5. ¡Hey, suéltala!
-No has contestado los mensajes- Dijo Hana parándose en frente de Nayeon, quién sólo sonrió mientras mantenía sus ojos en el celular - Veo que no te has tomado en serio la amenaza.
-Disculpa ¿De qué hablas?-Preguntó fingiendo no entender.
-No juegues conmigo, Nayeon. ¿Acaso olvidas que tengo tu video? Si me da la gana de-
-Escúchame tú a mí, Hana- Interrumpió, mientras se ponía de pie, acercándose a ella - A menos de que te vayas en este momento y olvides por completo la existencia de ese video- La señaló - Me veré obligada a exponerte.
-¿De qué hablas?
-Que no creo que te haga gracia que todo el instituto se enteré que sales con un hombre mayor- Contestó - El mismo que te costea todo el tipo de cosas que no paras de presumir en redes, ¿Por qué no lo presumes a él también?- Preguntó con una sonrisa burlona en sus labios.
No fue difícil para Nayeon encontrar su video entre la galería de Hana, pero no esperaba también encontrar pruebas de que salía con un hombre muchísimo mayor y seguramente casado.
-¿Cómo sabes eso?- Preguntó mientras fruncía las cejas.
-De nada te servirá saberlo, es sencillo, me dices quién más tiene mi vídeo y borro toda la información de tu celular- Propuso mientras alzaba su móvil.
-¿Qué me asegura que no me estás tomando el pelo?- Observó su alrededor, incluyendo las gradas.
-A diferencia tuya, a mí no me importa en absoluto tú vida- Contestó con una sonrisa ladeada -Ahora, ¿Quién te mandó ese video?
...
-Estoy muerto, ____- Alcanzo a decir Hyunjin antes de inclinarse en los lockers y dejarse caer en el suelo.
-Es la tercera vez que lo dices.
-No entiendes- Se justificó - Estoy enamorado de cada cosa que tenga que ver con ella, siento que incluso sus defectos son virtudes.
____ no pudo evitar preguntarse si diría lo mismo si supiera del vídeo, pese a que no supiera de que trataba exactamente podía hacerse una idea, y conociendo a Hyunjin posiblemente le afectaría a él también.
-Sé que no se llevan de la mejor manera- Continuó - Pero no miento cuando digo que de verdad quiero estar con ella.
- No tengo problemas en que estés con ella- Reconoció, notando la sorpresa en los ojos de Hyunjin - De todos modos debemos hacer un trabajo, así que es mejor empezar a llevarnos bien si quiero aprobar con Seokjin.
-¿Entonces iremos a citas en grupo?- Preguntó en broma.
-No te emociones que aún me causa dolor de cabeza- Aclaró con una sonrisa, de lejos pudo notar como Sana se asomaba por el pasillo -Dame un momento- Avisó mientras se ponía de pie y caminaba hacia ella -Hola- Saludó llegando a su lado.
-¿Me hablas a mí?-Preguntó Sana con molestia en su voz, fijando de lleno su atención en los libros que tenía en sus brazos.
-¿Quieres qué te ayude?- Se ofreció siguiéndole el pasó.
-No.
-Sana, disculpa- Dijo parándose al frente de ella, obstruyendo su paso.
-¿Por qué exactamente?- Preguntó -¿Por ignorarme, hablarme mal?- Enumeró.
-He sido un idiota, lo reconozco- Aceptó -Y me disculpo por eso.
Sana no pudo sostenerle la mirada, ____ provocaba tantas cosas en ella que con solo mirarle podía sentir el temblar de sus manos.
-¿Puedo recompensarte con una salida a la cafetería?- Ofreció con una pequeña sonrisa - Me portaré bien- Bromeó.
No pudo evitar reír, nunca aprendió como enojarse con él.
-Acepto sólo si llevas esto a la biblioteca por mí.
-No hay problema.
-Por cierto ¿Saliste con Hana?- Preguntó mientras le seguía el paso.
-Ayer fue a comer a mi casa, sólo eso.
-¿Entonces no volvieron?- Indagó.
