Nayeon no fue consciente de en que momento empezó a correr hacía ____, pero no pudo acercarse, Tzuyu la había detenido.

-No puedes ir, deben examinarlo- Avisó a su costado.

-Debo estar con él Tzuyu, me necesita- Señaló con urgencia.

-Ahora necesita que lo atiendan, pude sentirlo cuándo lo alce a la camilla. Debe tener como mínimo una costilla rota- Informó con desdén, percatándose de la manera en que Nayeon amplió los ojos.

El fútbol era una de las cosas que más le fascinaban a ____, además de la literatura. Pensar por un momento que debía suspender el deporte a pocos días de plena temporada le revolvió el estómago. No pudo evitar buscar al chico de cabello caramelo, odiando como parecía divertirse con toda la situación.

-Voy acabar con su cara de niño bonito- Escupió antes de intentar caminar hacia él.

Pero Tzuyu nuevamente la paró.

-Te suspenderán- Intentó persuadirla.

-No me importa- Negó.

-Pero a ____ sí, y no me perdonará si te dejo meterte en problemas-Explicó.

Guardó silencio, la chica frente a ella tenía razón. Apartó el brazo de sus manos para cruzarlo en su pecho, siendo agobiada por toda la situación.

-¿Qué pasó?- Pregunto Sana cuándo se acercó a ellas, con el equipo de animadoras detrás de ella.

-____ se ha lesionado- Contestó Tzuyu.

Reconoció a Sana apenas la vio, pero fingió no hacerlo, no quería incomodar a la chica de ojos cafés.

-¿Cómo?

-El idiota de Nicolas hizo esto- Escupió las palabras con enojo.

Sana la vio con confusión, de verdad parecía que Nayeon estaba muy afectada con esto.

...

-Seis semanas- Dijo la enfermera- Máximo cuatro si toma absoluto descanso, pero de todos modos deben sacarle radiografías.

-Es imposible, la temporada de fútbol está a menos de una semana y es el corredor del equipo- Insistió el hombre de cabello canoso -¿Está segura qué tiene dos costillas rotas?

-Es sencillo notar las lesiones al tacto, y usted fue testigo de las quejas de su jugador- Recordó -Le recomiendo que convoque a otro muchacho y qué el alumno Kang cuelgue el uniforme por un tiempo.

-Está bien entrenador- Aceptó ____ con dificultad.

-Iré a informarle a tus padres- Avisó antes de salir de la habitación.

-Oh chico, lo lamento tanto- Se disculpó con genuino pesar, compartiendo su sentir.

Intentaba estar tranquilo pese a las circunstancias, respirando con lentitud para disminuir el dolor de su abdomen. Pensó en hablar, pero fue interrumpido.

-Señorita Im, no puede estar acá- Dijo una voz afuera de la habitación.

-No me importa- Se quejó Nayeon apenas entraba a la enfermería de manera atropellada -¿Está contento con esto? ____ está lesionado por su culpa.

-Esa es una acusación muy fuerte- Señaló aquel hombre mientras endurecía sus facciones.

-¿Y qué?- Retó, acercándose a la cama donde reposaba el chico de ojos verdes -No quita el hecho de que sea cierto, porque él está aquí ahora mientras Nicolas y su grupo de animales está celebrando que se salieron con la suya- Bramó con enojo- Dudo mucho qué usted desconozca los problemas que se vivían en el equipo.

-Señorita Im, le pido que se retire.

-No me iré de esta habitación hasta que Nicolas y sus amigos sean castigados, suspendidos o expulsados por esto- Avisó con dureza -Así que usted decidirá qué hacer.

-Nayeon, está bien- Intentó hablar ____.

Volteó a mirarlo, sintiendo como el enojo aumentaba al notar el dolor nublar las facciones del chico de cabello negro. Se sentó a su lado, sosteniendo sus manos.

-No lo está, ____- Aclaró- Y si tú no peleas por esto entonces yo lo haré.

