—Helena tiene problemas con Zack...— le dijo Kara a Clay mientras mantenía su atención en su teléfono —Dice que se ha vuelto loco o algo así.

—Ya sabes cómo son, de todas formas, la boda ya es cuestión de horas— explicó Clay, quien se estaba recuperando exitosamente de sus múltiples heridas.

—También tuvo un encuentro con tu agresor... No entiendo nada la verdad. Dijo que Zack lo había capturado.

—Ni me lo recuerdes, cuando me recupere, voy a pedirle una revancha.

Kara volvió a golpear a Clay en el brazo para que se dejara de juegos. Ambos se rieron como niños pequeños.

—Espera, ahora lo entiendo, creo que no podrás tener tu revancha... Mira esto— Kara se acostó al lado de Clay y comenzó a reproducir un vídeo desde su teléfono móvil.

En este se veía claramente como los soldados de bajaban de los vehículos para luego apuntar sus armas contra Tobías, quien en ese momento parecía un simple vagabundo inofensivo, pero el problema viene cuando Zack da la orden de captura y los soldados comienzan a empalar a Tobías...

—El vídeo es viral, más que los otros sobre él... Las teorías suben como espuma, algunos dicen que es un alien, otros dicen que es un experimento del gobierno, entre otras conspiraciones más... Pero sin duda la mayoría cree que se trata de un montaje muy bien hecho.

—Y luego están las personas que conocen toda la verdad, como Helena. Nosotros solo conocemos una parte de la historia.

—En eso tienes razón, ella es la única que ha visto sus habilidades en vivo y en directo, aparte de los presentes en el vídeo...

—Tengo un mal presentimiento sobre esto— admitió Clay.

En ese instante, el teléfono móvil de Jara comenzó a vibrar. Se trataba de Helena.

—Hola, ¿Hay avances?— exclamó Kara.

—Hola de nuevo, de momento, no. Zack se fue hace algunos minutos, pero tengo miedo de lo que pueda pasar con Tobías.

—Hely...— no podía creer que siguiera pensando en ese hombre.

—En fin, ¿Sigues con Clay?

—Si, aquí está— Kara le pasó el teléfono al herido Clay con el altavoz puesto, para que ambos hablarán de una vez por todas.

—Holaa, sigo vivo.

—Si, es una pena tener que seguir aguantandote.

Ambos rieron al unisono para luego continuar con la charla.

—¿Cómo estás?

—Me duele todo la verdad, pero en unas semanas estaré como nuevo. Además, podré asistir a la boda así que no hay problema con eso.

—Perfecto. Prometo ir a visitarte pronto, y sobre la boda... Me gustaría posponerla.

—¡¿Que?!— exclamaron Kara y Clay al mismo tiempo.

—Esperen, aún no es nada seguro. Tengo asuntos pendientes con Zack— a Helena le dolía la cabeza de solo pensar en eso.

—Acabamos de ver un vídeo, allí se mostraba todo lo que me estabas describiendo antes— dijo Kara.

—Bueno, al parecer Zack también tendrá que darle una buena explicación a los medios...— afirmó Helena.

—Y una muy buena, de hecho— complemento Clay.

—Pero en fin, solo... Necesito descansar— se produjo un silencio en la línea —Hablamos luego.

Helena colgó de repente. Clay y Kara se miraron con preocupación.

—Ve con ella. Yo estaré bien— dijo Clay.

—¿Seguro?

Clay sonrió con calidez para transmitir su gratitud y seguridad hacia Kara.

—Seguro, pero antes ven aquí y dame un beso de despedida— pidió Clay apartando su mirada con timidez.

- - - - - - - -

El paisaje era demasiado... Sangriento. La habitación que antes lucía limpia e impecable, ahora estaba bañada de sangre por todas partes. Fonseca había estado un poco ocupado con Tobías.

—¿Ya te aburriste?— preguntó Tobías. Estaba sudando y sus piernas estaban tiradas en el piso. Un nuevo par se estaba regenerando de la nada.

—De hecho no. Me hubiera gustado jugar un poco más contigo, pero el señor Zack ya viene y no queremos que encuentre todo sucio— respondió Fonseca mientras dejaba las herramientas ensangrentadas en el carrito.

