Me bombardearon con preguntas cuando llegué a la base.

- ¡DÉJENME EN PAZ YA!- Les grité a todos y luego de eso me dirigí para la carpa y me quedé ahí encogí mis piernas abracé una almohada y lloré en ella.

- Zoé nena ¿Todo bien?- Me pregunta Lana, pero no contesté luego sentí un peso sobre mi cama, miré y era Lana.- Zoé ¿Pasó algo cuando saliste? ¿Alguien te hizo algo malo?

- Ella me odia Lana, me odia..

- ¿Quién?

- Rose.

- ¿Quién?

- No puedo explicarte porque sería muy largo y ahora no es buen momento para eso pero, Rose es mi hermana gemela.

- ¿Cómo que tienes una hermana gemela? Pero..

- Mañana te explicaré todo con detalle ahora quiero dormir estoy muy cansada y me duele la cabeza, porfavor Lana.

- No hay problema nena, duerme bien y ya mañana hablaremos.

Después de bañarme y vestirme me preparé para decirle todo a Lana.

- Me secuestraron ayer por la noche Lana y fue nada más y nada menos que Rose mi hermana, la conocí en un lugar apartado de la base ella me confesó todo hasta me leyó una carta que nuestra madre escribió para mí cuando Rose y yo éramos unas bebés de apenas una semana de haber nacido, en la carta mamá explica detalladamente cómo y porqué tomó la decisión de separarme de Rose, durante todos estos años crecí y viví bajo un engaño pensando que Sabrina era mi única hermana y ahora resulta que tengo una gemela?

- Todo lo que me dices es increíble Zoé pero
¿Cómo es ella?

- Físicamente es idéntica a mí tenemos la misma marca de nacimiento y ahora lo único que nos puede diferenciar es un tatuaje que Rose lleva en su hombro por la parte de arriba,.

- ¿Pero cuál es la razón que te tiene tan mal?

- Aparte de saber que tengo una gemela, es el hecho de que ella me odia no quiere verme ni saber nada de mí

- Y eso?

- Porque como fuimos separadas al nacer y recién ahora nos conocemos después de tantos años somos unas desconocidas la una para la otra aunque llevemos la misma sangre,  y Rose está herida y tiene mucho rencor y odio en su corazón pero lo que más supera todo eso junto sin duda es su dolor, dolor que no la deja vivir en paz.

- ¿Qué piensas hacer ahora con todo esto que sabes?

- Dejaré pasar unos días y después buscaré a Rose aunque eso signifique que muera al hacerlo.

- ¿Qué dices?

- Rose me amenazó con matarme si volvía a verme o si me acercaba.

- No pensarás arriesgarte de esa manera por ella.

- Por supuesto que sí, es mi hermana y tengo que demostrarle que la quiero apesar de lo que sucedió en el pasado que la quiero sinceramente, porque ahora ella creé que yo la odio y que sólo estoy fingiendo mi amor hacia ella.

- Podrías dejarme ir contigo Zoé?

- No quiero que Rose te haga algo prefiero morir yo.

- No digas locuras niña, yo no pienso dejarte morir tan fácilmente y si te vas a morir que sea por vieja y por causas naturales ¿Entendido?

- ¿Qué?

- Tú te quedarás en este mundo hasta que la vida decida cuando irse de tu cuerpo ¿Ok Zoé?

- Ay me harás llorar pero de risa mujer.- le dije sonriendo.

- Bueno al menos logré hacerte sonreír y eso es un gran avance porque no me gusta ver caras tristes en mis amigos y menos en tí que te quiero tanto.- sonreí mas y me abracé con Lana.

10:40 p.m. de la noche, todo silencioso no se ve a nadie más que yo en la base,.

- ¿Qué haces aquí sola?.- Pregunta Ethan

- Quería sentir el viento es todo pero ya me voy.

- Espera.- Me retuvo ahí con su mano sobre mi brazo al soltarme se empezó a comportar de manera muy extraña.

- ¿Si Ethan?

- Ven conmigo, te quiero enseñar algo.

- ¿Ahora?

- Si ahora, es mejor ya que estamos solos y nadie nos podrá interrumpir.- Luce muy serio al decir eso.

- Iré aunque eso signifique que me puedas hacer algo malo.

- Sólo sígueme.- Mientras le seguía el paso todo se iba oscureciendo más y más, llegamos al bosque y una luz amarilla se hacía visible frente a nosotros, ya estando más cerca logré apreciar bien de qué se trataba todo, es una casa en el árbol literalmente y una escalera hecha de palos con cuerdas cuelga de ella hasta el suelo.

- Sube tú primero Zoé.

- ¿Por qué yo primero?
Es tu casa no la mía.

- Pero necesito que lo hagas tú primero.

- Lo que pasa es que me quieres ver las nalgas ¿No?

- No necesito que subas una escalera para verte las nalgas cuando perfectamente puedo hacerlo a cualquier hora del día y cuando quiera.

