Era una perfecta mañana, el sol brillante prometía un día fantástico, el primero de la semana de entrenamiento de Yaoyorozu Momo y el encargado de tal infierno que vivirá no podría ser otro que Midoriya Izuku, el pecoso vio una oportunidad única al entrenar a su amiga y compañera de aventuras más allá de Japón.

Izuku- Momo-chan!- el peliverde irrumpió en la habitación gigante de la residencia con una bandeja con un desayuno muy nutritivo

Momo- Izuku-San? -la pelinegra se despertó de su gran cama acostumbrándose lentamente al brillo increíble del sol- que haces aquí tan temprano?

Izuku- es importante iniciar con tu entrenamiento o acaso lo olvidaste?- el pecoso se burló viendo el estado de la habitación y el de su amiga-noche interesante?

Momo- se podría decir que si- se levantó visiblemente desnuda y se estiró- no era nada comparado a ti pero fue bueno

Izuku- no haré más preguntas ahora come y te espero en el cuarto de esculturas de tu madre- el pecoso dejó la bandeja en una mesa y salió bajo la mirada curiosa de la pelinegra, que harían en ese lugar

No le dio muchas vueltas a eso y comió lo que trajo su amigo para después ir a ponerse ropa más cómoda y acuerdo a su entrenamiento. Una vez amarrado su cabello en una cola de caballo camino por la extensa mansión hasta llegar a una sala grande con recuadros que valían millones y muchas más esculturas, todas hechas por su madre.

Momo- puedo saber por qué aquí?- la pelinegra vio como su amigo jugaba con una estatua de ángel, una de las últimas creadas

Izuku- simple tu trabajo es lograr golpearme sin dañar ni una sola parte de ninguna estatua en la sala- la sorpresa de Momo sólo puso una sonrisa juguetona en su rostro-así espero que sepas dar golpes precisos en lugares pequeños además de evitar en un futuro que dañes accidentalmente cosas de gran valor o en su defecto estructuras inestables

Momo- estas seguro? Aun tienes el brazo enyesado

Izuku- solo significa que te será más fácil el golpearme inténtalo-sonrió calmadamente y la pelinegra creó un bastón de madera, si iba a golpear a las estatuas se aseguraría de ser con algo un poco débil- a sí el combate se acaba cuando yo lo crea necesario, lista?- Momo asintió dudosa-bien comenzamos- el pecoso fue detrás de la estatua de ángel y Momo detrás

Momo- no entiendo muy bien para... Que-giró por el mismo lugar que Izuku pero este parecía esfumarse en el aire-donde?

Izuku- eres muy lenta- el pecoso jalo la cola de caballo de la pelinegra haciéndole saltar en su lugar- intenta de nuevo- volvió a irse detrás de otra escultura y cuando Momo fue a ver desapareció

Momo- como?- escucho la risa del peliverde y fue en su búsqueda

No era nada sencillo el ejercicio, Izuku siempre se esfumaba en el aire y ella quedaba frustrada, no lograba siquiera saber dónde estaba el pecoso quien siempre le gastaba una inocente broma cada que podía, no entendía el que hacer.

Izuku- te rindes?- el pecoso salió otra vez detrás de una estatua y miró a Momo sentada en el frío suelo con una mirada frustrada

Momo- no entiendo como lo haces? Ni siquiera puedo calcular en donde aparecerás- el tono irritado le dio un poco de risa a Izuku- no es gracioso

Izuku- desde tu punto de vista no, desde el mío si- el pecoso se sentó al lado y frotó su espalda para intentar calmarla

Momo- porque estamos haciendo esto? es estúpido- la frustración se dejaba ver en sus palabras

Izuku- eso mismo creyó Daniel-San cuando el señor Miyagi le obligó a limpiar las ventanas y mira a donde lo llevó- miró a las estatuas frente a él, un Tigre en posición de ataque- las cosas más simples o estúpidas muchas veces son las que siempre funcionan no dudes de ello

