio por esto, estaba seguro que no era más que el mío⸻. No sé si esto dure como lo espero realmente o se corte en un tiempo, pero de lo que sí estoy segura es que es él a la persona que quiero en estos momentos.
>>Desconozco el motivo exacto por el que decidiste traer a Ian contigo, aunque tampoco me interesa. Supongo que no te ha contado la verdad del porqué decidí irme, ni los motivos reales por los que la relación se rompió ⸻su padre niega frunciendo el ceño⸻. Te aconsejaría que lo escuchases, es una historia un tanto ... peculiar ⸻sonríe poniéndome los pelos de punta⸻. Después de ello creo que evaluaras mejor las cosas y si aun así no lo haces, entonces te pido mirándote a la cara que me dejes ser feliz, porque trabajé mucho para llegar hasta donde estoy en un año, no fue fácil para mí regresar al lugar en donde mi madre falleció. Kenneth lo único que hizo durante todo este tiempo es apoyarme y no se merece ser tratado de mala manera.
Apoyarte en todo lo que había encontrado a mi paso ⸻quise agregar.
⸻En cuanto a ti ⸻señala a su ex⸻, espero que valores un poco las palabras que te acabo de dar y aceptes de una vez por todas que tu juego se acabó y que sea lo que sea que quieras de mí ya no lo vas a conseguir. Todo ha cambiado.
Dejo de escucharla cuando un mensaje de Enzo me llega:
Hay una rata.
Me divertiría yendo de caza el día de hoy.
⸻Bueno ⸻me coloco en pie interrumpiendo las malas miradas⸻, creo que es momento de retirarme, surgió un imprevisto en mi empresa ⸻Kenna frunce el ceño y por mi rostro creo que puede deducir algo.
⸻Te acompaño ⸻mira a su padre⸻. Nos vemos en la noche.
Salimos por la puerta principal y no es hasta que llegamos allí que dejo la postura de idiota enamorado para ponerme serio comenzando a caminar a mi camioneta.
⸻¿Qué ha pasado?
⸻Enzo descubrió dinero faltante en el último cargamento ⸻explico, ella parece estar un momento absorta en sus pensamientos.
⸻Voy contigo.
⸻No es necesario que lo hagas, no te necesito más tiempo a mi lado del necesario.
Abre la boca ofendida por mi respuesta. Sus bonitos labios rojos se remojan con su saliva antes de volver a hablar:
⸻No es que tampoco me haga mucha gracia, pero por si lo olvidas, mi trabajo es lavar el dinero y luego repartirlo, por tanto, necesito comprobar que mi personal no tenga nada que ver en esto.
⸻No quiero que vayas, tengo ganas de matarte cada vez que hablas.
⸻¿Te he dicho ya lo mucho que me interesa de lo que tengas ganas o no? ⸻Cierro mis puños⸻ ve tú en tus camionetas que yo iré en las mías, luego tengo que pasar a los laboratorios.
⸻Mi paciencia es poca, esta es la última vez que te lo advierto.
⸻Me vienes diciendo lo mismo desde hace tiempo, así que tu definición de poco y de niña para mí son algo erróneas.
No espera respuesta y empieza a caminar junto con su perro faldero, odiaba que me dejasen con la palabra en la boca y no tardaría en hacérselo saber. La maldita descarrilada esa provocaría miles de incendios si no la apagaba ya mismo, pero es mi jodida culpa por darle tantas alas.
Kenna Bianchi
La camioneta aparca frente a una casa abandonada. El lugar se veía viejo y poco cuidado, pero aun así tenía su seguridad bien distribuida.
En el año ausente del italiano jamás vine, pues el encargado de recibir las partes de dinero que le correspondían, era su cuñado. Esta bodega no es una fortaleza como tal, pero tenía lo suyo. Camiones de desembarque haciendo su trabajo nos recibe en la entrada, la caravana del Capo se estaciona seguidamente de la mía y Dante se apresura en llegar hasta la puerta y abrírmela.
⸻Te están siguiendo ⸻susurra cuando está a mi costado.
⸻¿Quién?
⸻Es una mujer, por las matrículas de las camionetas puedo inferir que es rusa, pero tendría que investigar más a fondo.
Mujer rusa. Sonrío. Maldito Ian y su porquería que trae consigo.
⸻Déjala que haga lo que quiera, pero no la pierdas de vista.
⸻Bien.
Comenzamos a caminar cuando noto a Kenneth dirigirse en dirección a la bodega. Luego de la información propuesta por parte de Dante mantenía mis sospechas sobre la desaparición de dinero, podría ser claramente una estrategia para acorralarme y atacar, porque siendo sinceros, no existía ser humano en este mundo que no le temiera a la ira de Kenneth Al Capone como para robarle.
Excepto yo.
Los lentes de sol que llevo resguardando mis ojos, me permitía revisar cada área sin necesidad de quedar expuesta, tenía mi arma lista por si la pequeña puta pensaba atacar. No sabía en lo que se estaba metiendo, porque no solamente estaba yo sino también el Capo y sus soldados no se la dejarían fácil.
Estúpida novata que actúa por coraje y se deja en evidencia.