Quiso hablar, pero la mirada que sus ojos le dedicaron le hizo saber que lo mejor era no hacerlo. Cuándo Nayeon tenía aquella mirada en sus ojos lo mejor era dejarla hacer lo que quisiera, a pesar de que no fuera nada bueno.

-Tus padres no tardarán en llegar- Dijo la enfermera, haciendo acto de presencia -Señorita Im, le repito que no puede estar acá.

-Y yo que de todos modos me quedaré hasta se cumpla lo que exijo- Reiteró.

-¿Y qué exige?- Cuestionó el entrenador, cansado de su actitud.

-Justicia- Contestó con desdén.

Ambos adultos intercambiaron miradas antes de suspirar, saliendo de la habitación en posible búsqueda de la directora.

-No puedes evitar los problemas- Negó.

-Con lo que amo buscarlos- Dijo con fingida ironía, acomodándose a su lado -No está bien lo que hicieron, mira cómo estás- Lo señaló -Tzuyu piensa que te rompiste una costilla.

-En realidad fueron dos- Corrigió.

Notó la sorpresa cruzar sus ojos, y después el enojo volver a hacerse presente.

-Lo haré llorar- Dijo antes de intentar ponerse de pie, pero se detuvo al sentir como ____ presionaba sus manos.

-Déjalo.

-No ____, no- Negó con enojo- Puede que tú te quieras callar esto pero yo no. ¿Entiendes?- Preguntó retóricamente -Imagina que sea yo quién esté en tu lugar, ¿Tratarías de estar en calma?- Cuestionó.

Apartó la mirada, contestando su pregunta. Definitivamente no estaría en calma, no dudaría en hacerle lo mismo al chico de cabello caramelo.

Sintió como Nayeon acunaba su rostro entre sus manos, chocando sus miradas.

-Me preocupé mucho cuando vi que te habían lastimado, quise correr hacía Nicolas y gritarle mil cosas pero Tzuyu no lo permitió- Confesó.

-¿Cómo te dejo venir acá?- Preguntó con una mínima sonrisa en sus labios.

-Dije que debía ir al baño- Recordó con diversión.

Se miraron a los ojos nuevamente, acortando la distancia que separaban sus labios. Pese a que ayer habían pasado todo el día y parte de la noche juntos creían que no era suficiente, o que parecía lejano.

Pese a tener un dolor ensordecedor en sus costillas no pudo evitar acercar a Nayeon hacía él, profundizando el beso.

-Chicos...

Se alejaron cuándo oyeron una voz en el marco de la puerta, encontrando a Tzuyu al lado de Sana.

El silencio ahogó la habitación.

Nayeon alcanzo a alejarse solo un poco de ____, pero no soltó sus manos, y lo mismo para el chico de ojos verdes.

Sana por su parte permaneció atónita, sintiendo como algo dentro de ella parecía quebrarse. Él chico del que aún se sentía enamorada estaba besando a quién consideraba era su mejor amiga.

¿Cómo podía narrar en palabras lo qué estaba sintiendo? Algo dentro de ella dolía, demasiado, casi tan insoportable que no pudo ahogar un quejido.

Huyó de la habitación cuándo sintió como le costaba respirar.

-Sana- La llamo Nayeon cuándo intentó seguirla, pero Tzuyu la detuvo.

-Dale tiempo para que lo procese- Aconsejó con calma -Yo iré por ella- Dijo antes de salir de la habitación.

Se giró en busca de ____, encontrándolo con el rostro oculto entre sus manos.

-____.

-Se arruinó todo- Soltó con pesar -Sana nunca perdonará lo que hicimos- Aseguró.

-Si hablamos con ella...

-Pudimos hacerlo antes- La interrumpió -Pero es tarde ahora, jodidamente tarde.

Guardó silencio, caminando hacia él mientras se sentaba a su lado, descansando su cabeza en su pecho.

-¿Y Hyunjin...?

-Con él será mucho peor- Acarició su cabeza en un intento de consolarla.

-Señorita Im, joven Kang- Los llamó la directora -Creo que ambos necesitan una extensa charla sobre sus lugares en este instituto.

