-Vine en cuanto me llamaron, ¿Dónde está mi hijo?- Preguntó Areum apenas entraba a la enfermería.

Todos observaron como la mujer de cabello castaño caminó hacía el chico de ojos verdes, ignorando la presencia de todo su alrededor se sentó a su lado, apartando el cabello revuelto de su frente.

-¿Qué pasó, qué tienes?- Interrogó con preocupación.

-Podría preguntarle al entrenador- Comentó Nayeon con molestia, reconociendo a la mujer que ya conocía en fotografías.

-Señorita Im, me veré obligada a suspenderla un par de días si sigue con esta actitud- Advirtió nuevamente la directora, cansada de las palabras de la chica de ojos marrones.

-Ya sabe mis condiciones- Contestó con el mismo tono.

-Nayeon, basta por favor- Pidió ____.

Sus ojos se conectaron, el sentimiento de calma y enojo parecían mezclarse en sus colores. Suspiró, sentándose a su lado mientras se cruzaba de brazos. Ignorando la interrogante mirada que le dedicaba Areum.

-¿Podrían explicarme qué sucede?-

-El alumno Kang sufrió una lesión en la práctica de juego, un compañero lo tacleo- Explicó el entrenador -Tiene dos costillas rotas...

-¿¡Dos cosillas rotas!?- Exclamó, sorprendida por la gravedad de la salud de su hijo -¿Cómo es posible que tenga dos costillas rotas?, ¿Y la protección? Ni en los juegos se lesionó antes. ¿Cómo es posible qué lo haga ahora?

El entrenador guardó silencio, buscando la mirada de la mujer a su lado.

-Entiendo que debe tener muchas preguntas, le pido que me acompañe a la dirección- Habló con cuidado.

-¿Bromea? Primero debe ir a un hospital- Recordó Nayeon en un intento de ocultar su enojo.

-Oye- La llamó antes de tomar sus manos -Tranquila- Susurró.

Areum entendió de inmediato que aquella chica de cabello castaño era de quién ____ estaba enamorado, nunca vio que el chico fuera cariñoso con alguien que no fuera ella, pero ahora parecía ser otra persona a su lado. Podía sentir la tensión y hostilidad en el aire, creyendo que lo mejor era parar aquel teatro.

-Primero llevaré a mi hijo a la clínica y después conversaré con usted- Avisó después de ponerse de pie.

-Los acompañaré - Dijo Nayeon, imitando su acción.

-Usted no puede retirarse hasta que acabe la jornada escolar, sin mencionar que debemos hablar antes de su comportamiento- Aclaró la directora con firmeza.

-Podemos hablar después de que Nicolas sea suspendido- Señaló con una falsa sonrisa en los labios.

La mujer de ojos marrón oscuro iba hablar, pero Areum la interrumpió.

-Puedes quedarte, yo cuidaré de él- Hablo con dulzura mientras le dedicaba una amable sonrisa -Después puedes visitarlo.

Iba a protestar, pero desistió cuándo cruzó miradas con ____. Suspiró antes de asentir, acercándose al chico de ojos verdes.

-Serás la primera persona que me verá- Aseguró, adivinando lo que pensaba, que podía preguntarle.

Nayeon sonrió, dándole un fugaz beso en los labios, ignorando la presencia de las personas a su alrededor.

Plantó una arrogante sonrisa en sus labios antes de salir de aquella habitación que parecía explotar por la tensión, negándose a girar cuándo oyó como los adultos llamaron su nombre.

...

-Son pequeñas fisuras- Dijo el doctor mientras señalaba una placa -No es tan grave como dos costillas rotas pero de todos modos debe guardar reposo- Recomendó antes de tomar asiento en su escritorio.

Habían llegado a la clínica hace poco.

El camino fue corto pero lleno de incertidumbre, ____ no parecía querer hablar y Areum no iba a obligarlo por más preguntas que tuviera.