El amor te volvía una cosa blandengue, como también podía volver alguien fuerte e inquebrantable; se debía ser inteligente para saberlas diferenciar. No cualquiera pretende ser la segunda sin dejar de ser la primera.
⸻Señor.
Llegamos al punto de encuentro cuando los hombres empiezan a reverenciar al italiano de ojos grises. El sitio no olía mal para ser un lugar descuidado, tenía puntos a favor.
Enzo que saluda a su jefe, me mira para después regresar sus ojos al italiano como un cachorro asustado.
¿Qué pasó aquí?
⸻Signora.
En ese momento una morena con buenos dotes pasa por nuestro costado, su ropa no cubría más que lo necesario y eso era mucho decir. Lógicamente a los hombres se le fueron los ojos poniéndome de mal humor.
⸻Céntrense a lo que vinimos. No tengo por qué perder mi tiempo con pubertos que no saben controlar lo que tienen entre las piernas.
Comienzo a caminar dejándolos atrás. Me hastiaba que se comportaran de esa manera, tenía muchas cosas por hacer, pero aun así estaba aquí al pendiente de todo.
⸻¿Celosa?
Escucho su voz a mi costado y ni siquiera me giro para comprobarlo, puesto que su olor ya es muy familiar para mi olfato.
⸻¿Por qué habría de estarlo? ⸻Me carcajeo⸻ No hay punto de comparación entre nosotras. Hay una gran diferencia entre ser una puta y la puta ama, yo soy más de lo segundo.
⸻Hasta que llegan ⸻un Arek con ropa deportiva interrumpe su respuesta⸻. No pretendo ofenderte con esto Kenna, pero ¿Qué haces aquí?
⸻Soy la encargada de repartir el dinero después del lavado, así que es lógico mi presencia ⸻espeto cuando ambos intercambian miradas⸻. A lo que vinimos ¿cuánto dinero hace falta?
⸻Más de cinco millones de dólares.
⸻Alguien tiene ganas de morir ⸻gruñe.
⸻¿Ustedes cuentan el dinero que les entrego? ⸻el ruso niega.
⸻Los pesamos porque es más fácil y hasta el momento no habíamos tenido inconvenientes ⸻asiento.
⸻¿Cuál fue la última carga?
Señala la que está detrás de mí. Avanzo hacia ella retirándome los lentes para inspeccionarla. A simple vista no parecía tener ningún defecto, pero si era meticuloso como lo era yo, no sería difícil encontrar lo que estaba mal.
⸻Acércate ⸻llamo a Kenneth que me mira mal antes de obedecer⸻ ¿Ves eso?
⸻Sí.
⸻La caja está desgastada solo de un lado, no tiene sentido si el dinero es ordenado por bloques para un mejor peso —levanto la tablilla que se encuentra sobre el montículo de dinero—, según esto dice que cada bloque que envío pesa doscientos o quinientos kilos exactos, nunca ha surgido ninguna variación excepto en esta entrega ¿no?
—Sí.
—Bien, Dante ¿Cuántos millones se supone que enviamos esta vez?
—Ochocientos con setenta y cinco.
—Es la cantidad que enviamos la semana pasada también. Jueves si no me equivoco —murmuro revisando la tablilla, en efecto—. Ese día ustedes también pesaron la caja y arrojó con quinientos kilos, entonces aquí dice que las cajas se pesan cuando llegan y cuando salen porque supongo que se toman el tiempo de verificar billete por billete lo que les demora algunos días.
Asiente.
—Sí, nos lleva entre cinco a seis días como máximo y siempre es una persona responsable.
—Bueno, la caja pesó lo mismo cuando llegó, pero no cuando quisieron exportarla, y no es porque les falte fajos si no porque los reemplazaron por papel de baja calidad.
—¿Qué?
Entorno los ojos.
⸻¿Cuál de estos, pesa más? ⸻le doy dos fajos de dinero.
⸻Este ⸻señala el de mi mano izquierda.
⸻Es porque el papel que se empleó es verificado y garantizado, es decir uno real ⸻coloco el fajo en su sitio⸻. Mientras que este ⸻lo abro⸻, solo contiene las tapas y algo más de relleno con simple papel ⸻evalúo un poco más⸻ de buen gramaje para que la diferencia no sea notoria al momento de la impresión de las figuras.
⸻Malditas ratas astutas.
⸻Eso quiere decir que estoy libre de culpas ⸻me limpio las manos⸻. Yo cumplo con entregarte el dinero completo, el robo viene después del primer pesaje. Lo sacan en pequeñas cantidades y luego maquillan un poco la contabilidad asumiendo que el valor de los billetes es menor, pero no han tenido cuidado con su peso.
⸻Vaya, si te enseñaron a razonar en tu kínder.
⸻No me subestimes Kenneth, que ser mujer joven y bonita no es un impedimento para ser mejor que todo tu equipo de inútiles ⸻retiro mi vista de él⸻ ¿Quién es el encargado de la contabilidad?
⸻Adriano ⸻responde Enzo.
⸻Llámalo.
⸻Como ordene.
