Aquella mañana Nayeon despertó de muy buen humor, se apresuró en ir al baño y arreglarse frente al espejo, aprovechó en maquillarse levemente y refrescar su aliento. Salió con una sonrisa, esperando encontrar a ____ dormido, o despierto, pero no lo halló.

No había rastro de que se haya quedado la noche anterior además del par de almohadas y sábanas que permitían dobladas encima del sofá, pensó en mandarle un mensaje pero quizás ya le explicaría al verse en clases, trato de no pensar mientras caminaba a la cocina y empezaba a preparar su desayuno.

...

Caminó por los pasillos del instituto con la cabeza en alto, como siempre. Traía el celular de Víctor en sus cosas, ya encontraría la forma de dárselo a Hana para que se lo devolviera, aunque había borrado el vídeo no quería quedarse con nada que tuviera que ver con él.

-¿Qué tal tú noche?- Preguntó Sana mientras se abrazaba a su costado - Te desapareciste del chat.

-Estuve un poco ocupada anoche-Se excusó mientras llegaban a sus lockers.

-¿Con un chico?- Preguntó con picardía.

Nayeon recordó momento a momento todos los que vivió con ____ aquella noche, más específicamente cuando curaba sus heridas.

-Algo así- Se limitó a responder con una sonrisa nerviosa - ¿Y tú ya hablaste con tú eterno amor?- Pregunto en broma.

-Sí.

Nayeon la miró con sorpresa.

-¿Y de qué hablaron?- Insistió

-Puede que me haya invitado a salir- Supuso mientras una gigante sonrisa adornaba su rostro - Lo hizo para disculparse sobre un altercado que tuvimos antes- Explicó - Pero el hecho de que él me haya invitado me hace tan feliz como no tienes idea.

Pero Nayeon lo hizo, comparándolo a lo que experimentó la noche anterior con ____.

-¿Y crees qué algo pase en dicha cita?

-Quiero creer que sí- Admitió.

Nayeon no pudo evitar emocionarse por Sana, la chica no paraba de hablar del muchacho que le gustaba, notando cuánto lo quería no podía hacer nada más que desear que tenga suerte con él, pesé a que aún no le decía quién era, Nayeon ya sentía que le caía bien -Nicolas está mirando hacia acá- Susurró con disimulo.

Pero ella lo ignoró, no habían vuelto a salir desde aquella noche en el bar, en parte por el incidente con Hyunjin y en otra porque nunca le gustó desde un principio. En cuánto iba a comentar algo pudo notar como todo el pasillo pareció enmudecer, levantó la mirada, tratando de buscar el motivo, y lo vio caminar entre las personas.

-Oh Dios- Susurró Sana -¿Qué le pasó?

A Nayeon le bastó un pequeño vistazo para distinguir que a comparación de la noche anterior, hoy sus heridas se veían mucho peor, incluso se atrevió a decir que tenía ojeras que ayer no había notado.

-Hola- Susurró cuándo ____ pasó por su lado.

Pero él solo le dedicó una pequeña mirada y un leve alzamiento de cejas antes de continuar su camino.

-Nunca lo había visto así, él no es de meterse en problemas- Comentó Sana mientras lo seguía con la mirada, Nayeon por su parte se sentía confundida.

Ayer habían tenido un momento especial, ignorando la discusión que tuvieron en su auto, antes de dormir se sintieron cercanos, ella lo sintió así y pensó que el sintió lo mismo. Había ignorado el hecho de que se había ido de su apartamento sin despedirse, pero no entendía porque la acababa de ignorar, mucho menos porque le había dedicado una mirada tan desinteresada.

-Quizás intentó ayudar a alguien- Insinuó.

-¿____ metiéndose en asuntos que no lo incumben? Ver para creer.

...