Momo- por más que digas eso no le veo el sentido o algo que pueda usar de estar corriendo de aquí para allí intentando golpearte una sola vez

Izuku- ese es el punto, aprender a encontrar algo, no sabemos bien el cómo serán los desafíos de este año en el festival deportivo así que te entrenare para estar preparada para lo que sea y creo que ya me hago una idea de como continuar- el pecoso se levantó y levantó a su amiga ahora irían a otro lugar

Pasado un par de minutos estaban afuera en el Gran jardín que tenía los terrenos de la mansión Yaoyorozu, no era sorpresa para nadie lo extenso que era y para ser sinceros era muy pequeño comparado con otros en otros lugares de los Yaoyorozu.

Izuku- bien con esa prueba de velocidad y pensamiento rápido de antes ahora se que tenemos mucho trabajo por delante así que haremos esto- lanzó una pelota pequeña a la pelinegra quien estaba sorprendida por su amigo- lo primero, entrenarás tus reflejos, haremos que estés atenta a todo lo que te rodea después practicaremos tu pensamiento rápido, esa es una de las cosas que tienes que mejorar, piensas las cosas demasiado y por eso te es difícil decidir

Momo- y como soluciono eso?- el pecoso dio una sonrisa aterradora que la hizo temblar

Izuku- te pondré en situaciones peligrosas, tendrás que pensar rápido para no morir, obviamente lo haremos lento al principio para darte oportunidad de sobrevivir- el pecoso giro y miro el extenso jardín- al mismo tiempo que practicamos tus reflejos también te daré velocidad

Momo- como?

Izuku- de la misma forma que un viejo amigo mío con la cabeza de roca- otra vez esa sonrisa espeluznante- atreves de un campo de entrenamiento único, prepárate para tu entrenamiento

La pelinegra con miedo y confusión se paró delante de su jardín miedosa por lo que pasaría y cuando el pecoso sólo dijo que corriera ella lo hizo atreves de las hermosas flores y los globos con pintura?

Así es el pecoso había puesto una serie de trampas que tendría que evadir o terminaría mal, un circuito de casi un kilómetro lleno de trampas algunas más mortales que otras en las cuales la pelinegra se puso nerviosa pero aceptó el desafío que se le puso.

No fue hasta dentro de dos horas que la pelinegra logró completar el circuito y era más complicado que unas simples trampas de arena y globos con pintura, descaradamente el pecoso movió las flores para hacer un campo impasable que si llegaba a sí quiera pisar cerca de aquellas flores recibiría un castigo por parte de el pecoso, un extenso y extenuante camino que logró completar con mucho esfuerzo.

Izuku- nada mal para ser tu primer recorrido y no tardaste más de dos horas, eso es algo- el pecoso extendió una botella de agua que con gusto se bebió

Momo- eres odioso cuando te lo propones- se levantó cansada y recuperaba aire por correr tanto

Izuku- eres libre de descansar un rato pero tenemos que iniciar la otra parte de tu entrenamiento- el pecoso entró en la mansión seguida de una cansada e irritada Momo quien se arrepentía de pedir el entrenamiento-aquí

Momo- vamos a pelear?- estaban en el gimnasio en la zona de pelea que tenía su padre para cuando venía Izuku

Izuku- corrección golpearas la lona miles de veces intentando golpearme y yo te corregiré y perfeccionare tu técnica luego de esto vamos a comer y después entrenaremos con tu quirk

Momo- sigues con el yeso no creo que sea buena idea- ante la mirada compasiva de la pelinegra el pecoso se acercó al muro y golpeó con el yeso que al instante reveló grietas y con una flexión del brazo terminó de estallarlo- ok me callo

Izuku- gracias ahora iniciemos con lo que sabes del combate cuerpo a cuerpo- el pecoso se despojo de la sudadera que usaba solo dejando una camisa negra de tirantes que remarcaba muy bien su musculatura

Momo- solo se gentil no se hacer mucho- avergonzada y nerviosa fue al ring que había y se puso en una defensa pobre, era claro que sería un extenso camino para recorrer