...

Tzuyu corrió detrás de la chica de ojos cafés, parando sus pasos cuándo la vio detenerse en medio de un pasillo vacío.

-Sana- La llamó -Entiendo que puedes sentirte mal, pero hablo por parte de ellos que no querían que te enterarás de esta forma.

-¿Tú sabías?- Preguntó con sorpresa.

-Al igual que tú me enteré sin querer- Señaló -Y no sé cómo te sientes- Admitió -Pero por favor no llores- Pidió en un susurro.

No lo había notado antes, pero de repente sintió cómo las lágrimas se abrieron camino en su rostro, mojando levemente sus labios, provocando un sabor salado.

-¿Por qué no fueron sinceros antes? Nayeon era como mi mejor amiga, Y ____...- Las palabras abandonaron su mente -¿Sabes cuánto tiempo llevo enamorada de él? Nayeon no tiene un año de conocerlo y parecía besarlo como si lo conociera de toda la vida- Señaló con el dolor palpable en su voz.

-¿Pero eso justifica algo?- Cuestionó -No creo que ____ esté obligado a amarte, así como Nayeon no tenga derecho a quererlo- Explicó con calma, tratando de acercarse a ella -Escucha, a veces no solo porque quieras a alguien significa que esa persona está obligada a sentir lo mismo por ti- Dijo antes de pararse frente a ella -Puede qué duela pero es la verdad.

-Estoy enamorada de él, Tzuyu- Alcanzo a decir antes de soltar los pequeños sollozos que se esforzó en callar.

Tzuyu no dudó en abrazarla, tratando de hacerle sentir algo de seguridad.

No la conocía, ni había hablado con ella antes. Pero nadie merecía sentirse como creía que Sana debía sentirse ahora, realmente no podía justificar a Nayeon ni a ____, pero tampoco culparlos.

El miedo siempre será tu peor enemigo, pensó.

-Calma- Susurró en su oído, apaciguando su espalda.

-No quiero sentirme así- Confesó en su pecho, siendo recién consciente de la altura de la chica frente a ella.

-Un día lo dejarás de sentir- Aseguró -Despertaras y te darás cuenta que solo era una persona más entre un millón de otras.

-Pero es la persona que yo quiero- Insistió, buscando su mirada.

-Pero tal vez no sea la persona para ti- Contestó con el mismo tono.

Ahora que la veía tan cerca pudo notar lo hermosa que era, y lo delicada que se veía en esos momentos.

Tzuyu siempre fue fanática de las historias de amor, presenciarlas era su pasión, pero unirse a ellas era el problema.

Pero en ese momento no pudo saber si fue la cercanía, lo vulnerable que se veía o la necesidad de hacerla sentir mejor que lo hizo imaginarse aunque sea un segundo lo maravilloso que sería probar sus labios.

...

-¿Ubicarnos a nosotros?- Cuestionó Nayeon -Deberían ubicarse primero a ustedes- Opinó con sorna.

-¡Nayeon!- Reprochó el entrenador.

-Estas ganando con creces que te suspenda, Im Advirtió la directora.

-Hágalo, pero seguiré sin moverme de aquí hasta que Nicolas y el resto del equipo de fútbol paguen por lo que hicieron- Recordó, ignorando la fija mirada de ____ en ella.

-¿Precisamente de que acusas al joven Miller?- preguntó con molestia el entrenador, cruzado de brazos.

-¿Por dónde empezar?- Preguntó retóricamente -¿Convencer a todo el equipo de fútbol para ir en contra de ____?, ¿Pegarle a Hyunjin e incluso querer agredirme a mí?- Preguntó con enojo -¿O también puedo agregar que intentó propasarse conmigo?

-Puedes meterte en serios problemas si acusas falsamente- Advirtió la mujer de ojos marrón oscuro.

-Me alegra mucho decir la verdad entonces- Retó, frunciendo las cejas.

La directora iba a hablar, pero una nueva presencia llamó su atención.

...