⸻No creo que él sea capaz de hacer eso, su padre trabajó con el mío por mucho tiempo y luego entró él.
⸻La traición siempre llega de quienes menos te lo esperas ⸻me encojo de hombros.
⸻¿Para qué soy bueno jefe?
Un hombre algo mayor que Kenneth se hace presente, era algo bajito, pero con buen cuerpo. Lo que llama mi atención es la cicatriz que tenía en su mejilla. Me acerco hacia él con pasos seguros.
⸻¿Tú eres el encargado de la contabilidad? ⸻pregunto y asiente. Mi semblante es gélido, sin oportunidad a que me vea débil por ser de su sexo opuesto, que era el mayor de los problemas en el submundo.
⸻Muéstrame el libro ⸻y es así como en cuestión de segundos me toma del cuello apuntándome con un arma en la cabeza.
⸻¡Quédense quietos o la mato!
Kenneth quien defendía al hombre saca su arma y le apunta al igual que todos. Estaba rodeado y no tenía escapatoria.
⸻Suéltala Adriano ⸻gruñe, pero el hombre niega⸻ ¿Si sabes que no saldrás vivo de aquí? ¿no?
⸻Puedo hacerlo si me la llevo como garantía.
⸻¿Por qué lo haces? Tu padre era como de la familia ⸻su risa seca llega a mis oídos.
⸻¡Siempre nos trataron como menos! ¡Mi abuelo, mi padre y yo les dimos lo mejor de nosotros y ustedes jamás nos dieron más reconocimiento del que merecíamos!
⸻Tan grandote y tan llorón ⸻le planto mi tacón en su pie provocando que su agarre disminuya de intensidad, le propicio un codazo en el abdomen, lo tiro al suelo y tomo su arma para dispararle en el centro de la cabeza.
⸻Menudo contador.
⸻¿Por qué lo mataste?
⸻Porque me amenazó ⸻señalo obvia.
⸻Merecía que yo le dé una ...
Su pequeño discurso es interrumpido por disparos y el rechinar de unas camionetas.
⸻Llegaron ⸻Dante se pone en alerta.
⸻¿Quiénes? ⸻Kenneth pregunta viéndonos a los dos de par en par.
⸻La orden es disparar a morir ¿entendieron? —hablo con la voz elevada—No quiero a nadie vivo excepto a la mujer.
⸻¿Quién mierdas te crees para ordenar en mi presencia?
Kenneth saca uno de sus cuchillos arrinconándome con el arma en el cuello.
⸻Este problema es netamente mío, tienes de dos ⸻señalo con mis manos⸻. O bien te enfrentas y me ayudas a que esta mierda se acabe lo antes posible, o te vas y te escondes detrás de un muro y me dejas asesinar en paz.
La puerta más grande es abierta con el choque de una camioneta contra la misma. El personal de seguridad sale por todos lados y los gritos no dejan de escandalizar a cualquiera.
⸻¡Rodéenlos! ⸻Grito quitándomelo de encima.
Es así como el fuego da inicio.
Los sonidos estruendosos que suelta mi grupo de hombres cuando pelean sin ningún problema aturde a los intrusos, mientras que los del italiano solo se dedicaban a disparar y resguardar a su Capo. Excelente.
Salgo del lado de la camioneta y con el rifle comienzo a disparar, mi lugar favorito siempre es en la cabeza. Un solo disparo te mandaba a dormir para siempre.
Los rusos eran fuertes, lo supe cuando uno me tumbo al suelo sin esperármelo.
⸻Hijo de puta.
Me levanto rápidamente dejando que él golpee primero. Gran error. Utilizo mi gancho derecho y logro atinarle un golpe en la mandíbula que lo desencaja retrocediendo, levanto mi pie proporcionándole una patada en su estómago tirándolo por completo.
⸻Hasta nunca.
Realizo presión con mi tacón quebrantándole la tráquea, el sonido del hueso roto es lo más celestial que he escuchado en las últimas 48 horas.
⸻¡Kenna!
Logro voltear justo cuando otro golpe iba dirigido a mí, lo esquivo inclinándome hacia atrás.
⸻Hasta que apareces perra.
⸻Vengo por ti maldita, ahora sabrás lo que una Kozlova puede hacer.
Suelto una carcajada esquivando otro de sus golpes. Sentía a muchos observarme y tildarme de loca en el proceso, ya estaba acostumbrada a ello y no descartaría la idea debido a mi genética.
⸻Pues te vas a ir con las manos vacías.
Me pongo en guardia arrastrando mi pie izquierdo por detrás de ella provocando que ella tambalee. Vino a su muerte segura y ni siquiera sabía cómo golpear.
Mis puños y manos se vuelven uno solo, no me permitía pensar en el desastre que estaba armando, ni en lo que vendría después. Simplemente me convierto en una máquina de aniquilación arrasando con todo.
⸻Móntenla en el auto y tírenla a las mazmorras.
Seco la sangre que baña mi rostro antes de tomar una de las camionetas y largarme de ese lugar, Ian tenía mucho que explicar porque en definitiva esos hombres con tantos armamentos y esos tatuajes, no los consigues ni así vayas regalando dólares como saludos matutinos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro