-¿Ya me dirán que fue eso?

-¿Que hace aquí?- dijo la mayor, tenía unos pantalones cortos y camisola que me hacían mirar cualquier cosa. Su cuerpo no me tentará, ese carácter de mierda le quitaba todo lo sexy que podía llegar a ser.

-Quiere encargarme un trabajo, lo mandó Vante- la vi sonreír.

-Supongo que no quieres a tu hermanita allá- pronunció con burla. -La milicia no es para cualquiera, si por algo como eso se echa para atrás no merece su rango.

-Ella no lo hizo- me quejé de mala gana.

-Ella no es tiradora- señaló a la pelirosa interrumpiéndome -Y por lo que sé necesitan una.

-Sabe demasiado como para "apenas enterarse"

-A mi fue a la primera que solicitaron.

-Um, supongo que si otra se niega es cobarde, pero si lo hace usted es cosa de honor- dije y la peli rosa nos miraba divertida.

-Oye tía- la llamó -¿Porqué no él?- me señaló

-Es bocón e idiota, temperamental y no sabe seguir ordenes, se cree el jefe cuando no es más que un lacayo.- hablaban como si no estuviera.

-Aún así puede funcionar, un Min ocultó a la tía, este otro puede...

-Dejen de hablar como si no estuviera- dije pero me ignoraron

-Sus orígenes no son conocidos en la milicia, es el primero de su familia.

-Es muy joven

-No tanto, es lo suficientemente mayor para serlo- la mas alta lo pensó, me miró -Tienen un tono de piel parecido.

-Iré allá y participaré en el operativo en lugar de tu hermana- dijo la Comandante dirigiéndose al fin a mi.

-¿Qué quiere a cambio?- la vi reír

-Eres de Daegu ¿no? Tu madre vive allá- asentí a pesar de que no fue pregunta. -Llevarás a Mau con ella mientras hacemos tu encargo.- dijo y la otra se rió, esto era muy...

-¿Porqué debería hacerme cargo del mocoso?- su madre quiso matarme con la mirada que me regaló.

-¿No pretenderás que lo dejemos solo?- habló la peli rosa.

-¿Porqué deberían ir ambas?

-Trabajamos juntas- dijo simple

-También quiero a Park y Min aquí, aprueba el traslado.

-Bien- la peli rosa respondió por ella. -Ve a la base bombón, a las 7 debes pasar por él- mis ojos se abrieron como platos. -Iremos allá y montaremos ese operativo, no necesitas saber más- dijo con una risa maliciosa en los labios.

No les creía una puta mierda de esto.

-No hasta que me expliquen que quieren o porque hacen esto. No confío en la reina de los cuchillos- la señalé, tampoco en la otra.

-Digamos que tenemos asuntos pendientes.

-¿Son del norte? Ustedes dos lo son- no tenían acento pero hay algo en ellas que no acaba de caerme.

-Si tienes tantas preguntas deberías irte y se cancela el trato. Quien necesita el favor aquí eres tu, no nosotras.

...

Y si, me vi aceptando y fui por el mocoso al día siguiente, las vi despedirse y este mirarme de mala manera antes de subir a mi coche.

-En la estación a media hora de aquí esperará por ti un chico.- dijo la Comandante -Te entregará unos documentos, los tomarás y se los entregarás a la señora Lee- ¿como sabía el nombre de soltera de mamá?

-Tu hermana ya fue convocada, el otro bombón también- dijo la pelirosa recorriéndome con la mirada -Te ves mejor con el uniforme- dijo, vestía ropa de civil -O sin ella.

-Yare-Ni- llamó su tía como un reclamo

-¿Qué? A la tía seguro no le molesta. Si tu no aprovecharás este bombón yo podría...

-No, no puedes- dijo tajante y se alejó

-Está celosa- dijo la otra para entonces seguirla dentro de la casa.

Mi teléfono se iluminó en una llamada, era Yoori, luego de hablar sobre cuán rápido preparaba su equipaje para venir, cerré la llamada. El mocoso continuaba en silencio.

-¿Tienes hambre? ¿Que cosa comen los niños?

-Comida tonto- dijo de mala gana y deseé lanzarlo por la ventana. Luego recordé que no había llamado a mamá para avisarle.

-Cariño- pronunció apenas tomó la llamada

-Mamá- llamé -Voy camino a casa, necesito un favor.

-Oh- aquella respuesta no me gustaba -¿Que necesitas?- dijo y divisé el joven a lo lejos, iba cubierto y tenía unos documentos en sus manos.

-Espera un momento- bajé del auto y este solo se acercó y los entregó, luego se perdió entre la gente. Volví al auto y los abrí, el mocoso continuaba en su lugar.

Era un acta de nacimiento, de un niño de 7 años, su nombre era de quien estaba tras de mi y su apellido el mío, tuve que leer dos veces antes de volver a respirar.
-Mamá- llamé -Necesito que cuides un niño- lo dejaría allá y buscaría a la loca de su madre para que me explique que mierda es esto.

-¿Tienes un hijo acaso?- pronunció entre risas -Oh, tengo otra llamada, te llamo más tarde- dijo y no me permitió decir más pues cerró esta.

-Niño, tu madre ¿es en verdad tu madre?- a este punto dudaba sobre cualquier cosa, dijo ser hijo de un militar importante, del Norte. Y ahora cambiaban su apellido por el mío, me pedían. Bueno, me exigían llevarlo con mamá y...

Mis pensamientos fueron interrumpidos con el resonar de mi teléfono. -Hijo, no hagas paradas, tráelo hasta la estación- dijo segura -Cuando su madre regrese todo estará en orden.

-Mamá- no me creía aquello.

-Hijo, no explicaré esto. Haz lo que se te ordenó, cuida de ese niño

-¿Quién es él mamá?

-Tu sobrino- reí con gracia y la escuché resoplar -Tengo una hija, una hija cuál se crió con su papá cuando me casé con tu el tuyo- dijo. Ella no es mi madre biológica, mi padre se casó con ella cuando tenía 3 meses, ella me crió, y  es mi madre. Pero no sabía que había estado casada anteriormente, que tenía una hija. -Cuando ellas lo resuelvan estará todo bien.

-No se cuidar de un mocoso mamá

-Um, tu padre irá por el a la estación. Pero tu no puedes venir con él. Haz lo que te digo. 

Lo miré cuando mi madre cerró, ¿ella era su hija y él su nieto?

.