-¿Cuánto tiempo hablamos?- Preguntó ____ con esperanza.

-Un mes como mínimo para que tengas una recuperación adecuada- Contestó con sinceridad, notando el pesar que parecía instalarse en su mirada -¿Prácticas algún deporte?

-Futbol americano- Se limitó a responder.

-Podrás continuarlo si tomas reposo- Alentó.

-¿Qué medicamentos debe tomar para el dolor?- Preguntó Areum.

-¿Es alérgico a algún médicamente o se médica con regularidad?- Cuestionó mientras tomaba una pluma.

-Testosterona, una ampolla cada mes y quince días- Respondió de manera cortante, fijando sus fríos ojos en el hombre frente a él.

Guardó silencio cuándo pareció entender por qué consumía aquella sustancia, posó una nerviosa sonrisa en sus labios antes de ponerse de pie.

-Traeré los medicamentos para el dolor- Avisó antes de salir de la habitación.

-No era su intención incomodar- Regañó Areum.

Pero ____ no respondió, permaneció en silencio con la mirada fija en sus manos entrelazadas.

-Esa chica... Nayeon, ¿Están juntos?- Preguntó con delicadeza.

No sintió el curvar de sus labios, pero si notó la fija mirada de su madre en él.

-¿Difícil de creer?- Cuestionó.

-Es muy hermosa- Opinó -Solo no pensé que fuera tan... Opuesta a ti.

____ carcajeó, sintiendo el dolor punzante en su cacidad abdominal.

Consideraba que la palabra "opuesta" era muy poco para compararla con él, eran dos extremos muy lejanos, del tipo que por más cerca que estuvieran no podían llegar a tocarse.

-Pero me hace feliz que te quiera- Confesó -La manera tan intensa en que te defendió, y como solo parecía escucharte a ti me hace creer que de verdad te quiere- Explicó con una amplia sonrisa en sus labios -Que te acepta.

-Lo hace- Dijo son seguridad -Lo sabe- Confesó a un hilo de voz.

Areum amplió los ojos, y ____ pudo darse cuenta que Richard no le comento sobre la charla que compartieron la otra noche.

-¿Lo sabe...? Es decir, ¿Todo?- Indagó con sorpresa.

-Todo, mamá.

-¿Y cómo no la has llevado a la casa?, ¿Por qué no me la habías presentado antes? Si no es por esto no la hubiera conocido, estoy segura de eso- Indagó para sí misma -Y te besó frente a todos los adultos, ¿Siempre es así de atrevida? No digo que este mal pero me impresiona que justo tú- Corto sus palabras, conectando los puntos en su mente -¿Te quedaste a dormir con ella anoche?

____ enmudeció, le había dicho que se había quedado en casa de Hyunjin, solo Seojun sabía la verdad. Pasó a mirarla, contestando su respuesta con el silencio.

-Tengo dieciocho- Excusó.

-Pero sigues viviendo bajo mi techo- Refutó -Y de seguro ella bajo el de sus padres.

-Es un tema extenso, en realidad- Apartó la mirada.

-¿De qué hablas?- Preguntó con confusión, recordando una pregunta que llevaba bastante rato rondando su mente -¿Por qué insistía tanto en quedarse? Cuándo llegué parecían discutir sobre algo, ¿Qué me estás ocultando?- Cuestionó con seriedad.

-Mamá.

-_______- Lo llamó por su nombre completo.

Suspiró, desistiendo los intentos de evitar el tema.

-Han pasado muchas cosas que evitaba contarte- Empezó a hablar bajo la profunda mirada de su madre.

...

-¿Cómo es posible que mi hijo haya estado bajo acoso en el plantel académico y no se haya hecho nada al respecto?- Se quejó Areum con enojo, siendo tomada de la mano por Seojun en un intento de apaciguar su furia.

-Señora Kang-

-Quiero que todos los chicos responsables de esto hagan frente a sus acciones- Ordenó -Si mi hijo no puede jugar en el equipo ellos tampoco deberían.