- Idiota.- Todo eso lo dijo de manera seria y muy segura sin miedo a nada ni a nadie. Subí rápido para evitar cualquier tipo de problema ya estando dentro admiré todo.

La casa es lo suficientemente amplía como para que 3 personas puedan vivir aquí, no sé cómo ni cuando está casa fue construida pero no está nada mal de hecho es muy agradable y bonita sin mencionar la calidez que producen sus paredes de madera y todo lo demás.

- Este es mi lugar especial por así decirlo, aquí vengo para pensar y aclarar todo en mi mente para estar solo y relajarme del resto del mundo es algo así como mi espacio personal y está aquí porque no quiero que nadie lo encuentre y se apodere de el o lo destruya es algo muy importante para mí.

- Y si es así
¿Por qué me trajiste aquí?

- Porque aunque no lo creas confío mucho en ti, y me sentí seguro de traerte para que conocieras este lugar.

- Confías en mí, después de todo lo que ha pasado.

- Si y no veo porque no debería ya que tú y yo somos.

- ¿Somos?.- Pregunté para que él complete su frase.

Avancé hacia Ethan quedé muy cerca de él y de su rostro levanté mi mano poniéndo mis dedos sobre sus labios tocando  los dos y rozandolos a la vez,. Él no se mueve no hace nada ni siquiera parpadea, entonces acerqué mis labios a los suyos tanto que puedo oír sus latidos están muy acelerados. Después me devolví a donde estaba antes.

Y cruzada de brazos lo miré.

- Te juro Zoé qué estoy haciendo un esfuerzo más que enorme por no agarrarte y pegarte contra esa pared para besarte y hacerte mía ya.

- Y yo qué creía que entre nosotros no había ni nunca habría nada.- Respondí.

- Mira aunque no seamos nada, eso no quita que sienta deseo y atracción por tí.

- Déjame decirte algo Ethan, hay literalmente bastantes chicas en la base y muy bellas por cierto y de todas ellas ¿Te sientes así por mí? No te entiendo.

- Estamos en las mismas porque yo tampoco me entiendo.

- Además tú no eres feo para nada, si quisieras podrías tener a cualquier mujer a tus pies con solo verla así como me ves a mí.

- Realmente no me interesa hacer algo así con nadie más.

- Pero por qué conmigo.- Ethan vino hacia mí para seguirme viendo así.

Y yo me estoy mostrando indiferente ante él.

- Lo que más me molesta es que cada vez que te veo Zoé, siento muchas cosas. Buenas y malas pero lo peor de todo, es que me pareces tan malditamente hermosa y eso no lo puedo soportar lo odio y quiero dejar de verte así-

No lo pensé ni lo dudé, interrumpí sus palabras con un beso y 5 segundos después me alejé de su rostro para decirle.

- Yo digo lo mismo, Ethan eres el chico más atractivo que he conocido incluso he llegado a pensar que esa belleza que tienes no es normal y que algo te hicieron para que seas así de lindo.- Ethan; Piel neutro ni muy blanca ni muy oscura, ojos color gris claro, cabello negro como la oscuridad de la noche y algo largo lo suficiente como para hacerse un peinado o cualquier tipo de coleta pequeña. Tiene músculos apesar de tener mi misma edad y mide 1,80 mientras que yo mido 1,60, soy una hormiga a su lado.

- ¿Y quieres saber por qué siempre te miro de esta manera?

- Porfavor.

- Porque involuntariamente me excito cuando te veo y mucho más cuando estás cerca de mí como ahora pero me he aguantado eso por todo este tiempo..- Rocé de nuevo los labios de Ethan y luego lo besé directamente.

A medida que ambos nos besábamos Ethan me decía cuando tenía oportunidad que si esto seguía así él no iba a parar por nada del mundo hasta haber hecho algo así conmigo. Y le dije que no me importa que tomaré el riesgo.

Y tal cómo él lo dijo, me alzó entre sus fuertes manos para pegarme brusco contra la pared y ahí nos dedicamos a besarnos, Ethan en un momento agarró ambos lados de mí camisa y de un solo tirón la abrió muy fácilmente haciendo saltar algunos botones de su lugar y dejando mis senos con el sujetador expuestos,y poder sentir el pecho suyo contra mis senos es algo que despierta más y más mis deseos sexuales y demás cosas que siento por dentro.

Él mantiene el equilibrio de manera que puede usar sus manos para otra cosa sin preocuparse porqué yo pueda caer, los besos entre nosotros no paran ahora está tocando mis senos.

Después me ayudó a quitarme la camisa y la tiró. Ahora estoy en shorts y en ropa interior. Ethan se quitó la camiseta haciéndome babear con ese cuerpo tan perfecto que tiene esculpido por los mismos ángeles, dios mío.

Me atreví a tocar su pecho y cada zona de el que tenga algún músculo marcado y bien formado o sea todo su pecho, hombros y brazos.