____ la miró de reojo, hacía tiempo notaba que Sana parecía manifestar sus sentimientos hacía él nuevamente, y por más que tratará de evadir el tema, no podía evitar pensar que ella parecía esperarlo.
Esperar algo que sospechaba, nunca llegaría.
...
Eran las 10:12 pm cuando ____ se encontraba en su habitación, en la comodidad de sus sábanas con los auriculares puestos y manipulando la laptop sobre sus piernas. Observaba fotos viejas, encontrándose con un par de cuando tenía unos posibles 9 años, se veía tan distinto ahora que si sus amigos lo comparaban con aquella foto pensarían que era otra persona.
Aunque fueran la misma.
Posó su vista en su celular, aquel día no había visto a Nayeon en el instituto, y aunque sabía que era de saltarse las clases no lo era de faltar al instituto, fue inevitable para el preguntarse si estaba bien teniendo en cuento todo lo que había pasado los últimos 2 días. Incluso quiso preguntarle a Hyunjin o Sana por ella, pero no quería levantar sospechas ni dar lugar a mal entendidos.
Fijo su vista en el celular nuevamente y lo tomo en sus manos, mandando un mensaje con torpeza.
«¿Por qué no fuiste a clases hoy?»
Se arrepintió en cuanto lo mandó.
¿Qué derecho tenía el para hacerle esa pregunta? Se planteó eliminar el mensaje pero sintió el vibrar de uno nuevo.
«Ya sé quién le mando el vídeo a Hana, me encontraré con él»
Frunció las cejas en cuanto terminó de leerlo, apartó la laptop de sus piernas y se sentó en la cama. ¿Acaso habían acordado un encuentro?
Sabía que la chica de ojos cafés no parecía tener límites, pero no creyó que llegara a tanto, tampoco entendía porque parecía preocuparle tanto a él, iba a dejar el celular en la cama cuando llegó otro mensaje.
«Si mañana faltó a clases es porque me pasó algo»
No terminó de leer el mensaje cuando había pasado a llamarla, oyó el tercer tono antes de colgar, intentó una segunda vez pero obtuvo el mismo resultado.
«¿Eso qué significa?»
«¿En dónde estás?»
Mandó los mensajes tropezando con sus dedos, se colocó los primeros tenis que encontró mientras intentaba marcar una tercera vez, parando la acción cuando recibió un último mensaje.
Era una dirección.
Sin contexto, sin respuesta, solo le compartía una dirección.
Casi no la conocía, poco le agradaba y creía que siempre buscaba los problemas.
Pero de todos modos tomo su chaqueta de jean y sus llaves, se despidió de sus padres y salió de casa.
...
El vecindario le parecía apagado, de poca confianza y peligroso. Solo quería recoger a Nayeon y salir de ahí cuanto antes.
Se detuvo al frente de una casa que parecía tener una fiesta bastante aparatosa, intentó marcar el número de Nayeon una tercera vez pero seguía sin contestar, lo mismo era con los mensajes, su última conexión aparecía a la misma hora que mandó el último mensaje. Casi convencido de que fue un error haber ido allí, retiró el freno de mano mientras retrocedía el carro, escuchando los insoportables gritos de una voz que terriblemente conocía.
Observó la ventana del copiloto, viendo así como Nayeon parecía pelear con otro chico, se apresuró en volver a colocar el freno de mano mientras salía del carro.
-¡Hey, suéltala!- Gritó mientras caminaba hacia ellos.
-¿Qué haces acá?- Preguntó Nayeon, arrancando lo que parecía ser un celular de las manos del chico.
-¿Disculpa?- Frunció las cejas.
Debía ser una broma de mal gusto, ¿Él había ido ayudarla y eso era lo primera que ella le decía?
-Devuélveme eso- Bramó aquel desconocido, halando su cabello, aprovechando que Nayeon le había dado la espalda.
____ frunció sus facciones, no detuvo sus pasos hasta que apartó al chico de Nayeon, tomándolo del cuello y arrinconándolo en la pared detrás de ellos.