Ese día despertó con un terrible dolor de cabeza, y sentía tener todos los huesos del cuerpo molidos, dormir en su auto no fue una buena idea, pero fue lo único que se le ocurrió a las 4 am cuando aún no lograba conciliar el sueño, sentía que si se apartaba de Nayeon podía descansar, pero tuvo el mismo resultado. Ese día llego a su casa más temprano de lo que había quedado con su madre, tomó una ducha y guardó su ropa sucia en uno de sus cajones, lejos del cesto de ropa, ya le quitaría las manchas de sangre a mano para que su madre no lo viera.

Fue cuando se cepillaba los dientes que notó mejor las facciones de su rostro, alarmándose por lo grave que se veía, no podía dejar que su madre lo viera así si no quería que se pusiera histérica, salió de casa sin desayunar y prefirió caminar hacía la secundaria en un intento de despejar su mente.

Pero no funcionó.

Nunca había sido partidario para llamar la atención, pero ahora no dependía de él, todo él que pasará por su lado se detenía a comentar su aspecto. ¿Algo podía ser más incómodo qué eso? Sí, que el rostro de Nayeon sea lo primero que viera al entrar al instituto, iba a ignorarla hasta que escucho su saludo, sólo acertó en darle una pequeña mirada mientras seguía su camino.

Realmente no tenía ganas de lidiar con ella ahora.

-¿Qué te ha pasado en el rostro?- Preguntó Hyunjin en cuanto llegó a su lado.

-Ayer me intentaron asaltar y me negué- Mintió mientras abría su locker.

-¿Y cuántos eran?- Preguntó mientras tomaba su rostro - Al menos dime qué fue más de uno, mira como dejaron tú rostro.

-Fueron tres, y ya no quiero hablar del tema- Finalizó mientras cerraba el locker con excesiva fuerza.

No quería hablar con nadie, sólo quería estar solo y se lo hizo saber a Hyunjin cuándo tomó asiento en clases y escondió su cabeza entre sus brazos.

-No es momento de dormir, Kang- Avisó su profesor mientras entraba al salón, junto al resto de estudiantes.

____ dudó en levantarse, pero quería evitar todo tipo de problemas ese día. Alzó la cabeza, pero mantuvo los brazos en la misma posición. Seokjin lo vió con sorpresa, pero no comentó nada al respecto, algo que ____ agradeció en silencio.

Estaba jugando con un lápiz en sus manos cuando vio pasar a Nayeon por la puerta.

-Disculpe la tardanza- Dijo caminando a su asiento.

-No te di permiso para que pasarás- Señaló Seokjin, cruzando los brazos.

-Acabo de disculparme.

Seokjin desistió mientras daba comienzo a la clase.

Nayeon se había caracterizado por no temer en pelear ni con compañeros o con sus profesores, las únicas personas de las que nunca había oído que hayan tenido un problema con ella era con el servicio de limpieza, sin mencionar que había oído que también pareció desafiar a la directora antes de ingresar al semestre.

No tenía límites, ayer se lo había dejado en claro.

Podía sentir su mirada en su espalda, se tentó a girarse y encontrarse con ella, pero el recuerdo de la noche anterior se coló de manera fugaz por su mente, fue suficiente advertencia para saber que estaba sintiendo cosas por ella, cosas que no debía sentir.

Quitando el hecho de que parecía un imán para los problemas, Hyunjin estaba enamorado de ella, y él no podía fallarle de esa manera.

...

-Ten.

-¿Qué es eso?- Preguntó Hana mientras fruncía las cejas en señal de confusión.

-El celular de Víctor, quiero que se lo devuelvas- Contestó, ofreciéndole el móvil con la mano extendida.

-¿De dónde lo sacaste?, ¿Cómo lo conoces siquiera?- Interrogó, tomando el aparato en sus manos.

-No creo que eso te concierne- Opinó mientras empezaba alejarse.

-¿____ te ayudo a cambio de las fotos?- Preguntó de pie, siguiendo a Nayeon.

-Yo no llegue a sacarle fotos- Se apresuró en negar - Pero si deseas sacar el tema, me interesa saber porque las buscabas. ¿Querías vengarte?

-Quería entender- Corrigió.