-Es un pedido muy fuerte- Intentó hablar -El fútbol americano es el sello de este instituto, de todo el país- Aclaró -Suspender al equipo sería tentar a todos los alumnos a quejarse y crear un gran alboroto.

-Usted debe encargarse de eso, yo de mí hijo- Recordó -Me prometí a mí misma que mi hijo no volvería a ser atacado y no pienso quedarme de brazos cruzados- Dijo sin pensar, pero no sé arrepintió.

Cuándo ____ recién empezaba su tratamiento de hormonas era complicado tener que corregir a las personas sobre su apariencia, y en el colegio fue peor. Consideró incluso que recibiera clases en casa para ahorrarle los problemas, pero desistió cuándo el chico de ojos verdes se negó, alegando que prefería mudarse cuando finalmente luciera como se sentía.

Un niño.

-No intento justificarlos- Aclaró -Pero-

-Lo que esos chicos hicieron no está bien- Negó -Y no permitiré que las cosas acaben así.

Se frotó la frente con cansancio, ese día no dejaba de ser tortuosamente problemático, tanto. Que no pudo evitar sentir alivio cuándo Im Nayeon no se había presentado en su oficina, pero sentía que fue en vano, no contaba que la madre del alumno Kang tuviera el mismo, o incluso peor temperamento.

-Lo que mi esposa intenta decir- Habló Seojun- Es que sus acciones no son las correctas, y si el instituto no asume medidas para evitarlas o corregirlas, nosotros tomaremos las nuestras- Explicó con calma.

-La temporada de fútbol está a una semana.

-Lo sabemos, desde hace tres años vamos a todos los juegos- Señaló con obviedad.

-Hablaré con los padres de los alumnos- Cedió antes de ponerse de pie -Necesito que ____ realice una lista con los nombres de todos los jugadores que cree conspiraban en su contra- Indicó.

-Mañana la tendrá lista- Respondió Areum con dureza -¿Cómo presentará los exámenes?- Cuestionó.

-Acomodaremos eso en unos días, pero seguramente sea a comienzos de las vacaciones navideñas- Explicó.

-Bien- Aceptó Seojun en un intento de aliviar la tensión -Mantendremos el contacto.

-¿El alumno Kang está bien?- Preguntó con genuina preocupación.

-Lo estará.

...

-¿Olvidaron sus llaves?- Preguntó apenas abrió la puerta.

Sus padres tenían muy poco de haberse marchado, quizás por ello se extrañó al oír el timbre con tanta insistencia, considerando que su madre le prohibió ponerse de pie antes.

Pero no se imaginó que la chica de ojos marrones estaría frente a él, esperándolo con aquellos ojos que lo hipnotizaban siempre que lo veían.

-Si me das una copia de las llaves dudo mucho que la olvide- Comentó con una juguetona sonrisa en los labios.

-¿Nayeon, que haces aquí?- Cuestionó.

-Estas lesionado- Señaló, adentrándose en su casa.

-Si...- Pasó a mirarla.

-Y yo siempre quise probar algo- Admitió sin cambiar la sonrisa de sus labios.

Se limitó a tomar las manos de ____ cuándo se percató de la confusión que reinaba sus facciones, lo llevo a su habitación con cuidado, negándose a contestar sus preguntas.

Paró en el marco de la puerta, pasando seguro cuando la cerró detrás de ella. Lo acerco a la cama y le indicó con las cejas alzadas que se acostara en ella.

-¿Qué intentas hacer?- Cuestionó.

-Siempre me pregunté cómo era ser enfermera, ¿Sabes?- Sonrió -Y después de recibir tú mensaje y darme cuenta que tendría todo un mes para saberlo, decidí que lo mejor era probarlo ahora- Dijo con lentitud.

Empezó a desabrochar los botones de su camisa blanca, dejando a la vista el borde del brasier del mismo color.

...