Me mordí el labio inferior al verlo de tal manera tan cerca de mí.

Entonces seguimos. Esta vez me soltó para sentarse él encima de la cama y yo sobre sus piernas poniendo cada una de las mías a los lados de sus caderas, él coloca su mano derecha en mi espalda cerca de mi cuello para arrancar el broche del sujetador de la misma forma que lo hizo con mi camisa rompiendolo instantáneamente.

Luego me lo quité por completo, y juro que puedo sentir bastante bien el miembro de Ethan debajo de mí, es duro.

- Ya estás duro
¿No es así Ethan?.

- Yo podría decir lo mismo de ti, tus pezones se están endureciendo.- Responde dejándome callada, este hombre no ha dejado de sorprenderme con lo que me dice.

No fue necesario quitarme el short está hecho de tela delgada y elástica bastó únicamente levantarme un poco correr a un lado esa parte que se sitúa justo en mi zona privada junto al calzón para que Ethan pudiera entrar en mí sin problema.

Con sus manos en mis caderas me ayudó a bajar para que entre por completo, a medida que lo hace voy sintiendo lo duro y grueso que es además de largo.

- Estás estrecha, igual que la primera vez.- Susurra en voz baja y muy varonil Ethan sabe muy bien como hacerme perder el control.

Sin darme cuenta Ethan ya me estaba penetrando, entrando y saliendo de mi interior no duele pero es raro y lentamente el placer hace su aparición en mí y en Ethan también.

10 minutos después no puedo callar lo que siento y se lo hago saber a Ethan en forma de gemidos y gritos.

- Puedes gritar tan fuerte como quieras que nadie te escuchará,.- Le obedecí midiendo el volúmen de mis gritos. Mientras me hacía saltar y saltar sobre su miembro haciendo que entre y salga varias veces.- Yo sé que nadie, escúchame bien Zoé, nadie te hará sentir tan mujer como yo.- Y tiene toda la razón , estando con Ethan todo es completamente diferente, él me hace sentir muy bien me siento una mujer de verdad cuando estamos juntos es como si estuviéramos unidos .

Además Ethan es el único que es capaz de tocar hasta mi alma sin hacer ningún tipo de esfuerzo.

- ¿Estás dispuesta a ser mía partir de ahora?.- Coloca su mano sobre mi mejilla.

- Toda tuya Ethan.- Contesté cegada y atrapada por todo lo que siento ahora.

Al instante la velocidad aumentó, y Ethan no se detiene para nada lo abracé fuerte esperando y sintiendo como el orgasmo se acerca.

- Zoé~...- Gime mi nombre y después de 3 minutos pasa, Ethan acaba y yo también, pongo mis ojos en blanco y clavo mis uñas en la espalda suya y agacho mi cabeza sobre su hombro, soltando un fuerte grito jamás había sentido tanto placer sexual en toda mi vida.

Luego de que la ola de placer se fue, puse mis manos sobre ambos hombros de Ethan, y mi cabeza sigue ahí encima no se ha movido.

Mientras las manos de Ethan permanecen en mi espalda ambos tratando de estabilizar nuestra respiración.

Ahora me siento llena por dentro. Gracias a él.

- ¿Te arrepientes de esto Zoé?

- Para nada Ethan ¿Tú si?

- Jamás podría arrepentirme de haber hecho algo como esto contigo, porque ha sido genial.

- A propósito, me debes un sujetador nuevo.- Dije agarrando el que rompió y mostrándoselo.

- Te debo?

- Ethan cuando me senté sobre ti me arrancaste mi sujetador de un jalón rompiendo así el broche y ese era el único que yo podía usar, los otros ya no me quedan y ahora gracias a ti no podré usarlo más.

- No es la gran cosa te conseguiré uno rápidamente, no dejaré que andes por la base sin nada debajo sabiendo que hay tantos degenerados y pervertidos por ahí.- Dice ahora enojado.- Nadie puede faltarte el respeto más que yo.

- ¿Cómo?

- En la cama Zoé,.

- Ah me vas a golpear y a insultar en la cama no?

- No dije eso!

- Entonces qué?

- Me refiero al sexo mujer.- Aclara rodando sus ojos con evidente molestia.

- Es que si me dices faltarme el respeto
¿Qué quieres que piense de eso?

- ¿No entiendes el sarcasmo?

- Claro que lo entiendo pero eso sonó raro.

- Ya no perdamos más tiempo hablando de cosas sin importancia.

- ¿Dices que haber roto mi sujetador no es importante?

- Zoé te estás comportando peor que una niña de 6 años a la que no le quieren comprar lo que quiere.

- No me importa yo exijo un sujetador nuevo.

- Y lo tendrás solo espera.

- Yo lo quiero ahora!

- Mejor te doy otra cosa ven.- Me calló con un beso tocando mi espalda suavemente, ya me está provocando de nuevo.