-¿De qué hablas?

Fue el turno de Nayeon de estar confundida con la situación.

-Nunca llegamos a tener relaciones- Confesó - Cada vez que las cosas empezaban a tornarse de esa manera él las paraba, y no de manera suave, siempre era abrupto- Explicó -Repentino.

-¿Y por eso querías acosarlo?

-En un principio pensé que yo era el problema, pero no se detenía en mí- Añadió - Cuando era su turno de retirarse la ropa buscaba excusas.

-Okey, no creo que deba saber esto- Advirtió Nayeon.

-Yo sólo quería saber si tenía algún tipo de defecto físico, un motivo por el cual se comportaba de esa manera- Continuó- Pocas veces llegue a colarme en la ventana de su casa, pero el miedo a que me atrapará era demasiado grande, por eso cuando Víctor pareció reconocerte de un vídeo te vi como la oportunidad de saber que pasaba.

-¿Te comentó de dónde saco ese video?- La interrumpió.

-No- Negó - Solo fue un video que halló de manera anónima, ya sabes.

Nayeon asintió, comprendiendo a lo que se refería, pero eso al contrario de aliviarla sólo incentivo su pesar. Fijó nuevamente su vista en la chica de ojos marrones.

-Sé que lo que hice estuvo mal, muy mal. Pero solo quería entender porque no me quiso- Se disculpó.

-Quizás sólo no estaba interesado en tener relaciones- Señaló Nayeon -Puede que te quiso por lo que eras y no por lo que le podrías ofrecer- Retomó sus pasos lejos de la chica, pero se giró una última vez - No llegué a fotografiarlo, pero si pude verlo, y en definitiva no tiene nada malo en él.

...

-¿No te duele?- Preguntó Sana mientras acariciaba la mejilla de ____.

-Si no lo tocas, no.

-Que amargado estás hoy- Dijo Hyunjin con fastidió.

-Me preguntó quién puede estar feliz si tiene el rostro como yo- Insinuó.

-Paren ustedes dos, mejor hablemos sobre el trabajo de Seokjin- Comentó Sana. ¿Ya han empezado la obra?

La obra de literatura, recordó ____, un trabajo que valía el 70% debía ser tomado en serio. Pero la verdad que entre tantas cosas no había quedado en un acuerdo con Nayeon, pero si las cosas seguían por el mismo rumbo prefería hacerlo solo.

-Michael y yo nos decidimos por una obra medieval- Comentó Hyunjin mientras bebía de su jugo de fresa -¿Tú y Nayeon han quedado en algo?- Se interesó.

-He decidido hacerlo solo.

-¿Volvieron a su enemistad?- Preguntó Sana con confusión.

-No funcionan para llevarse bien.

-¿Quiénes no pueden llevarse bien?- Interrogó Nayeon mientras se sentaba en la mesa de la cafetería, al lado de sus amigos.

Hyunjin y Sana voltearon a verse incómodos, ____ por su parte estaba muy interesado en el color de la mesa.

-¿Por qué se han quedado mudos?- Preguntó, frunciendo las cejas.

-Yo me encargaré del trabajo de literatura- Dijo ____, aún con la vista baja.

-Se supone que es en equipo- Señaló Nayeon, sin preocuparse en esconder la confusión de sus facciones.

-Ve el lado bueno- Alzo la mirada -No te obligaré a hacer nada.

Ambos pares de ojos se encontraron, pero esta vez era hielo chocando entre ellos, compartiendo el mismo ceño fruncido, dejando que sus miradas mataran por ellos. Ignorando todo su alrededor, sólo eran ellos y sus ojos hablando en su lugar.

-¿Así quieres hacer las cosas?- Preguntó la chica de ojos marrones mientras alzaba una ceja, ladeando una sonrisa.

-Así es- Afirmo, sosteniendo la misma expresión.

-Pero yo haré mi parte del trabajo- Aclaró Nayeon.

-Bien- Aceptó el chico de ojos verdes.