-¿Qué tan imbécil debes ser para lastimar a una mujer?- Escupió las palabras.
-Déjalo, ya tengo lo que buscaba- Mencionó Nayeon a sus espaldas.
-Debes ser muy estúpida para creer que te dejaré ir con mi celular- Intentó forcejear, pero ____ lo seguía sosteniendo fuertemente del cuello -¿Cuál es tu problema? ¿Sabes el tipo de vídeo qué quiere borrar no?- Preguntó con sorna, dirigiéndose a él -¿Cómo puedes defender eso?
-A ella la respetas- Ordenó.
Atrayendo su cuerpo y presionándolo nuevamente con fuerza, provocando un quejido de dolor. Soltó el cuello de su camisa y retrocedieron unos pasos, sin apartar sus ojos de él.
-Vámonos- Insistió Nayeon mientras tomaba su mano y lo guiaba al auto.
-Hey, Vic- Saludó un chico mientras salía de la casa, en compañia de un amigo - ¿Qué es todo este alboroto?- Preguntó arrastrando las palabras.
-Nada importante, sólo un idiota defendiendo a la cualquiera de su novia.
Nayeon no pudo saber en qué momento tenía la mano de ____ entre las suyas, y al siguiente lo veía golpear de manera violenta a Víctor, escucho el arrebato y vio como casi caía por el impacto.
-No sabes con quién te estás metiendo- Advirtió mientras llevaba sus manos a su boca, sintiendo el correr de su sangre entre sus dedos.
-No me gusta que le peguen a mis amigos- Dijo el anterior chico en compañía del otro, ambos caminando hacía ____.
-No les tengo miedo- Desafío sin apartar sus ojos de Víctor.
El primer chico intentó pegarle pero lo esquivo dando un paso al costado, seguido de un puñetazo directo en su rostro, pero el otro que había permanecido mudo todo el rato se aferró a su brazo, fuerte.
-¿Qué haces?- Pregunto mientras intentaba empujarlo, pero le resultaba imposible, y de repente sintió un certero golpe en la mejilla.
-Acomódenlo para mí- Pidió Víctor mientras se sobaba los nudillos.
El chico al que anteriormente ____ le había pegado no dudó en tomar su brazo libre, aún desorientado por el golpe anterior intento forcejear, pero un dolor en el estómago casi le hizo flexionar las rodillas
-¿Creíste que sería tan fácil venir a mi barrio y hacer lo que se te diera en gana?- Preguntó mientras le proporcionaba otro golpe.
____ intentó volver a forcejear cuando sintió un peso a su costado, alcanzo a ver cómo Nayeon se montaba en la espalda del chico al que había pegado antes y parecía abrazarlo excesivamente en el cuello.
-Te dije que lo sueltes- Oyó como casi gritaba mientras empezaba a halarle del cabello.
Él aprovecho para empujar al chico que se abrazaba a su otro brazo, y darle un derechazo lo suficientemente fuerte para hacer que cayera al suelo. Respirando lo poco que el frio le permitía, en un intento de equilibrarse sintió como era empujado hacía el suelo, seguido de otro puñetazo en el mismo sitio donde ya tenía uno.
Tomó el cuello de Víctor con las mismas fuerzas que antes, y él hizo lo mismo, ambos forcejeaban con fuerza, pero ____ tomo la barbilla de Víctor e intento levantarla todo lo que pudo, empujándolo y tomándolo de los hombros con la suficiente fuerza para cambiar de posición.
Nayeon no pudo evitar caer de la espalda del desconocido, sintiendo su cuerpo rebotar en el pasto, vio como él se giraba caminando hacia ella, con la desesperación abriendo paso por todo su cuerpo tomo lo primero que encontró y se lo lanzó.
-¿Qué haces?- Preguntó mientras se tapaba la cabeza, tratando de evadir las piedras.
-Si no te vas ahora juro encontrar una que pueda romperte la cabeza- Amenaza mientras seguía tirando todas las que encontraba.
Él chico estuvo a punto de quejarse, cuándo vio algo que llamo su atención.
-¡Oye para, lo vas a matar!
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