Justo en ese instante el personal de limpieza hizo presencia en el lugar para poder limpiarlo todo antes de la llegada del jefe. En pocos minutos la habitación ya estaba como nueva, excepto por Tobías, quien estaba completamente desnudo y lleno de sangre por las mutilaciones, pero su cuerpo seguía intacto, como siempre.

Por último, Fonseca y todo el personal de limpieza salieron de la habitación sin decir palabra alguna. Dejaron a Tobías solo, aunque seguía siendo vigilado por los científicos que estaban al otro lado de la pared. Se encargaban de monitorear a Tobías, sobretodo su comportamiento y sus palabras.

El hombre de los ojos escarlata permaneció en silencio con cabeza baja durante los veinte minutos que tardó Zack en llegar a si encuentro. Este último iba vestido con un traje impecable.

—Al fin nos conocemos... Formalmente— dijo Zack mientras se sentaba en una silla que estaba frente a Tobías.

—Es un gusto, su majestad— respondió Tobías sin molestarse en levantar su cabeza para verlo.

—¿Sabes algo? Has perturbado mi vida más de lo que lo ha hecho cualquier persona o empresa enemiga, y en tiempo récord. Solo te bastaron un par de días.

—Y eso que ni siquiera era mi intención, no te gustaría ver cómo acaba todo cuando en verdad quiero causarle daño a alguien. Generalmente hay mucho... Fuego. Todo arde como mil soles.

—Es una pena que ya no puedas apreciar su luz. Lamento informarte que vas a pasar mucho tiempo aquí encerrado— Zack no expresaba odio ni rabia en sus palabras, lucía tranquilo, como si ya lo tuviera todo resuelto —Y estoy comenzando a tomarme esto personal.

—Si, creo que un poco. De todas formas no deberías perder el tiempo conmigo.

—Se que saldré victorioso de esto, la llave de la inmortalidad, el gen perfecto. No tienes ni la menor idea de lo que significará esto para el mundo.

—Lamentablemente, sí la tengo. Las consecuencias de ese descubrimiento serían catastróficas— está vez Tobías levantó su cabeza por primera vez para mirar fijamente a su contrario —¿Lo entiendes?

—Lo hago, creeme, pero de todas forma no pienso dar un solo paso atrás...— Zack se puso de pie y comenzó a caminar alrededor de Tobías —Mi abuelo fundó la primera empresa familiar hace algunos años... Fue quien construyó los cimientos de lo que ves ahora. Luego tenemos a mi padre, quien era alguien bastante conservador a decir verdad. Él se centraba únicamente en el dinero, por último estoy yo. El más ambicioso de todos... Quien busca cambiar el mundo como nunca antes se ha visto.

—Si, si, lo que digas— respondió Tobías mientras bostezaba. La verdad le estaba aburriendo demasiado.

—Lamento que te haya molestado está pequeña charla, pero ya me tengo que ir— Zack se acercó a Tobías y lo miro fijamente, sin titubear un solo segundo —Tengo una boda que planear, ¿Sabes?

Aunque Tobías no quisiera, le hervía la sangre. Le molestaba escuchar esas palabras por parte de Zack.

—¡Sabes que ella no será feliz contigo!— gritó Tobías en un intento fallido por hacer que Zack recapacitara.

—Claro que lo será. De alguna u otra forma aprenderá.

Tobías no estaba muy seguro de que significaba eso, pero no podía ser nada bueno. Esas palabras habían causado más daño que cualquier otra cosa que le haya dicho antes sobre su aprisionamiento.

Intentó safarse de las ataduras con todas sus fuerzas, pero era una perdida de tiempo.

Al final Zack salió de esa habitación con una pequeña sonrisa victoriosa y Tobías se quedó solo... De nuevo.

—Mierda— susurró por lo bajo para luego cerrar sus ojos y perderse en su oscuridad.

- - - - - - - -

¡Hey! ¿Que tal? Espero te encuentres muy bien, está es una notita para expresar mi agradecimiento hacia todas esas personas que se toman el tiempo de leer lo que escribo. De verdad, mil y mil gracias por todo, es increíble como algunas palabras pueden cambiar el día de alguien... Pero en fin, solo pasaba por aquí para eso, ¡Gracias por leer! <3