La desesperación se había adueñado de mí cuerpo en tan solo segundos. Conduje hasta la escuela y apenas apagué el vehículo bajé de este sin siquiera molestarme en cerrar la puerta, mi arma iba lista para disparar una vez viera algo fuera de lugar.

Se suponía que su madre debía venir pistándome los talones, pero no la veo por ningún lado.

Apenas entré a su aula todos se alarmaron, tampoco es que fui discreto en la manera que entré, este estaba sentado transcribiendo de la pizarra al igual que sus compañeros y aquello me generó un innegable alivio. 

De todos modos no podía dejarlo aquí sin antes estar seguro de haber eliminado el peligro. -Vamos- hablé conciso, no se si por todo el tiempo que lleva escapando y en efecto tiene experiencia o porque mi tono era de advertencia pero este tomó sus cosas con rapidez antes de besar la mejilla de la niña a su lado, la recordaba, era nuestra vecina de en frente, estos suelen pasar el tiempo juntos.

De ser otra la situación quizás le haría bromas pero debía permanecer alerta todo el camino. No podía llevarlo con mis padres aún, ahí tampoco estaba seguro.

No creí pensar en eso pero la loca de los cuchillos era quien podía mantenerlo a salvo mientras yo podía emplear mi tiempo en alejar a quien lo busca y matarlo, porque mierda que lo mataría, pero esta a estado de trabajo en trabajo desde que vinimos a Daegu, mi hermana. Park puede protegerlos, emprendí camino hasta la camioneta pero el vehículo militar que se acercaba a la escuela fue más rápido, en este estaban Suran y Jungkook. -¿Qué fue lo que pasó?

-Alguien me envió esto- les mostré la foto con una clara advertencia de que su tranquilidad peligraría. -Pueden estar observando justo ahora.

El niño permanecía a mi lado tomando mi mano y a pesar de que estaba en silencio notaba lo nervioso que estaba por no conocer lo que pasaba.

-Vamos al pelotón- asentí ante lo dicho.

Hice subir al niño a mi auto y estos me siguieron de cerca hasta tomar la carretera. Tomé un camino distinto por el que estos llegaron, era más rápido pese a que los caminos no eran del todo planos. Pero nos haría llegar antes.

Al apenas unos 5 minutos de camino el humo y fuego de un vehículo me alertó, este no parecía tener mucho así por lo que pude identificarlo como uno militar.

Pensé en pasarlo de largo y mandar a investigar luego pero en cambio bajé del vehículo y caminé hasta Jungkook quién verificaba este, hice una señal con la cabeza para que Suran fuera con el niño en caso de ser una trampa. -Fary, ¿dónde...

-Creíamos que la encontraríamos contigo, ella salió corriendo apenas le dijimos. Vinimos aquí por si necesitaban refuerzos- mostró la aplicación para rastreo que posee su celular, este puede verificar cada vehículo militar y teléfono de los miembros activos de la milicia.

-El suyo- este tecleó y en segundos apareció la ubicación, justo donde estábamos, el vehículo estaba totalmente solo, ni siquiera parecía haber marcas de neumáticos por lo que el choque fue abrupto. No intentó frenar.

-Creo que lo del niño fue una distracción para llegar a ella.

Mi teléfono descansaba sobre la oreja, necesitaba refuerzos aquí -¡Quiero a todo el puto pelotón buscando a la Comandante Lee!

-Min, cálmate. Eres estratega, la conoces pero no puedes dejarte guiar por...- lo callé con la mano recordando el mensaje que había recibido.

-Este número, rastréalo- digitó los números mientras esperábamos a que aparezca la dirección, eso no pasó.

-Ya no existe- llevó su teléfono a la oreja -Kim, quiero que me envíes las imágenes satelitales de las coordenadas en las que me encuentro de los últimos 20 minutos. Lee- dijo por último respondiendo a no sé qué pregunta, mis oídos sumaban mientras mi manos se encontraban temblorosas, estaba tan temeroso por el mocoso porque el no tendría como defenderse que dejé desamparado al verdadero blanco.

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